divendres, 27 de gener del 2012

La triste realidad.

La triste realidad es que, mientras un jurado popular absuelve a Francisco Camps, el juez Garzón, quien destapó la trama Gürtel de corrupción en una de cuyas dependencias se encuentran los trajes que no se regalaron al President, corre el riesgo de expulsión de la carrera judicial.

La triste realidad es que, mientras decenas de miles de compatriotas, asesinados durante la guerra y la postguerra, yacen en las cunetas y en fosas comunes perdidas por los campos de España, el juez que trató de hacer justicia a las víctimas está procesado bajo la acusación de prevaricar por haber querido investigar los crimenes del franquismo.

La triste realidad es que cuando en varios países se ha podido llevar ante la justicia a los responsables de los crímenes de pasadas dictaduras gracias, entre otras cosas, a la avanzada interpretación del derecho del juez Garzón, él mismo está procesado por haber querido aplicar su doctrina en su propio país.

La triste realidad es que los españoles volvemos a andar por el mundo obligados a explicar por qué nuestra patria se aparta del común sentir de las naciones civilizadas que consiste en repudiar toda dictadura, exigir las responsabilidades penales que correspondan y dar satisfacción a las víctimas.

La triste realidad es que la nación, como siempre, persigue a sus mejores hijos y es condescendiente y hasta aplaude a los que la envilecen.

Que sigue habiendo víctimas, o herederos de ellas, y victimarios, o herederos de ellos.

Que no se ve la democracia como un sistema plural que institucionaliza el conflicto, sino como uno monolítico en el que se impone la victoria y se aniquila la diferencia.

Que aunque el espíritu contemporáneo reclama la secularización del poder político y la separación de la iglesia y el Estado, la iglesia católica tiene una presencia agobiante en las instituciones, en el sistema educativo, en la opinión pública, mediante pronunciamientos permanentes de la jerarquía sobre la legislación, y en los Presupuestos Generales del Estado.

La triste realidad es que este predominio de la iglesia y su jerarquía (cuya intención parece ser volver a evangelizar España) viene de muy antiguo y goza de amplio apoyo incluso entre los sectores que debieran propugnar la secularización y el laicismo; entre los liberales y hasta en la izquierda. Cosa nada insólita. La venerada Constitución de 1812, que tanto se identifica con el nacimiento de la conciencia de la nación española, a su vez, en su artículo 12 proclama solemnemente que: "La religión de la Nación española es y será perpetuamente la católica, apostólica, romana, única verdadera. La Nación la protege por leyes sabias y justas, y prohíbe el ejercicio de cualquiera otra." La esencia de la nación española es el catolicismo. Y todavía queda camino por desandar pues las otras religiones (las falsas) malviven, pero no están prohibidas.

La triste realidad es que este juez que ha pretendido criminalizar un régimen esencialmente español por ser nacionalcatólico está sentado en el banquillo y su fuerza y su garantía residen en la gente en la calle y en los observadores extranjeros. Como siempre.

(La imagen es una foto de http://www.presidencia.gov.ar/, bajo licencia de Creative Commons).

dijous, 26 de gener del 2012

Crónica de las primarias del PSOE, VII.

Se acerca el congreso y el final de las primarias y, aunque nada sea descartable en un último momento, parece que la campaña de los dos candidatos ha tenido buen tono y hasta buen gusto. Ha sido abierta y franca, sin incurrir en descalificaciones ni dar pábulo a quienes quieren ver bronca.

Después del varapalo del 20-N al PSOE le hacía falta ponerse en marcha otra vez, sacudirse la modorra de la derrota, encontrar nuevo pulso. Y le ha salido bastante bien. En el congreso se tomará la decisión probablemente con escasa diferencia de votos, pero la unidad del partido no está en cuestión en modo alguno.

El único escollo que aún debe salvar quien ocupe la Secretaría General será el de las elecciones andaluzas. El resultado de estas puede ser la última campanada del toque de difuntos o la primera nota de una diana floreada. Los candidtatos piden con entusiasmo la segunda pero el feo asunto del ERE fraudulento amenaza con la primera. Andalucía no es Valencia.

Se sigue echando en falta una mayor profundización en contenidos. Chacón produjo un titular al decir que "No daremos un paso atrás ante el PP ni la Iglesia" pues casi parecía que se iba a abordar el asunto de la política religiosa que sigue anclada en las prácticas franquistas. Pero no había tal: se refería la candidata a las declaraciones de un arzobispo que objeta a que una casada por lo civil pueda ser pregonera, que considera inaceptables. Desde luego. No se ve qué tenga que ver el estado civil con la capacidad para pregonar. Pero el perjuicio que la iglesia causa a una ciudadanía democrática no radica en las incongruencias de los obispos, sino en la situación de privilegio inaceptable de la confesión en su conjunto, con la jerarquía a la cabeza. Y de eso es de lo que hay que hablar.

Algo parecido sucede con el candidato Rubalcaba que quiere cambiar su partido aun advirtiendo que no será fáci; y lo será menos si no dedica más tiempo a aclarar cómo piensa cambiarlo y en qué sentido. Invocar el retorno a la socialdemocracia (¿clásica?) está bien pero es insuficiente. Pongo un ejemplo: François Hollande, que está en los prolegómenos de los preparativos del inicio de la campaña de las presidenciales ya ha dicho que se propone reformar el sistema financiero francés. Luego veremos cómo se propone hacerlo. Aquí podríamos intentar lo mismo: ver qué hacemos con el sector financiero. De eso también hay que hablar.

(La primera imagen es una foto de HombreDHojalata, y la segunda, una foto de PSOE de Extremadura, ambas bajo licencia de Creative Commons).

La justicia en Valencia.

No es la primera vez que Francisco Camps se libra in extremis de los tribunales por una decisión de estos que contradice las expectativas más amplias y razonables. Ya en los comienzos de esta pintoresca historia judicial de los trajes regalados y no regalados al mismo tiempo, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Valencia, Juan Luis de la Rúa, "más que amigo" de Camps, decidió archivar la causa en contra de El curita. Recurrida la decisión, el Tribunal Supremo obligó a seguir con ella allí donde Camps ya se daba por absuelto y sus seguidores empezaban a pedir que los acusadores se pusieran de rodillas.

Ahora puede pasar lo mismo. Camps ya se ha lanzado por la pendiente de la lírica, diciendo que la decisión del jurado muestra que su presidencia era inmaculada y María Dolores de Cospedal, en la rutinaria rueda de prensa sin preguntas ha aprovechado para hacerlas ella: ¿quién devolverá la honorabilidad a Camps y Costa? Mientras la sentencia no sea firme, esa honorabilidad seguirá en el alero. Y la sentencia no será firme, de momento, por cuanto puede recurrirse y probablemente se recurrirá. Tendrán que hacerlo la acusación particular, el PSOE, y el ministerio fiscal. Esa insólita absolución, tanto más difícil de entender cuanto que recae en un momento en que el juez Garzón esta siendo juzgado por iniciar el caso Gürtel, del que trae causa la regalada elegancia de Camps, contradice lo que todo el mundo esperaba y, sobre todo, contradice las pruebas.

Por el mismo acto -la aceptación de los regalos- hay dos condenados que confesaron voluntariamente el delito, Rafael Betoret y Víctor Campos, devolviendo las prendas malhabidas, y dos absueltos, Francisco Camps y Ricardo Costa, que en un principio estuvieron dispuestos a confesar pero luego decidieron encomendarse a la "justicia de sus conciudadanos". Han salido beneficiados, pero la situación es absurda: una misma acción no puede ser culpable y no culpable al mismo tiempo. Es sencillamente ridículo. Es cierto que la confesión de los primeros no demuestra la culpabilidad de los segundos; pero también lo es que estos no han probado ser inocentes sino que el jurado ha decidido que tampoco está probada la culpabilidad, ignorando tranquilamente la confesión de los dos condenados que esa sí que no ofrece dudas.

Así que modérese Camps, refrene sus ímpetus retóricos Cospedal y esperemos a que haya apelación para ver qué dicen los jueces profesionales. Porque lo que ha dicho el jurado atenta contra la lógica.

dimecres, 25 de gener del 2012

Un espectáculo lamentable.


Si la justicia condena a Garzón, el cielo es el límite.


El increíble proceso a Garzón equivale a un terremoto de la conciencia nacional, si tal cosa existiera. Es algo tan absurdo, tan ajeno a la realidad de las cosas y el sentido común que hace falta haberse pasado los últimos cuarenta años amojamado al amor de los otros cuarenta años de la Dictadura para no darse cuenta.

La cantidad de hechos sorprendentes, únicos, extraños, que confluyen en este caso propician la conclusión de que se trata de una operación de caza y captura no ya solo de un juez, sino de una idea de la justicia, de una forma de entender la función judicial en un mundo globalizado, de una concepción del derecho al servicio de la democracia, de la libertad y de la igualdad ante la ley. No al servicio de la tiranía, de los intereses creados, del privilegio.

La lucha contra las ideas que no se plantea en el terreno de las ideas sino en el de los tribunales, la coacción, la fuerza en definitiva, nunca triunfa a la larga. La primera de Público, como se ve, habla de los crímenes del franquismo. Es decir, considera el franquismo un régimen criminal. Palinuro sostiene que incluso genocida, pues consistió en la persecución y asesinato de sectores enteros de la población por razón de sus convicciones políticas. Obligado es aquí explicar cómo es posible que personas e instituciones asociadas a ese régimen criminal y desde luego, su cabeza visible, Francisco Franco, den nombre a calles, plazas, edificios, tengan monumentos y celebren ceremonias religiosas y civiles. Cómo puede darse que exista una fundación (y, por tanto, en parte sostenida con fonds públicos) dedicada a ensalzar la figura de un dictador criminal.

