dilluns, 12 d’octubre del 2009

Aquí no pasará nada.

Es tal el desbarajuste dentro de ETA que ya ni las detenciones de sus jefes, jefecillos o jefazos son noticia de interés en los periódicos que vienen, en cambio, suculentos con asuntos de la trama corrupta del PP. Sin embargo esta última caída de dos piezas buscadas por la policía invita a una reflexión tranquilizadora acerca del terrorismo en el País Vasco: la de que nada en éste es excepcional ni hace imposible acabar con aquel. Los vaticinios del ministerio del Interior han ido cumpliéndose: las caídas de terroristas son cada vez más frecuentes; los detenidos, cada vez más jóvenes e inexpertos; las acciones de la banda, sin restarles importancia, cada vez más esporádicas, inconexas y chapuceras. Es decir, hay solución policial/judicial al terrorismo etarra.

Este vaticinio cumplido coincide con otro igualmente cumplido que afecta al nacionalismo radical vasco, al entramado que no se separa de ETA, no condena los atentados y lleva años tratando de forzar infructuosamente su presencia en las instituciones en violación de la legalidad: el de que si se actúa contra el frente político del terrorismo, si se procesa y encarcela a los dirigentes nacionalistas radicales cuando sea de justicia hacerlo no pasa nada, no arde Euskadi, ni las masas abertzales enardecidas se echan a la calle. El carismático señor Otegi pasó unos meses a la sombra y en el País Vasco no hubo más alteraciones que las del business as usual y es posible que, encausado de nuevo por el famoso mitin de Anoeta, el señor Otegi retorne a la cárcel. Tampoco pasará nada. Siempre que el Estado democrático muestre su legítima fortaleza por medios legales, en el País Vasco no pasará nada.

Coinciden por último esos vaticinios cumplidos con el tercero y de más profundo alcance: en el País Vasco se puede desplazar al nacionalismo gobernante por medios democráticos y sustituirlo por partidos no nacionalistas vascos y nacionalistas españoles y... no pasa nada. Tampoco arde Euskadi ni los batzokis echan humo ni los jelkides se lanzan a la revolución callejera. Y al final resultará que todos estos años de fuego y plomo, de atentados, secuestros, explosiones, extorsiones, muerte y dolor, todos estos años de esquemas soberanistas, pactos excluyentes, planes separatistas, todo este ruido y toda esta furia parirán un estatuto reformado y aquí no pasará nada.

diumenge, 11 d’octubre del 2009

Gürtel, Filesa y el camino de Santiago.

Hace unos días Palinuro publicaba una entrada titulada El mundo en blanco y negro en la que sostenía que el caso Filesa del PSOE no era como el Gürtel del PP básicamente porque: "Que yo recuerde, en el caso Filesa hubo financiación ilegal del PSOE pero nadie se enriqueció personalmente; es decir, nadie se lo llevó crudo como parece ser el caso con el PP. Por supuesto, ello no hace el delito de financiación ilegal menos odioso y en los dos casos hay delito. Pero los delincuentes no son iguales; ni mucho menos. Los del PSOE no iban a enriquecerse personalmente. No iban a "forrarse".

De inmediato varios lectores se me echaron a la yugular llamándome sectario y cosas peores porque en el caso Filesa se lo habían llevado crudo; con lo que se venía a implicar que, pues Palinuro no podía desconocer hecho tan obvio, aprobaba Filesa, si es que no se había beneficiado de él directamente, que nunca se sabe. Hoy, sin embargo, Jesús Maraña, a quien se supone bien informado, publica un artículo titulado La "berlusconización" como estrategia" y en el que se lee: "tratándose en ambos casos (Filesa y Gürtel) de delitos de financiación ilegal de idéntica gravedad, los inculpados por Filesa fueron apartados de sus cargos, cumplieron las sentencias y no se hicieron ricos". Otra cosa es que en otros escándalos de corrupción del PSOE, como los de Roldán, Rubio, Urralburu, etc los culpables estuvieran llevándoselo crudo y hasta saignant. Pero no en Filesa en lo que yo recuerdo. En todo caso está claro: Filesa no fue Gürtel. En Gürtel, además de financiación ilegal del partido ha habido presunto trinque para el peculio de cada cual; cosa que no pasaba en Filesa, lo que afirmo según mi leal saber y entender, en lo que recuerdo y sin mucho tiempo para chequear cada vez que alguien te cuestiona un dato que tienes en la memoria.

