dijous, 3 de gener del 2008

La familia: obispos demócratas contra socialdemócratas totalitarios.

Por más que he leído dos veces (es breve, por fortuna) y con suma atención el comunicado de prensa del PSOE en respuesta a las mentiras, infundios y agresiones que profirieron los obispos en en el acto político pro PP que organizó el arzobispado de Madrid el sábado pasado, no he acertado a ver qué sea lo que hay en él que pueda calificarse de "absolutamente desmesurado y radical", como asegura el señor Astarloa y me gustaría que el citado señor, en lugar de suponer que su fogoso verbo deba aceptarse como verdad sin más, tuviera la gentileza de señalar en qué párrafos o expresiones del comunicado se traslucen desmesura o radicalismo algunos. No es difícil pues ya he señalado que el texto es breve y es seguro que hasta el señor Astarloa podrá leerlo y probar la exactitud de lo que dice. De no hacerlo quedará como un mendaz demagogo, cosa que ya se echa de ver en ese típico empleo del adverbio "absolutamente", al que suele recurrir este tipo de personas pensando que así dan más crédito a sus palabras cuando lo que hacen es quitárselo.

El texto del PSOE no sólo no es desmesurado ni radical, sino que es excesivamente moderado a mi parecer (aunque menos da una piedra) pues se limita a recordar a los curas que en España nos regimos por la Constitución y no por la ley de Moisés ni por los Evangelios. Bueno, por los Evangelios tampoco se rigen los curas. Basta con saber lo que se dice todos los días por la COPE. Aunque ahora entiendo (qué bueno es esto de escribir y cómo aclara las ideas) qué hay de desmesurado y radical en el comunicado del PSOE a ojos del señor Astarloa: la referencia a la Constitución. ¿Cómo no me habré dado cuenta antes?

Y no es el señor Astarloa el único absolutamente que ha salido a laminar al PSOE. Según el señor Jorge Fernández, secretario general del grupo popular en el Congreso, el PSOE muestra un anticlericalismo absolutamente decimonónico y casposo. Además del "absolutamente", don Jorge echa mano del socorrido "anticlericalismo décimonónico", una de esas expresiones que prueban hasta qué punto chupan rueda los carcas del lenguaje del progresismo tradicional. Porque, si el anticlericalismo es "décimonónico", el clericalismo que respiraba la concentración de curas, monjas, beatos y meapilas del sábado ¿qué es? ¿el siglo XXII? Apañados estamos.

Por último, un tercer Demóstenes de la derecha, el señor Benigno Blanco, presidente del Foro Español de la Familia, ha acusado al PSOE de tener un ego totalitarista, lo que es maravilloso. Totalitarios no son los que quieren imponer un único modelo de familia, obligar a los demás a aceptarlo o quedarse sin derechos, sino quienes amparan los derechos de individuos diferentes, protegiéndolos jurídicamente en su diferencia frente a gentes como el señor don Benigno Blanco.

Es obvio que la Iglesia católica española ha entrado en campaña electoral y que lo ha hecho a favor del PP, partido que ha salido en su defensa y en su mismo estilo, esto es, faltando de frente a la verdad, injuriando, insultando y tergiversando los hechos.

Lean, lean el comunicado del PSOE y digan qué hay ahí de desmesurado, radical, anticlerical, décimonónico, casposo o totalitario. Quienes dicen tamañas insensateces, ¿en qué mundo creen que viven?

(Innecesario decir que la imagen es el famoso lienzo de Goya, "la familia de Carlos IV", que se halla en el Museo de El Prado. Una típica familia "tradicional", por cierto.)

Las presidenciales estadounidenses.

Michael Moore ha enviado una circular pormenorizando los pros y cons de los tres principales candidatos demócratas (desde luego, ni siquiera considera la posibilidad de votar por un republicano), titulado Who Do We Vote For This Time Around? Es muy buen análisis y está estupendamente escrito, como siempre en su caso. Da la impresión de que su candidato sería John Edwards, que aparece tercero en todos los sondeos. Sin duda, Mr. Edwards es el que habla más claro y más a la izquierda de los tres principales postulantes demócratas. Él mismo está convencido de que, si se hubiera presentado en 2004, habría ganado a Bush. En lugar de eso, los destinos de las nominaciones lo obligaron a presentarse como Vicepresidente con John Kerry y ya se sabe lo que pasó.

