Hace poco posteé sobre el ruido en España, una de mis bestias negras. Una carta de lector en El País de ayer, firmada por don Enrique Angulo Moya, a quien Dios bendiga, y titulada ¿Complejo de inferioridad?me da pie para volver sobre el asunto pues, mientras nuestro país siga siendo tan ruidoso, cuantas veces se vuelva serán pocas. Tengo dicho que las cartas de los lectores son una fuente inagotable de ideas y, para mi gusto, lo mejor del periódico. Es tal mi pasión por el género que creo que postearé sobre él a no mucho tardar, tratando de responder a la pregunta de porqué se escriben cartas al director.
En este caso concreto, el del señor Angulo, la carta sostiene la teoría nada estrafalaria por lo demás de que los españoles somos tan ruidosos, groseros, incivilizados y gamberros porque padecemos un complejo de inferioridad. Es bastante posible y lo único que se me ocurre al respecto es que, si padecemos un complejo de inferioridad, es bien merecido.
Como tengo tendencia a las explicaciones simples, sin desdeñar en modo alguno el brillante diagnóstico del señor Angulo, creo que el problema es de educación. Quiero decir, claro, de falta de educación. La gente es ruidosa porque nadie, normalmente, ya sea en la familia o en la escuela le ha enseñado a no serlo. Y nadie le enseña a no serlo porque tampoco nadie enseña en parte alguna que, en toda convivencia civilizada, es de primera importancia pensar en los demás y procurar no ser molesto.
Es curioso, es tal el fracaso de la educación en este terreno que el comportamiento incivil de los españoles se acentúa precisamente cuando conviven. Parece una especie de gregarismo provocador y molesto. Si no me creen, hagan la prueba siguiente: lleguen a una terraza de un café en la que no haya nadie y siéntense a una mesa, la que quieran. Les apuesto doble contra sencillo a que los parroquianos siguientes elegirán para sentarse la mesa contigua a la suya, aun estando la terraza desierta y, a continuación, se pondrán a berrear.
Aprovechando la ocasión, me sumo al interesante debate que se traen los obispos, la carcundia nacional, el progresismo más o menos ramplón y los señores Savater y Ferlosio sobre la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía (EpC), pidiendo que además de esos asuntos tan interesantes de los derechos fundamentales, la democracia, la igualdad, los valores constitucionales, la tolerancia, etc, etc, se aproveche también para meter un capitulillo de lo que antes se llamaba "buenos modales", consistentes en cosas tan simples como las siguientes:
No escupir en el suelo en público.
No orinar en los quicios de los portales.
No gritar en los establecimientos públicos.
No permitir que las mascotas ensucien la acera.
No tirar desperdicios a la vía pública.
No ensuciar parques, jardines ni campo en general.
No fumar donde no esté permitido.
No molestar a los vecinos con ruidos innecesarios.
No llevar transistores a lugares públicos.
No jugar al balón en cualquier parte.
No permitir que los niños propios molesten a los demás.
Aquí me detengo pero la lista podría alargarse mucho metiendo discotecas, quads, chiringuitos, excursionistas, procesiones, fiestas, etc. En fin, como se ve, cosas muy necesarias y nada conflictivas, espero. Porque, si se piensa bien, hace falta ser un auténtico imbécil para transitar por las ciudades de noche con motos de escape libre. O sea, ser lo que un tío mío llamaba con precisión gracianesca, "un tonto montado en un ruido".
Un comentario en el post de ayer de una muy buena amiga alabando una entrevista televisiva del presidente Chávez encontrada en el Insurgente, que la tilda de "extraordinaria", me hizo verla íntegra, y eso que es larga. Está aquí abajo.
La verdad es que no sé bien qué decir. Lo primero que llama la atención es el arrobo de la entrevistadora al escuchar al señor Chávez. La plática del Presidente es muy ilustrativa de una forma de ser y de gobernar claramente caudillista. Tiene el arbitrismo, el desparpajo y el personalismo propios de esta forma de entender la gobernación de los Estados y la política en general. Los caudillismos, típico fenómeno latinoamericano con fuertes raíces en la madre Patria, pueden ser de derechas o de izquierdas. El de Chávez es netamente de izquierdas, razón por la cual tiene muchas cosas que resultan gratas a este bloguero rezongón. Especialmente cuando habla del imperialismo estadounidense o de la derecha en diferentes partes, singularmente en México.
Pero enjundia política, propiamente hablando, hay poca o ninguna. Sin duda, el señor Chávez es simpático, espontáneo, campechano y hasta se arranca por lo mariachi de vez en vez y, arrastrado por su amor a México -la señora Poniatowska está nacionalizada mexicana-, interpreta algún trozo de Antonio Aguilar (a) "El charro de México". Se hace querer. Comparto con él la pasión por la Plaza Garibaldi. Pero, en mi caso, prefiero a José Alfredo Jiménez. Aquí está cantando Un mundo raro. Ya saben:
Y si quieren saber de mi pasado es preciso decir otra mentira:
Les diré que llegué de un mundo raro que no sé del dolor que triunfé en el amor y que nunca he llorado.
Pero volviendo a la entrevista del señor Chávez, si en ella no hay enjundia, sí hay ocurrencias pintorescas, propias de los caudillos por la gracia de Dios, del Pueblo, de la Historia o de lo que diantres sea. Lo más llamativo es esa fe de creyente en las virtudes de la autarquía, de la autosuficiencia. "Producir lo que consumimos", dice el señor Chávez. Esa era también la principal (y seguramente única) idea económica del general Franco. Quizá haga falta ser militar para incurrir en tamaño desatino. En lugar de un Estado inserto en el comercio mundial, que compra fuera lo que necesita (y no es rentable producir dentro) con el dinero que gana con sus exportaciones, una especie de absurdo "Estado comercial cerrado" fichteano, plataforma del nacionalismo.
Sólo en los sistemas caudillistas pueden decirse y quizá hacerse cosas así porque, al fin y al cabo, nadie de peso en la política se atreverá a contradecir al mando. Incluso cuando el mando, como es el caso, está impecablemente legitimado por el voto de la mayoría democrática de los electores. El caudillismo esta inserto en el origen mismo del político señor Chávez como conspirador militar y consiguiente golpista. Las elecciones indiscutiblemente ganadas le dan su licencia populista. El último intento autárquico del que tengo noticia es el de Ceaucescu en Rumania. El país tenía que ser autosuficiente, aunque no pudiera permitírselo y debía producir de todo, desde leche a coches. Y así, producía el Dacia, para señalar bien el nacionalismo dacio y que no era otra cosa que el Renault fabricado bajo licencia.
Si esto es la izquierda y el "socialismo del siglo XXI", estamos apañados. Si bien es cierto que Chávez es muy simpático y lo de la tele lo borda. Hasta tiene un programa. ¿Cómo iba a permitir que funcionara la competencia, pudiendo impedirlo?
La decisión de la Comisión ejecutiva federal del PSOE de cortocircuitar el pacto entre el PSN y Nafarroa Bai podría convertirse en el culebrón del verano si los socialistas navarros osaran plantar cara a los órganos centrales y protagonizar algún tipo de algarada, movida, escisión o algo así. No será porque desde alguna prensa de izquierda (y de inspiración catalana) no se les empuje. Pero no parece que vaya a prender la llama de la insurrección en el socialismo navarro, Ribera del Ebro arriba o abajo. Si en lugar de tratarse del PSOE se tratara de los comunistas, probablemente ya se habrían escindido. Aunque nunca se sabe en estos tiempos postmodernos en los que el temple bolchevique parece más blando que el merengue. En todo caso, raro será (pero no imposible, desde luego) que un grupo significativo de socialistas de la Comunidad Foral alce bandera en contra de las imposiciones de "Madrid".
Los mandos nacionales continúan con sus actividades ordinarias, quien en la gestión cotidiana, quien disfrutando de unas vacaciones. El señor Blanco asegura que la decisión adoptada es la más conveniente para Navarra y para España, haciendo ese curioso doblete retórico que se hace siempre en el país al hablar de territorios problemáticos. Todavía no he escuchado a nadie decir que algo sea bueno para Extremadura y para España o para La Rioja y para España. A su vez, el presidente del Gobierno dice que "respeta" la decisión de dimitir del señor Puras y que "respeta" asimismo a Nafarroa Bai. Cuando un político dice de otro político o partido que "lo respeta", quiere decir que le importa un rábano lo que le suceda, si se me permite una traducción a la pata la llana. Al señor Puras y a Na Bai pueden ir dándoles. Y hasta aquí, probablemente, habrá llegado la "crisis" del PSN por la que cierta derecha cree que el señor Rodríguez Zapatero debe "asumir responsabilidades", sin que se tenga idea de qué responsabilidades sean esas.
