Ayer Palinuro se presentó más contento que de costumbre; se sentó sobre mi mesa de trabajo, sin dejarme ver la pantalla del ordenata, que es como si te quitaran la luz de los ojos; dio un tiento a mi café mañanero y me puso su nuevo libro bajo las narices.
-Vaya -dije, aparentando una indiferencia que sabía iba a herirlo-. Tu nuevo libro. Enhorabuena.
- ¿Cómo que "vaya"? ¿Cómo que "enhorabuena? ¿Es que no le vas a dedicar un post ni un comentario?
- Hombre -contesté-, no está bien hablar de los libros propios.
- Oye, perdona -dijo él-. Lo he escrito yo.
Yo (sarcástico):
- Pero lleva mi nombre.
- Bueno, tú sabes que somos el mismo.
- No; yo no me bebo tu café.
- Pero haces algo peor: te las das de bueno, de ilustrado, de "buena gente", como si fueras el Dr. Jeckyll y yo Mr. Hyde.
- Pues eso.
- Pero ¡somos el mismo! -se impacientó Hyde/Palinuro. ¿De verdad no vas a decir algo sobre tu libro?
- Sería una vergüenza, eximio piloto. ¿Cómo iba a evitar ensalzar mis virtudes y ocultar mis defectos?.
- Puedes ocultar tus virtudes (cosa fácil, pues son pocas) y ensalzar tus defectos; algunos son muy graciosos.
- Pero ¿no ves, maldito Hyde/Palinuro, que no sabes lo que dices?.
- Igual que tú. ¿O te crees que este diálogo que estás transcribiendo tiene sentido? Bueno, anda, escribe algo sobre la obra que hemos escrito al alimón.
- Que no, que no, que debo un respeto a mis lectores. Además, ¿está ya en las librerías? No, espera: la tirada ¿es de más de ese ejemplar que tienes en la mano?
Manifiestamente ofendido, Palinuro se atusó el cabelló, peinado a lo romano (republicano), dejó de parecerse a Hyde y adoptó una actitud de dignidad calderoniana:
- No os responderé, villano, a vuestra última grosería y os responderé sólo a la primera pregunta: no, el libro estará en librerías a partir del seis de febrero. Pero el que quiera puede adquirirlo por la red, pinchando en la imagen, enlazada a la editorial Los libros de la catarata.
Sentí un poco de lástima. ¿Qué quieren? Son muchos años juntos, surcando el proceloso piélago en busca de nuestro destino. Uno se encariña con el compañero de aventuras porque así se desdobla uno, siendo uno mismo y compañero del otro. La del compañero (o compañera) de aventuras es la única elección que se nos permite en la vida; en todas las demás, somos elegidos, sin poder decir ni tweet. Decidí reconciliarme con él y hacerme perdonar mi malicia:
- Te propongo un trato. No diré nada del libro, pero reproduciré aquí el índice.
- Vale, Ramón -dijo él-. Es suficiente. A verlo.
- Aquí está:
A.- TEORÍA
I.- En los orígenes: la sociedad abierta
II.- El ocaso de los proyectos revolucionarios en la postmodernidad.
III.- La traición del Tercer Mundo.
IV.- De qué sirven las teorías de la democracia.
B.- PRÁCTICA.
V.- La búsqueda discursiva de la verdad: el 15-M
(El movimiento 15-M o "movimiento de los indignados". Las reivindicaciones. El apoyo social).
VI- La verdad y la mentira: el caso Murdoch.
(Los medios de comunicación. La hegemonía ideológica. La propaganda).
VII.- Lo público, lo privado y lo secreto: WikiLeaks.
Conclusión.