Al no votar en las presidenciales estadounidenses (aunque siempre he dicho que el derecho de sufragio en esas elecciones debiera hacerse extensivo a todos los ciudadanos del mundo, igual que Roma acabó extendiendo la ciudadanía a todos los habitantes del Imperio, puesto que las decisiones que toma ese Presidente nos afectan a todos), no estoy obligado a hilar tan fino como Moore. A mí también me gusta Edwards más que los otros dos, que no son trigo limpio. Pero sus posibilidades son muy escasas. Mr. Obama tiene el valor simbólico de ser negro, hijo de padre keniata y madre estadounidense, mientras que Mrs. Clinton tiene el de ser mujer y ambos datos son muy importantes a la hora de avanzar hacia un mundo plural y democrático y quebrar la resistencia del monopolio Wasp. Mr. Obama lleva por delante haberse opuesto a la guerra criminal del Irak, mientras que Mrs. Clinton la apoyó desde el primer momento y ha seguido haciéndolo a la largo de la legislatura. Sin embargo, en todos los demás asuntos, el señor Obama es impreciso y ambiguo y a fuerza de querer caer bien a todo el mundo, ha conseguido una plataforma en la que nadie sabe a ciencia cierta qué propone. La señora Clinton ha sido cómplice de ese ignominioso acto de piratería internacional pero el resto de su programa es coherente con una posición de izquierda moderada, más moderada que la de Edwards, pero aceptable y practicable.

En todo caso, las posibilidades de Mrs. Clinton a escala nacional son muy superiores a las de sus dos competidores. El último Cook Political Report, uno de los más serios en los EEUU, publicado el 19 de diciembre pasado, daba a la señora Clinton un 60% de probabilidad de ser nominada candidata demócrata a escala nacional, un 30% al señor Obama y un miserable 10% a Mr. Edwards.

Como no soy votante en los EEUU, puedo permitirme el lujo de pronunciarme por el candidato republicano que menos me disgustaría. Ayer dejé claro que Mr. Huckabee, una especie de neofascista cristiano me haría tanta ilusión como Monseñor Rouco Varela, y Charlie Cook le concede un 10% de probabilidad de conseguir la nominación, lo que son buenas noticias. Sin embargo, el mismo Cook otorga un 50% de probabilidad a Mitt Romney y deja en un 20% a Rudy Giuliani y John McCain respectivamente. Eso me desconcierta un poco. Siempre he pensado que Giuliani partía como favorito por su "tolerancia cero" con la delincuencia, la lucha contra el terrorismo y la idea de aguantar en el Irak hasta la victoria final. No obstante, Mitt Romney, mormón de religión y un oportunista, ha virado hacia la actitud antiabortista, más grata a la derecha cristiana y al mantenimiento del statu quo en cuestión de armas y se afianza frente a Giuliani, aunque mi vaticinio en más favorable a éste. Por último, aunque prefiero que gane un demócrata (el que sea), de los republicanos, el que mejor me cae es McCain, un veterano de Vietnam, cinco años prisionero del Vietcong. También apoya la infame guerra del Irak pero, al menos, éste sabe de lo que habla.

No lo tiene fácil la izquierda en los EEUU. Pero ¿cuándo lo ha tenido fácil la izquierda en parte alguna?

(La ilustración es un cuadro de Frederic Remington, La carga de caballería, de 1903).

La DGT y el sentido del humor.

La Dirección General de Tráfico estaba ayer de enhorabuena. 2007 es el año con menos muertes en carretera desde 1968. Todo un éxito que premia los desvelos de ese cascarrabias que es el señor Pere Navarro, Director General de Tráfico. Y efectivamente es una noticia espléndida de la que todos, incluido el PP, debemos alegrarnos porque todo lo que sea aumentar la seguridad sin merma de la libertad, será siempre bienvenido en todas partes.

Desde luego, en la DGT estaban tan contentos que publicaron un video para felicitar a los conductores por su buen comportamiento, al tiempo que los animaban a perserverar en esta vía. Puede verse pinchando sobre la imagen superior para ir a El País y dando luego a activar la cinta.

Obsérvese bien ese plano general con zoom. ¿No recuerda algo? Sí, por supuesto, no sé si a propósito o no, el plano recuerda mucho a algunos de la famosa La noche de los muertos vivientes, de George A. Romero.