En el mundo nacionalista y sus aledaños hay notable irritación porque se les ha volado el mirlo blanco: un PSN "compañero de viaje" (o tonto útil, que se decía en los tiempos del franquismo) santificando con su presencia cuatro años de ilusionante "euskaldunización" o "construcción nacional" vasca en el territorio irredento. Qué poco dura la dicha en casa del pobre. El señor Zabaleta y Aralar en su conjunto se quedan a la luna de Valencia a pesar de haberse desgañitado condenando la violencia. Esa condena de la violencia es la que esgrimen los sociatas que quieren ver un gobierno Na Bai-PSN, como si no estuviera claro que, de haber podido presentarse los que no la condenan, el resultado de Aralar hubiera sido muy otro a la baja.
La derecha, a su vez, ve colmados sus deseos con la gobernación del antiguo reino, pero no se fía de los socialistas. Para allanar el camino, el señor Miguel Sanz aseguraba ayer que "nosotros nunca hemos dicho que el señor Rodriguez Zapatero fuera a vender Navarra" y desafiaba a quien quisiera a visitar las hemerotecas. Todo depende de que se entienda por "nosotros". Si ese pronombre personal de primera persona del plural se refiere al señor Sanz y el cuello de su camisa, seguramente será cierto, pero la hemeroteca, sobre todo la blogosfera, está a rebosar de pruebas de que tal cosa se ha dicho hasta la saciedad en medios próximos a la UPN, especialmente en blogs de orientación "liberal", vale decir, de derecha de toda la vida. No obstante, los mentores más reaccionarios quisieran arrancar del PSN un compromiso formal de que renuncia a presentar una moción de censura en este mandato. Hasta se le planteó ayer en rueda de prensa al portavoz socialista, señor López Garrido, quien contestó que nadie renuncia a medio alguno en derecho. La petición es insólita y bastante gratuita. La moción de censura es constructiva y tiene que incluir el nombre del candidato alternativo a presidir la Diputación. Y, como están las cosas, es poco probable que eso se dé. Así que, de momento, habrá gobierno navarro de UPN y aquí paz y después, gloria.
(Las ilustraciones son máscaras tradicionales del teatro No japonés).
En los cursos de verano de la UIMP, el señor Ian Gibson ha abogado por la necesidad de que los familiares de los asesinados, paseados, desaparecidos del bando republicano en la guerra civil, así como los de los represaliados en la postguerra, encuentren los restos de las víctimas y ha afirmado que "hasta que los perdedores no busquen a sus asesinados y les den un entierro digno, este país no está en paz". Igualmente, el biógrafo propugna que se incorporen las enmiendas de IU a la Ley de la Memoria Histórica (en su nombre vulgar) que aprobarán las Cortes seguramente en septiembre para que ampare más y mejor los derechos de las víctimas.
Luego, refiriéndose al revisionismo histórico de la derecha sobre la guerra civil, Gibson ha asegurado que los libros de Pío Moa hacen "mucho daño" y que si se venden es porque las derecha los compra en masa.
A su vez, Pío Moa no ha tardado en responderle con un artículo en Libertad Digital, titulado La golfería de Gibson, en el que insiste en su conocida interpretación, consistente e culpar de la guerra civil a las fuerzas obreras revolucionarias durante la República. Dichas fuerzas (socialistas, anarquistas, comunistas) no lucharon por la democracia y la república sino por la revolución. Es conocida esta posición que, en otras elaboraciones, suele sostener que la guerra civil fue ya cosa hecha con la sublevación revolucionaria de octubre de 1934.
Buscar culpables de las tragedias históricas es ocupación bastante inane. Además, si hemos de situar el origen del enfrentamiento en alguna fecha concreta, también valdría la sublevación del general Sanjurjo el 10 de agosto de 1932. Pero no me parece esto lo esencial. Como tampoco lo es, creo, pasar juicio de culpabilidad setenta años después. Lo esencial, en mi opinión, es encontrar una fórmula de entendimiento que permita la reconciliación definitiva. Es muy posible que haya un punto de razón en lo que dice Moa, esto es, que la sublevación militar de julio de 1936 vino movida por una situación insostenible en materia de orden público; en todo caso es lo que siempre sostuvo la propaganda franquista. Pero, aunque eso fuera cierto, la sublevación no se legitima ni un ápice y sigue siendo un acto delictivo, contrario a todo derecho, y así debe considerarse.
Sea de quien sea la culpa material, el hecho es que los asesinatos masivos en la zona rebelde, las "sacas", las ejecuciones extrajudiciales, los "paseos", los fusilamientos de republicanos y militantes y simpatizantes de las organizaciones del Frente Popular todavía están esperando el definitivo esclarecimiento. De las barbaridades cometidas por los republicanos en su campo ya se encargaron los franquistas de resarcir a las víctimas o a sus familiares. Para que la balanza se equilibre es necesario que ahora lo hagan los republicanos.
Y hay más. Terminada la guerra, la dictadura procedió con el país como si de un territorio conquistado se tratara, la represión siguió durante años, primero indiscriminada y masiva, después, "encauzada" a través de consejos de guerra y por último por medio del Tribunal de Orden Público y siempre, siempre, contando con las actividades de la Brigada Político-Social, una rama de la policia especializada en torturas y terror. Es justo que las víctimas de la represión se vean rehabilitadas y compensadas por sus sufrimientos bien ellas directamente, bien a través de sus familiares.
Devolver a la gente su memoria, su dignidad, sus derechos jamás podrá ser, como dice la derecha "reabrir viejas heridas", sino atender a un principio fundamental de la justicia de dar a cada uno lo suyo.
Aquí se criticó en su día por timorato el proyecto de Ley de Memoria Histórica. Es de esperar que lo que salga aprobado del parlamento, con las enmiendas de IU o las que sean necesarias, esté a la altura de la justa finalidad para la que fue concebida.
(Las ilustraciones son de Castelao ("Atila en Galicia", 1937) y Modesto Ciruelos ("Fusilados, 1936).
Por las barbas del profeta que esto pasa de castaño oscuro. Los de Al Qaeda han vuelto a atribuirse la matanza del 11-M. Aquí tiene que haber gato encerrado. Tanta insistencia por apuntalar la "versión oficial" del Gobierno seguramente oculta algo. Es probable que, en su retiro veraniego, el juez Gómez Bermúdez, por fin, esté atando cabos y comprendiendo cómo aquel horrible atentado fue obra material de ETA, bajo la dirección intelectual del PSOE, ansioso por ganar las elecciones del único modo que sabe, esto es, asesinando, y con la complicidad de unos cuantos agentes corruptos de las fuerzas de seguridad del Estado y los servicios secretos. La verdad acrisolada y verdadera que ya adelantó el PP cuando estaba en Gobierno, sostuvo después el señor Aznar en sede parlamentaria y han estado reptiendo como carracas sus periodistas, todos ellos injustamente ninguneados por un aparato de propaganda del Gobierno que no permite escuchar más voces que las de los incondicionales. Sin duda para evitar que tan resplandeciente verdad se abra camino en el espíritu judicial, se ha montado esta extraña farsa en la que un terrorista de Al Qaeda, que seguramente será de Alcorcón, recaba en un video la autoría de un crimen que cometieron otros. En fin, ya falta menos para que se descubra toda la patraña, queden al descubierto los verdaderos culpables y exonerados los infelices injustamente acusados. Y para entonces, ¡tiemble Vd., señor Rodríguez Zapatero!
Me ha llegado el último número de la revista Trasversalesque, como se ve, tiene edición digital, muy digna de visitarse. Estos deTrasversales son un grupo de gentes de izquierdas variopinta, muy plural, emprendedora y simpática. Uno de esos prodigios de vitalidad de la izquierda que no se resigna. Se da un aire precisamente a esa otra sana iniciativa de izquierda que se llama No Nos Resignamos, un grupo constituido allá por 1995 para agrupar a gentes de izquierdas capaces de saltar las barreras artificiales que el sectarismo erige continuamente en esta orientación política y que tiene una notable presencia en la red. La visita a su página es muy recomendable para quien quiera encontrar enlaces de interés en diversos campos, político, artístico, literario, español, francés, italiano, etc.
Volviendo al número de Trasversales, es de aplaudir la sección de David Casacuberta, que se ocupa de asuntos de la blogosfera. Demuestra que la izquierda está viva y no se queda en el viejo ciclostil con el que "editábamos" panfletos contra el franquismo. Los Trasversales tienen también gran interés por asuntos feministas, cosa que los hace especialmente caros a mis ojos, y en este número hay unos buenos trabajos sobre la prostitución, un asunto sobre el que la izquierda aún tiene mucho que reflexionar porque, la verdad, es endiablado. Felicitaciones a los/as autoras/es.
En definitiva, lo que más me gusta de esta gente es que, siendo radicales, carecen del dogmatismo habitual en este territorio, ese que lleva a la irrelevante y habitual tertulieta de cofrades a considerarse la única y verdadera izquierda, mientras los demás son todos unos burgueses lacayos del imperialismo.
A través de una carta de lector en El País me entero de un asunto sorprendente. Resulta que el señor Luis Alfonso Gámez, periodista de El Correo especializado en rebatir las habituales charlatanerías sobre ovnis, fenómenos paranormales, espiritismo y otros cuentos, y que tiene un blog alojado en el periódico que se llama magonia ha sido condenado por un juez de primera instancia de Getxo a pagar 6.000 euros de indemnización al señor J. J. Benítez, conocido autor de éxito, en una demanda civil de protección del honor que éste ha interpuesto. En su sentencia, el juez declara probado que el periodista atentó contra el honor y el prestigio profesional del señor Benítez por llamarle defraudador y sostener que "su negocio se basa en la mentira, el engaño y la tergiversación", así como otros términos de este jaez.
