dimarts, 5 d’abril del 2016

El cónclave

Los tres cardenales se reunirán el viernes, parece, repentinamente urgidos de formar gobierno, no vayan a echárseles las elecciones encima y los dejen como el sembrado tras el paso de la langosta. El viernes no es aún el deadline, pero todos insisten en que debe salirse con algo concreto, mollar. Mientras tanto, los medios han ido preparando el terreno al modo en que la artillería macera el campo del enemigo para permitir la entrada de la infantería: si hay elecciones, el personal va a quedarse en casa y esos son los de izquierda, la mayor participación favorecerá al PP que, a pesar de no aumentar mucho en votos, lo hará en diputados. De algún sitio había que sacar estos ya que la gente no está dispuesta a votar al partido de los sobresueldos. Podemos se hunde. El PSOE se estanca. Más vale no tentar la suerte.

Y, en efecto, los negociadores muestran posiciones más acomodaticias, flexibles, "comprensivas". Los de Podemos ven "posibilidades" reales de gobierno. Sobre todo, ven gobierno y parece que finalmente han comprendido que las sociedades no se cambian confrontando teorías en las mesas redondas sino desde el poder, con el BOE en la mano y los proyectos legislativos preparados. Hay que estar en el gobierno. Lo demás, desde la ideología a las convicciones, pasa a respetable pero segundo término.

El PSOE también parece razonar despierto. Está dispuesto a negociar los programas sociales con Podemos. Era su punto débil. A la vista de las relaciones, todo le aconseja radicalizarse algo más de la mano de Podemos. Si lo dejan solo con Ciudadanos, iría cediendo al peso del conservadurismo, dejándose llevar y podría encontrarse sin percibirlo en el infierno mismo de la alianza maligna con el PP, con el que tanto se desama y desune.

Todos parecen entender la situación y estar dispuestos a ceder para conseguir un objetivo óptimo: el gobierno a tres, PSOE, Podemos y Ciudadanos (y ya veríamos si con ministerios o con abstenciones). Todos menos, precisamente, C's. Sus dos exigencias a Podemos son muy toscas y habrá de matizarlas: a) que Podemos renuncie al referéndum de autodeterminación de Cataluña; b) que acepte expresamente el pacto entre C's y el PSOE.

La segunda condición, aceptación del pacto, no es grave ni imposible de cumplir. La primera, en cambio, sí, sobre todo porque ya está implícitamente admitida en la aceptación del pacto. ¿Qué sentido tiene forzar un rechazo expreso de Podemos al referéndum? Suena un poco a exageración inquisitorial: ¿por qué tienen que aparecer los morados con un sambenito de renuncia a una exigencia, por efecto del color? Es absurdo. Obligar a alguien a negar algo que pueda beneficiarlo como un acto de voluntad es un absurdo.

Por lo demás, C's hará bien en recordar que la combinación PSOE, Podemos, C's no es la única ganadora. También lo es la combinación de la izquierda que Palinuro apoya: PSOE, Podemos, IU, CC, ERC y DiL para la investidura. Son 181 diputados. Solo dependería de que el PSOE entendiera que la coalición con Podemos es más propia de su trayectoria que la coalición con C's.

Con las filas. No desde las filas

David Fernández/Julià de Jòdar (2016) CUP. Viaje a las raíces y razones de las Candidaturas de Unidad Popular. Madrid: Capitán Swing.
----------------------------------------------------------------

Este libro, como algunas partituras para piano, es a cuatro manos, a veces a seis, a ocho y tiene partes corales en las entrevistas. Así que, aunque los autores principales sean los dos de la portada, es una visión bastante representativa de su tema porque en él hay un montón de gent donant la seva. En conjunto viene a ser una especie de guía de viaje por el territorio de la protesta y la radicalidad, una suerte de Baedeker de un movimiento típico de grass-roots, muy pegado a la vida cotidiana de la gente , asambleario, de raíces anarquistas, no jerárquico y que hubiera hecho las delicias de J. J. Rousseau entre los muertos, y refleja la envidia de muchos otros en el Estado español que les gustaría haber puesto en pie algo semejante. Un libro sobre un objeto de estudio que es en parte el sujeto que lo escribe. 
El sempiterno debate sobre el anarquismo y el radicalismo político de base es el de su viabilidad o factibilidad. Recuerda mucho un famoso ensayo de Kant titulado "acerca del dicho frecuente 'eso está muy bien en la teoría pero no funciona en la práctica'". Es una experiencia que todos hemos tenido, que contribuye decisivamente a configurar nuestra idea del mundo, sobre todo cuando nos las damos precisamente de eso, de "gente de mundo", y probablemente acompañará a la humanidad hasta el fin de los tiempos porque hasta el fin de los tiempos habrá gente que no esté de acuerdo con el modo en que la mayoría hace las cosas y proponga hacerlas de otra manera, gente a la que, a veces, según la época que le haya tocado vivir y otras circunstancias, quizá se le ofrezca la oportunidad de poner en práctica sus ideas o quizá algo aun más innovador. Lo primero, la posibilidad de llevar a cabo lo que propugnas no es tan estrafalario ni insólito como parece a primera vista. Basta con reunir ciertas condiciones objetivas y subjetivas: instituciones flexibles, voluntad de cambiar la realidad y claridad de ideas para saber hacia dónde. En la Inglaterra del siglo XVII, los diggers pusieron en marcha experimentos de comunas igualitarias; en el siglo XVIII, muchos inconformistas, mormones y cuáqueros establecieron colonias en el Nuevo Mundo; en el XIX hubo falansterios, diferentes formas de cooperativas, organizaciones icarianas, comunidades saintsimonistas, talleres nacionales al socaire de la revolución de 1848 y hasta un primer bosquejo de gobierno de obreros en la Comuna de París de 1871. Otra cosa, por supuesto, es la duración o perdurabilidad de estas innovaciones. Se trata igualmente de una experiencia que admite muy diferentes ejemplos. La perdurabilidad en sí  misma es escasa, pero otra cosa es la huella que dejan en el devenir de las sociedades, tanto en el orden especulativo como en el facticio.
Labor interminable fuera hacer una enumeración de los ejemplos de movimientos ácratas, asamblearios, consejistas, de los experimentos en colonias educativas antiautoritarias, de comunas y formas espontáneas de organización de todo tipo en los ámbitos de distritos, municipales, urbanos, laborales, etc en Europa y América en los años treinta del siglo XX. Luego del paréntesis de los totalitarismos, la guerra y la guerra fría, los años sesenta presenciaron un resurgimiento de las formas revolucionarias, populares de organización que entroncaban con tradiciones del movimiento obrero, con las vanguardias artísticas (el dadaísmo y el surrealismo, que fueron  decisivos en el situacionismo y el 68) y con nuevas formas de organización fabril y productiva de tipo cooperativo, autogestionario, etc. Los sesenta y los setenta fueron años de experimentación de formas nuevas de organización, comunas y otras vías alternativas de organizar la vida cotidiana.
El deseo de la gente de liberarse de las relaciones autoritarias y/o explotación, de controlar sus propios destinos, de compartir la existencia y democratizarla, tomando decisiones directamente sobre las cuestiones que afectan a la vida cotidiana revive en todas las épocas y ciurcunstancias probablemente porque es consubstancial al propio ser humano.

Las CUP son una manifestación de esa corriente que atraviesa todas las formas de organización social, las culturas y los modos de producción. Un intento de organizar la política primeramente en el orden municipal con criterios de democracia directa, participativa y asamblearia para trasladarlos luego al nivel del mesogobierno

Un primer capítulo, a cargo de Gabriel de Jòdar, Raíces: hurgando en la historia ya nos pone en antecedentes acerca de cómo las CUP son en el fondo una especie de precipitado en el que coinciden numerosas experiencias organizativas de todo tipo en el ámbito local con dos elementos esenciales de carácter municipalista radical:  el asamblearismo y el independentismo. En él se trata la transición como una "renuncia" y se repasan los precedentes de las luchas municipalistas, caldo de cultivo de esta iniciativa, el movimiento independentista en los 80 y el nacimiento de las CUP a partir del Moviment de Defensa de la Terra. Elecciones municipales de 1987 y primer mandato de la CUP a la sombra de la designación de Barcelona para sede de los JJOO 1992 con los movimientos especulativos urbanos. Ayudó mucho la crisis de la izquierda independentista y la renovación de ERC, dispuesta a explorar la "vía parlamentaria a la independencia" de Ángel Colom y Josep-Lluís Carod-Rovira (p. 61). Posteriormente y a raíz de las elecciones municipales de 1991 y la liquidación del "independentismo de combate" (1991-1992) se da la operación Baltasar Garzón de detención de cantidad de independentistas catalanes. Importancia también tuvo el ingreso de Catalunya Lliure y Terra Lliure (próximas al Front Patriotic) en ERC (p. 64). El relanzamiento y expansión de las CUP (1999-2011). "Trabajo riguroso y paciencia: -dice el autor- una CUP no es un colectivo de espontáneos ni un Ayuntamiento ni un Casal Independentista o un Ateneo" (p 72). Crecimiento entre 2003 y 2007 que culminó con la Asamblea Nacional Extraordinaria de en abril de 2005. El estallido de 2011 y las consultas independentistas Arenys de Munt (2009). Asamblea nacional de Reus (2012). Suma y sigue.