Sin duda esto del trinque es avatar personalísimo, de la conciencia de cada cual; pero cuando se generaliza en el seno de una organización, se convierte en una moda, en un comportamiento obligado si se quiere estar in: o trincas o eres un pringao que nunca saldrás de concejal de tercera. La diferencia es la que hay entre ideologías. En el PSOE queda algo de ideología (en el mejor sentido del término); poco, pero algo; en el PP la ideología es el trinque. Ha elevado el trinque a la condición ideológica. ¿Qué significa la "privatización" de todo lo público si no exactamente eso: trinque? Lo que añade Gürtel es que el trinque es masivo, coordinado, sistemático y a la remanguillé.


El principal implicado en la trama gurteliana sector naranja, el señor Ricardo Costa, amigo íntimo del Bigotes, se ha dejado el móvil inmóvil y está dando talón al camino de Santiago. Es poca cosa este Ricardo. No tiene el corazón de león de aquel homónimo suyo que se hizo una cruzada. Éste, de cruzada, justo la chaqueta y eso si se la regalan. Pero lo insólito del asunto es que el pollo pera haya convertido una dimisión/destitución en un suspense televisivo. El señor Camps no está para muchas consejas, él que a todos quiere un huevo, incluido el señor juez y todo le parece "bonito", de nuevo incluido el señor juez que, en efecto, está bonito pero de bonito tiene poco. Ahora ya queda sólo él en primera línea de dimisión que es lo único que puede hacer pringado como está hasta las cejas en dos ciénagas a falta de una: Gürtel y sus ridículas mentiras. En realidad lo que debiera de hacer sería pillar él también el camino de Santiago a pedir un milagro al santo porque en Valencia le huele el trasero un poquito pólvora. Bonita, eso sí.

(La imagen es una foto de compostelavirtual, bajo licencia de Creative Commons).

Cartas terráqueas.

"Querido Mogoli: cuando estuve en mis años mozos al servicio del nuestro amado Emperador en estas Regiones Finales, compartía mis guardias con un amigo a quien no veo desde entonces que solía decirme que había descubierto el adjetivo calificativo de uso único. Ésta era "terráqueo". "¿Tu has oído", me decía, "que alguien lo emplee en contexto distinto que para globo terráqueo?" En su memoria, ahora que nuestro Emperador ha tenido a bien volver a mandarme a este pintoresco planeta para jubilarme ya en el ocaso de mi vida y disfruto de holganza suficiente para escribirte estas cartas, he decidido valerme de tan gentil calificativo. De ahí lo de "cartas terráqueas".

Pienso comunicar contigo con la frecuencia que las circunstancias permitan mientras me hallo en este curioso lugar, al que sus habitantes llaman "tierra" y que tan bien conozco desde mi primera estancia, de la que hablaba, en él, en tiempos del imperio napoleónico, correspondiente en nuestro cómputo al ciclo gamma dos, para que te hagas una idea, y dando cuenta de lo que de nuevo vaya encontrándome . He de decirte, por cierto, que los dichos habitantes son unos divertidos seres parlanchines que se llaman a sí mismos "seres humanos" y cuya característica consiste, según ellos, en ser "racionales", cosa que los diferencia, a lo que imaginan, del resto de la creación, incluidos nosotros que, con nuestro aspecto de nubes, pasamos por carecer enteramente de razón.

Lo más gracioso de esta supuesta "razón" es que los lleva a dividirse en dos grupos más o menos iguales en función de una característica biológica que nada tiene que ver con esa misma razón y, con tal motivo, una mitad, que llaman masculina, se adjudica todo el uso de dicha facultad que, con argucias más o menos especiosas, niega a la otra mitad a la que llaman "femenina". Actualmente hay un movimiento en todo el planeta en pro de reconocer a la mitad femenina el mismo uso de razón (y, por tanto, iguales derechos) que a la masculina. Pero parece resultarles muy trabajoso y difícil y, de vez en cuando, los de la mitad masculina, se ponen nerviosos y violan y asesinan a las de la mitad femenina.

