dissabte, 4 de juliol del 2009

La causa de la crisis.

Este incansable propagandista de las agresivas simplezas neocons prosigue su campaña de esclarecimiento de las muchedumbres y explicación de los más complejos fenómenos. Bien sea en la sede de la FAES, el lugar en el que se elabora el grueso de la doctrina, bien en actos de presentación de su último libro (ya reseñado en Palinuro en una entrada titulada la neurosis providencialista) cuyo título, España puede salir de la crisis ya revela su intencionalidad de charlatanería, bien en entrevistas en los más diversos medios, el hombre que intentó engañar a un país entero repite y repite los argumentos liberales sobre la crisis. Y como su actividad se intensifica y su escasa capacidad para incorporarse argumentos nuevos desaparece, esos argumentos son cada vez más irrisorios. Tómese como ejemplo el que esgrime para dar cuenta de la crisis mundial. El fracaso, dice, no ha venido del libre mercado ni en primer lugar de la codicia y malas prácticas de los banqueros sino que, al contrario, la responsabilidad recae, cómo no, sobre los bancos centrales y los Estados, que no han sabido funcionar ni detectar a tiempo dichas prácticas.

Es un ejemplo estupendo de razonamiento de secta neoliberal suyo presupuesto esencial es que el auditorio está compuesto por verdaderos imbéciles. Es posible que el Estado y las instituciones públicas hayan funcionado mal (¿qué otra cosa va a decir un neoliberal?) pero ¿quién lo puso en esa lamentable situación después de veinte años de políticas neoconservadoras basadas en la estulticia reaganiana de que "el Estado no es la solución sino parte del problema". Pero sobre todo y lo que revela que esta forma de "razonar" busca públicos de escasas luces es el manifiesto despropósito del enunciado porque si el problema estuvo en que fallaron los mecanismos de detección, la pregunta evidente sería: de detección ¿de qué? Es obvio: de los comportamientos delirantes y presuntamente delictivos que llevaron al sistema financiero al colapso que el señor Aznar se empeña en ocultar, atribuyéndolos a los más pintorescos planes.

Inasequible al desaliento su recetario es una ración doble del neoliberalismo que ha fracasado estrepitosamente en el mundo entero: más privatizaciones, desregulaciones reforma del mercado laboral, contención del gasto público, equilibrio presupuestario. Dejando a un lado que esta sarta de tópicos es la que ha producido el desastre financiero en el que nos encontramos, el señor Aznar no defrauda y en una entrevista concedida a Libertad Digital TV además del credo neoliberal, le sale la vena autoritaria, centralista, loca por revertir el curso de la descentralización política en España y sostiene que esas reformas deben hacerse con criterios económicos y no territoriales; estos le sacan los tics fascistas a este antiguo falangista que llama a las CCAA los "reinos de Taifas", cómo no.

(La imagen es una foto de Pontificia Universidad Católica de Chile, bajo licencia de Creative Commons).

Día del orgullo gay.

Pues nada, que lo pasen Vds. muy bien en su día. Hay que ver qué vistosas son sus manifestaciones públicas, con tanta gente semidesnuda, tanta referencia a la sexualidad y música y pitorreo. Son Vds. la prueba viviente de cuánto ha avanzado la especie humana, al menos la especie humana que habita en lo que se llama "Occidente". Uno no se plantea siquiera que pueda haber desfiles de esta naturaleza por las calles de Teherán, gane Ahmadinejad o Musaví, ni en El Cairo, ni en Pekín. Tanto es así que cabe definir "Occidente" como aquel lugar del planeta en que mayor libertad sexual hay. Así que, en buena medida, los amantes de la libertad en todos sus registros, tenemos una deuda con estas colectividades de gays, lesbianas, bi y transexuales.

Este año, según se ve en el cartel lo dedican a un asunto incendiario, como todo lo que tocan, que es el de la sexualidad en la adolescencia. Entiendo que quieren acabar con los "armarios" en los centros educativos. Siendo así que la adolescencia es una época de turbulencias, tratar con ella con este criterio equivale a ir pidiendo bronca. Ya me parece escuchar a los sectores bien pensantes de la sociedad diciendo: además de abortar quieren que nuestras menores se hagan lesbianas".

Más específicamente, la parte lésbica de la organización sale pidiendo visibilidad, esto es la condición de "ser visible" porque esta gente ha estado durante siglos, desde siempre, en realidad, sometidos a algo peor que el secuestro al que se pone fin con el derecho de habeas corpus pues en su caso no existían, no tenían ni "cuerpo", pues no podían decir cómo era.

Y en esto de los transexuales se puede ver un margen grande no solo para una restitución de siglos, sino para compartir un mundo con mayores libertades. Porque, la verdad, un cambio de sexo es mucho más radical y de previsibles mayores consecuencias que un cambio de ideología política o, incluso, de religión. Tiene algo de gran aventura en la vida.

En resumen, me parece estupenda la celebración del día del orgullo gay. En lo único en que discrepo es en ese contencioso que ha comenzado ya a emerger con los vecinos de Chueca que se quejan del barullo. Ahí mi ánimo se divide en dos: apoyo el orgullo gay pero detesto a la gente ruidosa que molesta a los demás. Ese empeño que tiene la organización de FEGLT de celebrar sus festivales en la plaza de Chueca no puede mantenerse si ha de ser en contra de la voluntad de los residentes. O el festival baja el tono o los organizadores debieran llevárselo a dónde no moleste.

(La segunda imagen es una foto del blog Fiestas y festivales de España).

divendres, 3 de juliol del 2009

La política nuclear.

