Incluyo aquí unas declaraciones de Palinuro al grupo de medios Sputnik, que cubre el mundo hispanohablante, España y América Latina en lo fundamental. Se trata de explicar a un público internacional el sentido de un proceso de extraordinaria importancia a cuarenta y ocho horas de que este alcance uno de us principales objetivos intermedios: saber cuánta gente esta a favor de la independencia en Cataluña y cuánta no. Un dato fundamental a la hora de arbitrar después políticas de uno u otro tipo, pero que el gobierno español ha tratado de ignorar a toda costa, prohibiendo un referéndum que lo aclare. Lo importante, lo decisivo de las elecciones del próximo 27 de septiembre es que van a despejar esta cuestión por encima de la voluntad de ese gobierno español que, en una obcecación típica del sostenella y no enmendalla, sigue sosteniendo que estas elecciones son unas autonómicas ordinarias de las que no podrán derivarse otras consecuencias jurídicas que las que normalmente se desprenden de estas consultas.
Reproduzco a continuación el texto literal de las declaraciones:
El Gobierno de Mariano Rajoy está dispuesto a ir donde sea porque están obsesionado con el proceso independentista catalán, sostiene a Sputnik Nóvosti Ramón Cotarelo, catedrático de Ciencia Política y de la Administración en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).
En 2012, "un millón y medio de personas salieron a la calle" en Barcelona con motivo de la fiesta nacional de Cataluña reclamando que "somos una nación", pero para "el presidente de los sobresueldos entonces era solo una algarabía", denuncia el profesor madrileño, que dice que se siente muy cerca de la ideología de los anticapitalistas e independentistas de la CUP (Candidaturas de Unidad Popular).
El Gobierno "está dispuesto a ir a donde sea, a cometer todo tipo de ilegalidades, a suprimir el Estado de derecho, a imponer un estado de excepción exclusivamente para los catalanes", denuncia el politólogo.
Para Cotarelo, la decisión del Partido Popular de hacer una reforma exprés del Tribunal Constitucional para poder sancionar al presidente catalán Artur Mas en caso de incumplimiento de la ley, "es una barbaridad" que confirma que el Alto Tribunal "es un órgano de partido".
La confrontación entre España y Cataluña y el apoyo de los socialistas del PSOE a Rajoy está "probablemente allanando el terreno para que, llegadas las circunstancias, se forme una gran coalición PP-PSOE".
Una apuesta que sería correcta para "un país normal", pero España "no es un país normal, ni el PP es un partido normal", y el PSOE con esta estrategia "demuestra que todos son iguales".
El PP compara la independencia de Cataluña con la dictadura franquista
Cataluña celebra este domingo 27 de septiembre unas elecciones regionales, que las formaciones independentistas ven en clave plebiscitaria ante la posibilidad de convocar un referendo pactado con el Gobierno central.
Rajoy ha convocado elecciones generales para finales de diciembre de este año.
Para Cotarelo, "no se puede poner al mismo nivel la responsabilidad de Cataluña y la de España" en la cuestión catalana, ya que el Gobierno de España "tiene el Ejército, la Policía, el Tribunal Constitucional, lo tiene todo", mientras que Cataluña es "una comunidad autónoma que casi no tiene nada, solo el apoyo de la gente".
"Hay una mayor responsabilidad en el Gobierno de España que ha hecho todo lo posible para llegar a esta situación de enfrentamiento", explica a esta agencia el catedrático, quien opina que si en el Ejecutivo español hubiera "un demócrata las cosas hubieran sido distintas" y "no un autoritario y un franquista como hay ahora".
Rajoy reitera que no habrá independencia en Cataluña
"En el colmo del disparate la derecha ha internacionalizado el conflicto", ironiza Cotarelo, después de acusar de que eso "era una argucia de los nacionalistas de ir por ahí buscando el apoyo internacional y ahora son ellos".
El Gobierno español, en su opinión, "está haciendo el ridículo de la forma más espantosa" porque le están pidiendo a Angela Merkel que "les saque las castañas del fuego"; y también al británico David Cameron: "¿El de Gibraltar viene a defender la integridad territorial española?, se pregunta.
El catedrático opina que la única solución para arreglar el reto catalán es celebrar un referéndum, pero la única posibilidad de que Rajoy lo convoque es que los europeos se lo impongan, concluye el politólogo, que no cree que la sociedad catalana esté fracturada ante el desafío independentistas, como demuestran las encuestas.
"Todas las sociedades están divididas porque los temas colectivos son siempre muy complejos", afirma.