Si es coincidencia, es coincidencia; pero, si no lo es, demuestra un extraño sentido del humor.

dimecres, 2 de gener del 2008

La familia y los obispos.

Según parece, el PSOE y su Gobierno tienen intención de salir hoy al paso de las mentiras y los ataques con que les obsequiaron los obispos el pasado día treinta en el curso de la manifa a favor del PP (disfrazada de acto eclesial en pro de la familia cristiana) convocada por el arzobispado de Madrid y jaleada a voz en cuello por los medios de la derecha y el Gobierno de la comunidad autónoma madrileña. Ya era hora de que comprendieran lo que hasta Aznar dice haber comprendido: que la política de apaciguamiento con los totalitarios, los integristas, los fanáticos no sirve de nada y es contraproducente pues les da alas permitiéndoles pensar que las concesiones que se les hacen no responden a un afán de diálogo o concordia sino al temor y al acobardamiento. La contemporización con los nacionalcatólicos ha sido el error más garrafal del señor Rodríguez Zapatero y no los dos que reconoció hace unos días ya que esos (la ruptura de la tregua y la llegada del AVE a Barcelona) no lo eran propiamente pues ambos dependían de factores ajenos. El servilismo ante los curas y sus desorbitadas pretensiones, en cambio, no fue un error sino una dejación, un abandono de los principios laicos, una traición al "no nos falles" con que se coreó la llegada del señor Rodríguez Zapatero a La Moncloa. Dicen los mentideros de la Villa que la principal defensora de esa abyecta política de concesiones al nacionalcatolicismo ha sido la señora Fernández de la Vega, vicepresidenta del Gobierno. Pues con todo lo bien que me cae dicha señora, si eso es cierto, entiendo debiera hacer pública confesión de arrepentimiento y prometer que nunca más volverá a ponerse ridículamente meliflua con clérigo alguno.

Puede parecer exagerado que se hable de totalitarismo en relación con la iglesia católica española. No hay tal. Los dirigentes obispales, con Monseñor Rouco Varela a la cabeza, son una wild bunch de teócratas que aspiran a que España vuelva a ser reserva de la cristiandad, martillo de herejes, azote de gays y lesbianas, némesis de los abortadores. Creen estos ultramontanos retardatarios que van por buen camino, a imagen y semejanza de la revolución de los neocons estadounidenses, que son en parte "teocons" y en parte "leocons", en reconocimiento de la influencia que Leo Strauss ejerció sobre muchos de ellos. (Sobre el ascenso de las nuevas formas de fascismo cristiano en los EEUU puede verse el post siguiente).

Es ya hora de que alguien con autoridad diga a los obispos que "no se metan en política" (como hacían cuando Franco, al que llevaban bajo palio), menos a favor de un partido, el PP, y menos aun en periodo preelectoral. Esas prácticas, al estilo de Divorcio a la italiana y aunque ellos mismos no lo crean, aparte de moralmente detestables son pragmáticamente desastrosas pues enemistan a muchos electores, en especial entre los cristianos

En el ínterin, representantes de las familias orilladas, ninguneadas, criminalizadas en el acto de exaltación a la cristiana se han puesto de acuerdo para salir en defensa de las familias homosexuales o monoparentales, de hecho o como sea y han puesto en marcha una especie de movimiento en la red llamado Por la diversidad familiar y en sólo cuatro o cinco días, ya cuentan con medio centenar de blogs de apoyo, entre ellos éste. Habrá quien piense que es mucho, pero no lo es cuando se recuerda que, según Technorati hay más de cien millones de blogs en el mundo.


Aprovecho la ocasión para traer el video de la campaña por la diversidad familiar, que me parece bien aunque un poco ñoño, peligro éste frecuente en la izquierda. Y para recordar que, además de acceder a la página güeb de la iniciativa pinchando en el banner de la derecha (jobá con el lenguaje blogosférico), donde quien quiera puede agregar su blog, es posible firmar onlain; toma ya. Es preciso meter en el tarugo de estos integristas católicos españoles que los homosexuales, los transexuales, etc tienen los mismos derechos que ellos porque son algo diferente, distinto, y no una degeneración de ellos. No parecen entenderlo y mira que es sencillo a nada que se reflexione que se puede ser, por ejemplo, maltratador de género y heterosexual u homosexual indistintamente. Pero, salvo los casos excepcionales de los hermafroditas y bisexuales, no se puede ser homo y heterosexual al mismo tiempo. El homosexual no es una condición errónea del heterosexual, sino que es un ser distinto. Caramba, no es tan difícil de comprender; hagan un efuerzo en pro de la convivencia.