La diferencia que hay entre ecología y ecologismo es la que hay entre la ecología y la política. Con la energía nuclear ocurre lo mismo, la diferencia existe, pero no es tan sencilla de visualizar. Salvo que a uno se lo pongan a punto de caramelo o como a Fernando VII (o a Felipe II, que hay discusión entre los especialistas en esto como en todo lo demás) diciendo, por ejemplo, como acaba de hacer el ejecutivo que se cerrará Garoña en 2013. Esto es lo que se llama encaje de bolillos presidenciales. El resultado de la medida es trino en potencia como corresponde a la potencia tridentina: a) Garoña se cierra, cumpliendo el programa electoral del PSOE (en 2013); b) Garoña no se cierra (de momento) porque no hay que aumentar el paro; c) la decisión final habrá de tomarla quien gane las elecciones de 2013, que puede ser el PP y también puede ser el PSOE con otro candidato. El Gobierno se ha quitado de encima la empanada de la energía nuclear sobre la cual no hay unanimidad ni en su propio partido como se ve escuchando al señor Felipe González, a quien se va a pasar de llamar "Mr. X" a llamar "Mr. Positrón".

Es de esperar que el resto de las actividades de Gobierno no se hagan tan pensando en el futuro y se atengan más a la realidad presente. Que, además, es de manual. Porque en los demás países, en los que la tasa de paro es la mitad que la española o la mitad de la mitad, cabe decir que el keynesianismo está muerto precisamente porque no hay paro sobre el que actuar. Pero en España nos sobra, y fue el paro, la necesidad de remediar el paro, lo que inspiró el corazón mismo del keynesianismo a través de la Teoría General del empleo, el interés y el dinero . ¿La categoría fundamental? El empleo. Suprimir el paro es aumentar la demanda agregada que es la que tira del crecimiento de la economía. En España no solamente es válido el keynesianismo sino que es lo único que es válido.

(La imagen es una foto de Tolao, bajo licencia de Creative Commons).

Apoteosis del color.

En el Thyssen de Madrid tienen una interesante exposición de Matisse en su conocido como "periodo medio", entre 1917 y 1941. Sea del tiempo que sea, la exposición ilustra también sobre los comienzos del artista y hay muestras del primer fauvismo, así como alguna de influencia postimpresionista y varias referencias al cubismo. Luego, ya genera Matisse su propio estilo, aunque seguirá teniendo hasta su muerte una vinculación estrecha con el espíritu impresionista, cosa que se ve por el hecho de que su pintura es sobre todo, desde el comienzo al final, pintura de colores.

En la obra de Matisse, me parece, se ven más las personas que los estilos, aunque no siempre. Cuesta detectar en ella rasgo alguno del alumno de Moreau o, lo que es más llamativo, de Bouguereau. En cambio, Cézanne surge casi de inmediato, nos llama desde un paisaje. La exposición incluye el cuadro de éste, Las tres bañistas que Matisse tuvo treinta y siete años en su posesión y que debía de saberse de memoria, por lo que él mismo decía. Pero también aparecen claras influencias, como homenajes o improntas de Derain con quien convivió bastante tiempo, Dufy, Van Gogh, Picasso, también amigo de numerosas ocasiones, Vlaminck, etc.

Matisse era un hombre esponja, capaz de absorber estilos y de concentrarse en temas. La exposición, que tampoco es muy extensa pues puede constar de unas setenta piezas, se concentra en tres puntos: a) escenas íntimas, b) ventanas y c) orientalismo. En las escenas íntimas, bodegones, retratos, interiores es donde rompe más violentamente con las normas clásicas de la perspectiva y la profundidad del arte pictórica como puede comprobarse en el famosísimo Armonía en rojo, que es de 1908, razón por la cual no forma parte de la exposición, pero yo no me resisto a incluir aquí porque me parece una obra exquisita. Y muy ejemplar de lo que se dice: trátese de averiguar en qué plano se sitúan la silla, la mujer y la ventana.

El segundo grupo es el de las ventanas, ventanas a Niza, a Collioure, a Tanger, a Saint-Michel. Hay que ver qué cantidad de ciudades y lugares ha retratado Matisse a través de ventanas que es una forma de pintar un cuadro con dos marcos. Y además de protagonista de la obra, la ventana es, en muchas ocasiones, elemento de la composición. Desde que se introdujo la perspectiva, una visión del mundo exterior, otro mundo, lo que sirve para dar profundidad a la composición o sentido. Porque pronto la importancia de la ventana se hizo patente por su color simbólico. Puesto que se abre a otro mundo, nada cuesta ya decir que se trata del Otro Mundo; la ventana abierta, símbolo de la eternidad. Y junto a la ventana, el segundo gran hacedor de otros mundos, aunque Matisse le dedica escasa atención, el espejo. Dos de los más interesantes cuadros de la muestra, creo, son sendas imágenes dobles de mujeres frente a un espejo, de forma que vemos en la composición, por ejemplo, la modelo real de frente y de perfil la virtual. Contemplándolo se le viene a uno a la cabeza la idea de que la chispa de Picasso consistió en superponer el frente y el perfil en una sola oferta, como si fuera una imagen doble.

Por último, el exotismo, presente en los temas morunos. El norte de Marruecos, al que viajó, es para Matisse más o menos como la España por la que anduvo Manet, tierras excitantes por lo exóticas. El orientalismo de Matisse se advierte en sus muchos cuadros de odaliscas, un tipo de desnudos cargados de sensualidad que, por cierto, nada tiene que ver con la de su maestro Bouguereau ya que está basada también en la pincelada. Como puede verse en la imagen del folleto de mano, la Odalisca con pandereta, aunque los colores estén desvaídos y, desde luego, en la de Las dos odaliscas, en el recordatorio de que la sensualidad de la pincelada puede estar fuera del cuerpo de las mujeres.