Los autores se esfuerzan por exponer la esencia misma de la CUP como una realidad in fieri. Hay en su prosa, sobresaltada y con acelerones, una especie de alegría y fascinación por saber que se está poniendo en pie algo nuevo, que promete y no surge de ningún modelo, patrón o blueprint propio. El momento decisivo o pistoletazo de salida es el resultado de las elecciones municipales de 22M de 2012. Ahí está el giro y lo que, con algo de entusiasmo y de exageración, sostienen los autores, permite dar respuesta a los recortes de 2011, la crisis y el directorio europeo Merkel-Sarkozy (p. 90)

Cartografía/s: la CUP sobre el mapa municipal. El voto municipal de la CUP el 22-M se concentraba en la región metropolitana de Barcelona (p. 103). Comarca a comarca, paso a paso y convertida entre 4ª y 6ª fuerza (p. 104) y con esto ya se puede hablar de hacer hervir la olla: cuando la práctica libera. La CUP surge del agotamiento del proyecto socialdemócrata (p. 135) y la derrota de las izquierdas oficiales (p. 136). Puede entenderse como un campo próximo a los "nuevos movimientos sociales que por entonces eran objeto de estudio por Claus Offe e Inmanuel Wallerstein.
Fascinados con la originalidad de lo que está poniéndose en marcha, los autores envían una encuesta a todos los concejales de la CUP elegidos el 12 de mayo de 2012. Responden 63 de 101 y, aunque las respuestas masculinas triplican a las femeninas, ello nos permite considerar que el  universo: de las CUP son jóvenes, formación elevada, de izquierda, independentistas y redes sociales. O sea, "catalanes de izquierda heterodoxa" (p. 185). Para afirmar esta primera impresión, los autores añaden veinte entrevistas en profundidad a veinte cupaires señalados que se encuentran en http://blocs.mesvilaweb.cat/copdecup (p.191).
En un afán casi perfeccionista por dibujar la esencia de la CUP con pelos y señales, entre abril, mayo y junio de 2012 los autores enviaron un cuestionario a personalidades de los Països catalans con 7 preguntas. Las respuestas que vienen a ser como las de el conjunto de la sociedad civil catalana en toda su abigarrado pronunciamiento. En esencia, la bateria de preguntas y sus respuestas demuestran lo que ya sabemos, que la CUP tiene muy buena prensa en Cataluña por su carácter genuino, auténtico, representativo y eficaz a la hora de la acción representativa y con una notable fibra moral. En la CUP no hay corrupción. (pp. 195-320).
Cierra el resumen de la obra las conclusiones de la mesa redonda del 13 de enero de 2012 en CIEMEN, con Anna Maria Gabriel, Marc Sallas, Joan Teran, Blanca Serra, Eva Serra, Ricard Vilaregut, Julià de Jòdar y David Fernández: diversos aspectos sobre que la CUP no tiene un discurso sobre el poder o está confusa ante el frente institucional (p. 333)
El libro se publicó originariamente en catalán en 2012 y se traduce ahora al castellano. Viene acompañado de un epílogo con una pregunta de ahora, 2016: ¿qué izquierda para el siglo XXI en el sur de Europa? (p. 356) y nos pone finalmente sobre la pista de cuál sea la intención de esta guía. Es un repaso al origen, desarrollo y situación actual de un movimiento participativo, de democracia directa, asambleario, que comenzó en el orden de la representación municipal y que en la actualidad ha posibilitado la formación de un gobierno en Cataluña cuyo mandato e inequívoco: conseguir la independencia de España, tomar su destino en sus propias manos.

dilluns, 4 d’abril del 2016

La entrevista revelación

Muchos dirán-ya están diciéndolo- que Rajoy sobrevivió a la entrevista de Évole; que se le escurrió entre los dedos; que, con su habitual marrullería, desarmó al periodista. Que ganó un combate, vamos.

Mentira.

La entrevista fue un triunfo de Évole. Quizá la mejor que haya hecho. Da las claves para entender, no ya la personalidad del presidente de los sobresueldos, nada difícil de entender, sino su supervivencia en el gobierno. Es la entrevista que revela la verdad de este asombroso fenómeno de que una supuesta banda de ladrones, dirigida por un presunto corrupto, cobrador de dinero en negro, gobierne "una gran nación" y tenga expectativas razonables de seguir haciéndolo.

Pero hay que entenderla. Entender la entrevista.

Rajoy amontonó todos los topicazos, lugares comunes, sinsorgadas y puras estupideces que lleva cuatro años repitiendo: la inmensa mayoría no delinque (como si eso exculpara a los delincuentes o a él en su posible complicidad con ellos); no recuerdo (igual que no recuerda la Infanta, ni su marido, ni Barberá, ni ninguno de estos); no conozco el asunto de que habla (referido a cualquier latrocinio de los organizados por la gente de su partido); la gran mayoría de los políticos (y él se incluye) cumplimos con nuestro deber (como si eso justificara a los que roban); me equivoqué enviando un SMS a Bárcenas (reconoce "equivocación" como Juan Carlos I, pero solo porque los han pillado); conscientemente, no mentí (o sea, mentí, pero no era yo; era mi inconsciente).

¿Cómo es posible que un tipo de esta catadura intelectual y moral presida nada en ningún sitio y menos un país europeo, aunque sea España? Porque la entrevista -insisto, ejemplar, dura, cristalina- lo dejó todo claro. Muchos dicen que tal cosa es posible porque hay millones de personas, de las que tienen la peor opinión, que lo votan. Yo mismo he caído en esa simplificación de la que ahora me curo gracias a Évole. Porque la siguiente pregunta es: ¿y cómo es posible que millones de personas sigan votando a estos pájaros en contra de sus intereses?

Esa es la pregunta. Y la respuesta es: porque los medios de comunicación, los intelectuales, los partidos de la oposición, en resumen, los organismos intermedios entre los gobernantes y la gente, que son quienes tendrían que ejercer la crítica e ilustrar a la opinión pública no lo hacen porque son unos inútiles, unos vagos, unos cómplices o todo a la vez.

La gente, los votantes, tienen muchas cosas en que pensar, tiene que salir adelante en condiciones de vida muy difíciles, enfrentándose a montones de problemas, no tiene tiempo de seguir la política, sobre todo la de unos tipos tan sinvergüenzas y embusteros como la presunta banda de ladrones. Confía, entonces, en que sus otros representantes, los políticos de la oposición, los medios de comunicación, las instancias críticas del país, ejerzan su función.

Pero no lo hacen. En ningún país democrático del mundo sería presidente del gobierno un irresponsable como Rajoy y sus sobresueldos. En ninguno. Pero es que en ningún país democrático del mundo la prensa y la oposición hubieran dejado un solo día de exigir su dimisión, de pedir una moción de censura, de movilizarse. En ningún país democrático del mundo esta banda de presuntos ladrones habría podido estar robando veinte años a manos llenas y repartirse las tarjetas black sin que pasara nada.

No es la gente la que falla. Es la oposición, los medios, los intelectuales comprados y silenciosos, son los "cuerpos intermedios" los que fallan y no cumplen con su deber. Es la cobardía de una oposición incapaz de plantear una moción de censura a esta banda de impresentables que, además se han declarado en rebeldía.

Y eso es lo que esta entrevista de Évole deja patente, claro, en primer plano. El sobresueldos está ahí, dando lecciones porque la oposición, los medios, los publicistas e intelectuales no cumplen con su deber.

Los Borbones y sus aficiones

El padre del Rey tiene, según la revista Forbes, una fortuna de 2.000 millones de dólares cuyo origen no ha explicado, caza elefantes en Botsuana, mantiene pabellones de caza que pagamos todos y relaciones con princesas que también pagamos todos. La hermana del Rey está metida de hoz y coz en un asunto de mangoneo de pasta pública por un tubo protagonizada por su marido y del que ella era la primera en beneficiarse. La tía del Rey ocultaba una fortuna en Panamá, paraíso fiscal y no explica si declaró ese dinero a la Hacienda de su país por el que todos los Borbones, de sobra lo sabemos, se han sacrificado siempre. No hay más que verlos.

¿Y tienen ustedes alguna duda de por qué los republicanos queremos una República? Para que dejen de tomarnos por idiotas esta manga de apandadores y de reírse de nosotros mientras nos despluma.

Por supuesto El País de hoy, ni palabra de la Infanta Mercedes en portada. Y el PSOE de Sánchez, si acaso, contribuirá a desviar la atención pública de los reyes.

Los siervos protegen a sus reyes, que les escupen encima.

Los ciudadanos queremos nuestra República.

diumenge, 3 d’abril del 2016

El horizonte está detrás

Palmira se ha salvado, de momento. Bueno, las ruinas de Palmira se han salvado, de momento; para ser más exactos. Tampoco todas: entre un 10 y un 20% han sido dinamitados en nombre de Alá, un dios que se alimenta de piedras. Piedra le dieron a comer a Cronos para salvar a Zeus. A este le dan las piedras en lugar de Zeus. Pero, sí, la Palmira del Conde de Volney se ha salvado. Las ruinas enseñan mucho. Aprovechando el viaje a Sevilla, visitamos Itálica (Estos, Fabio, ¡ay dolor!, que ves ahora...) y luego varios lugares emeritenses: el teatro, el anfiteatro, el museo, la casa del Mitreo y el columbario. Mañana o pasado escribiré algo sobre estos confines occidentales del Imperio que, andando el tiempo, habían de constituir un imperio nuevo, más occidental aun.