Comienza el baile.

A partir de mañana, día tres de enero, comienza la campaña electoral a la presidencia de los EEUU, la más larga del mundo, pues dura casi un año, desde los caucuses de Iowa hasta el voto final en noviembre. Estas primeras citas electorales de Iowa y cinco días más tarde, las primarias de New Hampsire, sirven como check points iniciales para aquilatar las posibilidades de los candidatos a la nominación de los respectivos partidos, esto es, de los candidatos a candidatos. Sirven también para que los comentaristas nos luzcamos mostrando cuánto sabemos de los estados de Iowa y New Hampshire, de su composición racial (estados superblancos), económica, etc. El hecho es que lo que pase mañana en Iowa será importante más en el campo demócrata que en el republicano. En el demócrata porque si, como anuncian los sondeos, Barak Obama, de origen negro, bate a la señora Clinton, eso lo aupará en la lucha por la nominación en la convención del partido en agosto. También es cosa de saber cómo termina aquí John Edwards, tercer candidato. Hay otros, pero no están muy avanzados aún.

En principio, la cosa es menos peliaguda entre los Republicanos porque el candidato que parte como caballo ganador, el excalde Rudy Giuliani, ya da el caucus de los granjeros de Iowa por perdido y no se presenta, con lo que la pelea se concentra en los segundones, de los que de momento, hay un puñado: Mike Huckabee, John McCain, Ron Paul (un septuagenario conocido como el fenómeno internet), Mitt Romney, etc. Tampoco gran cosa salvo que hay que decir dos palabras sobre ese Mike Huckabee, pastor baptista, predicador, saxofonista, que pertenece a la derecha cristiana más frenética y salvaje del país, la que coincide con los movimientos dominista y reconstruccionista, especies de celotas cristianos que abogan por una teocracia sin otra ley que la Biblia (ni siquiera el derecho civil o el penal independientes) ni otros gobernantes que los cristianos. Por supuesto, la ley del Evangelio aplicada en la sociedad a la brava y no como lo hacen los evangélicos que a estos doministas parecen unos vendidos. Así que si el señor Huckabee, que no carece de apoyos, ganara sería como si España fuera gobernada por Monseñor Rouco Varela, al que yo creo que no aguantaría ni Monseñor Rouco Varela.

Las primarias de New Hampshire el ocho de este mes también serán interesantes. Este electorado de Nueva Inglaterra es el epítome de los blancos progresistas en los EEUU, tiene algún religioso episcopaliano homosexual y ha reconocido los matrimonios entre personas del mismo sexo. Veremos si gana Obama.

Hay que rendirse a la evidencia de que las elecciones presidenciales estadounidenses son las más importantes del mundo, En algunos países son más importantes que las de la propia presidencia. Así que este año habrá que postear con frecuencia sobre las elecciones de los gringos. Por ello me buscaré una serie de ilustraciones para no aburrir al personal. Empezaré con cuadros y grabados de Frederic Remington, un magnífico pintor de la segunda mitad del XIX, que reflejó el mundo de los combates entre los "pieles rojas" y los "rostros pálidos", especialmente los de la caballería de los EEUU, y luego iré con otros, grandes artistas que no son muy conocidos en Europa, en donde la pintura estadounidense tuvo poco predicamento hasta la llegada de Pollock y Rothko.

dimarts, 1 de gener del 2008

¡Feliz año nuevo republicano!



Que todos vuestros deseos se hagan realidad.



El sino del año.

El día primero del año no existe a efectos civiles. Es una curiosa forma de comenzar un año, negándolo. El día primero de enero es el descanso de la noche del treinta y uno de diciembre. Pasamos el día uno del año durmiendo la mona de la noche anterior. En este día no hay periódicos, que siguen siendo los reyes de los medios, digan lo que digan los de las teles. Y como no hay medios, no pasa nada. Bueno, pasa, pero no nos enteramos. Nos enteraremos en diferido, lo que se lleva bastante mal en la época de la comunicación en tiempo real.