La exposición contiene también algunas tallas, bronces, un par de ellos muy curiosos: unos torsos en bronce que sobresalen en mediorrelieve de una plancha y que parecen emerger de ella, como sucede con la piedra en los esclavos de Miguel Ángel. Los dibujos son muy ilustrativos de la forma de trabajar de Matisse: de trazo sencillo y muy simple es una silueta, pero en ella está la posterior silueta pictórica que nos es tan familiar: el desnudo azul, por ejemplo.

Hay quien acusa a Matisse de superficialidad y de hacer una pintura ornamental. En verdad, no será él quien lo niegue, habiendo sido quien introdujo el arabesco en la pintura, es decir, quien reconoció el arte que había en las inscripciones islámicas al tener prohibido reproducir las figuras. Las suras coránicas son formas artísticas allí donde la figura humana o del mundo en general no puede serlo. Por lo demás, nunca he entendido bien esa acusación de ornamental tratándose de pintura que es un arte esencialmente ornamental. Parece como si quisiera decirse que es pintura que sólo es ornamental, que no tiene significado profundo. Esto, por lo demás, puede decirse de todas las artes. Por ejemplo, la música. De algún autor se dice que es superficial porque sus composiciones suenan bien queriendo decir que "no aspiran a nada más que" a sonar bien, sin impulsar al espíritu de los oyentes a algún tipo de peligrosa aventura interior. De todas formas, es difícil no ver la Armonía en rojo de más arriba como un cuadro típicamente modernista, que es una tendencia básicamente ornamental y, al mismo tiempo, lo hemos visto, es una especie de ruptura de paradigma artístico.

dijous, 2 de juliol del 2009

Difícil solución en Honduras.

El curso de acción que está tomando la comunidad internacional en el caso de Honduras parece ser, en principio, el correcto: ante todo restablecer en su puesto al presidente legítimo, señor Zelaya, porque, con independencia de los muchos errores que este oligarca reconvertido en izquierdista seguidor de Chaves haya podido cometer (convocar consultas ilegales, dividir a la población y enfrentarse con las demás instituciones del Estado) peores han sido los de sus rivales, que han puesto en marcha un golpe de Estado delictivo que empezó con el secuestro y deportación del presidente y ha seguido con medidas excepcionales en contra de la población hondureña, singularmente la residente en Tegucigalpa.

Ahora bien, es cosa de preguntarse si las medidas hasta ahora propuestas para alcanzar el objetivo señalado son las más adecuadas. Según muestra la experiencia, los ultimata no sirven para nada, salvo que haya una apabullante diferencia de fuerzas entre quien lo pronuncia y quien lo recibe, que no es el caso en esta circunstancia ya que el ultimatum procede de la Organización de Estados Americanos (OEA) que no tiene más que una fuerza simbólica frente a Honduras. Advierte la OEA de que si en setenta y dos horas Honduras no ha repuesto al señor Zelaya, quedará expulsada de la organización. Pero ¿es esta expulsión una amenaza suficiente teniendo en cuenta que Cuba lleva cuarenta años fuera de la OEA sin que ello la haya afectado en nada? Obviamente, no. Además, ¿por qué setenta y dos horas y no veinticuatro? ¿Para qué hacen falta las otras cuarenta y ocho? Ciertamente para dejar tiempo a las maniobras diplomáticas antes de tener que tomar otras decisiones. Algunas de estas maniobras ya están produciéndose, como la llamada a consultas de los embajadores de España, Francia e Italia. Es un aviso de que lo que viene después puede ser peor. Pero la verdad es que, mientras no sea la Unión Europea quien tome la iniciativa diplomática, Honduras no tiene mucho que temer.

En realidad, algo de estas vacilantes medidas trata de restar importancia al patinazo del señor Zelaya de anunciar su retorno al país para hoy, jueves, lo que hubiera sido un desatino, pues los gobernantes de facto actuales ya habían anunciado que, si cruzaba la frontera, lo detendrían. Y es que, digan lo que digan los medios de izquierda, tan mentirosos como los comerciales, que presentan a una Honduras ardiendo por los cuatro costados con una insurrección generalizada de partidarios del señor Zelaya, el presidente ignominiosamente depuesto no suscita fervorosos ni masivos apoyos en el país en el que sus seguidores no parecen ser muy numerosos. De ahí que no quepa confiar a la indignación de los simpatizantes de Zelaya el restablecimiento de éste en su legítimo mandato.

A continuación de las medidas diplomáticas y si éstas no producen efecto debe recurrirse a las sanciones de todo tipo, sobre todo las económicas, cosa que ya están haciendo los Estados Unidos. Pero lo cierto es que si éstas tampoco son eficaces las consecuencias son contraproducentes porque, por un lado, es la población y sobre todo los sectores menos favorecidos quienes pagan el pato y, por otro, permiten al Gobierno presentarse como víctima de una campaña de acoso y consolidar su apoyo popular allí donde el señor Zelaya está perdiéndolo o no lo ha tenido nunca. Incidentalmente, la mención de los Estados Unidos permite comentar algo acerca de la peculiaridad de este golpe: no ha tenido el apoyo cuando menos expreso o tácito de los gringos. Algo tan extraño que ha dejado a lo analistas del piñón fijo, los que culpan de todo al imperialismo yankee, colgados de la brocha y sin escalera repitiendo como loros mecánicos sus sospechas de intervencionismo estadounidense.

