Invitado por el Centro de Documentación Europea de la Universidad de Sevilla, mañana participará Palinuro en una interesante jornada sobre el tema de "Cataluña, España y la UE: perspectivas tras 30 años de la adhesión" junto a otros distinguidos colegas de los ámbitos del derecho internacional público, el derecho constitucional y la historia contemporánea.
Festejamos el trigésimo aniversario de la adhesión de España a la UE. ¡Treinta años ya! Cuando tomamos conciencia de este dato solemos mirar hacia atrás y maravillarnos de cuánto ha cambiado España desde 1986. No solemos, sin embargo, reparar, en algo también muy curioso: la propia UE ha cambiado mucho más. En 1986, al ingresar España y Portugal, éramos 11 países. Ahora somos 28. Los tratados se han expandido. Todo en su interior ha cambiado. Schengen es una realidad. Y actualmente la Unión en su conjunto padece varias crisis de diversa naturaleza: la de los refugiados, la actitud del Reino Unido y la crisis mundial que ha afectado a la Unión.
En el tema específico de Cataluña, que es el que justifica mi presencia en la jornada, lo trataré en perspectiva doble: a) desde el punto de vista europeo; y b) desde el español. Desde el punto de vista europeo hay tres ejemplos de alteraciones de fronteras de Estados europeos que podrían ilustrarnos (pero no nos ilustran porque no tienen nada que ver con la cuestión catalana): 1º) la independencia de Argelia en 1962, que dejó al país norteafricano fuera de la UEE; 2º) la salida de Groenlandia en 1985 a raíz del referéndum de autonomía de 1983 frente a Dinamarca; y 3º) la incorporación de la República Democrática Alemana con motivo de la unificación alemana de 1991. Argelia y Groenlandia no son países estrictamente europeos y Alemania oriental, en lugar de separarse, se ha integrado. Por tanto, no hay precedentes y habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos, si una Cataluña independiente ha de acceder como un Estado nuevo, si España veta la adhesión, si Cataluña puede estar dentro del área del euro sin ser miembro de la UE, etc.
Desde el punto de vista español, el asunto se refiere, obviamente, a si los catalanes tienen o no derecho a decidir por su cuenta, o derecho de autodeterminación y qué tipo de derecho es ese derecho y si es o no un derecho en primer lugar. Me propongo hacer una triple consideración: en primer lugar, tomando pie en los últimos 10 años, considerando los avatares del Estatuto que aprobó el Parlament catalán en 2006, fue luego cepillado en el Congreso de los diputados, aprobado por mayoría en referéndum en Cataluña y finalmente desmochado por la célebre sentencia del Tribunal Constitucional de 2010. En segundo lugar si son o no de aplicación a la situación catalana actual los antecedentes de los dos referéndums de autodeterminación de Quebec en los años de 1980 y el de Escocia en 2014. Y en tercer lugar, las perspectivas que se abren a la hoja de ruta del gobierno independentista catalán con un mandato para declarar la independenia en dieciocho meses y cuáles pueden ser las consecuencias para España.
La jornada (día completo, pues son exposiciones de los ponentes de 10 a 12 de la mañana y mesa redonda de los mismos por la tarde) tendrá lugar en el salón de actos de la Facultad de Ciencias del Trabajo de la Universidad de Sevilla, calle de la Enramadilla 18-20, Sevilla, 41018. La entrada es libre.
Allí nos vemos.