Al parecer, el señor Benítez, en una serie llamada "Planeta encantado", emitida en su día por TVE y con gran audiencia, sostuvo, según dice el señor Gámez, que hay pruebas de que el hombre convivió con los dinosaurios, que un poder mágico permitió transportar las estatuas de la isla de Pascua hasta su ubicación definitiva, que Cristo anduvo por el Coliseo romano años antes de que el edificio existiera, que seres de Orión levantaron las pirámides de Egipto y que los astronautas del Apollo 11 encontraron ruinas extraterrestres en la Luna. El señor Benítez fue desgranando tan pintorescas ocurrencias a lo largo de los distintos programas de la serie. Yo no lo vi porque no suelo ver la tele y menos programas de los "misterios de la realidad". Ya vi uno del señor Luis del Pino y considero cubierto mi cupo hasta el siglo XXII. Pero, de ser cierto lo que dice el señor Gámez, es evidente que el señor Benítez está cultivando un género que tiene ilustres predecesores, como Nostradamus y Madame Blavatsky, el género del embrollo, el truco y la superstición.
Es posible que el juez de primera instancia de Getxo tenga razón y los términos en que se refirió el señor Gámez al señor Benítez fueran insultantes y atentatorios a su honor y prestigio profesional. Es posible. Pero si una persona afirma hablando profesionalmente que Cristo anduvo por el Coliseo o que hay ruinas de chalets en la luna, no sé a qué prestigio profesional se referirá el juez. Y, sobre todo, lo que más me preocupa, ¿quiere decir esta sentencia que es insultante y, por tanto no admisible, afirmar que quienes hablan de platillos volantes, de ectoplasmas razonantes, de vudús apasionantes son charlatanes de tres al cuarto? No sé; estoy un poco desconcertado porque, si eso es así, el señor juez acaba de cargarse la Ilustración en cuanto lucha contra la mentalidad supersticiosa y, de escribirse hoy La Enciclopedia, sus autores se arruinarían pagando indemnizaciones por faltar al derecho al honor y prestigio profesional de los vendedores de elixires.
Ayer, al redactar la "Carta de Palinuro" sobre Navarra, no quise mentar la bicha de ETA. Pero la bicha no necesita que la mienten. Viene sola. Aquí está con esta carta, prodigio de estilo epistolar gangsteril de "paga o atente a las consecuencias" envuelto en la hojarasca de la lucha contra la opresión extranjera que se ejerce en Francia y España pero que sólo se lleva a cabo en España porque los etarras son criminales, pero no totalmente idiotas y saben que con los franceses caben menos holguras que con los españoles. Así que, probablemente, la "liberación" de Iparralde esperará un poco y la "izquierda" abertzale tampoco dará mucho la tabarra al otro lado de la muga. Una "izquierda" que, como se ve en la carta reproducida, actúa como recaudadora del impuesto revolucionario. Ante una prueba incriminatoria tan fuerte y evidente contra la "izquierda" abertzale se queda uno perplejo pensando si la carta será auténtica o un montaje y/o provocación de algún servicio secreto, policial, parapolicial o seudopolicial.
Ayer, a los 100 días del secuestro de la niña Madeleine McCann en Praia da Luz (Portugal), su madre, Kate, concedió una entrevista a la prensa y pidió que se le diera la máxima difusión. Ciertamente, todos debiéramos implicarnos más con estos casos de secuestros: Madeleine McCann, Yeremi Vargas, etc.; ser todos ojos, oídos, ayudar en lo que podamos en las pesquisas. No hace falta extenderse en consideraciones sobre la vileza y depravación de unos seres humanos, capaces de causar daño a estos seres débiles, indefensos, inocentes, que apenas están empezando a vivir. El dolor de unos padres a los que se arrebata tan injustamente a un hijo o una hija podemos y debemos sentirlo todos porque a todos nos los han arrebatado.
Dejo aquí las fotos de los dos. Nunca está de más...La esperanza no se pierde y a lo mejor alguien ha visto algo que pueda ayudar a encontrarlos.
Hay cosas que maravillan, suspenden el ánimo y lo dejan a uno perplejo. Ayer domingo, cinco sujetos enmascarados como si fueran el Subcomandante Marcos entraron arma en mano en el Museo de Bellas Artes Jules Cheret, en pleno centro de Niza, en la Riviera francesa, y se llevaron cuatro cuadros. Uno de Alfred Sisley (a la izquierda), de título Allée de peupliers de Moret, (Alameda de Moret), por cierto bien bonito, otros dos de Jan Brueghel el viejo, también llamado "Brueghel de Velours", el hijo de Pieter Breughel y titulados Alegoría del agua y Alegoría de la tierra. No he podido encontrarlos porque el Museo Jules Cheret tiene "en construcción" la página digital en que habrían de exhibirse. Pero no son difíciles de imaginar. Este Brueghel de Velours, de quien hay algunas obras en El Prado de Madrid, era un pintor barroco que lo llenaba todo de flores, guirnaldas y coloridas aves exóticas, lo cual me ha parecido siempre bastante difícil de soportar. Rubens le encargó mucho relleno en sus obras y, aunque no solamente trabajó este tipo de temas, son por los que es conocido.
El cuarto cuadro robado (a la derecha; lamento que la reproducción sea de baja calidad) es uno de Claude Monet titulado "El acantilado cerca de Dieppe" y del que hay más versiones, una en el Hermitage de San Petersburgo. (Tampoco estoy seguro de que sea ésta la versión robada ya que la he encontrado en la red con localización indefinida, y no he podido cotejarla con la que se exhibía en el museo porque pertenece al piso, rez de chausée, que está "en construcción"; pero, si no lo es, se le aproxima mucho). Lo curioso del caso es que tanto el de Sisley como el de Monet ya los robaron en 1998 en el mismo museo y aparecieron días después en un barco abandonado. Y, todavía más insólito, el de Monet lo habían robado por primera vez en 1978. Es desconcertante que una tela que tampoco es tan extraordinaria dentro de la producción del impresionista francés levante tal pasión entre los ladrones. Por cierto, Yahoo! daba ayer la noticia diciendo Four priceless paintings stolen in brazen French museum heist. El propio museo valora los cuatro cuadros en unos 50 millones de dólares. Eso del valor/precio de las obras de arte es cosa muy elástica. Hace dos años se vendió otra versión del mismo tema de Monet (Acantilado cerca de Dieppe) en una subasta de Carmes en Rouen por 400.000 euros. Los conservadores del museo dicen que serán difíciles de vender porque son muy conocidos. Seguramente tratan de consolarse pero me malicio que hay mercado para todo ya que éste no parece arredrarse ante las normas morales Lo que me llama la atención es que el arte convertido en mercancía encuentre su valor de uso (y entre así en el circuito de compraventa) a través del robo. No sé, es como una parábola. Igual que hubo unos Robber barons en el origen del capitalismo estadounidense, a lo mejor hay unos Robber thieves en el capitalismo globalizado.
Queridos/as amigos/as: muchas gracias por los comentarios de estos días que son la sal misma de un debate de interés y altura. Creo que podré aportar algo precisando punto por punto los que diputo motivos de controversia con dos codas finales. Como verán también este post podría llamarse el de los "¿o es qués?".
Primero: Madrid. Madrid como Comunidad Autónoma no pinta nada en Navarra. ¿A qué "Madrid" se refieren los señores de Na-Bai cuando dicen aparentemente indignados que Navarra se gobierna desde Madrid? Obviamente a la capital del Estado en la que se concentran gentes de todas las procedencias entre ellas muchas vascas y que está en Madrid como podría estar en cualquier otra parte. De hecho la decisión que tanto molesta a Na Bai la ha tomado un partido cuyo Secretario General es un leonés y cuyo segundo es un gallego. Puede que eso no quepa en la cabeza del señor Zabaleta y sus amigos (aunque sospecho que sí, pero no les interesa decirlo) ya que no creo que el Secretario de Aralar pueda jamás ser un murciano ni que ninguna decisión que afecte a la formación se tome a más de 200 kms. de Puente la Reina. Pero así son las cosas: unos se organizan a escala de Navarra y otros a escala de España aunque moleste al señor Zabaleta y sus amigos nacionalistas. ¿O es que es obligatorio el nacionalismo a la escala del señor Zabaleta según el cual algunas decisiones que afectan a Puente la Reina se pueden tomar en Pamplona pero algunas que afectan a Pamplona no se pueden tomar en Madrid? Cambiar las escalas a capricho no es de recibo. El "tremendo (y merecido) varapalo" del PSM o del PSOE de Madrid no tiene nada que ver con las decisiones del PSOE de España. ¿O es que el PSOE sólo es PSOE en Madrid? Si eso no se entiende, vamos aviados.