Hay una tendencia a hacer y decir gansadas en las dos jornadas última y primera de cada año: profecías, por ejemplo, o balances o repasos de deseos y promesas. Los balances o inventarios (que también suelen hacerse en el comercio por estas fechas para cerrar el año) son los más socorridos. Uno muy popular es contar a los muertos en el año y donde más se ve el carácter artificial de toda datación. Entre los muertos de este nadie ha olvidado recordar a Fernando Fernán Gómez. He echado en falta, sin embargo, a Guinovart, uno de los más recientes; pero puedo no haberme enterado. Lo que sí me ha sorprendido es el hecho de que Yeltsin haya fallecido este año. En el tiempo histórico o político, el hecho por los hombres, Yeltsin había fallecido en 1999, cuando presentó su dimisión como presidente de Rusia y lo sustituyó el señor Putin que ahora maniobra para perpetuarse en el poder.

Se sigue ronroneando con las noticias del día treinta, la famosa manifa de los curas en favor de los casados según el sacramento del matrimonio. Y ahí está el debate, que si la Iglesia se mete en donde no la llaman o que si puede haber auténtica moral pública si no es católica; que supongo sea lo que habrá querido decir ese clérigo creo que valenciano para quien el aborto o el matrimonio gay o alguna de esas prácticas supone un peligro ¡para la democracia! Padre, perdónalos porque no saben lo que dicen. Como el otro, que asegura que la legislación de igualdad de sexos es un retroceso en materia de derechos humanos. Es imposible razonar con quien hace proposiciones absurdas porque es evidente que no las hace para razonar sino para gritar y agredir.

Piensa uno que sobre la Iglesia está todo dicho; pero no todo hecho. Leo en El Plural, que cita el blog de Ignacio Escolar, Escolar.net, que los paneles de las autopistas de Madrid, con el cuento de informar sobre las calles cortadas al tráfico, anunciaban el encuentro en loor de la familia. ¡Qué barbaridad! Están a la que salta. Supongo que así es como se ganan las elecciones: mesmerizando al electorado.

Me va lo de los augurios. Me gusta escucharlos porque informan mucho sobre lo que preocupa a la gente. Y en punto a malos augurios el año comienza con tres muy claros, como tres amenazas pendientes sobre nuestras tranquilas cabezas de burgueses occidentales, la del desastre ecológico, la de la crisis económica y la de la crisis humanitaria. La conciencia del riesgo ecológico ha aumentado sobremanera en 2007. Como relámpagos en el horizonte tenebroso se abrían las tres posibles causas del desastre ecológico planetario, el envenenamiento de la biosfera, el agotamiento de los recursos o el efecto invernadero y hemos pasado buena parte del año imaginando escenas apocalípticas.

La crisis económica lleva meses anunciándose y algunas de las previsiones la considera peor y más duradera que la de 1929. Es posible. Al fin y al cabo somos los seres humanos los que hacemos la historia sin tener ni idea de lo que hacemos porque improvisamos. Nos gusta pensar que los fenómenos históricos se asemejan unos a otros porque esperamos así encontrar instrumentos para comprenderlos imitados del pasado. Pero esto es absurdo porque los fenómenos históricos no se repiten.

En cuanto a la crisis humanitaria es término de empleo frecuente pero siempre de alcance territorialmente determinado. Es hora de advertir que es un fenómeno generalizado, global, típico de nuestra época, razón por la cual cabe hablar de una crisis humanitaria a nivel planetario. Basta con observar las cifras de los movimientos migratorios en el mundo o, mejor dicho, los desplazamientos en masa de poblaciones enteras, tanto por razones económicas como políticas, étnicas o criminales o varias al mismo tiempo. Debe asimismo dejarse constancia de que en muchos casos de desplazamientos en masa de población por motivaciones políticas se trata de conflictos que se ventilan a tiros en el curso de guerras y guerrillas que pueden haber durado años y que siguen vivas a día de hoy, cuando hay más guerras en marcha al mismo tiempo que nunca antes.

Bien pensado, es conveniente tomarse un día de respiro.

dilluns, 31 de desembre del 2007

La familia cristiana se manifiesta a desgana.

El arzobispado de Madrid llevaba semanas batiendo tambores para atraer a los fieles al "acto", la "gran celebración" (quiere decir, la manifa contra el Gobierno del PSOE) por la familia cristiana; lo mismo venían haciendo los medios más vociferantes de la derecha. Al final han ido unos ciento cincuenta mil, que no está mal, pero no es la lluvia de millones con la que contaban los organizadores. Contaban... y cuentan porque la Comunidad Autónoma de Madrid, cuya unidad de medida de la manifa propia es un millón, le ha adjudicado algo más de un millón a la de los curas por la familia. Los propios curas, en aplicación de la doctrina del milagro de los panes y los peces, hablan de dos millones de asistentes. Nada es imposible para Dios. Lo dicho, ciento cincuenta mil y ya es mucho para protestar por nada, porque nadie ataca a la familia cristiana.

