En las primarias de hoy en New Hampshire (NH) todo el mundo se juega mucho. Más los demócratas que los republicanos porque el cataclismo político está teniendo lugar en las filas demócratas. El debate de TV el sábado pasado fue muy significativo. Un comentarista de prensa señalaba que, de los cuatro candidatos demócratas, Clinton, Obama, Edwards y Richardson, sólo había un wasp: Edwards. Los demás eran una mujer, un negro y un hispano. Tal cosa no se da entre los republicanos, que son todos más o menos wasps.
El caso es que la señora Clinton se puso agresiva con Mr. Obama y éste cerró filas con Edwards contra la ex-primera dama a la que acusaron de representar el statu quo, concepto peligroso en una campaña en la que la palabra mágica resulta ser "cambio".
Mrs. Clinton lleva un par de semanas cediendo en las encuestas ante Obama. Ayer cerraba la cosa como se ve a la derecha: Obama 34%, Clinton 31%, Edwards 20% y Richardson 9%. A última hora, la CNN daba a Obama una ventaja de nueve puntos sobre Clinton. De los republicanos hablaremos luego. Así que, efectivamente, la seguridad de la señora Clinton se ha desvanecido y la oleada de cambio, voto joven y, sobre todo, voto independiente (decisivo en unas primarias) está empujando al senador por Illinois al triunfo en NH y, quizá, en los EEUU. Tanto peligro representa el negro newcomer que el propio Bill Clinton intervino ayer en pro de su esposa con cuatro mítines en NH, mientras que ella atendía dos. Es difícil oponerse a la oleada de cambio cuando ésta ha comenzado a manifestarse y mucho más, me temo, recurriendo al esposo ex-presidente. Sin duda, como decía la propia señora Clinton, el hecho de que una mujer llegue a Presidenta de los EEUU es un gran cambio. Pero más lo será que llegue un negro, supongo. Por ese lado hay poco que hacer. En el mitin de ayer con Bill Clinton había 1.000 personas; en el de Mr. Obama, 3.000.
En el último momento, en un acto por la noche Mrs. Clinton, respondiendo a una pregunta personal, se emocionó y estuvo al borde las lágrimas. Se aprecia en el video.
Por supuesto, la cuestión es si el momento es genuino o una impostación para vencer a las encuestas negativas. La señora Clinton ha pasado de la seguridad del vencedor in pectore a jugar la posición del underdog. Las cosas están tan reñidas que pudiera darle buenos resultados si la gente cambia de opinión. Pudiera ser; no es imposible. Pero pinta muy negro para la otrora confiada senadora por Nueva York.
Del lado republicano, las cosas parecen más simples... en NH. Un Estado de la vieja Nueva Inglaterra en la que todo el mundo es moderado, demócratas y republicanos, parece alinearse detrás de McCain, dejando en segundo lugar al millonario Mr. Romney y casi empatados al ultrarreaccionario Huckabee (ganador por K.O. en Iowa) y Giuliani que dice estar reservándose para el supermartes de febrero. No hay un cuadro claro del lado republicano...salvo que echemos una ojeada a la última encuesta de Gallup publicada ayer y correspondiente a las tendencias de voto a nivel federal.
Ahí sí que hay sorpresas. Entre los demócratas llama la atención el empate entre Obama y Clinton (de diciembre hasta hoy la señora Clinton ha perdido doce puntos porcentuales y el señor Obama ha ganado seis), lo que puede ser una razón suficiente para que la ex-primera dama decida retirarse de la contienda si su derrota en NH es muy elevada.
En el campo republicano la sorpresa es mayúscula: el excura Huckabee ha ascendido como un meteoro desde diciembre pasado y ahora lleva la delantera a todos los demás candidatos, con cinco puntos de ventaja sobre Giuliani.
O sea que es posible que, al final, los dos contendientes por la Casa Blanca sean Huckabee y Obama quien, por cierto, ironías del destino, se llama Barack Hussein Obama.
Incidentalmente, aprovecho para llamar la atención sobre las diferencias entre los procesos electorales estadounidenses y los europeos, específicamente el español. En España, los dirigentes de los partidos (Secretario General en el PSOE, Presidente en el PP) son los candidatos a la presidencia del Gobierno. La única excepción es el PNV. ¿Y quién ha decidido que sea así? En el caso del PP, la omnímoda voluntad del Presidente anterior y su poderoso dedazo; en el caso del PSOE, unas primarias cerradas exclusivamente a los militantes del partido, que son una ínfima minoría del censo español. En los EEUU casi nadie conoce el nombre de los líderes nacionales del Partido Demócrata y el Repúblicano y, fuera de los EEUU, nadie. Los candidatos los deciden en caucuses y primarias los electores de todo el país. Toda comparación es odiosa pero, cuando se haga de menos la democracia estadounidense, piénsese en ese dato.
(La imagen es un óleo de Benjamin West, un pintor de temas históricos y heroicos, titulado El tratado de Penn con los indios, de 1771-1772, que se encuentra en la Pennsylvania Academy of Fine Arts en Philadelphia).