En realidad, me proponía glosar la encuesta de Metroscopia de El País. Las encuestas cumplen una doble función. La manifiesta: ilustrar sobre el futuro; la latente: animar debates sobre los efectos y la naturaleza de las encuestas. Además de la malicia generalizada de que si "allá van leyes do quieren reyes", allá irán los sondeos do moran los deseos. En este caso ahorramos y damos por buena la conclusión según la cual, una repetición electoral apenas cambiará el mapa parlamentario. Merece cierta consideración. A primera vista, pareciera una mesa de juego en la que el electorado, a modo de croupier repartiera la cartas para que los políticos las jueguen. Pero estos no saben y las devuelven. Los electores van y reparten las mismas.

Pero eso es un absurdo, ¿no? Porque si reparten las mismas seguirá sin haber juego y Rajoy empezará a pensar en la posibilidad de agotar un segundo mandato en funciones. Claro, con el gobierno en funciones, el país entero está en funciones. Por eso no viene Obama. Aunque uno sospecha que Obama, este sí, de retirada, seguramente no vendría en ningún caso. De tpdas formas, según Metroscopia, misma foto.

Pero ¿no quedábamos en que el electorado es siempre sabio? En el fondo, no; el electorado puede ser tan racional o irracional como cada individuo. Para los más doctrinarios, en realidad, los políticos tienen la obligación de hacer juego incluso con decisiones irracionales, pues también hay sabiduría en la sinrazón..

No obstante, el cuadro de proporción de las distintas fuerzas que la empresa demoscópica plantea varía algo respecto al actual aunque, en su opinión, no lo suficiente para cambiar el contenido de las decisiones que serán las de ahora: ninguna.

Las palabras no son inocentes. El uso del verbo "hundir" para calificar el descenso de tres puntos porcentuales de Podemos es casi melodramático. Aunque, por supuesto, si lo de "asaltar los cielos" queda por debajo del mundo broker de C's, puede haber una crisis. Pero, en realidad, puede haber crisis de cualquier tipo. Podemos sigue empeñado en el sorpasso al PSOE y, como siempre se ha dicho aquí, está en su derecho. Ahora parece que su principal aliado en esta tarea es el propio PSOE, que da la impresión de no ser suficientemente compacto. Pero peor lo tiene Podemos, cuya imagen es próxima al fraccionamiento.

Supongo que en ese 94% de gente que considera mala la situación política (el 6% restante son NS/NC o políticos) habrá dispuestos a votar lo que sea. Literalmente lo que sea. Y eso es muy difícil de pronosticar.

Catalanofobia

Mi artículo de hoy en elMón.cat sobre esa actitud tan típica de los nacionalistas hispanos de pasarse la vida envidiando y odiando a los catalanes, pero diciendo que los quieren mucho cuando creen que así pueden pararlos en su lógico deseo de largarse de este insoportable lugar de toros, panderetas, legionarios, cursis, curas, procesiones, plumillas a sueldo, ladrones, meapilas, pedantes y académicos bocazas. No hace falta dar muchas más explicaciones, pues estamos todos al cabo de la calle. Me explico. España es, desde luego, el país de la Contrarreforma, de Trento; el país típicamente antieuropeísta, opuesto al liberalismo, a la tolerancia, a las luces, la enciclopedia y la ciencia. También es el país con una enclenque clase intelectual progresista cuya función histórica no consiste en poner coto a todo lo anterior y orientar la colectividad en un sentido distinto, sino en lamentarse como un coro de plañideras, como un puñado de Jeremías, pero limitarse a eso, a lamentarse y, en último término, a encontrar cierta satisfacción algo masoquista en cultivar la profunda  creencia de que España no tiene remedio y que, en el fondo, en este desastre, en este fracaso histórico como todo, como sociedad, como Estado y como nación, está su gracia.
 
Aquí el texto en castellano:
 
Llevan la catalanofobia en la sangre
El viernes estuve en la Universidad de Sevilla en un acto sobre “Cataluña y España en el 30 aniversario de la adhesión a la Unión Europea”. Dos días antes, en otro acto en la misma Universidad organizado por Diplocat, en el que estaban Iñaki Anasagasti, Joan Tardá y Juan Carlos Rodríguez Ibarra, el expresidente de Extremadura se puso bronco con los catalanes y le recordó a Tardá el destino de Companys.
En nuestro acto no hubo tanto extremo, porque no éramos políticos sino académicos, pero la crispación y la catalanofobia fueron patentes. Cómo sería la cosa que la universidad (el Centro de Documentación Europea) subió el vídeo de la conferencia, ¡sin audio! Cuatro horas de imágenes mudas, como si fuera un “biopic” de Charlot.
Por fortuna, hay otra grabación que subiremos a la red con sonido el lunes. Ahí se podrán escuchar los argumentos y contraargumentos y las gentes podrán saber quién dijo qué y hacerse un juicio propio como mayores de edad que son, sin que venga nadie a censurar.
Fue una estupenda exposición de la batería de los argumentos españolistas más tradicionales, a saber: que le derecho de autodeterminación está estrictamente reservado a las colonias; que Cataluña no ha sido nunca independiente; que su desarrollo se ha debido a los privilegios de que ha gozado en el conjunto del Estado; que la historia común la obliga; que el Tribunal Constitucional no niega el derecho a decidir, pero exige ejercerlo dentro de la legalidad; que la parte no puede hacer referéndum frente al todo, sino que debe ser el todo el que haga referéndum sobre la parte; que si quien quiere hacer un referéndum permitirá que otras partes lo hagan en su interior; que Cataluña se quedará al margen de la UE, de la ONU y del mundo en general; que a dónde va Cataluña separada de España.
La verdad es que, después del famoso dictamen de la Corte Suprema del Canadá sobre los referéndums en Quebec y después del referéndum de Escocia el año pasado, todos estos argumentos, cargados de pedantería, doctrinas rebuscadas y dogmas muertos no valen ni el papel en el que se escriben ni la cinta en que se graban y quizá por eso ya no le ponen banda sonora.
Si los quebequeses y los escoceses pueden autodeterminarse pacíficamente en el seno de sendos Estados de derecho que, por supuesto, no reconocen el derecho de autodeterminación, sin que se hunda el mundo, la pregunta inmediata es ¿por qué los catalanes no, si España dice ser también un Estado de derecho?
Un solo argumento que respondiera a esta pregunta nos ahorraría a todos horas de debates más bien tediosos. Uno solo.
Pero no lo hay. No hay un solo argumento que justifique por qué los catalanes no pueden hacer lo que sí pueden hacer los quebequeses y los escoceses.
Lo único que hay es la catalanofobia y la cerrada negativa de los nacionalistas españoles a reconocer a los catalanes un derecho que, al menos cuando esos nacionalistas son de izquierdas, reconocen a los tibetanos, los saharauis e tutti quanti, pero no a los catalanes. ¿Por qué no? Por catalanofobia.
Al día siguiente, en una tertulia en RAC1 en Cataluña se nos preguntó a Suso de Toro, Ramón Lobo y a mí si España/Castilla podía reformarse, si era reformable. Mi respuesta, que tengo muy pensada, desde hace muchos años, es que no, de ningún modo precisamente porque España surge como Estado en la Edad Moderna en lucha contra la Reforma. La identidad de España, coincidente por la fuerza de las armas con la de Castilla, es la de la Contrarreforma. Castilla/España, abanderada del catolicismo, “luz” de Trento, es enemiga radical de toda reforma: lo fue de la protestante, lo fue de la del siglo de las luces, de la Revolución francesa, del positivismo burgués del siglo XIX, del europeísmo del XX y de la libre determinación de los pueblos en el XXI, sobre todo de los que ella domina.
Po odio, por catalanofobia.

dissabte, 2 d’abril del 2016

Obama no viene

Sala del Consejo de Ministros en La Moncloa. Todos los titulares sentados a la mesa, cariacontecidos, en silencio. se les ve asustados. Entra Rajoy braceando, rojo de ira, echando humo, y se sienta. Tamborilea muy nervioso. Los mira uno a uno. Por último estalla:

Rajoy. ¿Qué? ¿Nadie tiene nada que decirme?

Sáenz de Santamaría. (Mirándolo, inquieta, con una sonrisa) ¿A qué te refieres presidente?

Rajoy. ¡Obama no viene!

García Margallo. (Acojonado) ¿Cómo lo sabes?

Rajoy. Me la ha dicho Punchdemún. Los americanos lo han llamado porque dicen que es el único que sabe inglésh.

García Margallo. Bueno, inglés, inglés... Habla un pichinglish. Voy a meterle un conflicto de competencias.

Rajoy. Cállate, García. El último conflicto casi nos metes en una guerra por Gibraltar.

Sáenz de Santamaría. Tengo un amigo abogado del Estado que tiene un amigo en Washington que conoce al ujier de la Casa Blanca y dice que con dos millones de € arregla esa visita.

