Hoy, viernes, a las 19:00 los amigos de Recupera socialismo inauguran su sede social, en Ferraz 10, a escasos metros de la oficial del PSOE, actualmente en manos de la junta golpista, llamada "gestora". Se trata de militantes de izquierda y críticos con la línea de Rubalcaba/Díaz/Jiménez de entrega del PSE al PP. Entre ellos, hay muchos afines a Pedro Sánchez pero, no solo a él sino sobre todo, afines a la idea de devolver la dignidad al PSE, hacer unas primarias limpias, sin trampas y sin intelectuales orgánicos cantando las alabanzas de la derecha.
Los miembros de esta opción han organizado una primera mesa de debate a la que han invitado a Pau Marí-Klose, Ramón de Marco y un servidor. Me considero muy honrado de aparecer en compañía de gente tan interesante y notable y espero estar a la altura de las circunstancias. Siento gran respepto por la gente abierta, que quiere escuchar puntos de vista distintos y debatir sobre ellos. Sobre todo siento mucho respeto por quienes, a su vez, respetan la independencia de criterio y juicio que algunos mantenemos a toda costa, incluida la de no caer simpáticos a ninguno de los establishments ideológicos y políticos, ninguna de las cuadras que compiten en una carrera ficticia, hecha de ambiciones personales, nulo interés por el bien común y confusión permanente entre convicciones y conveniencias. Siempre, claro, en detrimento de los sectores populares a los que dicen representar, por los que dicen interesarse y de los que lo único que quieren son los votos para hacer almoneda con ellos.
Este tipo de actos, surgidos de la actividad espontánea de la gente, organizados y sostenidos por los esfuerzos personales de los militantes son los auténticos y verdaderamente interesantes a mi juicio. Nada que ver con las mascaradas que, desde los órganos del PSOE, e organizan a mayor gloria de la caudilla andaluza, una política profesional cuya ambición es inversamente proporcional a su competencia y capacidad. Pero no importa: todos los organos oficiales del PSOE están a su servicio, bien desde la sede central o bien desde las sedes provinciales en los que se fletan autobuses con el dinero de todos para traer a la capital a una cohorte de mariachis a que hagan sombra a la campaña de Pedro Sánchez, a cuyos mítines acuden voluntariamente más militantes de los que jamás irán a escuchar a Díaz Por cierto si yo fuera del partido o seguidor de Sánchz le diría que deben querellarse contra un uso tan injusto de los recursos de todos. Si hay autobuses para traer gente de Andalucía o Aragón a aplaudir a esta arribista sin principios, ¿no les de vergüenza a los socialistas de que, en cambio, nadie, absolutamente nadie en los aparatos del partido haga un solo gesto, por pequeño que sea, de apoyo a Sánchez.
Ignoro si hay algo que pueda indignar más a uno de izquierda que la injusticia, la desigualdad y la arbitrariedad.
Este tipo de actos, surgidos de la actividad espontánea de la gente, organizados y sostenidos por los esfuerzos personales de los militantes son los auténticos y verdaderamente interesantes a mi juicio. Nada que ver con las mascaradas que, desde los órganos del PSOE, e organizan a mayor gloria de la caudilla andaluza, una política profesional cuya ambición es inversamente proporcional a su competencia y capacidad. Pero no importa: todos los organos oficiales del PSOE están a su servicio, bien desde la sede central o bien desde las sedes provinciales en los que se fletan autobuses con el dinero de todos para traer a la capital a una cohorte de mariachis a que hagan sombra a la campaña de Pedro Sánchez, a cuyos mítines acuden voluntariamente más militantes de los que jamás irán a escuchar a Díaz Por cierto si yo fuera del partido o seguidor de Sánchz le diría que deben querellarse contra un uso tan injusto de los recursos de todos. Si hay autobuses para traer gente de Andalucía o Aragón a aplaudir a esta arribista sin principios, ¿no les de vergüenza a los socialistas de que, en cambio, nadie, absolutamente nadie en los aparatos del partido haga un solo gesto, por pequeño que sea, de apoyo a Sánchez.
Ignoro si hay algo que pueda indignar más a uno de izquierda que la injusticia, la desigualdad y la arbitrariedad.
Así que allí nos vemos mañana, a ver si conseguimos que se acabe esta vergüenza de que unos golpistas mendaces hayan prostituido millones de votos de la izquierda para favorecer a la derecha.
(Cada vez que veo a alguno de estos pavos mintiendo en las redes acerca de su "valiosa oposición" y de cómo ha beneficiado a no sé cuántos millones de personas, me pregunto cuál será la recompensa por apuñalar a un líder por la espalda, entregarse incondicionalmente al enemigo y colaborar en la explotación y opresión de la clase a la que se dice representar).