Hay quien define este juicio como un esperpento y quien lo compara con el caso Dreyfus. Para lo primero le falta gracia y frescura. Para lo segundo le falta el ejército y el socorrido ardid de la traición a la Patria. Desde el momento en que se trata de un procedimiento jurídico, aquí no hay patria que valga y lo que se juzga es una u otra forma de entender la justicia, cosa que no conoce fronteras. Por eso han venido los observadores internacionales. Serán quienes se encarguen de explicar al mundo qué idea tiene de la justicia el Tribunal Supremo español. Y qué idea tiene de la equidad, cosa más grave.

Nuevo libro de Palinuro.

Ayer Palinuro se presentó más contento que de costumbre; se sentó sobre mi mesa de trabajo, sin dejarme ver la pantalla del ordenata, que es como si te quitaran la luz de los ojos; dio un tiento a mi café mañanero y me puso su nuevo libro bajo las narices.

-Vaya -dije, aparentando una indiferencia que sabía iba a herirlo-. Tu nuevo libro. Enhorabuena.

- ¿Cómo que "vaya"? ¿Cómo que "enhorabuena? ¿Es que no le vas a dedicar un post ni un comentario?

- Hombre -contesté-, no está bien hablar de los libros propios.

- Oye, perdona -dijo él-. Lo he escrito yo.

Yo (sarcástico):

- Pero lleva mi nombre.

- Bueno, tú sabes que somos el mismo.

- No; yo no me bebo tu café.

- Pero haces algo peor: te las das de bueno, de ilustrado, de "buena gente", como si fueras el Dr. Jeckyll y yo Mr. Hyde.

- Pues eso.

- Pero ¡somos el mismo! -se impacientó Hyde/Palinuro. ¿De verdad no vas a decir algo sobre tu libro?

- Sería una vergüenza, eximio piloto. ¿Cómo iba a evitar ensalzar mis virtudes y ocultar mis defectos?.

- Puedes ocultar tus virtudes (cosa fácil, pues son pocas) y ensalzar tus defectos; algunos son muy graciosos.

- Pero ¿no ves, maldito Hyde/Palinuro, que no sabes lo que dices?.

- Igual que tú. ¿O te crees que este diálogo que estás transcribiendo tiene sentido? Bueno, anda, escribe algo sobre la obra que hemos escrito al alimón.

- Que no, que no, que debo un respeto a mis lectores. Además, ¿está ya en las librerías? No, espera: la tirada ¿es de más de ese ejemplar que tienes en la mano?

Manifiestamente ofendido, Palinuro se atusó el cabelló, peinado a lo romano (republicano), dejó de parecerse a Hyde y adoptó una actitud de dignidad calderoniana:

- No os responderé, villano, a vuestra última grosería y os responderé sólo a la primera pregunta: no, el libro estará en librerías a partir del seis de febrero. Pero el que quiera puede adquirirlo por la red, pinchando en la imagen, enlazada a la editorial Los libros de la catarata.

Sentí un poco de lástima. ¿Qué quieren? Son muchos años juntos, surcando el proceloso piélago en busca de nuestro destino. Uno se encariña con el compañero de aventuras porque así se desdobla uno, siendo uno mismo y compañero del otro. La del compañero (o compañera) de aventuras es la única elección que se nos permite en la vida; en todas las demás, somos elegidos, sin poder decir ni tweet. Decidí reconciliarme con él y hacerme perdonar mi malicia:

- Te propongo un trato. No diré nada del libro, pero reproduciré aquí el índice.

- Vale, Ramón -dijo él-. Es suficiente. A verlo.

- Aquí está:

A.- TEORÍA
I.- En los orígenes: la sociedad abierta
II.- El ocaso de los proyectos revolucionarios en la postmodernidad.
III.- La traición del Tercer Mundo.
IV.- De qué sirven las teorías de la democracia.

B.- PRÁCTICA.
V.- La búsqueda discursiva de la verdad: el 15-M
(El movimiento 15-M o "movimiento de los indignados". Las reivindicaciones. El apoyo social).
VI- La verdad y la mentira: el caso Murdoch.
(Los medios de comunicación. La hegemonía ideológica. La propaganda).
VII.- Lo público, lo privado y lo secreto: WikiLeaks.
Conclusión.

dimarts, 24 de gener del 2012

La invicta cruzada y el via crucis del juez.

De nuevo se sienta Garzón en el banquillo en un proceso, segundo acto de lo que muchos califican de cacería del juez que destapó los GAL, fue causa del procesamiento del dictador Pinochet, afirmó la validez de la jurisdicción penal internacional, fue decisivo en la derrota de ETA, intentó hacer justicia a las víctimas del franquismo y destapó la Gürtel, la mayor trama de corrupción y delincuencia en la España de la segunda restauración. ¿Cacería? Si se repasan las causas mencionadas se verá que el juez se ha ganado muchos y muy poderosos enemigos en todas partes. Tantos que el episodio recuerda la cacería de la peli de Arthur Penn en 1966, La jauría humana.

El procesamiento de Garzón se debe a una querella por supuesta prevaricación presentada por un sedicente sindicato de funcionarios, Manos limpias, cuyo principal dirigente, Miguel Bernard, es Caballero de Honor de la Fundación Nacional Francisco Franco por sus “servicios en defensa de los ideales del Movimiento”. Un país que tiene una Fundación con el nombre del más sangriento dictador de su historia no está bien de la cabeza. Imagínese el lector, si puede, una Fondazione Benito Mussolini o una Adolf Hitler Stiftung. Impensable, ¿verdad? Pues lo que en otras partes es impensable aquí no solamente es pensable sino realidad incuestionable. ¿No decía Fraga, el último de Filipinas del franquismo, que "España es diferente"? Los Caballeros de Honor (sic) de la Dictadura protegen la memoria del dictador y llevan ante los tribunales al único juez que ha tenido la decencia y el valor de hacer justicia a las decenas de miles de víctimas del franquismo. España no solo es diferente: es extraterrestre. Y, por supuesto, el juicio es político de cabo a rabo.

No, no, dicen los acusadores, sus amigos y conmilitones, no es una cuestión política sino meramente jurídica. No se procesa a Garzón por intentar enjuiciar el franquismo sino por una presunta prevaricación ligada a ese intento, por declararse competente y actuar en consecuencia a sabiendas de que va contra la ley. Es algo pura y exquisitamente jurídico. Sí, pero al juez se le abre proceso sin que haya acusación particular ni del Ministerio Fiscal sino solamente en razón de la acusación popular. Y ello contra el sentido común, la prudencia, la equidad y el precedente que se conoce como "doctrina Botín", según el cual no procede procesar a la sola instancia de terceros privados. Exquisitamente jurídico pero el juez instructor, Luciano Varela mostró a la acusación cómo tenía que redactar su escrito para poder admitirlo. Entre otras cosas, recomendó a la acusación que incluyera la expresión a sabiendas para estar dentro de lo exquisitamente jurídico. Tampoco se ha admitido la inmensa mayoría de las pruebas solicitadas por Garzón. Y se han alterado los tiempos procesales para que no fuera este juicio (el más político de los 3 del magistrado) el que abriera el via crucis.

Nada de procedimiento jurídico; es uno político disfrazado de jurídico. Lo peor que puede haber en un Estado de derecho. Y así está siendo a los ojos de todo el mundo. Por eso, en la vista oral que se abre hoy hay observadores internacionales. La presencia de estos es una garantía para el acusado, quizá la única que tenga. Y una vergüenza para todo el país. España no debiera ser como esas naciones del antiguo Tercer Mundo a las que es preciso enviar observadores internacionales porque nadie se fía de la limpieza de sus procesos electorales o judiciales. No debiera ser, pero es. La imagen que proyecta cada país no la determina él mismo sino que la determinan los demás y los demás han decidido enviar observadores internacionales, mientras la organización Human Rights Watch asegura que el mundo entero tiene los ojos puestos en las represalias que se están aplicando a Garzón.

La historia es maestra en ironías: mientras el juez Garzón comparece ante el Supremo por investigar los crímenes del franquismo, una jueza argentina, que investiga esos mismos crímenes en aplicación de la doctrina de la jurisdicción penal universal que tanto debe a Garzón, pide documentos al gobierno español para proceder con el mismo empeño que ha ocasionado el procesamiento de aquel. Por la misma doctrina de jurisdicción universal puede Manos Limpias querellarse contra la jueza argentina por prevaricación. Acabará prevaricando el mundo entero pero los crímenes no deben quedar impunes. Y menos el de genocidio.

Así mientras la justicia española se retrotrae a la época de la invicta cruzada, la argentina ampara los derechos de los españoles sometidos a aquella. La acción argentina se ha iniciado con querellas de víctimas del franquismo y, ahora, la asociación de expresos del franquismo La Comuna, anuncia que se personará en la causa en Buenos Aires en busca de una justicia que aquí se le niega. Y no solo se le niega sino que se hace un escarmiento en la cabeza del juez que ha tratado de realizarla para aviso a los demás, por si alguien más cree que debe obedecer a su sentido de la justicia antes que a la prudencia política.

Estamos cubriéndonos de gloria.