Y si las sanciones, como es de temer, tampoco funcionan, ¿qué? Pues, guste o no guste, se abandona el propósito inicial de restablecer al señor Zelaya en su cargo legítimo cosa que, por supuesto, puede pasar, o se considera en serio la posibilidad de la intervención militar para retornar al statu quo ante. La cuestión que se plantearía en tal caso es en qué marco multilateral podría tomarse esta decisión. Sin duda el que primero se postularía sería ALBA, pero lo más probable es que no prospere por el veto que interpondrán otros Estados de América, empezando por los EEUU. El siguiente podría ser la misma OEA pero ésta carece de experiencia en estos menesteres y no es una de sus funciones. Así que sólo quedaría la muy lógica posibilidad de la ONU que no solamente es el marco adecuado para estas decisiones sino que, en caso de adoptarse, se relegitimaría considerablemente. Autoridad para ello tiene toda la que le haga falta y experiencia también. La última vez que se dio una intervención militar auspiciada por la ONU en un país latinoamericano fue en 2004 en Haití (la misión llamada MINUSTAH, que ahí sigue) y, dadas las circunstancias, es una especie de mal menor. Algo así debería ir preparándose ya si es que de verdad se quiere que el señor Zelaya regrese a la presidencia de la república centroamericana. Cosa que tampoco está tan clara.

(La imagen es una foto de Presidencia de la República del Ecuador, bajo licencia de Creative Commons).

Imago patris.

Vaya melodrama en dos tiempos que se ha marcado Francis Ford Coppola. En dos tiempos porque es un melodrama dentro del melodrama o un "más difícil todavía". A primera vista la peli va de padre dominante, tiránico, egoísta, soberbio. De padre, en fin. Y de hijo rebelde que pone tierra por medio y no quiere saber nada de su familia. Ya sólo esto justificaría la situación que nos encontramos en el arranque de esta por lo demás prolija y algo lenta peli: un yankee expatriado, varado en La Boca, en Buenos Aires, que convive con una Miranda (Maribel Verdú), doctora en un psiquiátrico en el que él, Tetro, estuvo internado y que se ha enamorado locamente de él porque piensa que es un genio. En verdad, Tetro lleva siempre consigo un misterioso manuscrito, escrito en clave, una obra teatral que no quiere publicar y que oculta a todos y que es la que le da la imagen de genio a los ojos de su amante amada. Tetro, cuyo verdadero nombre es Angelo, lucha por superar sus conflictos del pasado. Dentro de este melodrama se inserta otro que es con el que arranca el film. Según se nos hace saber, un buen día se presenta en casa de Tetro un hermano mucho menor, Bernardo, Bennie, de diecisiete años, camarero en un buque de línea gringo que ha hecho escala en Buenos Aires con una avería de motor que llevará una semana reparar. Contra la inicial resistencia de Tetro que acaba de sufrir un atropello y lleva una pierna escayolada y no quiere saber nada de su familia, Bennie se queda en principio durante esa semana que luego se prolongará porque sufre otro accidente de coche que lo obliga a hospitalizarse y pierde su barco. Esto de los accidentes de coche trae malos presagios porque la madre de Tetro murió en uno de ellos conduciendo el vehículo su hijo. El padre, un famoso director de orquesta (Karl Brandauer, que hace un papel estupendo) se vuelve casar con la que será la madre de Bennie que, unos ocho años antes del comienzo de la acción del film cae en un coma del que no se ha repuesto. Aquí se esconde el segundo melodrama, el que da las claves reales del extraño comportamiento de Tetro y que no puedo revelar por no destripar la peli.

El caso es que, con la complicidad de Miranda (Maribel Verdú)y la furibunda oposición de Tetro, Bennie reescribe la pieza de éste que consiste en una historia de rivalidad entre dos hermanos (de hecho la del padre de ambos y su hermano mayor a quien aquel debe todo cuanto es pero no lo reconoce) y le pone el final que encuentra más lógico ya que la obra no lo tiene, esto es, el protagonista mata al padre. La obra se representa en el Festival de la Patagonia, dedicado al parricidio y, en el ínterín, el padre real aprovecha para morirse de resultas de un infarto sin que ninguno de los dos hijos acuda a su lecho de agonizante a pesar de que están cumplidamente informados y tienen los pasajes a su disposición.

Maribel Verdú dice que no se gusta en Tetro y hace bien porque no está en su mejor papel. Vincent Gallo (Tetro) y sobre todo Alden Ehrenreich (Bennie) le roban el protagonismo. Coppola se luce a mansalva en una peli repleta de flash backs que rompen con el uso convencional ya que las escenas actuales están rodadas en blanco y negro y las del pasado, en color. Un efecto muy logrado. Y no es el único. Lo mejor, para mi gusto, es la vida de expatriado de Tetro en Buenos Aires y que tampoco es tanto ya que la capital de la Argentina es la ciudad en la que nació su padre precisamente y cómo está captado el ambiente de La Boca e, incluso, los tipos porteños que se relacionan con Tetro, todos gentes de la farándula. Coppola reconoce la influencia de Elia Kazan en su obra. El minúsculo apartamento en el que viven Tetro y Miranda recuerda mucho el de Stella y Stanley Kowalsky en Nueva Orleans, en Un tranvía llamado deseo. Pero la visión de Buenos Aires, con las inevitables escenas en el inevitable Cafe Tortoni es agradable aunque fugaz. Imprsionantes, desde luego, los paisajes de la Patagonia, que contemplamos en el viaje en coche que realizan los protagonistas para asistir al estrenpo absoluto de la obra de teatro, llamada El deseo de viajar.

La peli se hace un poco larga, aunque sea muy variada no solamente por los flash backs sino también por las escenas de una pieza de teatro que se representa en La Boca, una versión del Fausto llamada Fausta, una especie de cabaret burlesco. La mezcla de lenguas, inglés y español y de acentos, argentino y castellano es agradable y en general la peli se sigue con agrado aunque sea algo tediosa por momentos. Y tomando el conjunto narrado con sus dos melodramas superpuestos, se obtiene una idea muy clara y patente en las escenas semifinales del funeral del viejo Carlo Tetrocini acerca del mundo morboso de la familia que pretende ser como una lección moral que habla de todas las familias. En un par de ocasiones los dos hermanos Tetrocini por separado, definen el drama de la suya como un asunto de rivalidades dentro de la familia. Pero la verdad es que la película se las ingenia para ir más allá de las rivalidades y mostrar un mundo pasional y oscuro, mucho más interesante, aunque coronado por un inverosímil final feliz que produce el efecto de un deus ex machina bastante chapucero.

dimecres, 1 de juliol del 2009

Malas noticias para los correveidiles de ETA.