Montoro. ¿Y de dónde sacamos dos millones de pavos, mi niña? Como no se lo digas a tus amigos de la lista Falciani...

Sáenz de Santamaría. Oye, Nosferatu, esos serán amigos tuyos.

Catalá. Obama tiene relaciones con la ETA.

Rajoy. ¿Qué dice este? ¿Le ha dado un avenate?

Morenés. No te lo tomes a la ligera, presidente. Tengo informes de que tiene sus puntos de tráfico de armas. En mi empresa, sin ir más lejos...

Montoro. ¡Cállate ya con tu empresa, tío! Voy a tener que empurarte.

Catalá. Obama es primo segundo de Errejón y tiene un contacto con ETA que le pasa la dinamita que no usa Trehorras.

Fernández Díaz. Además, como es negro, no cree en dios ni en santa Teresita de la ingle marchita.

Rajoy. Vale, pero ¿quién me trae a mí a Obama antes de que sea de noche, que luego, como es negro, no lo distingo?

Guindos. ¡Bah! ¿Para qué lo quieres, presidente? A Obama lo ve cualquiera: Merkel, Hollande, Cameron, el Papa... mindundis, presidente. Tú, a quien tienes que recibir aquí es a Teodoro Obiang.

Sáenz de Santamaría. ¡Claro! Negro por negro, más vale uno nuestro.

Catalá. Obama tiene vínculos con la ETA.

Guindos. A ver, Fernández, aplica a este pesado la Ley Mordaza.

Morenés. Oye, me malicio... ¿Y si el tipo no viene aquí pero hace como Renzi y se va ver Puigdemont a Reus?

Montoro. No fotis!

Catalá. Un altre de la ETA. Que parlas català, noi? No seras de Terra Lliure?

Rajoy.Fernández ¿que diantresh dicen eshtosh?

Fernández Díaz. Que mañana comienza un novenario a la virgen del santo cortijo con indulgencia plenaria por año jacobeo por orden de SS si se combina con un cilicio del siete una peregrinación a Santiago a la pata coja.

García Margallo. Mañana mismo llamo a nuestro embajador Trillo y lo pongo firmes para que haga respetar la bandera nacional.

Morenés. Que estamos hablando del embajador en Washington, tío...

García Margallo. Ya lo sé tronco; pero al de Londres lo tenemos agarrado por el manda güevos.

------------------------------------------------------

(Nota: todo parecido entre este autillo y una reunión del consejo de ministros es pura, pura, pura coincidencia).

divendres, 1 d’abril del 2016

La herencia de la banda de granujas

Durante todo su mandato, el presidente de los sobresueldos estuvo quejándose de la herencia recibida de Rodríguez Zapatero. Luego, en la campaña electoral advirtió muy serio y repetidas veces que votar por el PSOE o por Podemos o por cualquiera que no fuera él y la partida de presuntos malhechores que encabeza sería "poner en peligro lo conseguido", dando por supuesto que se había conseguido algo.

Y, en efecto, algo se ha conseguido. 

Esto:

Un déficit del 5% que obligará al siguiente gobierno a un recorte de 24.000 millones de €.

Una deuda pública del 100% del PIB que los españoles tardarán más de veinte años en pagar.

Un fondo de reserva de la seguridad social vacío, esquilmado en 40.000 millones de €.

Un paro de más del 25%, como cuando este pájaro entró a destrozarlo todo apoyado en los once millones de votos más estúpidos de la historia del mundo.

Más de dos millones de emigrantes que han tenido que marcharse del país en busca de trabajo.

Entre otras muestras de su absoluta incompetencia y su infinita capacidad para el robo y el trinque. Ya que este resultado alucinante no es solo producto de la inepcia y la estupidez. Su política ha sido de rapiña y saqueo de todos los caudales públicos en todos los niveles de gobierno, municipal, provincial, autonómico y central aplicada por un partido que es más partida de presuntos ladrones que otra cosa. Una banda de auténticos sinvergüenzas que han estado llevándoselo crudo en estafas, desfalcos, malversaciones, contrataciones indebidas, financiaciones ilegales, tarjetas black, comisiones tramposas, subvenciones a los amigos, enchufes y mamandurrias de todas clases. Unos tipos que han arruinado el país con sus latrocinios sistemáticos. 

Y esta gentuza tiene el morro de presentarse de nuevo a las elecciones porque todavía habrá imbéciles que los voten para que sigan robando.

Las dos preguntas inmediatas son: 

1ª) ¿qué estaban haciendo los medios en estos años? La vista gorda más descarada y los ditirambos más vergonzosos porque en su inmensa mayoría estaban comprados por la partida de facinerosos con dineros públicos .

2ª) ¿y la oposición? Aun menos. Y, encima, no era necesario comprarla dada su evidente inutilidad. Le bastaba con cobrar su sueldo y pillar alguna tarjeta black de vez en cuando.

Hoy, en Sevilla

Invitado por el Centro de Documentación Europea de la Universidad de Sevilla, hoy participa Palinuro en una interesante jornada sobre el tema de "Cataluña, España y la UE: perspectivas tras 30 años de la adhesión" junto a otros distinguidos colegas de los ámbitos del derecho internacional público, el derecho constitucional y la historia contemporánea. 

Festejamos el trigésimo aniversario de la adhesión de España a la UE. ¡Treinta años ya! Cuando tomamos conciencia de este dato solemos mirar hacia atrás y maravillarnos de cuánto ha cambiado España desde 1986. No solemos, sin embargo, reparar, en algo también muy curioso: la propia UE ha cambiado mucho más. En 1986, al ingresar España y Portugal, éramos 11 países. Ahora somos 28. Los tratados se han expandido. Todo en su interior ha cambiado. Schengen es una realidad. Y actualmente la Unión en su conjunto padece varias crisis de diversa naturaleza: la de los refugiados, la actitud del Reino Unido y la crisis mundial que ha afectado a la Unión. 

En el tema específico de Cataluña, que es el que justifica mi presencia en la jornada, lo trataré en perspectiva doble: a) desde el punto de vista europeo; y b) desde el español. Desde el punto de vista europeo hay tres ejemplos de alteraciones de fronteras de Estados europeos que podrían ilustrarnos (pero no nos ilustran porque no tienen nada que ver con la cuestión  catalana): 1º) la independencia de Argelia en 1962, que dejó al país norteafricano fuera de la UEE; 2º) la salida de Groenlandia en 1985 a raíz del referéndum de autonomía de 1983 frente a Dinamarca; y 3º) la incorporación de la República Democrática Alemana con motivo de la unificación alemana de 1991. Argelia y Groenlandia no son países estrictamente europeos y Alemania oriental, en lugar de separarse, se ha integrado. Por tanto, no hay precedentes y habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos, si una Cataluña independiente ha de acceder como un Estado nuevo, si España veta la adhesión, si Cataluña puede estar dentro del área del euro sin ser miembro de la UE, etc.

Desde el punto de vista español, el asunto se refiere, obviamente, a si los catalanes tienen o no derecho a decidir por su cuenta, o derecho de autodeterminación y qué tipo de derecho es ese derecho y si es o no un derecho en primer lugar. Me propongo hacer una triple consideración: en primer lugar, tomando pie en los últimos 10 años, considerando los avatares del Estatuto que aprobó el Parlament catalán en 2006, fue luego cepillado en el Congreso de los diputados, aprobado por mayoría en referéndum en Cataluña y finalmente desmochado por la célebre sentencia del Tribunal Constitucional de 2010. En segundo lugar si son o no de aplicación a la situación catalana actual los antecedentes de los dos referéndums de autodeterminación de Quebec en los años de 1980 y el de Escocia en 2014. Y en tercer lugar, las perspectivas que se abren a la hoja de ruta del gobierno independentista catalán con un mandato para declarar la independenia en dieciocho meses y cuáles pueden ser las consecuencias para España.

Tengo entendido que hace dos días hubo un acto similar en esta Universidad, organizado por el Diplocat y con participación de Iñaki Anasagasti, Juan Carlos Rodríguez Ibarra y Joan Tardá y que estuvo muy movido, habiéndose dicho en él cosas muy principales. Espero que nosotros no desmerezcamos.

Me he cerciorado de que el acto se grabará y se colgará en la red. Es cosa muy puesta en razón para que no se pueda luego argumentar que si dije o dejé de decir. Todo lo que se diga, grabado quede.

La jornada (día completo, pues son exposiciones de los ponentes de 10 a 12 de la mañana y mesa redonda de los mismos a continuación) tendrá lugar en el salón de actos de la Facultad de Ciencias del Trabajo de la Universidad de Sevilla, calle de la Enramadilla 18-20, Sevilla, 41018. La entrada es libre.

Allí nos vemos.

dijous, 31 de març del 2016

Hay que pactar, pero solo como los señoritos quieran

Ayer, Pablo Iglesias dio muestras de mayor flexibilidad política de la que acostumbra. Recogió velas, no insultó al PSOE y se mostró dispuesto a hablar con C's, aunque no a sentarse con él en un gobierno. Hasta ahí, juego político con cintura y responsabilidad. Tanta que hasta Sánchez vio un trozo de cielo abierto, al levantar constancia de que había esperanzas, cosa esencial para él, que se postula como presidente.