La imagen es una foto de http://www.presidencia.gov.ar/, bajo licencia de Creative Commons).

dilluns, 23 de gener del 2012

Crónica de las primarias del PSOE, VI.

El titular de Público da el espaldarazo democrático a las primarias del PSOE. De sobra se sabe que en las democracias las elecciones más reñidas las deciden siempre los indecisos. En su funcionamiento interno el PSOE es reflejo de los usos democráticos en torno suyo. Lo cual está muy bien. Dibuja un partido vivo y bastante abierto, muy distinto a la estructura autoritaria del PP, en el que el líder es nombrado por el líder anterior y aclamado después en un congreso. Ciertamente en el PSOE se dan casos de relaciones oligárquicas y clientelares, como en todas partes. Pero en conjunto, las primarias están siendo un ejemplo de comportamiento civilizado y democrático. En otros partidos los candidatos ya se hubieran enzarzado en golpes bajos.

Hay cómputos divergentes de los apoyos que cada candidato cuenta para sí, como es lógico teniendo en cuenta que se cuantifican cosas tan poco seguras como las promesas explícitas, las implícitas y las de los que se las hacen a los dos candidatos. Así las cosas, las cantidades que manejan estos son pura ilusión. Sobre todo teniendo en cuenta que el voto es secreto. El País sostiene que Rubalcaba sale de los "congresillos" con una ligera ventaja. Pero, tal como están las cosas habrá quien explique esa noticia como prueba de la inclinación "rubalcabiana" del diario. A saber el cálculo que haya hecho Público, que parece más "chaconista".

Lo importante es que el proceso de primarias está realizándose de modo transparente y democrático en un partido que proyecta imagen de partido de gobierno. Y se está haciendo desde las primeras de los periódicos porque se mantiene como la noticia más relevante día tras día. Se sabe muchísimo menos del gobierno, que parece haberse tomado los cien días de prueba como días de asueto. Ya no es noticia ni cuando habla Cristóbal Montoro que suele garantizar titulares.

Las primarias del PSOE eclipsan las del Partido Republicano en los Estados Unidos; aquí, claro es. Y aquellas tienen su importancia, como tenía importancia para las provincias del Imperio quién fuera el Emperador. No es lo mismo Mitt Romney que Newt Gringrich. Tampoco lo son Carme Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba.

De aquí al congreso los móviles no van a dejar de sonar y ojo con lo que se dice por ellos. Son facilísimos de intervenir y escuchar y van dejando más rastros que un concejal con una Visa Oro. Los móviles son el sonido del mercadeo, la negociación, los pactos. No tiene nada de extraño y hasta está bien, siempre que no se descuide el terreno deliberativo. Los candidatos tienen que seguir proponiendo ideas, aclarando sus respectivos programas para que los electores puedan votar después con conocimiento de causa.

De momento, en la encuesta de Palinuro en la columna de la derecha va ganando Rubalcaba por 24/17. Anímense y voten. No se trata de votar por uno u otra sino de decir quién ganará.

Las aporías de la izquierda.



Viçenç Navarro, Juan Torres López y Alberto Garzón Espinosa (2011) Hay alternativas. Propuestas para crear empleo y bienestar social en España, Madrid: Sequitur, 226 págs.

A poco de empezar a leer este libro me di cuenta de que la crítica me iba a ser muy difícil porque coincido plenamente con su contenido. Coincido con su punto de vista, las explicaciones que ofrece acerca de los problemas y las recetas que propone para salir de ellos. Así las cosas, pensé, si le hago una crítica, habrá de ser una autocrítica. Y efectivamente, de ese modo ha de entenderse esta recesión, como una autocrítica. No de Palinuro como autor de la obra con la que no tiene nada que ver sino de Palinuro como cofrade de la izquierda de la que esta obra es muy representantiva.
La autocrítica tiene la ventaja de que no es preciso andarse con paños calientes ni respetos convencionales. Tiene por otro lado la desventaja de que la izquierda, muy dada a la crítica a los demás, lleva mal la que se le hace a ella que suele atribuir a motivos inconfesables, clara manifestación de paranoia galopante.
El libro en cuestión está muy bien, es muy claro y consigue el objetivo que propone en el título de ofrecer alternativas a una situación de la que muchos dicen que no las tiene. Muestra el inconveniente de todos los libros colectivos, pues aunque los autores lo presentan como trabajo de conjunto, sin especificar autorías por capítulos, es evidente que se dan, son reconocibles y no evitan, aunque sí mitigan bastante, los inconvenientes de las obras colectivas de cierta falta de ilación, defectos de estructura de razonamiento, reiteraciones y discordancias.Vayamos ahora a la visión autocrítica de la izquierda. El libro se propone abordar dos cuestiones: una explicación de la actual crisis del capitalismo (con atención especial a España) y una enumeración de medidas concretas para resolverla. La primera crítica de fondo hace referencia al alcance teórico y las bases epistemológicas de la explicación de la crisis. Asunto interesante. La izquierda, en especial la de tradición marxista, creía tener una explicación científica del conjunto del capitalismo, una comprensión no puramente fenoménica sino esencial. El capitalismo era producto de un devenir histórico sometido a leyes objetivas y cognoscibles. Tenía un origen, desarrollo y final independientemente de los criterios de quienes los vivían. Y sería sustituido por otra cosa. Esa "otra cosa" era el modelo alternativo completo, entero que la izquierda postulaba.
La obra no encaja su explicación de la crisis actual del capitalismo en este marco teórico, ni la cuelga de una estructura conceptual más amplia, sino que se limita a ser una descripción de lo que sucede en la que la explicación no pasa de ser un análisis de causa-efecto tan problemático como los de los fenómenos más evidentes y menos abstractos. La izquierda no tiene una teoría general del capitalismo sino una particular sobre su gestión. Por eso el término "alternativa" del título no se refiere a la que pudiera proponerse como distinta del modo de producción sino a la diferente forma de gestionar una única realidad, la capitalista, carente de alternativa real y que, en el fondo, no se cuestiona. No cabe dar carácter de tal a la propuesta, frecuente en el libro, de que "otro mundo, otra economía" son posibles entre otras cosas porque esta afirmación carece de significado.
La izquierda trata de compensar esta carencia con un espíritu positivista en el que lo que se valora es el carácter científico de los enunciados. La explicación de la crisis del capitalismo implica el desenmascaramiento de las explicaciones ideológicas que los economistas e intelectuales neoliberales formulan para mantener el sistema de la explotación del hombre por el hombre. Quieren ser explicaciones científicas y se revisten de aparato matemático pero son puramente ideológicas.
Frente a ellas los autores elaboran un discurso crítico, con frecuentes apelaciones a la "evidencia empírica", base del razonamiento científico, pero que no se integra en un contexto teórico, en un conjunto sistemático, sino que tiene un carácter fragmentario. La praxis sin teoría es ciega. Por ello mismo su pretensión positivista a la certidumbre científica es tan verosímil como la de sus adversarios. Personalmente coincido con este punto de vista pero no se me oculta que se trata de una posición normativa de base ética, tan alejada de la ciencia que postula como la de los neoliberales. Es decir, otra ideología: la opuesta.
Esta discordancia de una izquierda positivista que quiere mantener el espíritu crítico recurriendo a una razón instrumental es el punto débil del razonamiento de la izquierda. Un punto débil que hace referencia a la legitimación del discurso. Porque ¿de qué otra forma cabe hoy legitimar un discurso si no es a través de la ciencia? Sin embargo, ¿cuál es la base real de nuestras propuestas de izquierda aparte de nuestra convicción de que son moralmente superiores? Por lo que se ve la experiencia y solo la experiencia. Pero la experiencia es esencialmente ambigua e interpretable y solo nos conduce al historicismo, un ámbito en el que todos los gatos son pardos.
De hecho el libro es una auténtica floresta de equívocos de este tipo. Por ejemplo, los autores dicen querer llegar a una economía "justa y eficiente", términos tan vagarosos que pueden significar cualquier cosa, incluso ser contradictorios. Recuérdese que no se trata del sentido de la justicia y la eficiencia del capitalismo frente a las de otro modo de producción sino de dos modos de gestionar el capitalismo. ¿Por qué nuestras propuestas han de ser mejores que las contrarias que, por supuesto, se formularán en términos axiológicos contrarios?
Las explicaciones de los autores en cuanto a la evolución del Estado del bienestar están en el mainstream hoy día cuestionado por el auge neoliberal. Curiosamente la mayor crítica que se hace a éste de que propone como solución justamente las medidas que provocaron la crisis se vuelve contra una izquierda neokeynesiana que igualmente propone como solución un retorno a políticas de estímulo, incremento de la demanda agregada, etc., que no supieron hacer frente a la ofensiva neoliberal.
Hay alguna crítica a los postulados neoliberales especialmente feliz, como la que contesta a la exigencia de aumento de competitividad diciendo que es maltusianamente imposible que todos seamos competitivos a la vez (p. 130). Pero algo así cabe también decir de las críticas que fían la recuperación al estímulo del mercado interno siendo así que ningún país concebido como un "Estado comercial cerrado" podrá prosperar.
Como suele suceder con el positivismo, los autores se piensan legitimados para, una vez soslayada la base sedicentemente científica, pasar a las recomendaciones normativas, algunas de las cuales son muy problemáticas. Por ejemplo, postulan para España un pacto nacional de rentas (p. 132) que reequilibre la proporción relativa de las rentas salariales con las del capital. Pero ¿desde dónde se propone ese plan? ¿Quién lo impondría? ¿Con qué apoyos?
El salto positivista del ser al deber ser lleva directamente a la utopía. Los autores, que no tienen especial simpatía por el pensamiento utópico, no se dejan enredar en él y se aferran a sus propuestas "concretas" que, obviamente, quieren prácticas y que, para mayor evidencia empírica han cuantificado: 115. La primera de estas medidas concretas da una idea de lo que aquí viene diciéndose: "Constitución de un gobierno mundial que permita compensar y reducir el poder de los grupos privados internacionales, así como facilitar la instauración de un mundo diferente" (el subrayado es mío). En realidad, las otras sobran.

diumenge, 22 de gener del 2012

Diálogo entre Carme Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba.

