Ya está. Los sindicatos han hecho la convocatoria. Hay algo simbólico en que los viejos sindicatos "de clase" se hayan adelantado a la blogosfera. El lema y la motivación no me hacen muy feliz. Los encuentro algo ambiguos y un poco timoratos pero supongo que es el precio que hay que pagar por conseguir que sea lo más unitaria e inclusiva posible, esto es, una manifa contra el terrorismo, por la paz, que no vaya a la yugular del Gobierno, que apoye a las "instituciones democráticas" y deje abierta la opción del restablecimiento del proceso de paz. ¿Qué puedo decir? Me resulta enternecedor y muy edificante que los sindicatos salgan en defensa de las instituciones democráticas. Sí señor, eso es instinto porque lo que está en juego con la ofensiva de la ultraderecha y los neonazis es, precisamente, la democracia en nuestro país. La democracia: un fin en sí mismo. Recuérdese a Azaña: "la libertad no hace felices a los hombres; los hace hombres." Yo voy. Pásalo.