Las elecciones anticipadas. ¿Quién teme al lobo feroz? Hay quien dice que saldría malparado el PSN. ¿Por qué? ¿Por no formar gobierno siendo la tercera fuerza en votos cuando las dos primeras son incapaces de hacerlo sin él? Las elecciones, incluso repetidas, serán siempre mejores que pactos incómodos entre aliados que no se conllevan. No creo se pueda acusar al PSOE de precipitación. ¿O es que el PSN está obligado a aliarse con Na Bai por algún motivo preternatural? ¿Que vacila, duda, se retracta? Claro, como todo el mundo haría en una pendiente llena de pieles de plátanos.
Na Bai no es un partido, sino una coalición electoral de cuatro partidos, dos de izquierdas, esto es, Aralar (una escisión de Batasuna) y Batzarre, uno de derechas demócrata-cristiano, el PNV y otro de centro derecha, Eusko Alkartasuna, procedente de una escisión del PNV. Y los votos que ha obtenido vienen en parte de los electores de ANV. Pero lo esencial de todos ellos, lo que les une al extremo de aliarse derechas e izquierdas en una significativa amalgama es el hecho de ser nacionalistas. Esa es su característica esencial, la clave de este enredo y el truco con el que quieren engañar a los socialistas. Na Bai es una coalición claramente nacionalista de perfil neutro en el eje izquierda/derecha porque ese perfil, para un nacionalista, es secundario.
La cuestión del tacticismo frente a los principios, que me parece es lo esencial de este debate. Pensé que había quedado claro ayer. El PSOE ha hecho un cálculo electoral perfectamente legítimo y ha entendido que no le trae cuenta la alianza con Na Bai. En efecto, yo también creo que es así y, por supuesto, podemos estar equivocados. Pero me parece claro que en el resto de España los votantes agradecerán que el gran partido de la izquierda no pierda el sentido de Estado y no se deje avasallar por la derecha en un terreno muy peligroso. Sin duda perderá votos de cierta izquierda pero ganará muchos más en el centro que es desde donde se gobiernan las sociedades avanzadas hoy. Yo mismo decía que lo único que podría oponerse a ese cálculo electoral sería una cuestión de principios, pero que no veía que se diera en el caso de Navarra. Y a ello me atengo.
Que no es cuestión de principios se ve en el hecho, generalmente señalado, de que el PSOE gobierna con ERC en Cataluña y con el BNG en Galicia donde, a diferencia de lo que pasaría en Navarra, es el socio mayoritario, asunto nada baladí, no se olvide. O sea, que miedo a la izquierda, nada. ¿Qué sucede en Navarra? Me da la impresión de que el PSOE no se fía del nacionalismo vasco-navarro y, en mi modesta opinión, hace bien porque acabaría convertido en su rehén. Aquí no hay una opción clara de izquierda; aquí hay una coalición nacionalista dentro de la que se da de todo y cuyo objetivo es obvio: valerse de los votos del PSN para impulsar la política de nacionalismo impositivo y acaparador que ha caracterizado al PNV (y, en mayor medida aun, a la llamada "izquierda" abertzale) en el País Vasco, que ha llevado a la situación de agobio y acoso de los ciudadanos vascos no nacionalistas (vascos) o nacionalistas españoles que todos conocemos. ¿O es que no se puede decir que el nacionalismo vasco forzoso es tan repugnante como el español?
A más a más, cuando los nacionalistas vascos creyeron que podían hacerlo, se unieron entre sí en el Pacto de Lizarra y dejaron fuera no solo al PP, sino al Partido Socialista. Con esa manifiesta falta de lealtad ¿de qué asuntos de principios se habla al tratar de unos nacionalistas que son ante todo nacionalistas y sólo secundariamente y en parte de izquierdas? No soy del PSOE, ni siquiera socialista, pero no me parece justo acusar de tacticismo a un partido que hizo la oposición que hizo en los años del aznarato. ¿Que se equivoca? ¿Que el señor Rodríguez Zapatero a veces mete la gamba? ¿Y quién no?
El alcance de la decisión navarra. Si no he entendido mal, de lo que se trata es de que de las cosas navarras decidan los navarros; de las de todos, decidimos todos. ¿O es que no hay cosas de todos? Si un partido español cree que debe articular su política de alianzas con visión de Estado, está en su derecho. Con dos añadidos: no hay que confundir la parte con el todo ni dejar a la mayoría a la intemperie. Me explico: la parte con el todo. Na Bai obtuvo el 23,7% de los votos. Su decisión, muy legítima, por supuesto, es la de menos de 1/4 de los electores (excuso decir de la población) de Navarra. ¿Desde cuándo 1/4 vale por todo? Se podría decir que también es la decisión del 22,4% que votó a los socialistas. Pero eso puede ser demasiado decir porque imagino que a muchos de esos votantes les pasará como a mí que, sobre no fiarnos de los nacionalistas, estamos ya hartos de ese estadio de gracia del que pretenden siempre disfrutar cuando lo suyo es la pura política del terruño propio. Y dejar a la mayoría a la intemperie. ¿Alguien piensa que no somos millones los votantes que vemos con buenos ojos que el PSOE no arriesgue el gobierno del Estado por una aventura más que dudosa con unos nacionalistas que no han sido nunca leales a aquel cuyo apoyo piden ahora, precisamente por ser español? ¿O es que es peor que gobierne la carcundia en Navarra que en España?
Javier Rojo y la defensa que los gerifaltes del PSOE puedan hacer de las posiciones de su partido. En eso no me meto, que no miro mucho la tele ni tengo en alta estima las dotes de muchos políticos/as sean del partido que sean, especialistas en defender las posiciones oficiales con independencia de que coincidan con las suyas o no, por puro interés personal, bandería o devoción al enchufado de turno. En el PSOE y fuera del PSOE.
Coda primera: no me molesto en hacer vaticinio alguno sobre un gobierno en minoría de UPN. Lo que sí me parece claro es que no tiene sentido responsabilizar al PSOE de ese gobierno. De ese gobierno es responsable, en primerísimo lugar, el 42,4% de los electores que votó UPN más el 4,4% de CDN; en total, el 46,8%. Luego también cuenta la actitud de los nacionalistas y sus planes soberanistas con los que no veo por qué tiene que coincidir el PSOE y mucho menos con el señuelo de la izquierda.
Coda segunda: puede que esta decisión cause sobresalto y hasta tumulto dentro del PSN. No hay que arredrarse. Son cosas de la política. Por peores momentos, supongo, pasó ese partido cuando se descubrió que los señores Urralburu y Otano se lo llevaban crudo a casa, que eso sí que hizo daño al socialismo y a la izquierda en Navarra y en España, y no si se entra en esta o estotra alianza.
Es magnífica la entrevista que Maria Antonia Iglesias ha hecho a Felipe González (FG) y que publica hoy El País. Me hubiera gustado postear sobre ella, pero me he quedado exhausto después del post navarro. Sin embargo, hay algo que no quiero dejar pasar porque tengo mis razones. Se observará con qué pasión habla FG de los momentos del ataque del aznarato al grupo Prisa y en concreto a los señores Polanco y Cebrián, a los que se intentó encarcelar, entre otras ignominias, por razones estrictamente políticas. FG dice que los apoyó e hizo lo que tenía que hacer. No tengo duda. Yo también. Precisamente por apoyarlos (a ellos y a él) me echaron de todas partes, sin que tuviera solidaridad de ningún sitio. De ninguno. No me quejo porque es el precio que se paga cuando se actúa con independencia real de criterio. Pero permítaseme una observación: esos que ahora jalean a FG ¿en dónde estaban entonces? Muchos de ellos -quizá los que hoy más vociferan- estaban bajo las piedras, murmurando aquella canallada de la "guerra de los medios" cuando era evidente que se trataba de un ataque del Gobierno de la derecha a un grupo de comunicación, y esperando que escampara para salir en defensa del vencedor.
Ayer se leyó y escuchó de todo acerca de la questione septentrionale. Una nota muy oída fue la de la decepción: el PSOE sacrifica su espíritu izquierdista en Navarra al sórdido deseo de ganar las elecciones en España. Pues sí, tal ha sido. Salvando de momento el asunto de que lo que surgiera en Navarra fuera un gobierno de "izquierda", que luego se verá, el PSOE cree que la alianza con NA Bai es un handicap para las generales del que se aprovecharía el PP. Que el asunto es un puro cálculo táctico, sin trascendencia ideológica, se observa en el hecho de que el Partido Socialista Galego está gobernando con el BNG, que dice ser de izquierdas. El problema no es, pues, con la izquierda; el problema es con el nacionalismo, con el nacionalismo vasquizanteestilo Batasuna. Ignorar eso no es buen punto de partida para entender la cuestión Navarra. Por lo demás, si los de Na Bai están tan interesados en un gobierno de izquierdas, ¿por qué no ceder las reivindicaciones nacionales para ligarse al PSOE? Porque de lo que se trata no es de izquierda/derecha, sino de nacionalismo vasco/español y el canto de sirena al izquierdismo del PSOE sólo pretende ganárselo para que legitime una política de imposición nacionalista en Navarra como la que se ha dado en los últimos 25 años en el País Vasco pero con la mitad de los votos.