Ayer los dos candidatos tuvieron la gentileza de hacer un hueco en sus apretadas agendas y vinieron a casa a tomar un café y charlar de sus cosas. Hacía mucho que no hablaban de tú a tú. Tenían muy poco tiempo porque ambos iban luego a sendas reuniones, así que puse una grabadora con su permiso y esto es lo que se dijeron, cómodamente arrellanados en dos hamacas de Ikea, que me salieron muy apañadas de precio en su día:

Chacón.- ¡Los medios! Fíjate cómo vienen, que si "guerra", "tensión"... Estos quieren sangre...

Rubalcaba.- Es su negocio. Quieren emociones, riesgos, catástrofes, grandes decisiones.

Chacón.- Pero no hay que dejarlos que impongan su espíritu. Los socialistas somos una familia. Bien es verdad que las familias suelen estar mal avenidas. Pero no es el caso.

Rubalcaba.- Déjalos. Reflejan muy bien lo que pasa en España. No hablan del gobierno porque éste no da que hablar pues no hace nada. Hablan mucho más de nosotros y eso es bueno. También hablan de la corrupción y de esa ciberguerra que se ha montado en los Estados Unidos que es como una "Ley Sinde" elevada al infinito.

Chacón.- Hablan porque toca contar los votos de los congresillos y el asunto parece como de carrera de caballos. Seguro que en las agrupaciones hay porras y apuestas. Fíjate que hasta Palinuro ha puesto una encuesta en su blog. (Es verdad. La encuentra el/la lector(a) en la calumna de la derecha. Anímese y vote). Esto es como un recuento de fans.

Rubalcaba.- Sí, es una tontería, pues está bien claro que voy ganando. Tengo ya más de la mitad de los votos.

Chacon.- Perdona, pero estás equivocado. Voy ganando yo. Según nuestros cálculos, te llevo 200 de ventaja.

Rubalcaba.- Bueno ¿para qué vamos a discutir? Lo que sea, será en el congreso.

Chacón.- Lo cual demuestra que no te fías de tus cálculos. Yo tampoco de los míos. En campaña hay que decir siempre que se va ganando y que se va a ganar porque decir lo contrario es absurdo.

Rubalcaba.- Por supuesto. Los delegados no son compromisarios, no tienen vinculado el voto y, cuando puedan tenerlo por circunstancias personales o respetos humanos, tampoco quiere decir nada ya que el voto es secreto.

Chacón.- La democracia es eso: deciden los electores y deciden libremente. Puedes salir tú, puedo salir yo. Por cierto, todavía no hemos decidido quiénes deciden. ¿Solo los delegados, todos los militantes, también los simpatizantes? ¿Primarias cerradas, semicerradas o abiertas? Yo quiero abiertas.

Rubalcaba.- Yo también. Pero no lo decidimos nosotros; lo decide el congreso y me da la impresión de que el congreso querrá primarias cerradas porque los delegados no gustarán compartir su voto con afuereños; les quita importancia.

Chacón.- Es lo más probable. En todo caso hemos de pensar en qué invertimos el tiempo que resta hasta el congreso.

Rubalcaba.- ¿En qué va a ser? En ganarnos las voluntades de los delegados. Son algo más de 900; se les puede contactar personalmente; hasta llamarlos al móvil o ponerles un SMS; no es como si fueran dos millones. Así que ahora se hablará mucho. También hay que seguir haciendo oposición al gobierno que, con esto de las primarias del PSOE, no se asoma a los medios más que para demostrar que no sabe por dónde anda. Y, por último, tenemos que debatir entre nosotros.

Chacón.- Pues para luego es tarde. Tenemos tres terrenos de debate en los que hemos de aclarar que piensa cada uno: el modelo de partido que queremos y su relación la sociedad; las propuestas para España; y las propuestas para la Unión Europea. En cuanto al partido, yo quiero uno abierto, dinámico, capaz de adaptarse e innovar y más nutrido con gente joven. Somos pocos y la edad media, demasiado alta.

Rubalcaba. Pienso lo mismo y quiero lo mismo. Si acaso yo insistiré en que el partido hable con una sola voz en España, pues la unidad es un valor. Una sola voz. Ahí tienes tú un hándicap.

Chacón.- Es tu punto de vista que, como buen castellano, valoras el canto llano. Nosotros, los de la periferia, preferimos la polifonía, el contrapunto. Es mejor música. En cuanto a la propuesta para España, somos partidarios del retorno a la izquierda socialdemócrata. Políticas económicas de izquierda y ampliación de la democracia. Somos ecologistas, feministas y partidarios de ampliar la democracia, de llevarnos bien con el 15-M.

Rubalcaba.- ¡Toma! Y nosotros. El 15-M se consolidó porque, siendo yo ministro, no me dediqué a reprimirlo como parece que van a hacer estos. Y en cuanto a las políticas económicas de izquierda, lo hemos dejado bien claro: queremos compaginar los ajustes con políticas de estímulo. Y cualquier día de estos le callo la boca a Palinuro explicándolas. (Palinuro se remueve incómodo en su asiento). Ahora estamos estudiándolas. Pero todo llegará. En cuanto a la Unión Europea, hay que ir al programa socialdemócrata común. Los socialistas tenemos que salir del marasmo y reafirmar nuestros valores que son transnacionales. La justicia social, la igualdad, la libertad, los derechos no son nacionalmente divisibles. Los países europeos tenemos diferencias muy acusadas de niveles de vida y los socialistas tenemos que formular un programa para toda la Unión

Chacón.- De nuevo coincidimos. La única respuesta a la Europa del capital y de la banca no es la etérea "Europa de los pueblos", sino la Europa socialdemócrata, esto es, del reformismo radical. Frente a la Europa de la derecha, la de la izquierda. Y ese es un punto de diferencia contigo, me parece. Nosotros creemos que los socialistas debemos funcionar como un polo de atracción del conjunto de la izquierda europea, haciéndole ver que es la única alternativa real a la hegemonía de la derecha pues lo otro son los nichos testimoniales. El programa socialdemócrata tiene que ser el programa común de la izquierda europea.

Rubalcaba.- El Frente Popular, vamos. Eso se te acaba de ocurrir.

Chacón.- Pues sí, se me acaba de ocurrir. ¿Y qué? En algún momento han de ocurrírsele a una las cosas. Las ideas vienen y van y esa me parece mejor que la tuya.

Rubalcaba.- Tenemos suficientes temas de debate y formas claras de distinguir nuestras candidaturas sin dar carnaza a los medios. Tiene razón Palinuro.

Palinuro.- Un momento, un momento, a ver si me va a quedar fama de mediófobo. Ni hablar. Lo que digo es que no perdais las formas porque, cuando se pierden las formas, nadie se entera de nada y todos optan por criterios de bandería, de clientelismo, ajenos a la razón, al menos a la forma noble de la razón, porque siempre hay razones de otro tipo para justificar comportamientos irracionales.

Rubalcaba.- ¿Lo ves, Carme? Te lo dije: es insufrible. Bueno, estamos en contacto.

Chacón.- Por supuesto y a través de las redes. Hay que estar en el ciberespacio. ¿Tú tuiteas?

Rubalcaba.- Tuitean por mí. Pero es cierto, hay que estar en el ciberespacio. Fíjate, esto que decimos aquí ya está en un blog, volando por la red.

(La primera imagen es una foto de Rastrojo, bajo licencia de Creative Commons). La segunda, una foto del US Department of Defense, en el dominio público.

dissabte, 21 de gener del 2012

Crónica de las primarias del PSOE V

Aun habiendo perdido las elecciones de forma catastrófica el PSOE está saliendo bastante bien parado. El proceso precongresual y el de renovación de la dirigencia se desarrollan con sosiego, de modo abierto y democrático. El partido ha encajado el varapalo sin quebranto interno, sin enfrentamientos críticos. La pugna entre los dos candidatos, si quedan en dos, no es una lucha a muerte, de malos modos y cuyo fin solo pueda ser el triunfo del uno y la aniquilación del otro y la exclusión o expulsión de sus partidarios. Es una opción que se decidirá por la regla de la mayoría, la única válida en democracia y a su término, el partido se reintegrará a su unidad por consenso y mayoría y minoría se fusionarán. Todo en un clima civilizado. Parece una tontería pero no lo es. El PSOE está dando una prueba de madurez en condiciones difíciles, algo de lo que los demás pueden aprender.