La Iglesia dice que sí. En su última Carta Pastoral, Monseñor Rouco Varela razona del jesuítico modo siguiente:"Providencialmente, este acto tendrá lugar justamente cuando celebramos el XXV aniversario de la visita del inolvidable siervo de Dios, el Papa Juan Pablo II, que vino por vez primera a España en 1982. Quienes asistieron a la misa de las familias, celebrada muy de cerca de donde tendrá lugar nuestro encuentro, no olvidan la fuerza, la claridad y el amor con que Juan Pablo II anunció a las familias el plan de Dios sobre el matrimonio, la familia y las consecuencias que se derivan del mismo: la defensa de la vida (no al aborto), la unión indisoluble (no al divorcio) del matrimonio entre hombre y mujer (no al matrimonio homosexual), el significado trascendente del amor conyugal, el derecho insustituible e ineludible de los padres a educar a sus hijos (no a la educación para la ciudadanía) según sus propias convicciones." (Los paréntesis son míos).

Desde luego, la causa es una pura invención porque, lo dicho más arriba, nadie amenaza a la familia cristiana: nadie obliga a los cristianos a abortar, ni a casarse si son gays, ni siquiera a ser gays.

Está claro que les cuesta mucho, que es casi imposible que muchos católicos admitan que sus opiniones morales son eso, opiniones, y no una orden válida para todo el mundo o el imperativo categórico divino. Que ellos crean que debe dárseles un estatuto especial por cuanto son las opiniones de Dios (su Dios), aunque les parezca terrible injusticia, no los autoriza a imponérselas a los demás que es lo que intentan siempre, a toda costa, sin pausa ni descanso, como las termitas, termes o comejenes. Una plaga.

Está claro también que la jerarquía católica jugará a la ambigüedad por lo de la vela a Dios y al diablo. Después de la manifa de ayer el grupo Prisa ha empezado a desempolvar a los curas progres, los teólogos civiles y otras gentes de esta franja, dispuestas a resolver la situación como sea. Sólo de ese modo es posible ser cura y decir que los manifestantes de ayer no representan a la Iglesia, sino que se representan a sí mismos. ¿Qué diantres quiere decir que Monseñor Rouco Varela se representa a sí mismo cuando escribe lo que escribe y dice lo que dice como cardenal arzobispo de Madrid?


Enviar este post a Menéame

Franga.

Eso de los cincuenta años para juzgar a Franco que se ha sacado de la manga su ex-ministro de Información y Turismo entre 1962 y 1969 quiere desautorizar todo juicio que se haga ahora... si es negativo, porque si es positivo puede formularse y la prueba es que el mismo señor que dice lo de los cincuenta años, acto seguido equipara a Franco con Napoleón Bonaparte, que no está mal. Ese es un modo de hacer muy típico de la derecha: las reglas obligan... al otro.

Incidentalmente, viendo las manifas de los obispos y escuchando a los señores Mayor Oreja y Fraga haciéndose lenguas del Caudillo cabría reconsiderar esa crítica algo doctrinaria que se hace a la Transición española en el sentido de que no se fue tan lejos como se debía o podía. La transición fue un intento de evitar que la derecha volviera a echarse al monte. Ahora se ve que las concesiones que antes se hicieron ya no sirven para nada. Ahora se ve con qué gente había que tratar a mediados de los años setenta. En aquellas condiciones, andar pidiendo la rendición del adversario y la implantación del sistema político más justo jamás imaginado no era lo más adecuado. Además, la derecha estaba crecidísima, tan cerca aún de la Dictadura, de la que se sentía orgullosa. Tiene razón el señor Mayor Oreja, para mucha gente el Franquismo significó la placidez de unos años de dicha. Exactamente treinta y nueve años de placidez a cambio de que para muchos otros fueran años de torturas, persecuciones, cárceles y asesinatos. Porque Napoleon envió a muchos compatriotas suyos a la muerte, pero fue combatiendo contra pueblos extranjeros: españoles, ingleses, austriacos, prusianos, polacos, rusos. No masacró directamente y sin piedad a su propia población ni la sometió a un régimen de terror. El crimen político más sonado de Napoleon contra un compatriota fue la ejecución, mejor dicho, el asesinato del duque d'Enghien. Franco, de esos casos, tuvo a decenas y similares, a centenas.