El PNV es un partido demócrata-cristiano; o sea, un partido de derechas, si bien no de derechas extremas o cerriles. EA es un partido "socialdemócrata" en el sentido de la socialdemocracia del signore Saragat en Italia en los años cincuenta y sesenta y del señor Fernández Ordóñez en los setenta y primeros ochenta, esto es, un partido de elástica ideología entre el centro izquierda y la derecha y que suele estar en todos los gobiernos; su preponderancia navarra se debe al hecho de que el señor Garaikoetxea es navarro. Siendo eso así, la alianza con Na Bai tiene el espíritu izquierdista que puedan aportar Batzarre y Aralar y que no será mucho desde el momento en que la respuesta que han dado al rebufo nacional (no "madrileño", como dicen ellos, con ánimo de confundir las cosas) ha sido decir que Navarra se gobierna desde Madrid. No que se pierda un gobierno de izquierda, no; eso les importa una higa; el hecho es que Navarra "se gobierna desde Madrid". Lo que es falso. El PSN es parte voluntariamente del PSOE y estas decisiones se toman en los órganos "federales", o sea, para entendernos, "nacionales", igual que, me imagino, la Na Bai de Tudela o de Sangüesa forman parte de la Na Bai navarra, o "nacional". ¿Y cómo le sonara a uno de Tudela que le digan que lo gobiernan desde Pamplona? Pues de lo más lógico, ¿no? En algún lugar tendrá que estar el gobierno.
Hay quien dice que los socialistas navarros han quedado con el culo al aire y que hay que respetar lo que digan. Sí y no. Con el culo al aire han quedado por apuntarse a un órdago sin llevar juego. Respetar lo que digan... si lo que dicen es respetable.
Claro que el PSOE ha hecho un cálculo, un cálculo que puede hacer cualquiera: en Navarra el PSN es la tercera fuerza política; en España es la primera. ¿Alguien arriesgaría ser el primero en lo mucho por ser el tercero en lo poco? El cálculo, lo admito, podría ceder a favor de una cuestión de principios; pero, ¿hay cuestión de principios con los nacionalistas vascos? Si la hay, se basa ¿en qué experiencias? ¿En qué ha beneficiado alguna vez el nacionalismo vasco al socialismo español o a la izquierda o cuándo ha sido leal con ellos? Por lo demás, ¿qué tiene de malo un cálculo electoral? Los partidos ¿no están para gobernar, para ocupar el gobierno, para ejercer el poder? Quienes reprochan al PSOE el abandono del izquierdismo que se consuelen pensando que su cálculo táctico es perfectamente leninista: hay que hacer lo que sea para llegar al poder, que es donde se toman las decisiones. El PSOE ha sustituido el "lo que sea" leninista (en buena medida, compartido por el PP) por "ganar las elecciones". ¿Qué tiene eso de malo?
Sobre todo lo anterior, por una vez en la vida, creo entender a los hombres "del aparato socialista" que son, seguramente, los que han urdido esta salida de dejar el gobierno a la UPN. El PP ha declarado ya que se trata de una solución "constitucional" y sus gentes navarras se aprestan a gobernar, con lo que verán que, en un sistema parlamentario, sólo puedes gobernar en minoría si cumples el programa legislativo de la oposición. Es decir, es bastante posible que en Navarra haya reformas sociales en sentido de izquierda sin tener que pagar el canon de la "construcción nacional" como factor de primera atención.
Curioso: de todo lo que leí ayer, el único que se dio cuenta de en dónde podía estar la trampa fue Libertad Digital que salía preanunciando una moción de censura al gobierno de UPN después de las elecciones generales. Son malos estos chicos, pero listos. Además, sugerían a Sanz que convocara elecciones anticipadas en Navarra. Aun más curioso, ese mismo deseo formulaban los de Na Bai. Muy bien, que haya elecciones anticipadas en Navarra y que se convoquen a causa de que las dos fuerzas más votadas no pueden hablar entre sí.
Aprovechando que estamos en la capital por algo importante que no consigo recordar fuimos ayer a ver Auge y caída de la ciudad de Mahagonny, una ópera (bueno, no es propiamente una ópera sino un cabaret con orquesta) con música de Kurt Weill y libreto de Bertolt Brecht con la que han inaugurado el teatro del Matadero de Madrid Mario Gas en la dirección escénica y Manuel Gas en la musical.
Menudo espacio ese del antiguo matadero, unas naves inmensas en ladrillo visto del neomudéjar madrileño que forman un conjunto muy extenso construido en los años veinte, creo, con un sentido del ornamento y la estética que recuerda mucho algunos campos de concentración en Alemania. Ya sé que la comparacón no es muy grata y probablemente está movida por la conciencia del uso al que se destinaron los edificios. Cuando ese matadero se construyó, probablemente para sustituir a unas instalaciones anteriores que se habrían quedado obsoletas y se situaban en donde hoy está El Rastro, que de ahí deriva su nombre, de "rastro de sangre", Madrid ya era una gran urbe y precisaba de unas instalaciones en que se pudiera "procesar" ganado bovino, ovino y porcino por cientos. De ahí las dimensiones del recinto, hoy dedicado a teatro, auditorio de música y otras actividades artísticas.
La ópera es una obra mordaz, grotesca, de crítica destructiva de la sociedad capitalista de los años veinte, donde la ley fundamental es que "todo está permitido mientras puedas pagarlo". Dicha sociedad está representada en la ciudad que erigen unos delincuentes en fuga para forrarse a cuenta de los buscadores de oro que, tras meses, años, de extenuantes trabajos acuden a los bares, garitos, casas de lenocinio a dejarse sus cuartos. Una ciudad de perdición en la que la justicia la administran los tres criminales fundadores de la ciudad: Trinidad Moisés, Willy "el procurador" y Leocadia Begbick y es perfectamente corrupta, una alegoría de Sodoma y Gomorra. De hecho, al final aparece Dios, se escandaliza de lo que ve y vuelve a irse. El ser humano no tiene arreglo.
La obra respira influencias de La ópera de tres centavos, estrenada con gran éxito en 1928, dos años antes que Mahagonny. En buena medida la fórmula de Mahagonny está prefigurada en la otra, delincuentes, putas, chulos y trabajadores. La consigna básica de Mahagonny, "En primer lugar está el zampar/en segundo el fornicar/en tercero el boxeo no olvidar/y en cuarto beber sin parar. Y lo que más claro hay que tener/es que aquí todo se puede hacer", recuerda uno de los coros de La ópera de tres centavos, la "Balada acerca de la cuestión ¿de qué vive el hombre?", en donde se dice: "En primer lugar está el zampar/luego llega la moral" y la Jenny de Mahagonny recuerda mucho a Jenny, la pirata de la otra ópera, que tampoco era una ópera.
Mahagonny, con todo, tiene su propio intríngulis, como crítica de las relaciones sociales capitalistas. La sátira del proceso penal corrupto en que los jueces son los delincuentes es soberbia, como la aparición de Dios y la burla simbólica y medio blasfema de la pasión y muerte de Cristo. Es raro que no haya salido la autoridad eclesiástica pidiendo medidas.
La interpretación Mario Gas es muy ágil y muy rápida, como requiere el teatro de Brecht. Para mi gusto los actores y actrices chillan demasiado para hacerse oír por encima de la música de la orquesta con lo que a veces se organiza un batiburrillo incomprensible. Y Jenny está magnífica. Bueno, yo me moriré teniendo la voz de Lotte Lenya pegada a las mejores canciones de Weill/Brecht. Así que aquí la dejo interpretando Meine Herren, meine Mütter prägte, en que Jenny se niega a pagar las deudas de su amante, Paul Ackerman que en esta versión es Johny Mahoney
La estrofa final reza: "¡Los hombres no son animales!/Cada cual tiene lo que se merece/Nadie se moja por nadie/Y si alguien da de patadas, seré yo/Y si a alguien le dan de patadas, serás tú". Bert Brecht en estado puro.
Va a ser que no. El PSOE no quiere meterse en el avispero navarro, o no más de lo que ya está. En un primer momento me pillé un mosqueo. (¿Serán capaces de dejar el gobierno navarro en manos de los carcas de UPN? ¿No va a haber gobierno "de progreso" en Navarra?). Pero luego lo he pensado creo que mejor y entiendo que los sociatas hacen bien.
Vamos a ver si me explico.
En primer lugar, un vistazo a las cifras. El PSN es la tercera fuerza en votos en la CA navarra pero como si fuera la primera porque todas las demás dependen de ella. UPN no puede pactar con Na Bai; Na Bai no puede pactar con UPN. El que vale para el roto y el descosido es el PSN. No está mal para un partido que tuvo que abandonar el gobierno corrido tras los escándalos de los mangantes Urralburu y Otano. Pero aun así, ¿desde cuándo se pide a la tercera fuerza que asuma la responsabilidad del gobierno de forma que todos se creen con derecho a achacarle sus propios fracasos?