En el momento actual están eligiéndose las delegaciones al congreso y es normal que haya tensiones. La opción es difícil y no es lo mismo votar por un candidato que por la otra. Si fuera lo mismo, si diera igual, no habría tensiones. Es preciso que esas tensiones no degeneren en enfrentamientos y juego sucio. Eso viene bien a los medios, pues venden más cuanto mayor dramatismo ambiental reportan y, si hay malos modos o insultos, miel sobre hojuelas. Pero es lo peor que puede pasar a un partido, la bronca interna. Por eso advertía Palinuro al comienzo de las primarias ¡Ojo a los medios, chicos!. La sociedad mediática requiere apertura total pero sin olvidar que los medios son empresas, negocios, que van a maximizar el beneficio, no a procurar la estabilidad de un partido o un gobierno.

Además estas tensiones que la prensa en cierto modo instiga, hablando de enfrentamientos, pulsos, quiebras, etc., tienen un límite en la próxima elección de delegados que serán los que voten, dado que nadie ha vuelto a hablar de primarias. Hasta ese momento es lógico que los partidarios de uno de los dos candidatos traten de asegurarse el voto de su lista. Pero el voto es (o debe ser) secreto y los delegados no son compromisarios, atados por un mandato imperativo. ¿Por qué no va a haber sorpresa en el congreso?

Proliferan las declaraciones de intenciones de dirigentes y cargos de importancia que alzan bandera por un candidato/a. En un inteligente artículo en Público titulado Liderazgo con partido, curioso juego de palabras, José Andrés Torres Mora justifica su opción a favor de Chacón. María Teresa Fernández de la Vega también la respalda. Se dibujan así los tres puntos de apoyo de Chacón: jóvenes, mujeres y catalanes. Es, desde luego, un reto: una mujer joven y catalana dirigiendo el PSOE y, quizá, la primera mujer y el primer catalán en presidir un gobierno de España desde los tiempos de Prim. Tiene muchas posibilidades. No obstante conviene que la candidata, que transmite determinación y fuerza, modere sus ímpetus. Tiene prisa, no admite transiciones ni prórrogas, pero a veces se pasa. Que los cargos públicos y orgánicos rindan cuentas cada tres meses se supone que obligadamente, es exagerado. Si un director general tiene que rendir cuentas cada tres meses no dirigirá nada. Con una vez al año será suficiente y, si se me apura, ni eso. El asunto puede resolverse regulando la revocación de forma que los cargos rendirán cuentas cuando los ciudadanos -o los militantes en el caso del partido- lo pidan.

En el otro lado, los apoyos de Rubalcaba son más difusos y transversales. Sin duda destacan dos grupos, el generacional (los "mayores" del partido) y el orgánico, esto es los cargos. Pero no son los únicos pues Rubalcaba tiene respaldo en todos los sectores. Transmite seguridad y experiencia y por eso hace una campaña (pues de campañas se trata) en tono bajo y sin estridencias. Pero que no tenga estridencias no quiere decir que no tenga ideas. El discurso de Rubalcaba acentúa aquellos aspectos en los que puede dar una imagen menos favorable: renovación, cambio, innovación, flexibilidad, adaptación. A ello añade que plantea asuntos de interés general, preséntándose como candidato a la secretaría general y al gobierno. Es muy oportuna su insistencia en que para salir de la crisis, además de los ajustes y recortes hay que arbitrar políticas de crecimiento, algo en lo que posiblemente esté de acuerdo todo el mundo, desde luego Merkel y Sarkozy; lo que piense Rajoy será difícil de averiguar.

Pero una vez acordada la necesidad de los políticas de crecimiento, de estímulo, de expansión, falta por saber en qué consisten, es preciso formularlas, por si acaso el gobierno decide adoptarlas, cosa improbable pero no imposible. Ni el mismo Rajoy hubiera creído que Rajoy subiría los impuestos como primera medida de gobierno.

¿Cómo va el PSOE a conseguir la reactivación? ¿Va a crear un banco público después de haber aceptado la privatización de las cajas? ¿Va a aumentar las obras públicas -y por tanto el gasto público- para generar empleo, fortalecer la demanda interna y poner a las empresas en marcha otra vez? ¿Con qué dinero? ¿Cuál será la política fiscal en concreto? ¿Van a detenerse las privatizaciones y va a re-socializarse lo ya privatizado? ¿Habrá de nuevo un sector público? ¿Se dará a los sindicatos capacidad de gestión en las empresas? ¿Se formulará en términos prácticos el cambio del modelo productivo? ¿Qué líneas de producción serán prioritarias? ¿Qué se propone para Europa? ¿Cómo ha de funcionar el BCE? ¿Van a cerrarse los paraísos fiscales? ¿Cómo?

Ese es el debate de hoy y ahí es donde la gente espera las propuestas de Rubalcaba. Personalmente, Palinuro se siente más a gusto en el orden de preocupaciones de Rubalcaba que de Chacón, pero eso no quiere decir que respalde al primero, entre otra cosas porque lo que Palinuro respalde es indiferente.

(La primera imagen es una foto de Rubalcaba38; la segunda, una foto de isafmedia, ambas bajo licencia de Creative Commons).

Fabracadabra pata de cabra

O mejor pata de conejo pues este es el hombre por el que la lotería tiene una querencia. Y así, ahora le ha tocado el gordo. El juez le pide 4,2 millones de euros de aquí al lunes. Y una cifra astronómica a su mujer o su ex-mujer y otros millones al empresario con el que se entendía hasta que, desde luego, dejó de entenderse. Lluvia de millones en Castellón, provincia afortunada. Ya lo era cuando la gobernaba este ciudadano ejemplar, este dechado de virtudes, este amante de los aviones. ¿Saldrán esos millones de su amoroso escondrijo? ¿De alguna de las 90 cuentas bancarias que, al parecer, posee Frabra o estas se sindicarán para hacer frente al cargo? ¿Habrá una cuestación entre los miles de castellonenses beneficiados de un modo u otro por Fabra? Gobernar es un negocio y los votantes son en realidad clientes. Es una forma de entender la política reciamente española y, en concreto, mediterránea. Sol, alegría de vivir, millones. Energía vital de un hombre que se dejó llevar de su temperamento, poco convencional; hasta que la realidad se le echó encima en forma de decisiones judiciales que llevaba diez años evitando. Ahora se le abrirá el juicio oral y en él podrá ver la gente de qué pasta está hecho este gobernante casi mítico, vástago de una dinastía de Fabras. Como ya lo ha visto en el proceso de Camps o la seccion de sastrería de la Gürtel. Y se verá en el proceso de los cargos públicos y empresarios que supuestamente se lo llevaban crudo mientras hacían la depuración de las aguas fecales de la provincia. Si es que las depuraban, que no parece.

divendres, 20 de gener del 2012

La ruina viene de la corrupción.

Según Alberto Fabra, el presidente de Valencia, Camps no ha despilfarrado nada y la culpa de todo es de Zapatero. Pero lo contrario salta a la vista: Zapatero no financió el Fórmula 1, ni la Copa América, ni quiso edificar las torres de Calatrava, ni construir un aeropuerto sin aviones, ni traer al Papa para hacerse con una foto de él. Si a estos y otros dislates de megalómano unimos los pagos a las empresas de Urdangarin, la pastuqui que se llevaban los mendas de la Gürtel y, para redondear, la presunta financiación ilegal del PP, no es nada difícil ver por dónde ha venido la ruina de la Comunidad Valenciana, no hay que especializarse en filigranas contables, pero sí mirar como se merece a una gente que, ahora se ve, gana elecciones porque hace trampas y financia sus gastos esquilmando a sus conciudadanos.

La ruina ha venido por un desgobierno casi de locos en el que el despilfarro de los fastos faraónicos se unía a una actividad de expolio generalizado del erario público, con una administracion que no daba un paso sin que alguien se levantara una pasta. En donde no estaba la Gürtel con esos diálogos telefónicos ("amiguito del alma", "te quiero un guevo", "gilipollas") de tan sorprendente audición, aparecía el conseguidor providencial, Urdangarin y, cuando no, esa otra trama, ligada a la contrata del tratamiento de las aguas fecales, que es como la metáfora perfecta de la corrupción valenciana.

Hay aquí un elemento berlanguiano, de traca de fallas, que induce a tomarlo a chirigota con la resignación del sempiterno latrocinio, el caciquismo consustancial a la raza mezclado con la picaresca de altos vuelos y postín tecnológico, todo en inglés macarrónico, lleno de "special consulting", "future events" o "more sunrise". Pero tiene también otra cara mucho menos amable: la de los funcionarios recortados, los interinos despedidos, los sindicalistas ocupando espacios públicos, servicios clausurados o no atendidos, dependientes descuidados, proveedores adeudados, colegios cerrados por impago y aulas gélidas en las que los alumnos tienen que dar clase abrigados con mantas que traen de casa. La corrupción no es solamente un oscuro tejemaneje que acaba en algún lejano paraíso fiscal. Tiene también un rostro real e inmediato: el de las penurias que pasa una población cuyo nivel de vida era de los más altos de España. Y eso gracias a una pandilla de incompetentes, manirrotos y corruptos.

Fabra sabe que Zapatero no tiene nada que ver con esto; pero él, si; él era y es parte del gobierno de esa Comunidad a la que el hoy presidente del gobierno había declarado ejemplo para España. Algo que mete miedo.

(La imagen es una foto de ppcv, bajo licencia de Creative Commons).

En su puesto.

Quien haya escuchado los discursos de Rajoy en campaña electoral, es decir, los de los ultimos cuatro años, recordará con facilidad cómo insistía el lider conservador en que el crédito de España se restauraría en cuanto él llegara al gobierno; cómo explicaba que los males del país se reducían al gobierno de Zapatero pero que, removido éste amanecería un sol radiante.

