dijous, 10 de desembre del 2015

La impunidad de la delincuencia.

Daba mucha risa ese atildado joven portavoz del PP, diciendo en el debate de TV1 que en España no hay impunidad de la corrupción. Recordaba a su jefe, el de los sobresueldos, diciendo que en España "el que la hace la paga". Pero él todavía no ha devuelto ni un ochavo de los 400.000 machacantes en negro que, según Bárcenas, se llevó desde los años 90, mientras decía a la gente que no llegaba a fin de mes.

O sea, la corrupción sí queda impune. ¿Cuántos ladrones del PP hay en la cárcel? ¿Cuántos en libertad? En la cárcel están Fabra, Matas, Díaz Ferrán, a los que ya era imposible no juzgar y condenar. Y ¿cuántos están en libertad y, mientras no sean juzgados y condenados, serán "presuntos"? Y ¿qué digo condenados si muchos imputados y procesados van en las listas electorales de esta también presunta organización de malhechores? Legión, son legión.

Y, cada día que pasa, aumenta el goteo de sinvergüenzas. Hace un par de meses se supo que el embajador Trillo y el diputado Pujalte -ambos látigos peperos contra la corrupción del PSOE- cobraban suculentas comisiones por asesorar verbalmente a empresas que luego obtenían contratos públicos de las administraciones gobernadas por el partido de los señores Trillo y Pujalte. Una granujada de las muchas que se dan en esta manga de pillastres. Ahora se sabe que otro embajador, Gustavo de Arístegui, y otro diputado, Gómez de la Serna, ambos del PP, llevaban años pillando cantidades astronómicas por comisiones al conseguir jugosos contratos para empresas a las que representaban mientras estaban sometidos las incompatibilidades que no respetaban.

¿Que no hay impunidad para la delincuencia en España? Vamos, hombre, Casado, no haga usted más el ridículo. Preguntado Rajoy qué le parecía que estos dos sujetos, el embajador y el diputado cobraran sobresueldos, contestó que, por lo se le alcanzaba todo era muy normal.  Claro, ¿qué va a decir un payo que estuvo veinte años cobrando sobresueldos en negro? Que todo lo que sea forrarse con dineros públicos está fenomenal.

Y nunca pasa nada. Sostenía Escolar en un gran artículo eso mismo, que no pasa nada. Aznar pillaba comisiones, al parecer, siendo presidente; Naseiro, el contable, se lo llevaba crudo; en Bankia circulaban las tarjetas black, para darse el vidorro a costa de los contribuyentes; el ministro Soria veranea en hoteles que le financia la trama corrupta; Rajoy gasta en atender a su padre el dinero que no quiere gastar en los dependientes. Nunca pasa nada. Nadie dimite. Nadie se mueve. Todo esto es muy "normal".

Ayer mismo, día  mundial contra la corrupción, todos los partidos catalanes firmaron un acuerdo contra la corrupción. Todos menos el PP. Naturalmente, no tiene sentido firmar pactos contra algo contra lo que no se tiene la menor voluntad de luchar porque, entre otras cosas, uno mismo se beneficia de ello, lo fomenta y ampara.

Y no se tiene la voluntad de luchar porque la España de la derecha es el reinado mismo del robo y la estafa.

El mismo pollo pera concluía en el debate de TV1 que no era de recibo vincular a la Casa Real con la corrupción. Es posible que la hermana del Rey y su marido, Urdangarin, no sean miembros de la Casa Real en sentido estricto. Todo depende de cuál sea el sentido estricto de "Casa Real". Y el Rey jubilado. ¿Tampoco forma parte de la Casa Real? Y qué explicaciones ha dado este personaje de sus relaciones con Corinna zu Seyn Wittgenstein y quién las financiaba o del origen de su fortuna, calculada por la revista Forbes en 2.000 millones de dólares?

¿Qué no existe impunidad? Lo que no hay es justicia. La nueva reforma de la ley de enjuiciamiento criminal, al reducir el plazo de instrucción, ¿pretende algo distinto que los corruptos, ladrones y estafadores se vayan de rositas porque sus causas quedarán archivadas?

¿Cómo que no hay impunidad de la delincuencia si la han convertido en ley?