Vamos ahora a los contenidos. Se oye por ahí que los navarros no quieren un gobierno de derechas, sino uno de izquierdas. Será en otro mundo porque en éste, lo que los navarros quieren por orden de mayor a menor cantidad de votos es que los gobierne:
A) la derecha españolista, pues a UPN le ha faltado muy poco para la mayoría absoluta y cuenta con 24 diputados, tantos como NA Bai y PSN juntos.
B) una amalgama de nacionalistas no necesariamente de izquierdas. Nafarroa Bai es un conglomerado con dos partidos de izquierda, Aralar y Batzarre y dos partidos de derechas, el PNV y EA.
C) la izquierda españolista del PSN.
Así las cosas, una alianza Na Bai-PSN no es necesariamente una alianza "de progreso" sino, básicamente, la cobertura que necesitan los nacionalistas, cuya base electoral en el viejo reino es muy reducida, para dar un empujoncito a la "euskaldunización" de Navarra cosa que, a la vista de lo que ha pasado en el País Vasco, no me parece recomendable. Es decir, se quiere que el PSOE facilite las cosas al nacionalismo en Navarra -como ya lo hizo en el País Vasco antes de que los nacionalistas le dieran una patada en el trasero en el pacto de Lizarra, cosa que los sociatas no deben olvidar- y que, a cambio, pierda las elecciones en España dado que esa alianza sería la principal baza electoral del PP. No acertarían si picaran. En cambio...
...En cambio, si los sociatas permiten un gobierno en minoría de UPN a base de abstenerse en la investidura y no se comprometen a esa estupidez de renunciar a la moción de censura, tendrán en su poder la gobernación de Navarra y UPN se verá obligada a pactar todo con ellos. Vamos que estarán mejor que Jordi Pujol en los últimos tiempos de Felipe González y, además, tendrán ganadas las elecciones de marzo de 2008 de calle. Y en abril...
...En abril, ¿por qué no una moción de censura al gobierno de UPN si éste se la gana? Y entonces sí podría formarse un gobierno PSN-Na Bai-EB si se quiere y solamente porque no gobierne la carcundia. Pero yo no haría una sola concesión al nacionalismo porque éste, tanto el de izquierdas como el de derechas, en el fondo, es siempre de derechas.
Ayer fuimos a ver la peli de Paul Leduc, Cobrador, In God we Trust en los cines "Golem" de Madrid. Me gusta el nombre de "Golem" y la leyenda del homúnculo. El caso es que la historia. protagonizada por Peter Fonda, Lázaro Ramos, Antonella Costa, etc está muy bien. La última vez que vi a Peter Fonda, el de Easy Rider, fue en una peli de Christopher Menaul, La pasión de Ayn Rand, con Helen Mirren (a la que han dado un óscar por interpretar a Isabel II) haciendo de Rand. Fonda interpretaba el desgraciado papel del marido alcoholizado y consentidor. Parece que, en su vejez, esté especializándose en este tipo de personajes decadentes y semirruinosos.
La peli es una historia perfecta y deliberadamente deslavazada que el director ha hilvanado a base de varios relatos de un mismo escritor, pero sin conexión entre sí. El resultado es un relato continental que sucede entre Nueva York, México D.F., Rio de Janeiro y Buenos Aires, caracterizada por un encadenamiento de actos de violencia gratuitos, sin sentido, que van in crescendo hasta una especie de apoteosis final que no cuento para no ir de destripaargumentos. No hay historia, no hay lógica, no hay narración propiamente dicha. Hay una especie de desconstrucción de la violencia sin sentido del mundo contemporáneo que está inserta en las relaciones sociales dominantes, las que todos conocemos, las que emergen todos los días en los noticiarios y en la prensa mundial y que no hace falta que nos expliquen. ¿Es necesario aclarar las relaciones de dominación de los EEUU sobre el resto de América, de los blancos sobre los negros en todas partes, de los hombres sobre las mujeres? ¿Hace falta decir que el capitalismo transnacional no tiene entrañas y explota sin piedad la riquezas ajenas, que los ricos oprimen a los pobres y les roban hasta los fetos, que los policías suelen ser asesinos, especialmente en los llamados países en desarrollo, pero no sólo en ellos, que los políticos son corruptos y los pobres insolidarios entre sí? No, ¿verdad? Por eso la peli prescinde de todo afán pedagógico y muestra la realidad como es una vez la ha desconstruido.
Corona la historia el símbolo de la violencia contemporánea por antonomasia y que tampoco declaro por la razón aducida más arriba.
Había pensado dejar el asuntito de los toros, que resulta tan polémico, pero héteme aquí que al video de Renaud (por cierto, extraordinario y que ya lleva 2.286 visitas), prohibido por las autoridades francesas por motivos tan espurios como los que han llevado a secuestrar El Jueves aquí, le ha salido ya una respuesta. Aquí tienen a Eric Maillard hablando en contra de Renaud.
¿Qué juicio merecen esos razonamientos? Pobres me parecen. Acusar a Renaud de buscar publicidad hablando (mal) de los toros cuando lo que tiene que hacer es cantar es una verdadera simpleza. En general, los toros tienen mala defensa. Que si la tradición, el folklore, la cultura... Lo pongan como lo pongan, el espectáculo no es de recibo. ¿Que hay mucha gente que vive de eso? Pues habrá que buscarle ocupaciones alternativas y menos crueles; por ejemplo, en un matadero. ¿Que si no es por la fiesta, ya no habría toros bravos? Tampoco hay dinosaurios y no parece especialmente grave. ¿Que son uno de los signos de la "identidad nacional española"? Primero, no será de todos los españoles porque yo no necesito la fiesta para nada; y segundo, cámbiese la tal seña y se verá que no se hunde el mundo porque tropecientos berrendos dejen de españolear a cuenta de un infeliz bicho.
Coincidente con esto encuentro en 20 Minutos unas declaraciones del señor Sánchez Dragó en Alicante a donde ha ido a leer el pregón en una corrida de toros. ¿Ven? Es perfectamente lógico que alguien como el señor Dragó sea taurófilo. Como lógico es que su razonamiento carezca de lógica. Dice el presentador que "los antitaurinos confunden el toreo con el españolismo y el franquismo". Vaya galimatías el del pregonero. ¿No es él españolista, aunque se diga no franquista? Que cuente a sus jefes en la tele que el españolismo es malo. Respecto a la confusión de toros y franquismo es difícil descurrir algo más necio. Tan viajado como es, ¿también cree que el sentimiento de los antitaurinos foráneos viene de confundir los toros con el españolismo y el franquismo? ¡Ah, no, ya caigo! Esos son la Antiespaña, siempre al acecho.
El laboratorio político en España está en el País Vasco, en segunda medida en Cataluña y en tercera en Galicia. El resto es "tierra del común". De los tres territorios forajidos (en el sentido de fora eixido, que no hay aquí ánimo injurioso), el más peculiar es el vasco y donde más variedad se da. Por ejemplo, con la noticia recién de Navarra. O sea, una parte de Hegoalde, que es el nombre de los nacionalistas para el País Vasco más Navarra que se distingue de Iparralde o País Vasco francés, el conjunto de los cuales se denomina, sabido es, Euskal Herria o País de los Vascos. Un país que se está haciendo a base de ponerle nombres. Tengo dicho que me resulta incomprensible que ETA siga llamándose así, Euskadi Ta Askatasuna, cuando profesa luchar por la askatasuna de Euskal Herria. Mantener el logo demuestra un espíritu mercantil conservador. Claro que renovarlo supondría pasar a llamarse EHTA y no sé si la gente no lo confundiría con la EFTA o el NAFTA.
La manía de convertir los nombres en cosa litigiosa y de cargarlos de significación militante y quién sabe si confesional siempre me ha parecido una muestra de inseguridad colectiva: dudan de su identidad y por eso se empeñan en acuñar nombres y nombres, unos en lucha con otros, de forma que uno acaba sabiendo prácticamente todo sobre el otro según que éste, para referirse a la misma cosa, use los términos provincias vascongadas, Vascongadas, País Vasco, Euzkadi o Euskalerria, a su vez con sus variantes. No consigo quitarme de la cabeza que el país más poderoso de la tierra, los EEUU, cuyos habitantes no tienen duda sobre su identidad nacional, carece de nombre, y no muestra interés por remediar tan lamentable carencia. Nadie los ignora, aunque no tengan un nombre. Ellos mismos se llaman América, como si el resto del continente no existiera. No hay nombre; pero hay cosa. En el País Vasco no hay cosa; pero hay un montón de nombres.
Según arde Canarias y con el presidente en el archipiélago de apagafuegos improvisado los camaradas socialistas navarros le han dejado una patata incandescente en su sillón en Ferraz pidiendo permiso para formar un gobierno "de progreso" con Na Bai. Los incordiantes navarricos han puesto a la dirección del PSOE ante el hic Rodhus, hic salta que tanto le gustaba repetir a Karl Marx o sea, lo que la gente llama "la hora de la verdad". El PSOE tendrá que decidir si admite un gobierno de coalición con un cocktail de nacionalistas o mantiene su egregia soledad y permite gobernar a UPN a base de abstenerse.