Por fin es ya evidente, es verdad judicialmente establecida, lo que todo el mundo sabía: que Batasuna, Herri Batasuna, Herritarren Zerrenda y todas cuantas organizaciones, coaliciones, grupos, pandillas y peñas ha ido inventándose la izquierda abertzale para burlar la ley de partidos son correas de trasmisión de ETA, parte del entramado terrorista; que ilegalizarlas y prohibirlas no solamente no es antidemocrático sino que es el modo de proteger la democracia frente a quienes quieren acabar con ella; que la ley de partidos no solamente no atenta contra los derechos fundamentales sino que es un instrumento esencial para defender la democracia y el Estado de derecho de los ataques de sus enemigos los terroristas y sus correveidiles, los que les bailan el agua y que por más logomaquias y sofismas que empleen sobre si condenan o no condenan esta o aquella violencia, también la falta de condena al terrorismo, en ciertas circunstancias es recriminable.

Al mismo tiempo, según el fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, España es un Estado de derecho y una democracia en todos los sentidos del término y hace muy bien en protegerse del ataque del entramado etarra que, a través de organizaciones-tapadera como las citadas, trata de estar en las instituciones para condicionar su funcionamiento y, en la medida de lo posible substituir la democracia por algún tipo de dictadura "popular", que es lo que gusta a los terroristas y su mariachi.

Y todo lo anterior no lo dice la Audiencia Nacional, órgano de excepción continuador del siniestro Tribunal de Orden Público, ni el Tribunal Supremo del podrido reino borbónico, ni el Tribunal Constitucional, instrumento al servicio del fascismo español. No. Lo anterior lo dice un tribunal de siete jueces presidido por un danés y compuesto por magistrados de Estonia, República Checa, Alemania, Liechtenstein, Mónaco y España. O sea, lo dice el mundo.

Se acabó el rollo de atacar a la democracia con el cuento de la libertad de expresión reprimida por el fascismo español; se acabó la monserga de que la interpretación del juez Garzón de que ETA es también su entorno que la sostiene, ampara, financia, ayuda y encubre, es un atropello; se acabó el cuento de que las ilegalizaciones del Tribunal Supremo eran atentados contra los derechos fundamentales; se acabó la melopea de que el Gobierno español pretenda asfixiar el debate independentista en el País Vasco. Ahora ya estamos todos al cabo de la calle.

Quienes en el pasado sostuvimos que había que ilegalizar todo lo que sirviera directa o indirectamente a ETA y que se hiciera con todas las garantías del Estado de derecho y de protección a los derechos de los ciudadanos, estamos de enhorabuena. Ya no tendremos que escuchar más insultos de los majaderos "izquierdistas", esos para quienes un sinvergüenza y un asesino, si dice ser de izquierda, ya no es un sinvergüenza ni un asesino.

Como comprendo la decepción de los justificadores, embellecedores y animadores de ETA y de todos los "izquierdistas" peninsulares que les hacen el juego, les ofrezco algunas vías discursivas para salir del atolladero en el que están: 1ª) en realidad, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) está compuesto por fascistas y enemigos del pueblo vasco; 2ª) los jueces del TEDH son una manga de prevaricadores comprados por los agentes españoles al servicio del Borbón; 3ª) los verdaderos jueces del TEDH han sido secuestrados por los fascistas españoles y en su lugar han puesto estos clones, dispuestos a justificar el genocidio de España en el País Vasco. Que por fabular no quede.

No obstante, como frente a esta decisión de sala del TEDH queda una vía de recurso ante el pleno del Tribunal, es de esperar que los estrategas que han conseguido este exitazo judicial la pongan en marcha. De esa forma quedarán en evidencia por segunda vez como lo que son: correveidiles de ETA.


(La imagen es una foto de My Web Page, bajo licencia de Creative Commons).

Madre e hija.

Estamos (o, cuando menos, estoy) tan acostumbrados a ver cine gringo que, cuando ponen una peli que no lo es, una peli europea, por ejemplo, la diferencia llama muchísimo la atención. Se agradece una historia que no se base en espectaculares efectos especiales, incluida la casquería, no esté repleta de androides, no contenga una frenética persecución de coches por Nueva York y no se dirima al final con una pelea de artes marciales. Se agradece mucho ver una peli en la que se cuentan historias verosímiles con gente normal de la que encuentra uno por la calle y a la que le sucede lo que sucede a todo el mundo.

Aunque sea una historia trivial, como ésta, y repleta de tópicos, casi todos, por cierto, copiados de los estadounidenses (peripecias de adolescentes en un instituto de enseñanza media en París) y con un final feliz casi como de cuento de hadas. O quizá por ello: la siente uno como más próxima y más auténtica.

La directora, Lisa Azuelos, hija de Marie Laforet (a su vez, un ídolo de mi adolescencia) imprime un ritmo vertiginoso a su narración y consigue introducir una ingente cantidad de material en la trama: conflictos en las relaciones amorosas entre adolescentes, enfrentamientos generacionales entre padres e hijos, una visión sintética de Londres con ojos de francés (tan tópica como el resto de la peli), problemas de familias, un par de historias de amor. Realmente no se puede pedir más. Encima los chavales son todos guapísimos y actúan de cine, muy bien dirigidos por Azuelos que muestra consumada maestría en este su tercer film.