En este momento, el obstáculo esencial a la formación de gobierno es C's, que dice ser de centro pero no quiere a Podemos "por activa ni por pasiva".  Iglesias, aun declarándose dispuesto a hablar con Rivera, mantiene el veto a su entrada en el gobierno. Público, la voz orgánica de Podemos, muestra su falta de perspicacia al sostener que Sánchez se empeña en un pacto “casi imposible” entre Podemos y C's, como si fuera un error. Falso. El error es mantener el veto a C's. Levántenlo. No pasa nada porque C's entre en un gobierno tripartito y Podemos debe mostrar la máxima disposición a llegar a acuerdos. Si alguien carga con el mochuelo de ser el responsable del bloqueo de la situación, que sea C's.

C's insiste en mantener a distancia a Podemos e invitar al PP a gobernar con el PSOE y ellos mismos. Es lógico. Está en su interés: un gobierno PP, PSOE, C's pondría al PSOE a merced de las políticas reaccionarias de los otros dos, las legitimaría y terminaría por hundir el histórico partido del original Pablo Iglesias. En cambio, al revés, un gobierno PSOE, Podemos, C's pondría a este último en minoría en un gobierno de izquierda, legitimaría a éste y permitiría sacar al país del marasmo en que encuentra después de cuatro años de desgobierno, expolio y ruina a manos de una asociación de presuntos malhechores.

Los argumentos de Rivera para bloquear todo acuerdo con Podemos son de tres clases. Considerémoslos.

1º) C's cuestiona la autenticidad de las concesiones de Iglesias por creer que son meramente tácticas, para evitar nuevas elecciones. Puede ser. ¿Y qué? Quizá sea cierto que Podemos tema elecciones nuevas. Yo las temería también si estuviera en su lugar. Y, sin embargo, a lo mejor salía beneficiado de ellas. Nunca se sabe. Por la misma razón decir que la negativa cerrada de C's también es táctica y trata de provocar elecciones nuevas porque piensa que le favorecerán. Y también es posible que esté equivocado y se dé una castaña.

2º) Podemos, dice C's, se empeña en referéndums de autedeterminación en todas partes. Está en su derecho. Pero que haya o no referéndums no depende de Podemos. Ni siquiera depende de Rivera y su partido por muy estupendos que se pongan. Esos referéndums, especialmente el catalán, dependen de los catalanes y estos siguen su marcha, diga Rivera lo que diga. Y hacen bien. Los independentistas ya han desconectado y en su momento plantearán la cuestión definitiva con un probable referéndum constituyente catalán y ya veremos qué hacen entonces el señor Rivera y el resto del nacionalismo español, PSOE incluido.

3º) Podemos no puede estar en un gobierno en que haya que tomar medidas de política económica en contra de la crisis porque tiene proclividades venezolanas y griegas. Es el mismo argumento, aunque algo menos demagógico, que maneja un editorial de El País, (Fe de errores) que parece redactado por la FAES. Podemos no puede estar en un gobierno que afronte la crisis y el periódico pide al PSOE -como lo hace C's- que se entienda con el PP. Es decir, que se entregue a la carcunda neofranquista para que el país siga gobernado por una banda de presuntos corruptos, neofranquistas y meapilas, pura herencia del caciquismo decimonónico ladrón.

En el fondo, lo que estos dos quieren, C's y El País, es que no haya gobierno de progreso, que no haya regeneración democrática, ni auditorias de la gestión de esta banda de sinvergüenzas, ni se deroguen sus tropelías legislativas, al amparo y abuso de su mayoría absoluta, la LOMCE, la Ley Mordaza, la reforma laboral, los privilegios de la Iglesia, etc.

Porque, ¿de dónde sacan estos dos linces que un gobierno tripartito en el que los miembros de Podemos estarían siempre en minoría frente al PSOE y C's, serían aquellos quienes impondrían su supuesto radicalismo (que tampoco es tanto) frente al conservadurismo del PSOE y el reaccionarismo de C's? Obviamente, de ningún sitio, porque es mentira.

Lo que quieren es un pacto de gobierno pero a su antojo, para legitimar el expolio y el desastre de los últimos cuatro años y que los responsables de la corrupción y este latrocinio monumental se vayan de rositas.

Y, por supuesto, que los catalanes no puedan moverse.

dimecres, 30 de març del 2016

Mañana, en la Universidad de Sevilla

Invitado por el Centro de Documentación Europea de la Universidad de Sevilla, mañana participará Palinuro en una interesante jornada sobre el tema de "Cataluña, España y la UE: perspectivas tras 30 años de la adhesión" junto a otros distinguidos colegas de los ámbitos del derecho internacional público, el derecho constitucional y la historia contemporánea. 

Festejamos el trigésimo aniversario de la adhesión de España a la UE. ¡Treinta años ya! Cuando tomamos conciencia de este dato solemos mirar hacia atrás y maravillarnos de cuánto ha cambiado España desde 1986. No solemos, sin embargo, reparar, en algo también muy curioso: la propia UE ha cambiado mucho más. En 1986, al ingresar España y Portugal, éramos 11 países. Ahora somos 28. Los tratados se han expandido. Todo en su interior ha cambiado. Schengen es una realidad. Y actualmente la Unión en su conjunto padece varias crisis de diversa naturaleza: la de los refugiados, la actitud del Reino Unido y la crisis mundial que ha afectado a la Unión. 

En el tema específico de Cataluña, que es el que justifica mi presencia en la jornada, lo trataré en perspectiva doble: a) desde el punto de vista europeo; y b) desde el español. Desde el punto de vista europeo hay tres ejemplos de alteraciones de fronteras de Estados europeos que podrían ilustrarnos (pero no nos ilustran porque no tienen nada que ver con la cuestión  catalana): 1º) la independencia de Argelia en 1962, que dejó al país norteafricano fuera de la UEE; 2º) la salida de Groenlandia en 1985 a raíz del referéndum de autonomía de 1983 frente a Dinamarca; y 3º) la incorporación de la República Democrática Alemana con motivo de la unificación alemana de 1991. Argelia y Groenlandia no son países estrictamente europeos y Alemania oriental, en lugar de separarse, se ha integrado. Por tanto, no hay precedentes y habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos, si una Cataluña independiente ha de acceder como un Estado nuevo, si España veta la adhesión, si Cataluña puede estar dentro del área del euro sin ser miembro de la UE, etc.

Desde el punto de vista español, el asunto se refiere, obviamente, a si los catalanes tienen o no derecho a decidir por su cuenta, o derecho de autodeterminación y qué tipo de derecho es ese derecho y si es o no un derecho en primer lugar. Me propongo hacer una triple consideración: en primer lugar, tomando pie en los últimos 10 años, considerando los avatares del Estatuto que aprobó el Parlament catalán en 2006, fue luego cepillado en el Congreso de los diputados, aprobado por mayoría en referéndum en Cataluña y finalmente desmochado por la célebre sentencia del Tribunal Constitucional de 2010. En segundo lugar si son o no de aplicación a la situación catalana actual los antecedentes de los dos referéndums de autodeterminación de Quebec en los años de 1980 y el de Escocia en 2014. Y en tercer lugar, las perspectivas que se abren a la hoja de ruta del gobierno independentista catalán con un mandato para declarar la independenia en dieciocho meses y cuáles pueden ser las consecuencias para España. 

La jornada (día completo, pues son exposiciones de los ponentes de 10 a 12 de la mañana y mesa redonda de los mismos por la tarde) tendrá lugar en el salón de actos de la Facultad de Ciencias del Trabajo de la Universidad de Sevilla, calle de la Enramadilla 18-20, Sevilla, 41018. La entrada es libre.

Allí nos vemos.

Hacer cuentas trae cuenta

Los números mandan y

202 > 161 > 130

Repasemos los tres gobiernos posibles con los números en la mano y recordando algo:

1ª prioridad: que esta banda de corruptos y sinvergüenzas deje de gobernar.

2ª prioridad: evitar elecciones nuevas.

OPCIONES

1º: 130. 

Fracasada. Repetirla carece de sentido.

--------------------------------------------------------------------------------------------

2º: 161.

Requiere que cedan C’s y PSOE. Poco probable, no elegante y desleal por parte PSOE.

Si PSOE cediera y C’s estuviera en contra solo podría mantenerse con apoyo de los independentistas, lo que requeriría que el PSOE cediera también en el referéndum.

Si lo hace, Palinuro, encantado. Pero serían dos concesiones del PSOE y ninguna de Podemos ya que la ausencia de Iglesias no es una concesión de partido, sino personal y no cuenta. 

Tendría dos oposiciones: la de C's y la del PSOE baronil. Menos probable que la tercera.

-----------------------------------------------------------------------------------------------

3º: 202. 

Cede PSOE al incluir a Podemos. 
Cede C’s en cuanto a presencia de Podemos.
Cede Podemos en cuanto a presencia de C’s
Cede Podemos en el referéndum. Dos cesiones. A cambio, Pablo Iglesias debe ser vicepresidente.
Es la opción más segura, la más inclusiva y civilizada.
El encaje de IU y CC puede negociarse luego. No es necesario, pero sí respetuoso.
La banda dejará el gobierno ipso facto.
Quien se oponga a esta opción cargará con el sambenito de haber provocado elecciones.