Seguiré informándote en sucesivas cartas: también se dividen según el color de la piel (que, ellos mismos reconocen, tampoco tiene nada que ver con la razón); según unas creencias extrañas que tienen sobre seres inexistentes a los que llaman dioses; según unos sonidos que emiten a los que llaman idiomas. En resumen, se consideran seres humanos, dicen ser una especie, pero, si vienes aquí sólo encuentras individuos y mal avenidos.

(La imagen es una foto de marioquartz, bajo licencia de Creative Commons).

dissabte, 10 d’octubre del 2009

Melancolía de la excusa y la mentira.

Ahora que el sumario del caso Gürtel es parcialmente público y que ya se conocen las dimensiones de esta gigantesca trama que parece asociar a militantes y cargos del PP en todas las administraciones y niveles con una organización de chorizos cuyo objetivo es (presuntamente) esquilmar los caudales públicos y amasar fortunas que luego van a parar a paraísos fiscales; ahora que se ve cómo los imputados de la trama defraudaban (presuntamente) a todos los ciudadanos de modo sistemático burlando las normas sobre contratos del Estado para llevarse los millones, financiar ilegalmente a su partido, costearse carísimos regalos para ellos y sus cónyuges; ahora que queda claro que llevan años (presuntamente) corrompiéndolo todo y organizando todos los actos del PP que son, según propia confesión de parte, "chorizadas"; ahora que es patente que se trata de un partido plagado de presuntos corruptos, cuya acción política parece ser un mero encubrimiento de una actividad de pillaje organizado, ¿se acuerda el respetable de cómo ha ido reaccionando a lo largo de los últimos meses, según iban conociéndose sus maniobras, sus trinques? ¿Hay memoria de las mentiras y las provocaciones con que ha respondido a las noticias, tratando de dar una interpretación que lo exonerara y de cargar contra todo lo demás? ¿Hay recuerdo de cómo ha tensado la vida política democrática, deslegitimando las instituciones y cargando contra el Estado de derecho? He aquí un pequeño elenco de dislates por los que nadie espera que pida perdón pero que no conviene olvidar. Invito a los lectores a completarlo:

Ahora que vienen en cascada las dimisiones, los ceses, las destituciones, los "yo no sabía nada", "han abusado de mi buena fe", etc, etc y en tanto esperamos que se produzca la segunda oleada de ceses entre los responsables políticos de toda esta mangancia (o sea, los de los Camps, Aguirres, De Cospedales, etc) y antes de la inevitable dimisión del señor Rajoy, conviene recordar el clima de agresividad en contra de las instituciones que ha reinado en España desde que en febrero de este año se destapó el caso Gürtel, un caso que va a llevarse por delante al PP y va a presentar bajo su verdadera luz a las dos legislaturas del señor Aznar.

Y mientras tales cosas suceden, una última consideración sobre el inefable señor Camps que ayer, día de la Comunidad Valencia, y antes de verse obligado a dar una patada política en el trasero del pisaverde señor Costa, dijo en su alocución oficial que a los valencianos nadie nos ha regalado nada con lo que queda claro que, como viene sosteniendo Palinuro, este hombre debe de ser un cretino profundo o un sinvergüenza redomado o ambas cosas a la vez, cuenta habida de que, como todo el mundo sabe, a él le han regalado unos trajes y al recientemente depuesto señor Costa un coche y un reloj carísimos así como otras bicocas de acicalamiento que tanto gustan a estos petimetres.

La imagen es una foto de 20 Minutos, con licencia de Creative Commons)

El Nobel de Obama.

Palinuro es descaradamente obamáfilo; apoyó desde el principio la candidatura del afroamericano a la presidencia de Gringolandia; aplaudió su programa de cambio; se felicitó -¡cómo no!- de que pusiera fin a la unipolaridad y al asfixiante clima de bravuconería y estupidez que caracterizaba a la administración anterior; sostuvo y sostiene de todo corazón el intento de Obama de universalizar el Estado del bienestar en su país; defendió y defiende el claro y noble ánimo de Obama de establecer relaciones de igaul a igual con todos los dirigentes democráticos del planeta, empezando por el español. Además Palinuro está convencido de que, diez meses después de tomar posesión, Obama sigue siendo Obama y la esperanza que inspira de conseguir un mundo mejor está intacta.