Al final nos enteramos de que la peli está parcialmente basada en hechos reales y, según parece, tiene elementos autobigráficos: ella, como su protagonista, Sophie Marceau, está en torno a los cuarenta y tiene una hija adolescente como la Lola que interpreta Christa Theret. Sospecho, además, dado el apellido de Lisa Azuelos que también su padre sea español, como el marido divorciado de la madre de Lola Delgado en la peli. No hacía falta advertirlo, en todo caso pues cuanto sucede en LOL es perfectamente verosímil. Otra cosa es la representatividad social de los personajes. El carácter trepidante del argumento, los líos con las drogas, la música, el cachondeo en la educación requerían un instituto público pero el origen social de los chavales casa mal con esa enseñanza, aunque se trata de una cuestión menor. Lo importante es también el sentido del humor con que se presentan los distintos episodios. La relación de la madre con la hija, a veces un poco cursi, está muy lograda y ese policía de la brigada de estupefacientes que aparece ocasionalmente es un acierto.

Los adolescentes se relacionan a base de SMSs y de servicios de messenger de un modo casi compulsivo lo cual impone un ritmo de relaciones entre ellos que puede resultar agotador para un adulto pero que explica mucho de sus claves simbólicas y de su forma de enfocar la vida. El sexo tiene una importancia capital. En la división de funciones, siguen mandando ellos: el conjunto de música con estética Rolling Stone son chicos únicamente y cantan en inglés, porque todo lo anglosajón los influye mucho. Pero ellas toman igualmente la iniciativa. El lenguaje, por cierto, es unisex y los diálogos están muy conseguidos.

En definitiva, una comedia sobre el lado amable de la vida, alegre, despreocupada y risueña. Parece normal que haya tenido cuatro millones de espectadores en Europa.

dimarts, 30 de juny del 2009

Viva el Ayuntamiento.

El Ayuntamiento de Madrid, en un gesto histórico que honra a la capital como baluarte de la lucha por las libertades democráticas, ha decidido por unanimidad despojar de todos sus títulos, honores, menciones y prebendas al difunto Francisco Franco... a los treinta y cuatro años de su fallecimiento. Más que nada por si resucitaba y se enfadaba, que el General era de malas pulgas y sus súbditos le tenían un miedo cerval. Basta con recordar que, cuando estaba con vida y todos le deseaban la muerte, nadie se atrevía a decirlo y hubo que acuñar dos categorías inefables con las que se desataría ese fenómeno de insólitas repercusiones que se llamó la transición, según se fuera franquista o antifranquista, las categorías de "las previsiones sucesorias" y "el hecho biológico".

Aun así, hay que dar la gracias a la Corporación por el ejemplo que supone haber cumplido la ley. España sigue siendo un lugar en el que cumples la ley y sales en los papeles y hasta te dan el Príncipe de Asturias. Y no es baladí lo anterior: en Almendralejo de los Gorrinos, el alcalde, un tipo bragado del PP desde el año 39, Año de la Victoria, ha dicho que no hay cataplines en España para quitarle a él la placa a Franco que adorna la Plaza del Caudillo. Y en Sequillo del Valle, el cura párroco, hijo de un cruzado del 36, dice que el chafarrinón de la fachada de la iglesia glorificando exclusivamente a veintitrés caídos rebeldes es una obra de arte como los frisos del Partenón y no se le puede aplicar la piqueta que prevé la ley.

Y cuentan las crónicas que, ya lanzado por la senda nefanda de las luces, el racionalismo y la masonería, el Consistorio reprobó, condenó o maldijo la dictadura del general ferrolano como un régimen indigno. Están las cosas muy revueltas en la corrala cañí. Desde luego que con esta condena, así como el expolio simbólico, Micer Ruiz Gallardón tiene ganadas de calle las elecciones municipales de 2011 con una mayoría que hará saltar de rabia a su querida compañera de partido, señora Aguirre. No sé si a ésta se le habrá ocurrido la posibilidad de rivalizar con el Ayuntamiento en antifranquismo: que investigue en las decisiones de la antigua Diputación Provincial de Madrid, absorbida en su día por el Gobierno de la Comunidad Autónoma pero con un pasado en el que seguro que le fueron concedidos honores al General Franco. Sultán de la provincia, por ejemplo. Que a saber.

El signo de los tiempos.

Ciento cincuenta años de prisión. Le han caído a Bernie Madoff. Podían haberle caído a otro...

¿A quién?

A cualquiera, a un banquero cualquiera.

Hombre, lo que sucede es que Madoff es un estafador.

Y los banqueros ¿qué son? ¿Filántropos?

No; pero tampoco estafadores.

¿No? ¿Cuál es la diferencia con Madoff?

Lo de Madoff era un esquema Ponzi.

Como todos los bancos, como el banco central, como el sistema monetario mismo; todo esquema Ponzi. El capitalismo financiero es esquema Ponzi, una estafa.

Pero eso es una metáfora y en el caso de Madoff era the real thing.

Como en los bancos. Lo que sucede es que, cuando el pastel se descubre, los Madoff van al trullo y los banqueros, a un fondo de rescate y/o reestructuración.

O sea que, según tú, en lugar de ir a la cárcel Madoff debiera ir...

A dónde ya estuvo una vez y como presidente: al Nasdaq. Es el hombre que precisa la bolsa.

¿Y las víctimas?

Daños colaterales.

(La imagen es una foto de Shiny Things, bajo licencia de Creative Commons).

dilluns, 29 de juny del 2009

El derecho de injerencia en Honduras.

El Congreso de Honduras ha nombrado por unanimidad presidente interino de la República al señor Roberto Micheletti, aceptando al mismo tiempo una supuesta carta de renuncia del mandatario legítimo, señor Zelaya. A su vez la Corte Suprema respaldó y hasta ordenó la acción del ejército de detener al dicho presidente legítimo bajo la acusación de intentar un referéndum ilegal. Todo ello da idea del complicado y confuso conflicto institucional que se produjo la semana pasada en el país centroamericano. Clarificadas las cosas con una intervención militar fuera de toda proporción y manifiestamente ilegítima, que se configura como un clásico golpe de Estado en contra de la democracia, sólo queda exigir el retorno al país del presidente Zelaya, su restablecimiento en el cargo y el correspondiente castigo de los culpables de haber alterado el funcionamiento de las instituciones democráticas.