Se fue Zapatero; llegó Rajoy, pero nadie parece haberse enterado de tan feliz acontecimiento salvo los contribuyentes españoles, colectividad esta reducida pues aquí contribuir, lo que se dice contribuir, pagar los impuestos, pues en fin, los asalariados y poco más. El resto del universo sigue a su bola sin apreciar la grandiosa regeneración de España. Standard & Poor's rebaja la calificación de la deuda en lugar de restaurarnos nuestra triple A. Fitch dice que piensa hacer lo mismo pero que, de todas formas, los bonos españoles cotizan al nivel de bonos basura, sin querer reconocer que eso era antes, en tiempos de Zapatero. Ahora los bonos tendrían que ser reales de vellón, dado que en La Moncloa se encuentra ya nadie menos que Rajoy, salvador de la Patria.

El FMI augura dos años de recesión para España porque, como ve el mundo con los anteojos de la leyenda negra, no quiere reconocer que estamos entrando en dos años de recuperación garantizados también por la presencia de Rajoy el salvífico. ¿De dónde se sacará el FMI ese dato de descenso del PIB un 1,7% en 2012? Es un dato masónico y, además, herencia de Zapatero.

Rajoy ha ido a visitar a nuestro vecino del sur como podía haber ido a jugar a la petanca. Una vez ganadas las elecciones, ya nada es como antes, las urgencias se calman y Rajoy aprovecha para estirar las piernas. Todos esos para los que el presidente debe estar en su puesto de mando en momentos de borrasca como los actuales solo quieren incordiar y obstaculizar la acción exterior del Estado. Además se limita a hacer una visita protocolaria al estilo de la que un par de días antes había hecho Sarkozy con él. Es posible que el truco haya funcionado en el caso de Sarkozy, consistente en desviar la atención de la situación económica de Francia hacia su acción exterior. En el de España es poco probable porque la situación económica del país, recién degradada a la condición de bono basura, es de extrema gravedad, bordeando el colapso.

Y la culpa no es de Zapatero.

(La imagen es una foto de La Moncloa, en el dominio público).

dijous, 19 de gener del 2012

Las invenciones de Montoro.

No hay nada nuevo bajo el sol. El ministro Montoro, guardián del tesoro, amenaza con perseguir penalmente a los gobernantes manirrotos o despilfarradores y no estaba mirando a nadie en concreto. La oposición le ha recordado que el desgobierno ya cuenta con varias figuras delictivas en el código penal. "Pero es que", dirá Montoro, hombre tenaz, "yo voy a tipificar un nuevo delito: el del gobernante que gasta más de lo que tiene y se endeuda."

Pues tampoco es nuevo. Es una resurrección de los viejos juicios de residencia, especialmente aplicados a los virreyes y funcionarios de las Indias, pero también en la península. El cargo que cumplía su mandato era "residenciado" y sometido a investigación por su sucesor. Es fácil imaginar cómo acababan aquellas residencias. Como puede pasar ahora cuando el gobierno sea de un color y la comunidad autónoma de otro.

Pero hay más, ¿no está Montoro resucitando la prisión por deudas, abolida en el mundo civilizado desde primeros del siglo XIX? Excepto, quizá, en algunos sitios hoy día para los casos de omisión del deber de alimentos en los divorciados. Si es así como vamos a hacer frente a los nuevos tiempos, lo llevamos claro.

(La imagen es una foto de Partido Popular de Cataluña, bajo licencia de Creative Commons).

Apagón.

Otra batalla política en la guerra del ciberespacio. WikiLeaks, la primavera árabe, el 15 - M, OccupyWallStreet, el apagón de ayer en los Estados Unidos son momentos sucesivos del nuevo orden (o desorden) político global que obliga a redefinir conceptos, a adaptarse a pautas distintas en un mundo virtual que forma parte del real pero lo está transformando a toda velocidad.

El blackout en los Estados Unidos fue la respuesta de parte del ciberespacio a la tramitación de dos leyes contra la piratería digital, SOPA en la Cámara de Representantes (Stop Online Piracy Act ) y PIPA en el Senado (Protect Intellectual Property Act), en realidad, dos "Leyes Sinde". Media Web se fue a negro: Wikipedia, igual que Boingboing, Wordpress y miles de sitios cerraron; otros, como Google se sumaron canalizando protestas, Facebook, E-Bay, Yahoo!, Twitter asimismo en contra. Se calcula que el apagón afectó a unos 100 millones de internautas, muchos de los cuales, por supuesto, estaban en el blackout eran propietarios de las más de más de 60.000 páginas que cerraron.

¿Resultado? Los dos proyectos, que iban a pasar sin problemas en ambas cámaras, son ya prácticamente papel mojado. Han perdido la mayoría. Hasta la Casa Blanca se ha echado atrás con el argumento de que la represión de la piratería no puede atentar contra las libertades e instaurar la censura, probablemente el mismo escrúpulo que detuvo la aprobación del reglamento de la Ley Sinde en el penúltimo consejo de ministros de Zapatero. De momento, las grandes industrias discográficas y cinematográficas estadounidenses, la mismísima Cámara de Comercio, poderosos lobbies detrás de la legislación represiva, se han quedado con un palmo de narices, por decirlo castizamente, con su argumento de que hay que proteger los derechos de autor de los creadores frente al saqueo mundial a que se someten los productos culturales gringos.

¿Quién ha vencido por ahora? Otros gigantes tan poderosos como aquellos: Amazon, Google, Mozilla, Wordpress, Facebook, etc, forman otro lobby tan temible como el primero. Su argumento es que las viejas empresas no saben reaccionar frente al desarrollo de las nuevas tecnologías, son incapaces de adaptarse y pretenden que el Estado proteja sus intereses (los creadores les importan un pepino) por ley. Puede que no sea un argumento mejor que el de las discográficas, pero tiene un aspecto que no suele mencionarse y es decisivo: junto a los grandes del ciberespacio se han movilizado cientos de miles de internautas, blogs, webs personales y corporativas, etc; todos, media red, han ido a negro en protesta y aviso de que puede ser peor pues el apagón prolongado significa la ruina para todos pero especialmente las industrias de contenidos. Éstas, a su vez, no movilizan a nadie a su favor. Solo a sí mismas. En la red no son nadie ni tienen a nadie. Solo al gobierno del PP, que va a meterse en un lío. Es un dato fundamental para saber por dónde soplará el viento. Impedir las descargas va a ser imposible. La industria cultural tiene que cambiar. Como está cambiando todo.

Ayer también Anonymous suplantó la web de la UGT con un mensaje incendiario y hace unas fechas, la de la Comunidad de Madrid para mostrar una imagen de fotoshop, una mezcla de Aguirre y Aznar. Son los prolegómenos ludicos de la que se va a montar cuando comience a aplicarse la ley. Habrá más suplantaciones, bloqueos, ataques DoS. El ciberespacio tiene una potencialidad enorme y la ciberpolítica es básica y radicalmente de oposición, trátese de derechos de autor, de tiranías árabes, de la democracia española o las leyes de secretos oficiales. La red se opone a todo lo que no sea ella misma y pretende suplantarlo. Los indignados, por ejemplo, se han puesto a redactar una nueva Constitución. Imagino que los realistas que en 1789 veían lo que pasaba en el Juego de Pelota, sonreirían con conmiseración. Como harán muchos ahora. Y como seguramente hacían otros cuando un par de años atrás se planteó en Islandia llevar a los culpables de la crisis (políticos y banqueros) ante los tribunales y redactar una nueva Constitución en la red.

For the times, my friends, they are a-changin'.

(La imagen es una foto de DonkeyHotey, bajo licencia de Creative Commons).

dimecres, 18 de gener del 2012

Crónica de las primarias del PSOE, IV.

Como era de esperar, las primarias del PSOE están desarrollándose con bastante sentido común. Salvo algún rifirrafe accidental los dos candidatos son mutuamente respetuosos. Hacen campaña en positivo y omiten la confrontación, sin dejar por ello de exponer sus respectivas propuestas. Eso está muy bien.

Ayer fue día dedicado al género epistolar. Chacón y Rubalcaba enviaron sendas cartas a los militantes. La de Rubalcaba parece tener más enjundia, aunque no conviene olvidar que la de Chacón llevaba como anexo las declaraciones que hizo en Olula del Río, el pueblo de su padre. Pero esa es agua pasada, que no mueve molino.

Los dos discrepan sobre la cantidad de sus seguidores. En espera de que haya discrepancias más interesantes, la de los partidarios se resolverá en el congreso. En el ínterin Rubalcaba es el más versátil, pues habla de cuestiones de renovación del partido y también de debate ideológico. Esa propuesta de intensificar el municipalismo del PSOE es una buena idea. El poder local es un terreno en el que la izquierda ha tenido siempre mucho gancho. No obstante y como muestra de que estamos en un tiempo nuevo, el candidato podría vincular su propuesta con la que también habrá que hacer acerca de la racionalización de la vida municipal. Tiene poco sentido que en España haya ocho mil municipios. El objetivo debe ser menos municipios y más fuertes.

Chacón, a su vez, también ofreció una propuesta concreta con que poner color a su idea de que se precisa acercar el partido a la sociedad al pedir la recuperación de la secretaría de Formación, un centro de formulación de doctrina. No obstante, lo esencial no es el fuero, sino el huevo. El huevo de la doctrina.