-------------------------------------------------------------------------------------------

Queda fuera cuestión del referéndum. Fuera quiere decir fuera. Sin mención. Podemos tiene derecho a seguir abogando por él y C's y PSOE a seguir oponiéndose. Muy correcta la propuesta de Podemos de un tándem negociador con Iceta y Domenech, aunque las expectativas no sean muy halagüeñas 

Los independentistas y quienes apoyamos el derecho de autodeterminación de los catalanes ya sabemos que no cabe esperar nada de ningún gobierno español. Lo que haya de ser en Cataluña depende de lo que hagan los propios catalanes. La situación de desgobierno en España los beneficiaba, pero quizá no tanto como puede parecer.

La banda de ladrones

Todo el mundo recuerda a Aznar diciendo en 2010 con su habitual y ridícula prosopopeya que el PP es incompatible con la corrupción. Asimismo se recuerda cómo, al estallar el caso Gürtel, Rajoy se rodeó de la guardia pretoriana del PP para afirmar que aquello no era una trama del PP sino una trama contra el PP.

Hoy es obvio que ambos políticos mentían, lo cual no es nuevo porque es lo que hacen habitualmente. Mentían porque el PP no es otra cosa que pura corrupción y pura trama de corruptos en todos los órdenes y niveles de la administración, en todas partes, en cualesquiera cargos públicos. Esta asociación de presuntos malhechores no hace otra cosa que robar. Y Aznar y Rajoy han sido siempre los primeros en saberlo. Desde sus puros comienzos el PP es una asociación de presuntos maleantes.

Suma y sigue. Ahora salen a la luz los criterios por los que la Alcaldesa Botella del PP repartía los dineros municipales en publicidad entre los diferentes medios, radios y periódicos. Como se ve en el cuadro adjunto, eran inversamente proporcionales a la difusión del periódico y directamente proporcionales al grado de abyección y lameculismo del medio. Resultaba así que La Razón, un periódico que no lee nadie y está al servicio directo del PP recibía diez veces más fondos que El País que, sin ser ninguna maravilla, se parece más a un periódico (La Razón es un tebeo) y tiene un millón y pico más lectores que el otro.

¿Con qué criterio repartía pues los dineros municipales Botella? Con el del amiguismo, el enchufismo y el servilismo del medio. Nada más.

Y esos dineros que Botella repartía entre sus lacayos, ¿eran de su bolsillo? En modo alguno. Eran dineros públicos, procedentes de los impuestos que pagamos todos los madrileños.  

O sea, el régimen de ayudas a la prensa de Botella era ruinoso, si no directamente fraudulento porque no se justificaba por ningún criterio de productividad de ningún tipo sino de puro enchufismo y servilismo. Dicho de otro modo, por cada mendacidad o embuste que Marhuenda soltaba en su periódico, se embolsaba un dinero que no le correspondía, entregado por una política, Botella, que faltaba clamorosamente a su deber de gestión pública eficaz y honrada.

Ignoro cómo llaman ustedes a esto. Yo lo llamo atropello, granujería, cosas de sinvergüenzas.  Y pido que se lleve la gestión de esta señora a los tribunales porque tiene toda la pinta de ser pura malversación de fondos públicos.

Y, como este, espero que se lleven las demas tropelías cometidas por esta banda de facinerosos.

Por eso es imprescindible que a día de hoy, miércoles, la izquierda llegue de una vez a un acuerdo de gobierno para empezar a barrer la basura, la podredumbre, la ñorda infinita que esta gente ha dejado en todas las instituciones del país. 

Hay que seguir levantando alfombras, explicar a la gente documentadamente cómo ha estado robándonos a todos durante años una partida de ladrones meapilas y mucho ejjjpañoles.

Sería imperdonable que por sus narcisismos los dirigentes de la izquierda fueran incapaces de llegar a un acuerdo que libere al país de esta plaga de sinvergüenzas.

El mal y la belleza: Salomé

En el Centro Cultural de la Villa de Madrid, la Salomé de Oscar Wilde, dirigida por Jaime Chávarri e interpretada por Victoria Vera. Una obra de teatro tan rodeada de leyenda y fascinación como la fascinación y leyenda de que trata la obra.

La primera pista está en el cartel anunciador, que es una acuarela del simbolista Gustave Moreau, La aparición, y representa a Salomé deslumbrada por la aparición de la cabeza del Bautista casi como un dios solar. Un tema que repetiría luego en composición muy similar Aubrey Beardsley en su ilustración de 1894, J'ai baisé ta bouche, Iokanaan. Moreau había tratado el tema de Salomé varias veces. Venía siendo frecuente en la pintura desde el Renacimiento por las mismas claroscuras razones por las que lo fue el otro paralelo de Judith y Holofernes. Eso de la mujer cortando o haciendo cortar la cabeza a un hombre insinúa freudianamente la tendencia a la emasculación. En Moreau es un verdadero ciclo (con acuarelas, óleos y dos docenas de dibujos) que concentra en él toda la fascinación decadentista con la mujer fatal, el deseo, la muerte y la perdición de los hombres. Muy probablemente fue la inspiración para uno de los Tres cuentos de Flaubert, Salomé, publicado por aquellos años de 1877. Ambos, a su vez, decisivos, sobre todo Moreau, en A Rebours (1884) (A contracorriente) de Joris Karl Huysmans, cuyo capítulo V está dedicado a las reflexiones del antihéroe protagonista, Jean Des Esseintes, sobre dos de las obras de Moreau. A Rebours, biblia del decadentismo fin de siècle, influyó mucho en Oscar Wilde. No se menciona expresamente pero hay acuerdo general en que se trata del famoso "libro amarillo" que Lord Henry regala a su amigo Dorian Gray (en cierto modo, versión inglesa de Des Esseintes) y con el que ocasiona su perdición, porque es la "novela más perversa" de la época.

La leyenda trae causa de los tres evangelios sinópticos, coincidentes en el relato, especialmente en lo que no se dice: el nombre de la hija de Herodías. Ni Lucas ni Mateo ni Marcos, que es quien más en extenso trata el tema, mencionan el nombre de Salomé. El primero en hacerlo es Flavio Josefo, en sus Antigüedades judías. Pero Josefo, que da cuenta de la Salomé real (dos veces casada y con descendencia) no la vincula con Juan el Bautista y es precisamente esta vinculación, que sí está en los Evangelios, la que da la pimienta a la historia: Salomé, hija de Herodías, baila para Herodes quien, ebrio de concupiscencia, le promete lo que le pida y Salomé pide la cabeza del Bautista por deseo expreso de su madre, harta de que la voz que clama en el desierto le eche en cara su vida incestuosa.

Wilde escribió la obra en francés 1892 y la puso en escena en París en 1896 Sarah Bernhardt, hasta su prohibición casi inmediata. De aquí arranca el tópico de que la escribió para ella, cosa que el mismo Wilde desmintió en carta a la prensa francesa. Traducida al inglés por su amante Lord Alfred Douglas, para desesperación del propio Wilde a quien la versión pareció detestable, cuando se estrenó en Francia, el autor cumplía condena en Reading por indecencia pública, una típica estupidez legal de la época. No pudo estrenarla en Londres, dada la prohibición de papeles bíblicos en el teatro inglés y esta especie de maldición prohibitiva prosiguió en sus adaptaciones. La versión para ópera de Strauss (1905) fue prohibida en Viena en donde iba a estrenarla Mahler.

¿Qué tiene la pieza que tan maldita la hace? Pues, en principio, un típico giro de amoralidad (aunque estoy tentado de escribir moralidad porque es lo que pienso) de Wilde. La obra se aparta de la interpretación al uso: no es Herodías quien induce a Salomé a bailar para vengarse del Bautista. Es la propia Salomé quien, incendiada de pasión por el primo de Cristo, requiere su cabeza para besar su boca y saciar su deseo: "Besaré tu boca, Iokanaan". Incidentalmente, la traslación del nombre de Johannes a Iokanaan, busca el mismo giro estético: la orientalización o exotización de la historia. Como el hecho de periodificarla con la tonalidad de la luna: blanca al principio, roja cuando comienzan las muertes y negra al final. Para acabar de situar Salomé en el pináculo del decadentismo maudit, el ilustrador fue el genial Aubrey Bearsdley, director por entonces de la revista de arte y literatura The Yellow Book y quien, por cierto, detestaba a Wilde.

La versión de Jaime Chávarri, aceptable y la interpretación, en conjunto, decorosa. El Bautista no acaba de ser convincente en el punto central de la obra: el ardiente misticismo y el amor carnal que inspira, la perversión última del cristianismo: el sacrilegio de atraer a Dios o a su enviado al pecado. Claro que ahí falla también la protagonista. Victoria Vera es buena actriz, con mucho dominio y recursos, pero quizá no sea la mejor idea poner a representar un papel de intensa carga erótica a una mujer de sesenta años con el climax de la danza de los siete velos. Porque esta es la consecuencia del inesperado giro de la historia en Wilde: la versión convencional en la que el Bautista es, en realidad, la voz de la conciencia que atormenta a Herodías deja paso a otra mucho más audaz (aunque, en el fondo, vacía) en la que es la crueldad de la belleza y la juventud la que arrasa con todo y lleva el sacrilegio y el decadentismo al extremo de la necrofilia. 

dimarts, 29 de març del 2016

Plus ultra

Poca originalidad mostrará hoy quien se moleste en decir que los medios de comunicación mandan mucho en nuestra sociedad. Mandan tanto que no solamente dan cuenta de la realidad, sino que la adelantan; no solo narran lo que hay sino lo que vendrá. En este caso, los amigos íntimos de Susana Díaz deslizan en oídos sedientos de novedades la especie de que la presidenta de Andalucía ya tiene tomada la decisión de reñir la secretaría general del PSOE a Pedro Sánchez. No es una realidad sino una premonición, quizá un globo sonda, como suelen llamarlo los expertos en comunicación política. He aquí, quizá, el inicio del proceso (o su continuación, según se mire) de fabricación de una líder.