La primera opción pone al navío de Ferraz al alcance de las baterias de costa del nacionalismo español. Excuso decir la monserga de aquí a las elecciones: ZP traidor, vendepatrias, entreganavarras, genuflexo y proetarra. La murga podría ser tan densa que el Gobierno podría pensar en adelantar las elecciones para no sufrirla. Esto sin contar con que habría voces dentro del propio partido clamando como San Juan Bautista contra la perversión del tiempo, como San José Bono.
La segunda opción enemista al PSOE con la izquierda, pero no con la española, sino con la vasca. La española, al menos la madrileña, acostumbrada a gobiernos de la derecha, no alcanza a ver por qué haya de ser tan nefando que siga gobernando la derecha navarra cuando, además, es la lista más votada.
Si los socialistas razonan pensando en las urnas lo más probable es que desautoricen a los camaradas navarros. Pero también pueden razonar con su corazón de izquierda. Razonar con el corazón no suele ser provechoso pero, a veces, da gusto hacerlo. Y más gusto da explicarlo. Aunque uno se dé una castaña.
Habrá que ver qué fumata sale de Ferraz. Se admiten apuestas.
¡San Ignacio nos ampare! El espíritu de Sabin Arana guíe nuestros pasos. Nunca se vio tanta osadía maketa en las sacras tierras vascas. El Tribunal Supremo es-pa-ñol ha fallado que las autoridades autonómicas vascas están obligadas a izar bandera rojigualda en todos los edificios públicos de la Comunidad Autónoma, según preceptúa la vigente Ley 39/1981, de 28 de octubre por la que se regula el uso de la bandera de España y el de otras banderas y enseñas. El Gobierno vasco se ha apresurado a decir que acatará la sentencia y cumplirá la Ley, como si se quitara un peso de encima. La verdad es que ya la fundamentación de su recurso era débil. Afirmar ante unos jueces que se ha estado ventiseis años incumpliendo la Ley porque se pensaba que, al no haberse cumplido en ventiseis años, estaba en desuso y no hacía falta cumplirla es como llamar pollino a Pitágoras.
Así que de ahora en adelante en todos los edificios públicos vascos ondeará la vieja enseña de los Borbones junto a la ikurriña, diseñada por Sabin Arana. A ver qué sucede a continuación. Las viejas piedras de sobrio gris de verde y nube del País Vasco, mancilladas por los chillones colores del maketo. Un baldón que identificará a los edificios oficiales como comisarías cipayas. Vaya, que acabaremos sustituyendo el Eusko Gudariak por "Suspiros de España". No hay que pensar en sustituir nada, pero sí conviene estar abierto a otras sensibilidades. Por ejemplo, si se le da una oportunidad a "Suspiros de España", se descubre que es un cacho pasodoble, uno de los mejores, lleno de fuerza, de garbo y donaire. Lo dejo aquí, por si alguien quiere escucharlo en una versión muy ortodoxa del grupo "Cuando el Río Suena" hace algo más de un mes.
Y ya veremos qué pasa en los edificios municipales del suprascrito País Vasco en que haya corporaciones de la izquierda abertzale. Cabe observar cómo la famosa "guerra de las banderas" que se producía en los veranos hace ya uno o dos decenios vuelve a animar las fiestas de mano de las decisiones judiciales. Está claro que un país que sólo puede desplegar la bandera dentro del territorio nacional por decisión judicial y protección de la fuerza pública tiene un problema. Está claro que, si eso es lo que dice la ley, los tribunales han de ampararla. Como también está claro que vamos a tener follón garantizado.
¿Y cuándo no? Volviendo a los pasodobles, si serán representativos de España que son el acompañamiento del paseo, con el que se abren las corridas. Y con las corridas también vamos a tener lío.
Esto de los toros tiene los días contados. La cuestión suscita posiciones muy agriamente enfrentadas y con mucha polémica. Los partidarios de la fiesta invocan Numancia y están dispuestos a inmolarse antes que permitir que deje de celebrarse un espectáculo que consideran inherente a la identidad española. Los contrarios señalan que no se puede tolerar un espectáculo basado en hacer sufrir a un animal. Es un argumento poderoso y difícil de rebatir. Véase en el video que ha editado en Francia la Sociedad Protectora de Animales y al que ha prestado su voz el cantante Renaud.
Es díficil encontrar argumentos para defender esa atrocidad. Yo, además, no me siento obligado a hacerlo porque tampoco estoy de acuerdo con las fiestas de toros. Pero acometer este asunto en la opinión pública española va a ser un verdadero trauma porque los toros forman parte de la cultura española. Están hasta lexicalizados. Si se suprime la fiesta, muchas expresiones acabarán siendo incomprensibles, como "dejar para el arrastre", "cortarse la coleta", "una faena de aliño", "el quinto toro", "torear mirando al tendido", "banderillas de fuego", "ir a matar", "pinchar en hueso", "dar la puntilla", etc, etc. No hay problema por la lengua porque ésta se renueva permanentemente. Piénsese en el poco lugar que ocupan en la lengua hablada de hoy las expresiones propias de las sociedades agrícolas. El problema está en la cabeza de los hablantes de la lengua.
En todo caso, si la fiesta desaparece, ello no afectará a las manifestaciones más elaboradas de la cultura. Algo de la obra de Blasco Ibáñez, si acaso, de García Lorca y Carmen de Bizet, claro está. En la cultura plástica, sobre todo pintura, será un desastre, ya no habrá tauromaquias como la última de Miquel Barceló. Y para la cultura popular será una catástrofe. De momento, si no he entendido mal, el video anticorrida está censurado en Francia por razón de su contenido violento. Aunque no estoy muy seguro pues está colgado en You Tube. ¡Qué manía la de los censores de hacer publicidad a lo que quieren que no se haga público! Al escribir esto, el video lleva un día colgado y tiene 1.075 visitas. Ya veremos dentro de una semana.
Los datos del sondeo de julio del CIS posterior al debate sobre el estado de la Nación son muy gratificantes para el señor Rodríguez Zapatero. Los españoles le dan un aprobadillo (5,01), pero lo ponen por delante del señor Rajoy (3,81) que ocupa un sonrojante cuarto puesto, detrás de los señores Llamazares (4,24) y Durán i Lleida (3,94). Por cierto esa buena puntuación del dirigente de IU no parece vaya a librarlo de la oposición que suscita entre los dirigentes de su propio partido, el PCE. Para una vez que los comunistas tienen un dirigente bien valorado, quieren cargárselo porque dicen que contemporiza mucho con el Gobierno. Sin embargo, tiene una expectativa de voto de 5,9%, un punto más de lo que obtuvo en 2004. No quiero ni pensar qué sacará IU si lleva un candidato como, digamos, don Francisco Frutos.
En todo caso, las diferencias entre los señores Rodríguez Zapatero y Rajoy son llamativas. El primero suscita menos rechazo que el segundo; un 54,4% confía poco o nada en él, mientras que ese porcentaje se eleva al 74,6% en el caso del señor Rajoy. Sólo un 24,5% de los ciudadanos cree que la gestión del Gobierno haya sido "mala" o "muy mala", mientras que el 49,8% piensa que así ha sido la labor de la oposición. Y no cabe olvidar que hacer oposición es siempre más fácil que gobernar, porque no hay que ir pisando callos.
Con estos resultados, las elecciones están cantadas. Supongo que el señor Rajoy tiene la esperanza de "dar la vuelta a las encuestas" en el tiempo que reste hasta las elecciones, pero veo difícil que lo consiga reiterando el discurso que ha hecho hasta aquí y que le ha granjeado las calificaciones que se han visto. Parece que sea su intención, sin duda en aplicación de la doctrina del señor Fraga de que "el que resiste, gana". El señor Zaplana cerraba ayer el "curso" político dejando constancia de que su balance, inexplicablemente, es muy bueno y sosteniendo que, con unos datos del CIS como los de este barómetro de julio, ganaron las pasadas elecciones autonómicas y municipales. Pues nada, que los manes de Augusto los acompañen en el solaz veraniego pues, si ganan las elecciones generales como han ganado las municipales/autonómicas, no van a necesitar oposición porque serán ellos. La fe sin duda mueve montañas, pero no sirve para ganar elecciones.
Las cosas de la vida. Iba a postear algo más sobre Bergman y se muere Antonioni, otro mito de la época, aunque muy distinto. Allí donde Bergman pretendía mandar mensaje de preocupación por las postrimerías y las oscuras cuestiones del ser humano, celos, envidias, ambiciones, etc, Antonioni se concentraba en lo de la incomunicación entre la gente, con lo que su mensaje desaparecía y sus relatos se eternizaban. Sus pelis eran muy buenas y muy cuidadas estéticamente, salía uno con el espíritu por los suelos de pura angustia; pero tendían a parecerse bastante. A uno se le quedan en la memoria como distintas, con personalidad propia, Blow up y Zabriskie Point. Sobre todo la primera, que está inspirada en un cuento de Cortázar comprendido en Las armas secretas, "Las babas del diablo". Un relato de cómo una fotografía interfiere en una historia y la tuerce. El cadáver que revela la foto de Thomas (David Hemmings) es el hombre mayor con el rostro maquillado que emerge del fondo de la de Michel, el fotógrafo del relato de Cortázar que habla de él en tercera persona. El Blow Up se prolonga en el final de Zabriskie Point de un modo espectacular. Merece la pena ver la secuencia, aunque es un poco larga porque es como una celebración.