Aquí sigue habiendo carencia. Hay que encontrar propuestas acerca de cómo se sale de la crisis en perspectiva socialdemócrata. Rubalcaba dice que Rajoy probablemente subirá el IVA. Es de lo poco que le queda por hacer; pero ¿cuál es la alternativa? Y, tirando por elevación, ¿qué se propone para reformar el capitalismo y evitar que la crisis sea crónica? ¿Qué para reducir el poder de la banca y aumentar el de los órganos democráticos representativos? ¿Qué para alcanzar el objetivo, que parece haberse abandonado, de cambiar el modelo productivo? ¿Qué para combatir esa lacra y esa rémora de la corrupción? ¿Qué para relegitimar el sistema político?

No hay que tener miedo al debate interno, dice Rubalcaba. Bien está, pero ¿sobre qué se debate? El miedo no parece estar en el debate en sí mismo sino en los temas del debate. Nadie habla la iglesia, cuyos privilegios en época de penuria general son escandalosos; nadie de las cuestiones ecológicas y medioambientales, cada vez más apremiantes; nadie de qué pasos seguir dando en materia de violencia de género e igualdad; nadie acerca de cómo articular una política socialdemócrata europea que todos dicen ser necesaria; nadie de cómo abordar el sempiterno problema de la memoria histórica, especialmente lacerante ahora que va a procesarse al juez Garzón por querer hacerle justicia.

No haya temor a debatir, cierto. Y no haya tampoco temor a mencionar los temas de debate.

(La primera imagen es una foto de Rastrojo, bajo licencia de Creative Commons). La segunda, una foto del US Department of Defense, en el dominio público.

Garzón vs. franquismo.

Los jueces que imparten la justicia de un régimen ilegítimo, ilegal y delictivo, como lo fueron el franquismo, el nazismo o el comunismo (en Alemania Oriental, por ejemplo) son tan ilegítimos, ilegales y delincuentes como el régimen al que sirven. Así, cuando los países que los sufren se liberan de ellos, lo primero que hacen es depurar la judicatura. Eso no pasó con el franquismo y los jueces que presidieron las farsas del Tribunal de Orden Público, siguieron en sus puestos durante la democracia administrando una justicia tan contraria a sus convicciones como contraria a la justicia había sido su práctica anterior. La democracia heredó intacto el cuerpo de jueces de la dictadura y, con ellos, los usos, las creencias y los prejuicios de ésta.

El ejército, la policía, la iglesia y la judicatura fueron los últimos reductos del franquismo. Los dos primeros se han renovado ideológicamente. Los dos últimos, no. Por ello no es de extrañar que el estamento judicial trate de condenar la actividad del único juez que en España ha intentado hacer justicia a las víctimas de la dictadura. Una condena a Garzón no solamente será un castigo a éste sino que pretende tener un efecto disuasorio para quien pueda venir detrás queriendo hacer lo mismo. Aunque la causa que se le sigue ahora, como una segunda por unos supuestos cobros del Banco de Santander, no tienen relación directa con el franquismo, sí la tiene el tercer proceso con motivo de la aplicación de la Ley de la Memoria Histórica y este proceso es el que da sentido al conjunto de la peripecia judicial de Garzón. Se le persigue y se le juzga por haber tratado él de juzgar el franquismo.

¿Cabe esperar justicia? No es descartable pero tampoco lo es lo contrario; al revés, quizá sea lo más probable. Es mucha la animadversión que este juez ha sembrado entre los de su gremio, en donde los simples envidiosos por sus éxitos unen fuerzas con quienes quieren dejar incólume el franquismo.

Las movilizaciones populares a favor de Garzón deben continuar. Es un derecho de la gente y son beneficiosas para el acusado en la medida en que los jueces se saben observados por una opinión pública muy crítica. Mucha ayuda, más quizá que la anterior, presta a la Justicia la asistencia de medios de comunicación extranjeros. Durante el franquismo solo la repercusión internacional de las fechorías de la dictadura era un freno a las de sus esbirros judiciales. Muchos represaliados de la Dictadura salieron no tan mal parados como se temía precisamente por la presión internacional. Es preciso mantenerla. Que los magistrados de la sala segunda sepan que, si cometen una iniquidad, las naciones civilizadas se lo reprocharán.

En torno al juez Garzón se libra la última batalla contra el franquismo. Y será una batalla larga. Si el juez es condenado ahora podrá acudir al Tribunal Constitucional y también al Tribunal de Estrasburgo por cuanto, al juzgarlo directamente el Supremo, sin posibilidad de segunda vuelta o revisión en proceso penal, tendrá abierto el amparo por indefensión y denegación de juicio justo. Y, si estos fallan, a la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. Hay que aguantar y denunciar sin descanso. Una libertad sin justicia no es libertad.

(La imagen es una foto de http://www.presidencia.gov.ar/, bajo licencia de Creative Commons).

dimarts, 17 de gener del 2012

La corrupción es un problema de Estado.

Las pasadas elecciones de 20 de noviembre mostraron que la corrupción no pasa factura al PP, el partido que más afectado está por ella. El electorado valenciano dio una asombrosa mayoría absoluta al expresidente Camps, el hombre de quien cabe presumir que haya provocado la ruina de una comunidad autónoma antes rica y próspera, convertida con él en una tierra de saqueo, según acertada expresión de El país, en la que el despilfarro del dinero público ha sido la norma en los últimos años. El despilfarro, la malversación, el cohecho, la apropiación indebida..., un estilo de gobierno. Lo mismo ha sucedido en Castellón en donde, de haberse vuelto a presentar el inefable Fabra, hubiera cosechado probablemente un triunfo similar. Lo mismo también en Baleares, otra mayoría arrolladora para el partido del expresidente Matas quien está ahora procesado por una serie de presuntos delitos de corrupción que dejan boquiabierto a cualquiera, una verdadera trama corrupta con escritores áulicos a su servicio pagados con dineros públicos.

¿Cómo es posible? No hay explicación satisfactoria. El comportamiento del electorado desmiente las más complejas teorías de los expertos sobre su motivación y comportamiento. Pero que no haya explicación no quiere decir que la corrupción, cuando llega a este grado de generalización, no sea un problema de primera magnitud, tanto como el paro o la crisis bancaria. El reciente golpe de Standard and Poor's puede verse como una maniobra aviesa, pero debilita el crédito de las naciones recalificadas a la baja. Con todo, más lo hace esta insólita epidemia delictiva de guante blanco y en las alturas. Ningún plan de recuperación, que supone sacrificios y solidaridad, puede consolidarse sobre un terreno cuya fibra moral está literalmente destruida por una corrupción que lejos de provocar el rechazo popular, garantiza mayorías absolutas a los presuntos corruptos. Presuntos corruptos malgobernando comunidades autónomas que han tenido que pedir auxilio al Tesoro para evitar la bancarrota.

Muchos ven la crisis, en realidad, como una estafa por la que los bancos se enriquecen a costa de las estrecheces de la gente normal, la que trabaja (cuando tiene empleo) paga sus impuestos (que son los únicos que se suben) y pena por llegar a fin de mes y no como Esperanza Aguirre, sino de verdad. ¿Y los políticos? Muchos han sido cómplices de ese saqueo; otros se han enriquecido mediante privilegios escandalosos; y otros por procedimientos supuestamente delictivos. De acuerdo, no hay que generalizar. No son todos los políticos. Pero ¿por qué los honrados no plantean abiertamente la cuestión de que la corrupción es un problema de Estado? ¿Por qué no se han tomado medidas drásticas con los presuntos culpables? Ciertamente, el PSOE andaluz lo ha hecho con ese director general que, al parecer, se fundía cientos de miles de euros de los dineros públicos en correrse juergas que luego versificaba. Y tiene una gracia macabra que, en parte por hacerlo, sean los socialistas quienes vayan a pagar por todos pues corren serio riesgo de perder las próximas elecciones en Andalucía.

¿Cómo puede seguir ocupando cargo público alguno Francisco Camps quien, aparte de su comportamiento chulesco durante el proceso, queda retratado en las conversaciones entre sus "amiguitos del alma" que, cuando él no los oye, lo llaman "gilipollas" o "hijo de puta"? Bueno, en este juicio quedan todos retratados como verdadera escoria pero, al menos, los demás no ocupan un sillón en ningún Consell Jurídic Consultiu.

¿Cómo es posible que ocupe cargo alguno Carlos Fabra? El afortunado jugador de lotería inauguró con gran pompa en compañía del precitado Camps ese increíble aeropuerto sin aviones que ya debería estar en el Guiness, capítulo de tomaduras de pelo colectivas. Y ahora parece que el aeropuerto, inmenso como es, presidido por esa estatua monumento a la megalomanía, no era más que la punta de un iceberg que ocultaba una gigantesca recalificación de terreno para 40.000 viviendas, doce campos de golf y mil otras amenidades a cual más disparatada.

¿Cómo es posible que nadie diga nada cuando una Infanta de España y su marido están presuntamente implicados en el monumental expolio a que Matas sometió el archipiélago que gobernaba? ¿Cómo se sigue sin decir nada cuando se revela que, al parecer, dicha implicación conducía a una compleja y refinada organización con fines delictivos? ¿Cómo no explica el Rey hasta dónde sabía y qué hizo para poner en práctica el principio por él mismo enunciado de que "la justicia es igual para todos"?

Todos estos personajes, empresarios, políticos, miembros de la casa real y avezados delicuentes debieron de emborracharse con la sensación de impunidad que se dio en los años locos del despilfarro y del expolio, en la segunda legislatura de Aznar y la primera de Zapatero. Y ahora se nos aparecen como el reparto de una nueva versión del ascenso y caída de la ciudad de Mahagonny.