Casi simultáneamente a esta especie de vaticinio se produce la noticia de que el PSOE aplaza su congreso a después de las nuevas elecciones de junio que ya todo el mundo parece ver como inevitables. Al peón de blancas que avanza Díaz responde Sánchez avanzando el de negras. Pausa. Habrá que ver qué sucede ahora. La intención de ambos está clara y el resto de los medios deduce que, al aplazar el congreso, Sánchez aplaza el duelo. Entre tanto pueden pasar más cosas, por ejemplo, aunque maraville solo el pensarlo, que se constituya gobierno de aquí a unos días. ¿Quién sabe? Los designios del Señor son inescrutables y los de sus criaturas más inescrutables, hasta para su Creador.

En todo caso, si Díaz quiere "dar el salto", sus razones tendrá. Muchos objetan que lleva un año de presidenta en Andalucía y no ha hecho aún gran cosa. Pero eso no significa nada. Si quiere puede justificarse diciendo eso tan habitual de que ha hecho mucho pero ha comunicado poco. Yéndose de Andalucía a un nivel superior seguirá pudiendo hacer mucho por su tierra; quizá más que quedándose en ella. La angostura del mandato autonómico es una de las quejas más habituales de las CCAA que quieren ser Estados. Es una aplicación de un principio universal de la lógica según el cual "donde cabe lo más, cabe lo menos" y lo contrario no es necesariamente cierto.

Díaz está en su perfecto derecho de postularse y los observadores en su deber de no enjuiciarla más que en los términos pragmáticos de su racionalidad instrumental o adecuación de los medios a los fines. Palinuro confiesa tenerlo fácil porque carece de preferencias entre las dos posibles opciones, Sánchez/Díaz. Las dos a su juicio dejan mucho que desear. Díaz viene rodeada de una fama de folklórica andaluza que chirría al norte de Despeñaperros, cuando no levanta sarpullidos. Eso de los cirios en las procesiones, los pasos, los nazarenos, las vírgenes, el redoble del tambor y los caballeros legionarios pone los pelos de punta. Excusado decir el refuerzo esencialista y tradicional a la doctrina del PP y Wert en concreto de que las corridas de toros son patrimonio cultural subvencionable. Sus ideas sobre la organización territorial del Estado caben en un rebenque. Del resto, si hay resto, similares cuitas.

Pero, por otro lado, Sánchez, que se estrenó con una bandera rojigualda de aznarinas dimensiones, impuso como consigna de la campaña ¡Más España! y homenajeó a Lázaro Cárdenas en México D.F. con una ofrenda floral con los citados colores, parte de una concepción mononacional de España tan cerrada como la del PP. O más, quizá por necesidad de supuesto converso ya que, al fin y al cabo, estos socialistas tienen sus puntas de federalazos. Referéndum, no. Es ilegal. Si quieren ustedes, reformamos la Constitución (dentro de un orden) para que se sientan ustedes a gusto y no se aflijan porque no les dejamos ser lo que quieren ustedes ser. Así, me temo, no vamos a ir muy lejos.

Se entiende la indiferencia de Palinuro. Si hay pugna, que gane el/la mejor.  

--------------------------------------------------

Leo que el okupa de La Moncloa, gobernante en rebeldía, comparecerá en sede parlamentaria a informar sobre el Consejo europeo. Pues con lo soberbio que es este hombre, auguro una comparecencia sonada. Seguro que trata a Sánchez de Ruiz.

Hamelin está en la otra dirección

Javier López (2015) Más allá de Podemos. Veinte cartas de un inconformista frente a los cantos de sirena del populismo Sekotia: Madrid.
----------------------------------------------------------------
El mejor modo de resistir la tentación de escribir un libro sobre Podemos es leer los que escriben los demás. Que son muchos, voto a tal. No sé si habrá algún otro fenómeno social comparable que haya hecho correr más tinta o acumular más bits. Quien más, quien menos se ha sentido obligado a dar su opinión sobre la formación morada y con un porcentaje amplísimo de visiones críticas y/o negativas. Dado, además, el eclecticismo que se adjudica a sus promotores en cuanto a su querencia por la izquierda o la derecha, los ataques les vienen por la derecha o la izquierda con admirable simetría. He leído repasos más o menos duros desde enfoques anarquistas, espontaneístas, marxistas, comunistas, socialistas, liberales (genuinos), liberales (de pacotilla neo) y conservadores. Me faltaba leer uno también conservador desde una perspectiva próxima al falangismo y este es un buen ejemplo, por cierto escrito en el acrisolado estilo epistolar. 

Resulta curioso porque el ensayo de Javier López parte de dos juicios negativos de Podemos que no sé si dicen tanto sobre el fenómeno en análisis como sobre el analista. Sostiene este ya desde el comienzo que Podemos es una pseudorrevolución propia de una "izquierda fascistizada" (p. 23). Cuando se dice de alguien que es "pseudo"algo viene a decirse que el algo (en este caso la revolución) es bueno y que lo malo es que sea "pseudo", o sea, falsificado. La calificación de "izquierda fascistizada" se entiende, pero más bien intuitivamente. Ignoro qué relación guarde el sintagma con la idea poulantziana de la "fascistización" del capitalismo tardío, pero alguna tendrá.

Desde una perspectiva conservadora inclusiva que parece admitir postulados tradicionales con criterios innovadores, cierto nacionalcatoliocismo con un neoliberalismo al uso, Javier López señala lo que a su juicio son las insuficiencias de Podemos y, al paso, contrapone sus propuestas.

La democracia podemista es insuficiente y, si hay que regenerar esta  "monarquía republicana, sin pompa ni corte y especialmente amable con el socialismo emergente" (p. 32), lo oportuno es reformar el sistema electoral e implantar la circunscripción uninominal (p. 43), lo cual saneará el sistema político a base de debilitar a los partidos políticos que deben quedar reducidos a meros instrumentos del "sentir popular, nada más" (p. 45). Simpatizo poco con la idea de achicar y/o reprimir y/o suprimir los partidos políticos. Detrás suele haber un intento de menoscabar la democracia que, lo siento, pero sin partidos políticos no existe. Ignoro de donde saca el autor la idea de que la circunscripción uninominal rompe la disciplina de voto (p. 44). En unos casos (EEUU), sí; en otros (Gran Bretaña), no. Igualmente, la idea de incluir en el Congreso a los representantes de las regiones, que ahora están en el Senado (p. 46) resulta sorprendente porque ya están (eso son las minorías nacionalistas catalana, vasca, valencian, gallega, canaria) y porque, además, en principio, no debieran estar según la teoría ya que el Congreso es una cámara de representación personal frente al Senado que lo es territorial.

En el ámbito económico, López parece propugnar un sindicalismo "genuino" (p. 56) que suena a falangismo y por tanto algo todavía más visto y manoseado que las tendencias que atribuye a Podemos. Por si hubiera alguna duda, acude al bueno de Salvador de Madariaga para hacer aceptable una sociedad ordenada de forma "orgánica" (p. 62). Madariaga traía su liberalismo de la tradición inglesa, en donde estas bromas no levantan suspicacias. Por estos pagos, cuando alguien habla de la concepción "orgánica" de la sociedad es imposible no recordar la democracia orgánica del Caudillo. A propósito de este, López -que cuestiona el paralelismo capitalismo = derechas y anticapitalismo = izquierdas, con el fin obvio de dar una colleja a Podemos- incurre en ese curioso calembour, al que tan aficionados son los discípulos de Pedro Schwarzt (por ejemplo, Esperanza Aguirre) de acusar a Franco de socialista porque diz que era muy intervencionista (p. 69). En fin...

En un terreno filosófico, López consigue relacionar el personalismo de un anarquista singular como Heleno Saña con el pensamiento de  Primo de Rivera (p. 85). Desde luego la Falange y el anarcosindicalismo compartieron algo más que los colores de la bandera, pero no sé si tanto. Se entiende su crítica al psedurrevolucionarismo de Podemos al contraponer el valor de la persona a las proclamas a favor del consumismo, pues la mortadela no es revolucionaria, lo cual tiene gracia. Pero enseguida se vuelve a lo trascendental y se aplaude a un izquierdista como Correa, de Ecuador (p. 91) y otros caudillos latinamericanos por su brava defensa de la vida frente al aborto.  Lo que no sé es si interpreta correctamente a los de Podemos que, en este espinoso asunto, son más escurridizos que de costumbre, como sabe todo el que escuchó decir a Carolina Bescansa que el aborto "no es una prioridad en nuestra sociedad". Este crítico, que es un correoso feminista, sí cree que es una prioridad absoluta porque están en juego los derechos de las mujeres.