La celebración del que hace estallar todo desde dentro, un rito simbólico y como iniciático. Es difícil encontrar un ataque más duro a la sociedad de consumo. La banda sonora de Pink Floyd hace el resto. Al final, el propio Antonioni ha sido blown up.
El caso es que me quedé sin postear lo que quería sobre Bergman. No era gran cosa, simplemente se me había ocurrido que Akira Kurosawa reconoce que El séptimo sello le impresionó mucho. Claro porque es una historia que se puede entender muy bien con el trasfondo japonés, ya que es una reflexión sobre la moral del guerrero; y también sobre el trasfondo español, ya que el guerrero trae un escudero cuyo aspecto y talante rústicos hace que se produzca la pareja del hidalgo y escudero que todo el mundo reconoce. La moral del caballero, cuyas hazañas siguen siendo materia de obras de arte como El séptimo sello y encandilando a las gentes que gustan creer que en el mundo en el que viven caben el heroísmo, el desprendimiento y la lealtad.
Ver a los obispos pidiendo la objeción de conciencia contra la nueva asignatura de Educación para la ciudadanía (EpC) es tan insólito que, en lugar de pasarlo por alto, como suelo hacer con los pronunciamientos eclesiales que no son de este mundo, me he detenido a escuchar sus razones. Y son sorprendentes. Así resulta que Monseñor Martínez Camino, Secretario General de la Conferencia Episcopal Española (CEE), un clérigo moderno, de juvenil y atildado porte y con un verbo contundente, justifica la cerrada oposición eclesiástica en nombre de la "libertad de conciencia y de enseñanza".
¿La libertad de conciencia? ¿Desde cuándo se preocupa la Iglesia por la libertad de conciencia? Váyase al Syllabus de la encíclica Quanta Cura, publicada por Pio IX en 1864; allí se condenan los "errores del tiempo", entre otros el panteísmo, el naturalismo, el racionalismo (absoluto y moderado), el indiferentismo, el latitudinarismo, el socialismo, el comunismo, las sociedades secretas, las sociedades bíblicas, las sociedades liberal-clericales y, mirabile dictu, el "liberalismo moderno".
Que se sepa, la Iglesia no ha rechazado o renegado de la doctrina del Syllabus. Todo lo más que cabe decir es que está "en desuso", como algunas normas jurídicas. Pero "estar en desuso" no quiere decir "carecer de vigor" o "estar derogadas" y las normas, como las condenas del Syllabus, el Ave Fénix y los muertos el día de la resurrección de la carne, pueden volver a hacer de las suyas. Es más, lejos de rechazar, repudiar o condenar, Juan Pablo II beatificó a Pio IX en el año 2000. O sea, que puede llegar a santo quien tantas cosas condenó en vida.
Impertérrito, Monseñor Martinez Camino sostiene que, cuando la Iglesia se opone a la EpC y pide objeción de conciencia, en definitiva, desobediencia a la autoridad, lo hace en nombre de la "libertad, la democracia y los derechos humanos fundamentales". Pero eso es falso y los cristianos no deben mentir. Ni los no cristianos, claro. Monseñor sabe que el Syllabus condena como error la idea de que el Estado pueda interferir en las normas que la Iglesia dicta respecto a las conciencias de sus fieles y lo haga invocando los valores que Monseñor Martínez Camino dice defender. Según el beato Pio IX, el error número XLIV, correspondiente al grupo VI de errores, los que se refieren a la "sociedad civil considerada en sí misma y en su relación con la Iglesia", consiste en sostener que compete a los poderes civiles enjuiciar las instrucciones que, en el ejercicio de su menester, dicten los pastores de la Iglesia con respecto a la "guía de las conciencias". O sea aquí de libertad de conciencia nada. Por si no fuera suficiente, el mismo beato vuelve sobre el asunto en el grupo X que recoge los errores que caracterizan al "liberalismo moderno" el primero de los cuales es, vaya por Dios, decir que "en el día de hoy ya no es conveniente que la religión Católica sea la única religión del Estado con exclusión de todos los demás cultos". ¿Queda claro? Según doctrina en vigor (aunque no muy aireada) de la Iglesia, la religión católica debe ser única religión del Estado.
Así pues Monseñor Martínez Camino y sus hermanos en Cristo están en contra del Estado y piden que no se le obedezca pero no en nombre de la democracia sino de lo contrario. En nombre de la religión del Estado, de lo que era cuando el Caudillo por la gracia de Dios. Como va a ser que no, la Iglesia pide desobediencia. Cosa que sólo se entiende si considera al poder civil "ilegítimo" pues el error número LXIII, correspondiente al grupo VII acerca de errores referentes a la ética natural y la cristiana consiste en decir que sea admisible negar obediencia a los príncipes legítimos. Pues nada, si los obispos consideran que el Gobierno de España es "ilegítimo", que lo digan y que digan por qué. Lo de la democracia y la libertad de conciencia no cuela.
Porque es desobediencia civil lo que la Iglesia está fomentando y también la derecha. La señora Aguirre dice en los curso de verano de la UPM en El Escorial que "no entiende" por qué no se pueda aplicar la objeción de conciencia a la EpC. Hay que ver qué cosas se dicen en ese augusto templo del saber y el orar. Porque la señora Aguirre, ilustre abogada, no ignora que la ley vigente en la materia, 22/1998 de seis de julio reguladora de la Objeción de Conciencia y de la Prestación Social Sustitutoria, aprobada en el mandato del señor Aznar, restringe la objeción de conciencia exclusivamente a la negativa a hacer el servicio militar. Y es lógico (aunque ya inútil pues, a su vez, se ha abolido el servicio militar obligatorio) porque la señora Aguirre comprenderá que carece de sentido que haya una ley que regule la desobediencia a la ley por cualquier motivo que se le antoje a la señora Aguirre. La obediencia a la ley no está sujeta a la decisión en conciencia de cada ciudadano y menos a la de la señora Aguirre en nombre de todos. La obediencia a la ley es obligatoria y la desobediencia se castiga, como bien dice su beatitud Pío IX, aunque se reserve el derecho a autorizarla tratándose de príncipes "ilegitímos".
La objeción de conciencia, la desobediencia civil es, sin embargo, un hecho que se da de vez en cuando en nuestras sociedades. Trátase de colectividades que se sienten agredidas por unas u otras normas jurídicas y las desobedecen, aceptando el castigo que la desobediencia acarrea. Pero se habla aquí de personas privadas. Las autoridades como la señora Aguirre no pueden llamar a la desodencia a la ley que han jurado (o prometido) cumplir y hacer cumplir. En cierta ocasión de la que tengo vagos recuerdos creo que ya hicieron algo parecido algunos cargos públicos de Gobierno vasco. En fin ya se sabe que los nacionalistas tienen algo de excéntricos. Pero que llame a la desobediencia un cargo público de un partido conservador carece de toda lógica divina, humana, matemática o difusa. Sin duda la señora Aguirre es libre de predicar ésta y otras desobediencias y hasta de seguir el dignísimo camino no del Monseñor de idéntico apellido, sino del venerable Mahatma Gandhi. Sin duda aunque, francamente, no la veo ataviada como Mahatma. En todo caso para hacerlo deberá abandonar su puesto público, resignar su cargo, deponer su autoridad, volver a la vida civil y desde ahí, como persona privada, iniciar su campaña en pro de la libertad de conciencia.
Es extraño que la señora Aguirre no entienda algo tan elemental. ¿No será que no quiere entenderlo?
LA HORA DE TODOS
Anteayer falleció Antonius Block. Había regresado de una Cruzada y se había encontrado a la muerte en una playa nórdica, una playa pedregosa sobre la que rompen en espuma las olas bajo un cielo bajo y gris oscuro, que recuerda los cuadros de Nolde de no ser porque las inmortales imágenes de Bergman son en un despiadado blanco y negro.
Block retó a la muerte a una partida de ajedrez con el objetivo obvio de ganar tiempo. Anteayer, la muerte le dio jaque mate.
La verdad es que hay que felicitarse por la existencia de internet y, en concreto, You Tube. Es una inmensa ventaja que el día en que muere el director de una película que te ha marcado desde adolescente, puedas volver a ver muchas escenas de muchas de sus pelis. Éstas del Séptimo sello son magníficas. Lo que más impresión me causó de la peli es cómo Bergman vincula a la Iglesia misma con el mal de una forma tan sutil que el censor del franquismo no lo vio. Cuando Block cuenta en confesión que piensa ganar la partida a la muerte con una combinación de caballo y alfil y descubre que el confesor es la muerte. A lo mejor posteo mañana algo sobre Bergman, que es tarde.