Pero esta concesión del Nobel de la Paz es claramente prematura e injustificada. No se le concede por lo que ha hecho (puesto que aún no ha hecho casi nada) sino por lo que se espera que haga. Pero ¿y si, por las razones que sea no lo hace? El Nobel de la Paz (entre cuyos poseedores se encuentran terroristas como Kissinger, Arafat o Rabin) no goza de un prestigio impoluto, así que tampoco es acertado correr albures de este calibre.

¡Qué más quiere Palinuro que Obama haga realidad su programa! Pero al día de hoy, su curriculum es enteco y su lista de asuntos pendientes más o menos la misma que hace diez meses:

- El injusto bloqueo de Cuba sigue como siempre.

- En el asunto de las torturas y Guantánamo no se ha avanzado gran cosa.

- La situación en Palestina es la de siempre con los israelíes más agresivos, si cabe.

- La situación en el Irak invadido, saqueado y oprimido es la de siempre o peor.

- La situación en el Afganistán ocupado y destruido es la de siempre o peor.

- La situación en los países africanos en guerra civil permanente es la de siempre o peor.

- El riesgo de cambio climático es mayor que nunca.

- Los peligros de la proliferación nuclear son mayores que nunca.

Todos estos enunciados deben matizarse con un prudente "casi". Palinuro sabe también que no es realista pensar que todo dependa del presidente gringo. Pero algo sí; y algo, también, cabría haber hecho ya. So pena de que, dentro de cuatro (u ocho) años, cuando Mr. Obama deje el cargo, se diga de él lo que se dijo en enero de este año, al tomar posesión: que prometía mucho.

En el interín que reiterarlo: el Nobel no parece justificado y sólo se entiende por el infinito afán de peloteo de la Academia sueca, su falta de sentido crítico y su incapacidad para resistirse a los cantos de sirena de los medios.

Tiene razón el señor Obama: no se lo merece. De momento.

(La imagen es una foto de Violentz, bajo licencia de Creative Commons).

divendres, 9 d’octubre del 2009

Tres cabezas.

¡Menudo golpe de efecto el de doña Esperanza Aguirre!Unos cambios drásticos sin que le tiemble el pulso: nada, nada, ¡fuera los tres corruptos de las huestes del PP! Bien es verdad que su mayoría absoluta no se resiente pues todavía le sobran diputados. Entonces, ¿qué ha hecho? Expulsarlos del grupo parlamentario y forzar su pase al mixto: siguen siendo diputados, siguen cobrando un sueldo público, siguen haciendo que representan a los madrileños, aunque sólo se representen a sí mismos, siguen estando aforados. Esto no son medidas. Esto es una tomadura de pelo. Sus votos no hacen falta a la lideresa pero, llegado el caso, puede seguir contando con ellos porque los del grupo mixto también votan y pueden hacerlo como quieran.

Ese es su punto débil y el que debe golpear la oposición: la señora Aguirre juzga que los tres imputados no son dignos de actuar en nombre del PP ¿pero sí de hacerlo en nombre propio? Dice que ella les pidió el escaño pero que ellos se negaron invocando el mandato representativo. Eso no es creíble. Para salir de dudas basta con que formule la petición en público, ahora mismo: "señores López Viejo, Bosch Tejedor y Martín Vasco: devuelvan su escaño (y la pasta, añadimos nosotros) y váyanse de la Asamblea de Madrid". A ver qué responden los tres implicados.