Es un problema capital; no se puede minimizar ni ocultar; hay que hablar de él. Los políticos deben decir algo; el Parlamento debe decir algo; el país debe decir algo.

(La imagen es un gráfico tomado de El País, edición de 14 de enero de 2012.

Propaganda mezclada de melodrama

¡Menuda decepción la película de Phyllida Lloyd sobre Margaret Thatcher! ¡Qué forma de destruir un personaje que, a su modo, tuvo cierta grandeza, convirtiéndolo en una estúpida leyenda acartonada! Sin duda la interpretación de Meryl Streep es estupenda. Gran trabajo de impostación de la voz por el que una yanqui de New Jersey habla un perfecto Queen's English con acento de oxbridge. Seguramente le darán un Óscar. Pero la película tenía que haber sido algo más que una ocasión de lucimiento de una actriz.

Abreviando, porque irrita hablar de un producto tan detestable: más de la mitad de las dos horas de La dama de hierro se van en confrontarnos con la miserable existencia cotidiana de una enferma de Alzheimer. Eso quiere decir que queda otra hora para embutir a ritmo de caballo once años de una historia que vio momentos tan excepcionales como la derrota de los otrora poderosos sindicatos británicos, la alianza con Ronald Reagan para destruir el Estado del bienestar, el atentado del IRA en Brighton, la guerra de las Malvinas, la caída del muro de Berlín, el enfrentamiento con la Unión Europea y la conspiración del Partido Conservador para deshacerse de su lideresa aprovechando el fracaso de su intento de desmantelar el servicio nacional de salud (cosa que no se menciona en la peli) y de establecer un injusto impuesto de capitación.

Como esta pretensión es tan disparatada se resuelve con un guión absurdo en el que vivimos los episodios más impactantes de esa trayectoria como confusos fogonazos en reiterados flash-back de una mente enferma de Alzheimer. La lamentable condición de Thatcher se muestra ya en las primeras escenas. Hubiera bastado con eso y un único flash back para contar toda la historia en lugar de interrumpirla continuamente con episodios típicos de esta enfermedad de forma que no se sabe si lo que se quiere es colocarnos un documental sobre el Alzheimer en el marco de una historia de ocaso de los dioses o enardecernos con la leyenda de una férrea personalidad. Lo primero carece de sentido y lo segundo es un fracaso.

Afortunadamente para ella y para todos, Margaret Thatcher fue mucho más que una Iron Lady, especie de mezcla de Isabel I y Golda Meir. Thatcher representaba una mentalidad, una ideología neoliberal y conservadora que tenía y tiene mucho más fondo que la admiración de una jovencita por la integridad moral de su padre, honrado tendero, convencido de que son los tenderos quienes han hecho grande a Inglaterra. Una mentalidad de las clases medias y altas en el mundo anglosajón que se impuso arrolladoramente en el planeta desde los años ochenta y que ha traído la catástrofe de la actual crisis.

Thatcher tenía convicciones que aún hoy inspiran a muchos polític@s de la derecha. Me limito a citar una de sus más célebres expresiones que dan la medida de esta ideología: "La sociedad no existe". De eso, como de muchas otras cosas, no se dice nada en la película. Sí, en cambio, de la contrapartida: lo que existen son las familias y los individuos. La finalidad es clara: presentar únicamente los aspectos positivos del personaje (es vergonzosa la forma en que se caricaturiza la oposición laborista), convirtiéndolo en una especie de muñeco de cartón completamente inverosímil.

Cuanto de público hay en la película es propaganda y cuanto de privado, melodrama "explicativo" de acompañamiento.

dilluns, 16 de gener del 2012

Crónica de las primarias del PSOE, III.

El buen cronista debe ser ecuánime e imparcial y Palinuro se esfuerza por conseguirlo, pero cada vez le resulta más difícil porque a veces, alguno de los dos candidatos no está a la altura de las circunstancias. Carme Chacón tiene fuerza, tiene empuje y deseos de ganar. Pero, en ocasiones, ese ímpetu le pierde y debiera refrenarlo. Ya hace unos días tuvo la dsgraciada idea de mencionar una especie de "relevo generacional", algo en lo que los jóvenes caen con facilidad porque es muy simple: me toca a mí porque el tiempo del otro se ha pasado, está mayor. Es una actitud discriminatoria por razones de edad que resulta injusta, como todas las discriminaciones, como la que pueda hacerse por razón de sexo o de raza. Y, además de injusta, muy convencional y poco inteligente porque no se está hablando de un campeonato de ciclismo, sino de dirigir un partido político. Por la misma sinrazón podría descalificar el mayor a la más joven por ser bisoña. Por fortuna, Rubalcaba respondió con más altura al decir que él no le preguntará la edad a nadie. Palinuro, que no está obligado a andarse con circunloquios, añade que preguntar por la edad para asuntos en que ésta es irrelevante debiera estar prohibido. Lo necesario para dirigir un partido y/o un gobierno es mostrar capacidad intelectual, espíritu de servicio, iniciativa, cosas que se pueden tener a los veinte, a los cuarenta, a los sesenta años de edad o a ninguna de ellas.

De nuevo Chacón desbarra cuando ofrece un lugar en la dirección del partido a Rubalcaba si ella gana las elecciones. Es una actitud de una magnanimidad inoportuna ya que, a todas luces, corresponde a Rubalcaba un sitio en esa dirección por méritos propios si él quiere. Lo más sensato que puede hacer Chacón es dejar de referirse a su competidor porque tal mención permanente parece algo obsesiva.

En este terreno Rubalcaba lleva ventaja porque procura no referirse a Chacón salvo para responder y concentra su discurso en las tareas del PSOE y su necesaria reforma y en la oposición al gobierno del PP, como cuando pregunta: ¿desde cuándo sabe Rajoy lo que hay que hacer? En efecto, ¿desde cuándo? Enterarse aclararía bastantes cosas. Pero no habrá lugar. Rajoy no contesta las preguntas.

El famoso debate de ideas sigue sin producirse. A las que ha apuntado Palinuro en entradas anteriores añade hoy otras en relación con el Estado del bienestar y la iglesia. Afirma Rubalcaba que estará vigilante para luchar en contra de los intentos de la derecha por desmantelarlo. Es importante, si bien, a fuerza de realistas debe admitirse que es poco lo que cabe hacer dada la aplastante mayoría absoluta del PP. Pero, además de importante, ¿es todo cuanto cabe decir? ¿Basta con defender lo existente, que está tambaleándose? ¿No hay que ser más decididos? ¿No hay que prometer también que, además de defender el Estado del bienestar, debe ampliarse y fortalecerse? Por ejemplo, entiende Palinuro que el PSOE debiera prometer que devolverá al sector público todo lo que la derecha ha privatizado en detrimento del interés general. Los servicios públicos deben ser eso, públicos, y no privados, compartidos con lo privado o de gestión privada, que son los artilugios neoliberales para despojar a la comunidad de sus pertenencias y, por ende, de sus derechos. La sanidad, las pensiones, deben ser todas ellas públicas, sin detrimento, claro, de que haya sanidad privada y planes privados de pensiones. También la educación debe ser inequívocamente pública. Hay que ir a la eliminación de la enseñanza concertada que, en el fondo, es tan negocio como la privada pero con fondos públicos. Si los curas quieren participar en la enseñanza que monten colegios privados. El Estado debe cuidarse de que la enseñanza pública sea gratuita, universal y laica. Porque es un derecho.

Y lo mismo cabe decir de los demás servicios públicos. El Canal de Isabel II debe seguir siendo público al cien por cien y, si el PP lo privatiza en todo o en parte, el PSOE debe prometer que volverá a socializarlo. El Estado ha de ser fuerte, tener saneados ingresos vía fiscal y actuar con fines de redistribución de la renta. Por supuesto, no tiene por qué interferir en la actividad privada legal y financiada con fondos privados, pero tampoco debe consentir que los intereses privados lo colonicen, lo troceen, se aprovechen de él.

En ese mismo terreno, la socialdemocracia no puede seguir ignorando la permanente intromisión de la iglesia en los asuntos públicos. La última peripecia en este campo es la reamortización que los curas están llevando sigilosamente a cabo en toda España, al amparo de una injusta Ley Hipotecaria, mediante la cual están depojando a la colectividad de todos los bienes del común, casas, tierras, iglesias, ermitas, cementerios, etc. Sería bueno que el PSOE explicara que recogerá el propósito, abandonado por el gobierno anterior, del que ambos candidatos fueron ministros, de proseguir en la tarea constitucional de hacer realidad la aconfesionalidad del Estado, lo que implica la denuncia del Concordato vigente así como de los abusivos Acuerdos con el Vaticano de 1979. La iglesia católica ha sido de siempre una rémora para el progreso de España y sigue siéndolo. La tradicional falta de espíritu crítico, la carencia de orientación científica que tanto se hacen notar en España ahora que la salida de la crisis sólo puede enfocarse mediante el fomento de la sociedad del conocimiento, de la investigación y el desarrollo, siguen siendo los grandes obstáculos al adelanto del país y de ellos la principal responsable es la iglesia, cuya financiación a cargo del Estado es una injusticia con la que el PSOE debe acabar.

(La primera imagen es una foto de Rubalcaba38; la segunda, una foto de isafmedia, ambas bajo licencia de Creative Commons).