Esa debe ser tarea de la comunidad internacional a través de sus organizaciones representativas, ALBA, la OEA y, en último término la ONU, quienes deben exigir el restablecimiento de la normalidad institucional en Honduras en función de un derecho de injerencia que aquella posee ante atropellos tan evidentes a la legalidad democrática. Dicho derecho de injerencia debe materializarse en primer lugar por la vía diplomática. Si no se obtienen resultados satisfactorios de inmediato, convendrá pasar a la aplicación de sanciones y si tampoco éstas fueran eficaces en un plazo razonable, no habrá otro remedio que contemplar la opción de la intervención militar.

Es cierto que este derecho de injerencia, planteado en esta forma de escalada, plantea el sempiterno problema de si se aplicaría frente a países más poderosos que esta pequeña república de siete millones de habitantes y de si la comunidad internacional no estará empleando dos varas de medir. Teniendo este reparo en cuenta, que hace patente la necesidad de poner en marcha algún mecanismo internacional de alcance universal para los casos de ruptura del Estado de derecho, preciso será convertir en realidad en algún momento la convicción general de que hay que erradicar de una vez para siempre el fantasma de las asonadas militares en América Latina, sea cual sea el pretexto que invoquen.

(La imagen es una foto de Presidencia de la República del Ecuador, bajo licencia de Creative Commons).

¿Hasta dónde llega la trama Gürtel?

A medida que van sabiéndose más cosas sobre la trama de presunta corrupción dirigida por el señor Francisco Correa se comprende mejor el desconcierto del PP y sus extrañas reacciones: el asunto parece ser mucho, pero mucho más grave de lo que se presumió en un principio, cuando se pensaba que se trataba de unos cuantos negocios más o menos ilegales que había hecho la trama Gürtel en connivencia con algunos ayuntamientos gobernados por el PP en el rico noroeste de Madrid y, si acaso, con la Generalitat valenciana y la Comunidad Autónoma de Madrid De hecho, sin embargo, ya unas primeras declaraciones del señor Rajoy a poco de destaparse este escándalo, ponían sobre la pista de lo que podía ser un terremoto. Según él, los Gürtel habían operado hasta 2004, cuando él toma el mando de la nave, se entera de que no todo es trigo limpio y ordena que cesen las actividades de la sede central del PP con las empresas del señor Correa, hoy encarcelado. Esta decisión explica por qué los implicados en la trama concentraron entonces sus esfuerzos en la administración local y autonómica, ya que ambas quedaba fuera del alcance de las decisiones depuradoras del aparato del partido. Y en esto empezaron los avatares del señor Camps en Valencia así como algunos diputados autonómicos del PP en Madrid y algunos alcaldes como los de Boadilla del Monte, Pozuelo o Majadahonda.

Pero de las actividades de los Gürtel con el PP central en los años anteriores a 2004, en plena legislatura con mayoría absoluta del partido conservador, no se decía nada. Sin embargo, según la información de hoy de El País, en un reportaje titulado La investigación a Bárcenas revela una red de facturas falsas de una constructora del AVE, las actividades corruptas, el expolio de las arcas públicas, los cohechos, etc pueden tener un alcance mucho mayor de lo que se suponía y afectar al Gobierno de José María Aznar (al cual el señor Correa organizó, según parece, una gran cantidad de actos oficiales) y a la gestión del señor Álvarez Cascos, por entonces ministro de Fomento y responsable último de las obras del AVE a Barcelona y Valencia, sobre las que llovió una pila de millones de euros en forma de concesiones ilegales y actividades fraudulentas de todo tipo. De ello parece haberse beneficiado directamente el señor Correa, pero los gobernantes de entonces no pueden llamarse andana, dado que tienen una responsabilidad política directa de lo que se hizo. En especial el señor Álvarez Cascos con las obras del AVE que parece haber sido un verdadero festín de comisiones millonarias ilegales.

Con razón insiste el señor Álvarez Cascos en que el señor Bárcenas no dimita y luche hasta el final. Es un modo de retrasar que la investigación judicial de la trama Gürtel llegue hasta él y hasta el señor Aznar.

(La imagen es una foto de Cuqui24, bajo licencia de Creative Commons).

Reflexiones vascas.

Publica el señor Otegi un artículo en el diario Gara, titulado Construir una estrategia para el cambio político de muy útil lectura y no menos provechoso comentario. En él se mezclan consideraciones teóricas globales sobre el estado del mundo, con análisis de la situación económica y laboral en Euskadi, una valoración sobre las relaciones de las distintas fuerzas políticas entre sí y una especie de vaticinio o anhelo a corto y medio plazo. Las consideraciones teóricas dejan bastante que desear por su imprecisión y hasta carencia de sentido. Empezando por el título que habla de "construir una estrategia para el cambio político" porque si, a estas alturas, todavía hay que construir una estrategia para ese cambio político que el señor Otegi reclama y consiste en lo esencial en independencia más socialismo, ¿qué ha estado haciendo la llamada izquierda abertzale hasta hoy? En realidad la estrategia está clara, al menos desde el acuerdo de Lizarra: forjar un frente de todas las fuerzas soberanistas/independentistas, sin necesidad de asegurarse el fin del terrorismo y que fuercen una salida negociada al "conflicto" planteado bajo la forma de un proceso de independización de los territorios vascos. Lo que habrá que construir es la táctica para lograrlo porque todas las fórmulas aplicadas hasta la fecha han fracasado y hasta cabría argumentar que un resultado de ese fracaso ha sido, precisamente, el hecho de que el nacionalismo burgués del PNV haya perdido el gobierno de la Comunidad Autónoma Vasca.