De todas formas, hay que admitirlo, es un gesto. Porque esta es la hora en que el inimitable señor Camps no ha hecho ninguno. A propósito, el tal señor Camps es en sí mismo un tratado de sociología. Según un sondeo de El País, el 53 por ciento de los valencianos cree que mintió al decir que se pagaba los trajes. No obstante, si hubiera elecciones, el PP volvería a ganar por mayoría absoluta crecida. Un electorado sabio éste que distingue entre el partido y sus dirigentes, hechos de débil carne humana. El resultado es que los valencianos decidirían estar gobernados por un mentiroso. Pues no me parece tan sabio ese pueblo sino más bien abyecto. Por mi parte no entiendo porqué no se pregunta por la otra mentira que me parece más significativa: la de que el Curita no conocía al Bigotes cuando prácticamente cenaban juntos a diario para hablar "de lo suyo" "que es muy bonito" porque el Bigotes, vaya por Dios, llevaba el día a día del PP de Valencia y, si esto es cierto, decir que no se le conoce no es solamente mentir: es revelarse como un bellaco embustero compulsivo, como un granuja que debiera haber dimitido hace meses. En Valencia el Gürtel ha provocado una revolución: la señora Barberá ya pide en público que se haga algo. Pero si el Curita ha dado un corte a la señora De Cospedal, puede dejar fría y yerta a la Barberá. Al menos mientras siga contando con el incompresible apoyo del señor Rajoy quien por razones que empiezan a ser misteriosas no se atreve a poner término a una situación de farsa y licencia que parece una berlusconada.

El baile no ha hecho más que comenzar. El Gürtel se ha comido todo el crédito del PP. Sus dirigentes principales, normalmente tan decididos, callan por los rincones. Los años de Aznar, su principal activo, están en cuestión. ¿Ganaban elecciones por medios fraudulentos? ¿Se instituyó en ellos esta práctica del doble gobierno, uno público y otro bajo cuerda, hecho de adjudicaciones, comisiones, paraísos fiscales, esa tangentopoli española? Desde luego fue en ellos cuando don Vito Pastuqui estuvo en el apogeo de sus poderes y, culminación simbólica, asistió al bodorrio de El Escorial. ¿Lo organizó él? ¿Lo pago él? Esas son las preguntas a las que los Aznar, el PP o alguien con más crédito debe responder.

(La imagen es una foto de Chesi - Fotos CC, bajo licencia de Creative Commons).

Entre tanto.

Entre tanto siguen cayendo. Una a una, como ayer, una mujer asesinada hace días en su domicilio. De a dos como a principio de semana, dos mujeres asesinadas a tiros por sus cónyuges. Sigue el goteo incesante de esta masacre callada, que apenas logra un hueco en los noticiarios entre las corrupciones del PP, el megapoderío chino, los trompicones del dólar, el hambre del África o las mentecateces de Berlusconi. Esa muerte silente pero siempre presente que amenaza a todas las mujeres en un clima de agobio universal porque los amenazadores son sus maridos, amantes, novios, los que dicen amarlas antes de estrangularlas, quemarlas vivas, tirarlas por la ventana, coserlas a puñaladas. Un miedo general porque nadie sabe por dónde vendrá el golpe, quién será la siguiente. Eso es el terror. Algo que los hombres no podemos entender por experiencia directa porque estamos del otro lado del cuchillo y sólo podemos sentir tomándonos el trabajo de ponernos en el lugar de ellas para intuir el miedo angustioso de la calle solitaria, la esquina oscura, el timbre tardío, el teléfono en la noche, la voz conocida.

Sin embargo podemos hacer mucho por ayudarlas. Para empezar, teniéndolas presentes.

(La imagen es una foto de P. Medina, bajo licencia de Creative Commons).

dijous, 8 d’octubre del 2009

Estado de descomposición.

El caso Gürtel, esa gigantesca trama de presuntos ladrones, sinvergüenzas, apandadores, mangantes, corruptos dentro del PP y en torno a él que llevaba años esquilmando los caudales públicos con un designio de expolio sistemático en todos los órdenes de la administración pública; ese plan organizado desde el tiempo de Aznar y habrá que ver si con su consentimiento, de saqueo de España digno de un episodio de la leyenda negra, se ha cobrado ya su primera víctima: el señor Rajoy ha demostrado ser un perfecto inepto, incapaz de reconocer la gravedad del problema cuando se le vino encima, incapaz de reaccionar a tiempo ni a destiempo; de controlar al partido, como se prueba a día de hoy en que no consigue que el señor Camps, sobre quien se ciernen los mayores indicios y sospechas de ser el responsable de la trama en Valencia no diga alguna de sus increíbles necedades. El mismo señor Rajoy que hace dos días pedía a los suyos que ignorasen el caso Gürtel, todavía fiel a su idea de que se trata de un montaje del Gobierno en contra del PP. Un perfecto incompetente al que, quizá por eso, nombró Aznar varias veces ministro y, por último, sucesor suyo.