No cincuenta, pasarán mil años y Franco será por siempre jamás lo que fue y es: un general traidor que, tras una guerra civil muy cruenta, estableció un régimen ilegal basado en el crimen, uno de cuyos más fieles administradores fue el señor Fraga Iribarne. Cuando aquel gobierno asesinó a Julián Grimau, el señor Fraga Iribarne era miembro de él. Si condena se condena así que ¿cómo va a condenar?


Enviar este post a Menéame

El tesoro de los libros.

La Biblioteca Nacional, meritísima institución que ha poco pasaba por un trance rocambolesco felizmente resuelto, tiene en marcha una exposición llamada Biblioteca Hispánica en la que se exhiben muchas piezas de sus fondos, generalmente únicas (o de las que se conservan quizá dos o tres copias) de un valor incalculable, una gran belleza, raro mérito y, en bastantes, casos, mucha importancia histórica. Se trata de manuscritos, incunables, ediciones princeps, ejemplares inencontrables. Y no sólo hay libros en el sentido habitual del término, sino asimismo partituras, grabados, estampas, mapas, planos, bocetos, dibujos, fotografías, carteles y hasta cromos todos ellos procedentes de los fondos de la Biblioteca.

También se ha editado un catálogo (que a mí me ha caído de regalo estas Navidades) en el que se reproducen con mucho cuidado editorial, en cuatricromía y papel satinado, todas y cada una de las piezas expuestas acompañadas por cumplidas notas a cargo de especialistas que han sabido compaginar la brevedad con el rigor y la información, cosa muy de agradecer. Completa el catálogo una serie de capítulos (uno por cada sección de la exposición: música, ciencia, filosofía, cartografía, etc) encomendados a diversos autores reconocidos en sus diversos campos. Se facilitan así dos tipos de información: la especulativa y teórica, a cargo de los respectivos maestros a los que se ha encargado una reflexión de vuelos sobre un capítulo determinado y la específica y concreta, pegada a cada pieza, como si fuera su etiqueta y probablemente a cargo de becarios o personal que esté al comienzo de sus carreras pues sólo se les permite firmar sus noticias con sus iniciales, si bien luego hay una clave con los nombres. Tras haber leído atentamente todas éstas, es obligado decir que en nada desmerecen de los escritos de los consagrados (también de encargo) y algunas veces hasta los superan.

En todo caso, merece la pena visitar la exposición en la sede de la Biblioteca en el madrileño Paseo del Prado; la semipenumbra en que es preciso mostrar el papel impreso, dibujado, coloreado, miniado, etc., así como el silencio que allí reina y los recursos de las nuevas tecnologías al servicio del visitante hacen que uno acabe perdiendo el sentido del tiempo y se abandone a la contemplación de tanta maravilla.

Ante la imposibilidad de dar cuenta completa de la gran variedad de la muestra me limito a unos apuntes de los textos que más me han gustado (sin demérito de los otros) y algunas imágenes verdaderamente curiosas. A la derecha pueden verse dos páginas correspondientes a un librillo llamado Catecismo de la doctrina cristiana, de Pedro de Gante, un flamenco cultísimo, pariente del Emperador Carlos y franciscano que, pasado a las Indias, dio en la flor de alfabetizar y, de paso evangelizar a los indios, mediante estas ingeniosas figuras y jeroglíficos trazados por él aprovechando los gustos estéticos de los aborígenes. José Manuel Blecua, autor de un interesantísimo capítulo sobre "Verbalización y comunicación. Lengua y didáctica. Espiritualidad y lengua", en el que habla del libro de Pedro de Gante y otras piezas de no menor interés, llama la atención sobre el hecho de que la figura que representa al "enemigo" sea un soldado español. Así pues, aunque el mismo Blecua recuerda la famosa opinión de Elio Antonio de Nebrija, cuya primerísima Gramática de 1492 también figura en la exposición, según la cual siempre la lengua fue compañera del imperio, el ejemplo de Pedro de Gante muestra que este imperio se afianzaba asimismo merced al espíritu evangelizador que, no pudiendo valerse de la lengua de Nebrija, utilizaba jeroglíficos, símbolos iconográficos para alcanzar sus objetivos que, en definitiva, eran los mismos que los de los gramáticos.