Aunque Podemos no lo sepa, entiendo que señala López, querer a España también es de izquierdas (p. 101). En esto el autor se da la mano con mi amigo Miguel Candelas, autor de un  apreciable libro con el provocador título de Cómo gritar ¡viva España! desde la izquierda. No tengo opinión definida sobre este asunto. En mi ya larga experiencia he escuchado a tanto sinvergüenza vendepatrias gritar ¡viva España! mientras la humilla que me tomo la sugerencia a beneficio de inventario.

López cree que hay un más allá de Podemos. Yo también. Estos muchachos le parecen muy intervencionistas (p. 116). No sé si tanto como Franco. A mí me parecen la ambigüedad personificada. Para él la "izquierda fascistizada" es un híbrido entre el fascismo y el comunismo (p. 120) y hasta una "socialdemocracia fascistizada" (p. 132). Regreso al comienzo. No estoy muy seguro de si ese "fascistizado" tiene que ver con la "fascistización" que los poulantzianos creían descubrir en nuestro tiempo. Supongo que algo habría ayudado a esclarecer el concepto un análisis del populismo del que se habla en la portada del libro. 

La pena es que solo aparece en la portada.

dilluns, 28 de març del 2016

A seguir mareando la perdiz

Ignoro hasta qué punto es cierta la información de El País, según la cual Los ‘errejonistas’ reprueban las formas de Iglesias con el PSOE. Y lo ignoro porque, en contra de sus soflamas de transparencia, información, aires nuevos, etc, Podemos es un partido tan hermético, reacio a dar información y proclive a mentir sobre su situación interna como todos los demás. A quien hace apenas diez días se le ocurriera decir que había lío interno en el partido morado le saltaban encima hordas de fanáticos llamándolo de todo. Comportamientos tan viejos y aburridos como los de las sectas de los derviches que, si se explican cuando los sectarios son jóvenes, resultan patéticos cuando son entrados en años. De ser cierta la información de El País no tengo más remedio que aplaudir el punto de vista de Errejón por creer, en parte como él, que es absurdo y un error decir que se busca una alianza de gobierno (o de lo que sea) con un partido al que se insulta, se difama y se criminaliza.

Sin embargo, me separaría de la interpretación errejónica en el calificativo empleado y que solo puedo atribuir a un exceso de buena fe por parte del segundo a bordo. No creo que esa contradicción de pretender una alianza con alguien a quien se difama sea solo un error. Creo que es algo deliberado: se trata de simular que se busca una alianza al tiempo que se hace imposible a base de desplantes e insultos con el fin de que haya una ruptura pero que no parezca producida por el insultador. El origen de este burdo maquiavelismo está en la influencia que Anguita y su delirio del sorpasso ejercen sobre Podemos y que llevará a este a la destrucción, como llevó a IU. Si alguien lo duda, que explique cómo puede decir Iglesias que Anguita es su referente intelectual. Anguita. Intelectual. Dicho se está todo.

Palinuro ya analizó ayer esa situación de "debilidad" de los partidos, aunque con otro nombre. Sobre todo en los de la izquierda (la izquierda cavilosa), así que aquí bastará con dos o tres precisiones más. La repetición de elecciones será un desastre para los partidos de izquierda pero, para Podemos, será un suicidio.  Es muy poco probable que las "confluencias" vuelvan al carné de baile con Podemos en Galicia o Valencia y en Barcelona, la alcaldesa, que cada vez se parece más a la ogresa de Hansel y Gretel, los fagocitará a todos en su nuevo partido para su mayor gloria. Pero lo que más amenaza los destinos de Podemos es la repetición en su seno del síndrome fraccionalista de IU a cargo de las cohortes de tránsfugas y espabilados de aquella federación que abandonaron el barco a la deriva para asegurarse un buen puesto en la flamante opción ganadora que ya no es flamante, no será ganadora y puede que ni opción. 

Como suele suceder en España, es posible que el partido morado sortee este aciago destino, no por sus méritos, sino por los deméritos ajenos, no por sus virtudes sino por los vicios de los demás. El PSOE en concreto parece aun más decidido a hacerse el harakiri que su posible socio. Pedro Sánchez, el hombre de Rubalcaba en la dirección, no tiene un  solo acierto ni cuando es físicamente imposible equivocarse. Aun así podría decir algo que sonara a una izquierda verosímil siempre que el auditorio ponga buena voluntad. Pero si, como parece que está fraguándose, le riñe el puesto Susana Díaz, a quien nadie se toma en serio fuera de Andalucía, no se me alcanza cómo conseguirá el PSOE obtener algún voto al norte de Despeñaperros. Porque ya fastidia que Sánchez venga envuelto en la bandera borbónica dando gritos de "¡más España!" y no reconociendo un miserable derecho de autodeterminación a los catalanes. Pero se ponen los pelos de punta cuando se piensa que a esto puede añadirse la figura de esta señora portando en andas la figura del Cristo del camino pino o aplaudiendo a algún diestro con una oreja sangrienta de toro en cada mano.

Añádase a ello la reaparición de Rubalcaba, el hombre cuya actitud reaccionaria, centralista y monárquica llevó al PSOE a su mayor derrota electoral en la segunda restauración. Reaparición que señala ya la hoja de ruta de la entrega del PSOE a la derecha neofranquista: la gran coalición bajo mando del Sobresueldos. 

Todo por la patria.

Lo pequeño puede no ser hermoso, pero es útil

En la plaza de Felipe II de Madrid, al final de Goya, en el límite de la zona nacional, cabe el megalito de Dalí, la Caixa Forum ha organizado un curiosa exposición en cómodas y luminosas carpas bajo el título de Héroes ocultos.  Está dedicada a los objetos cotidianos, los humildes "inventos geniales" que nos facilitan la vida sin que normalmente reparemos en cuánto y sin que rindamos tributo por ellos a quienes los idearon. Y eso cuando los ideó alguien y no son productos del ingenio humano que se pierden en un pasado remoto, como el abanico, por ejemplo, tan típico de la cultura española y que fue traído de oriente por los navegantes portugueses. O el modesto y orondo botijo, que ha refrescado los gaznates resecos de millones de personas, sobre todo en la cuenca del Mediterráno. O el sacacorchos, llave misma de la verdad más profunda en la medida en que esta está en el vino. 

Los demás objetos que aquí se exhiben y se comentan con lujo de detalles e informaciones curiosas, tienen todos inventor con nombre y apellidos. Realmente es una idea estupenda y un sitio magnífico para llevar a nuestros hijos con edades comprendidas entre los tres y los ochenta años. Porque todos aprendemos algo. En especial, aprendemos a mirar las cosas de otro modo, a no despreciar atolondradamente los objetos comunes que muchas veces son resultado de largos y pacientes trabajos, tesón, gran  fuerza de voluntad y un deseo genuino de ser útiles a los demás. Aprendemos modestia. Ya quisiéramos algunos escribas, que pretendemos causar el pasmo de los contemporáneos con nuestras bobadas haber sido capaces de inventar algo tan necesario, conveniente y empleado por millones de personas como la pinza para tender la ropa. Y si se piensa que exagero, que se intente colgar la colada húmeda en un alambre o cuerda en un día de viento. O atrévase alguien a imaginar cómo era el mundo cuando no había lapiceros o bolígrafos y solo era posible dejar nuestras tonterías por escrito merced a las plumas de ganso.

Casi todos estos inventos tienen el reconocimiento que merecen por acuerdo general. Basta pensar en la bombilla eléctrica, que ha iluminado las noches de la humanidad entera y desterrado los hachones, los candiles, candelabros, velas, palmatorias u otros utensilios de luces titiladoras que alimentaban relatos fantásticos y ensuciaban las paredes y techos. Los clips o los archivadores han permitido que las oficinas y administraciones públicas o privadas no sean ya el reino del desorden caótico sino el del desorden racional. Los legos han prolongado la feliz inocencia de la infancia hasta el umbral de la vejez y, sin exageración alguna, los envasados al vacío han hecho posibles viajes interminables a zonas remotas del planeta en donde era posible arriesgarse gracias a otro invento genial, el mosquetón.

Otras veces, estos objetos han cambiado pautas, usos y costumbres con consecuencias insospechadas. La hispánica fregona ha transferido el nombre común de la mujer que frotaba arrodillada con una bayeta al objeto mismo y hasta ha facilitado que los hombres pierdan el miedo y la repugnancia a limpiar el suelo que ensucian. Las cerillas que, por cierto, ya no tienen cera, fueron elementos esenciales en el establecimiento de relaciones eróticas que asimismo cambiaron mucho con el invento del velcro y, sobre todo, la rápida cremallera. Y ¿qué decir del paraguas, que ha alcanzado categoría de protagonista por derecho propio en varias artes como la pintura o el cine? ¿Y de los "post it" que nos permiten  no perdernos en las lecturas de las procelosas novelas contemporáneas?

Conclusión: merece la pena darse una vuelta por el lugar. Sale uno deseando que se le encienda una bombilla interior con una idea que pueda ser tan inmortal como cualquiera de las que se materializan en estas carpas.