Recuérdese lo que tiene dicho el señor Rajoy sobre este asunto en los ocho meses que llevamos de instrucción: todo falso; no es una trama del PP, sino una trama contra el PP. Un intento de machacar al PP. España, un Estado de terror, un Estado policía, un régimen de terror. Todos estos disparates y tonterías han llevado el placet del señor Rajoy. Un señor que, hace unas horas, anunciaba engoladamente que si alguien ha hecho lo que no debe, se tomarán medidas, como si pudiera suceder lo contrario, esto es, que alguien hiciera lo que no debe y no sucediera nada.

Es de esperar que el señor Rajoy presente su dimisión por su incompetencia, liberando a su partido de un peso enorme y permitiéndole reaccionar con tiempo todavía para llegar a las elecciones de 2012. ¿Cómo va a ser candidato al gobierno de España uno que no sabe gobernar ni su propio partido? (La imagen es una foto de Jaume d'Urgell, bajo licencia de Creative Commons).-

Se acabó la farsa.

La Corte Constitucional italiana ha devuelto la dignidad a los italianos impidiendo que se consume la última arbitrariedad de ese indeseable que tienen de primer ministro de ponerse por encima de la ley. Un intento de reventar el Estado de derecho atacándolo en su misma médula, el imperio de la ley y el principio de igualdad de todos ante ella con igualdad de responsabilidad. La intención de que alguien, él en concreto y dos o tres cargos más, para disimular, no sean responsables por sus actos.

De inmediato ha dicho Il Cavaliere que la decisión es política y que el Tribunal Costitucional está lleno de izquierdistas que, ya se sabe, lo persiguen contra todo derecho. Estos personajes, estos Berlusconis, Aznares y Rajoys son iguales en todas partes: juegan a la democracia y al Estado de derecho mientras les conviene pero, si las cosas se tuercen, tiran contra ellos, los deslegitiman porque, en el fondo, no son demócratas; ni siquiera son políticos sino sátrapas arbitrarios acostumbrados a hacer lo que quieren e imponer su voluntad por los medios que sea en la esperanza de que gozarán siempre de impunidad. El señor Berlusconi tendrá ahora que comparecer ante dos tribunales de justicia, a responder por sus hechos. Igual que es de esperar que algún día comparezca ante otro el señor Aznar por la canallada de la invasión del Irak decidida contra toda legalidad internacional en las Azores.


(La imagen es una foto de fabbio, bajo licencia de Creative Commons).

Bravo por El Prado.

Ayer me dejé caer por las nuevas salas que el Prado ha abierto con el fin de pagar una deuda antigua que la casa tenía con la pintura española del XIX, que ya era hora. Estupenda decisión que permite a los visitantes no salir ya del museo con la idea de que la pintura española se acaba con Goya. Ni mucho menos.

Las salas están muy bien (aunque aún falta información sobre algunas piezas, incluidos cuadros celebérrimos como el de Los poetas contemporáneos, de Esquivel) y perfectamente situadas después de Goya. Es un placer visitarlas y encontrar en ellas obras que generaciones enteras sólo han podido contemplar en reproducciones, como El fusilamiento de Torrijos y otros. Es verdad que no es, en general, una pintura deslumbrante, original o rompedora, que está sometida a gustos extranjeros y encorsetada por convenciones de género; pero es nuestra, narra historias españolas y cuenta con lo mejor que este arte ha dado en cada momento, desde Alenza a Sorolla, pasando por el inefable Beruete. Prometo seguir en algunas entradas posteriores. De momento no me resisto a traer aquí al bueno de Pradilla con su fabulosa Juana la Loca, una imagen que, al menos yo y, supongo, todos los de mi generación, tenemos grabada desde pequeños, de los libros de bachillerato y que vivió siempre ajena al museo, alojada en el Casón. Obsérvense los gestos de todos los acompañantes de Juana. Son los del pueblo español ante los disparates tradicionales de sus clases dirigentes.

Bien por El Prado. Aplausos.