El artículo contiene asimismo una evaluación sobre la correlación de fuerzas políticas tanto en Euskadi como en el conjunto de los Estados español y francés que resulta bastante razonable en parte. Parece claro que el PNV ha quedado en una posición incómoda después de las elecciones y no sabe cómo conciliar sus dos almas, la autonomista y la soberanista y también lo parece que la alianza (que él llama contra natura, haciéndose eco del calificativo de un irritado señor Urkullu cuando se anunció el pacto PSOE/PSE-PP) entre los dos partidos constitucionalistas (sic) no cuenta con suficiente apoyo social para llevar a cabo un proyecto integracionista. No cuenta con él... de momento, añado yo. Pero contará si sigue gobernando como hasta la fecha, no se escinde y aprende a capitalizar el cansancio y confuso descontento de un sector importante de la sociedad vasca con la situación en Euskadi.

Entiendo que el autor es muy subjetivo en su valoración tanto de la fuerza electoral de la izquierda abertzale que él representa como de la que no representa, esto es, Aralar, y parece mentira que no se dé cuenta de que la que él representa no tiene perspectivas en tanto no acepte las reglas del juego, como Aralar, y se desvincule explícitamente de la violencia, es decir, se independice a su vez de la tutela ideológica que sobre ella ejerce la organización terrorista.

En realidad, como se ve, el artículo del señor Otegi se va alejando de la realidad a medida que cree estar acercándose a ella, asunto que queda claro cuando uno cae en la cuenta de que la pieza pretende ser un repaso de la situación política y social de Euskadi en el último año pero en él no aparece ni se menciona una sola vez la función que cumple el terrorismo en la sociedad vasca; ni una sola vez aparecen las siglas ETA y eso a menos de una semana de que ésta haya asesinado a un policía. ¿Cómo puede decirse que va a analizarse la situación concreta de una sociedad cuando se omite toda referencia al factor que es único responsable de que la izquierda que el señor Otegi representa no esté presente en las instituciones y el mismo señor Otegi no sea diputado autonómico? De ahí que su alegato final no sea una conclusión que se siga del análisis sino una muestra de lo que los anglosajones llaman wishful thinking, es decir, un mero deseo.

(La imagen es una foto de www.ukberri.net, bajo licencia de Creative Commons).

diumenge, 28 de juny del 2009

Honduras: reconsideración.

Ayer sábado colgué una entrada sobre la situación política en Honduras que estaba muy confusa. Sigue estándolo, pero algunas vicisitudes ya permiten un pronunciamiento con más sosiego.

Partía en mi entrada de mi desconfianza hacia el presidente Zelaya. No me gusta que un hombre elegido para la presidencia en un partido con una ideología claramente conservadora, cambie de bando en mitad de su mandato, aunque sea para hacerse de izquierda porque eso equivale a un fraude a los electores. Tampoco me gusta que un presidente en el curso de su mandato pretenda cambiar la Constitución, esto es, las reglas del juego, en beneficio propio. Eso es lo que han hecho casi todos: Correa, Chávez, Morales y Uribe, pero no lo encuentro de recibo y me parece un doble fraude.

Por todo ello decía yo en la entrada del sábado que el golpe de Estado estaba dándolo el propio presidente Zelaya en contra del Parlamento, del Tribunal Supremo y del ejército. Y, de hecho, la situación no estaba clara. Enseguida hubo quien acusó a los Estados Unidos de estar detrás del golpe cuando parece ser que no es cierto. Lo cierto es lo contrario. Por lo demás, el ejército actuaba a las órdenes del Tribunal Supremo.

Pero todo ello no puede ser excusa para romper la legalidad democrática y tomar el poder por la fuerza porque eso es lo que convierte un intento plebiscitario como el que pretendía el señor Zelaya a imitación de sus colegas izquierdistas en un verdadero golpe de Estado con todas sus consecuencias.

Algo que condeno sin paliativos.

Deseo que lo anterior quede claro para evitar confusiones. Por supuesto, creo que la entrada de ayer pecaba de precipitación por lo que pido disculpas por ella y procedo a suprimirla porque me fastidia haber metido el patoncio.

(La imagen es una foto de Presidencia de la República del Ecuador, bajo licencia de Creative Commons).

Los católicos y el aborto.

El señor José Bono dice con mucho tino que la Iglesia católica en España tiene derecho a decir lo que piensa, pero no a imponerlo y ello en relación con la furibunda oposición eclesiástica a la ampliación de los supuestos del aborto en la reforma de la correspondiente ley. Matiza el señor Bono que él distingue entre su voto y su conciencia, lo que no es una expresión muy afortunada porque viene a decir que puede no votar en conciencia, pero se entiende que debe de querer explicar que el asunto del aborto pertenece a su fuero íntimo y los obispos no tienen nada que decir en él porque le corresponde "vivir su fe" a su manera.

Por otro lado, sin embargo, el secretario general de la Conferencia Episcopal Española, el atildado petimetre Monseñor Martínez Camino, habla de excomunión automática para quienes aborten y, supongo, todos aquellos que los encubran o amparen. Y no sé yo si el señor Bono o cualquier otro puede "vivir su fe" en el catolicismo estando incursos en causa de excomunión.

En verdad, el catolicismo tiene un problema con el aborto que hasta ahora se ha venido resolviendo mal que bien haciendo la vista gorda: a pesar de las severas y apocalípticas condenas de la Santa Sede los católicos controlan su natalidad y, cuando les es preciso, abortan. Son sepulcros blanqueados; pero no por culpa suya sino por la incompetencia y la intolerancia de su jerarquía.

(La imagen es una foto de Chesi - Fotos CC, bajo licencia de Creative Commons).