Valeriano Bozal ("Estampas, dibujos, libros e ilustraciones") se concentra en lo que quizá sea el capítulo más fascinante, el que cuenta con las preciosas obras de Rábano Mauro y el célebre Apocalipsis de Beato de Liébana; sin olvidar las láminas de Durero dedicadas a este tema y algunas otras no menos impresionantes, como Melencolia que me cuesta no reproducir.

En un magnífico ensayo sobre "La música escrita", Antonio Gallego toma pie en las piezas de música que se exponen (anotaciones, libros de enseñanza de música y coros, partituras, etc) para trazar algunas ideas brillantes al hilo de una amplia visión histórica del género que pasó en la enseñanza del trivium al cuadrivium, como corresponde a la naturaleza aritmética, matemática, de la música y cómo, de esa visión del "número aúreo" del Renacimiento se llegó a la visión rousseauniana, sentimental, propia de la Ilustración.

Me gustaría detenerme en el apartado de cartografía, a hablar de alguno de los magníficos mapas que se exponen, así como comentar el muy enjundioso capítulo de Carmen Líter Mayayo sobre "La imagen del mundo. Cartografía en la Biblioteca Nacional". No pudiendo, me limitaré a decir que se aprende mucho en él. Al fin y al cabo, la Imago Mundi nos dice todo sobre la idea que tenemos de nosotros mismos.

Emilio Lledó ("Los libros y la memoria de la libertad") toma a su cargo el capítulo de filosofía y política en el que comenta con la profundidad de su mucho saber algunas joyas bibliográficas de Platón o la primera traducción de Aristóteles del griego al castellano de Pedro Simón Abril en 1584, la Introducción a la sabiduría, de Juan Luis Vives o esa pieza única en todos los sentidos (pues también fue única obra de su autor) del Examen de ingenios, de Huarte de San Juan (1594). Reproduzco la portada del pergamino de las Siete Partidas (siglos XIII-XV) que, junto a un ejemplar del Fuero Juzgo (siglos XIII-XIV), también en la exposición son las dos piedras miliares del ordenamiento jurídico español desde la Edad Media a la Moderna. Especial atención dedica Lledó a la Theologia naturalis (1502) de aquel catalán, ingenio peregrino, médico en Toulouse, Ramón Sabunde, de cuya filosofía dice que "para aquellos tiempos, era realmente revolucionaria". Michel de Montaigne, que escribió la famosa Apologie de Raimond Sebond que constituye el libro II, capítulo XII de sus Essais confiesa que tradujo la obra de Sebond o Sabunde por encargo de su padre y dice que "encontré bellas las imaginaciones de este autor, bien construida su obra y su intención llena de piedad". La Inquisición no pensaría igual.

José Luis Peset escribe un magnífico capítulo sobre los avances científicos de los que hay abundante testimonio en la exposición en "Preciados saberes en el despertar de mundos nuevos", normalmente el capítulo olvidado en este tipo de ceelebraciones. Sus observaciones sobre Los veintiún libros de los ingenios y de las máquinas, de Pedro Juan de Lastanosa con sus preciosos grabados son de gran interés. Pero mucho más tienen y de mayor provecho para un lego como yo sus consideraciones sobre los dos tratados (de estática y mecánica y de fortificación estática y geometría) del genio Leonardo da Vinci, con sus complicados artilugios y su curiosa escritura especular.

Saltándome cosas de gran interés, voy al apartado de lo que podríamos llamar la "cultura popular", ("De lo efímero permanente", a cargo de Fernando Bouza) donde se muestran piezas curiosísimas, como el álbum de cromos de Enriqueta Sanfiz (siglo XIX), que es idéntico a los que yo vi en casa de mis abuelos y otros ejemplares de esa cultura plástica popular que fue abriéndose paso en los siglos XIX y XX a través de la publicidad comercial, una sucinta muestra de una colección de fotografías de la guerra civil así como carteles de toros o de espectáculos de funambulistas.

En esta exposición de la Biblioteca Nacional entra uno en contacto directo con algunas de las obras más importantes de la historia del espíritu de nuestro país y, a través de él, del mundo.


Enviar este post a Menéame