El país está en estado de shock, como si le hubieran administrado una de esas descargas eléctricas, los llamados electroshocks, con los que se creía que se curaba a alguien y dejaban a la gente peor que estaba, pero con mucho miedo.
Según parece y supuestamente, por supuesto, el Rey tenía una amante alojada a cuenta del erario público en un palacete contiguo a su residencia. Esto es algo que puede pasarle a cualquiera, (el tener una amante estando casado, no el usar palacetes de picaderos) y allá cada cual con el rol que interpreta en la comedia: el marido, la amante, la esposa fiel. Las cosas de la vida privada de la gente. Pero es que no es vida privada pues la mentada realizó labores de mediación por cuenta del gobierno español, delicadas, secretas, protegidas por los servicios de inteligencia. Una historia de Mata Hari, que ya es suficientemente pintoresco. Pero es que esta Mata Hari cobraba una comisión del 3% por sus gestiones y en cuentas en Suiza. Cobros opacos, en Suiza, una persona que trabaja "en interés de España" en colaboración directa con la Corona y coordinación con los servicios secretos españoles. Una 007 germánica. ¿Y los asuntos? Complicados negocios de fondos árabes, explotación de energía, pero siempre negocios, alguno de los cuales tiene un sospechoso parecido con una estafa, apadrinados por el Monarca. ¿Y si la amante llevara su amor al extremo de actuar también como broker de su amado?
El Rey tiene un yerno que mejor le fuera no tenerlo porque, con sus aventuras al estilo del neorrealismo italiano, el mozo pone en peligro la continuidad de la institución monárquica.
Del Rey abajo, el gobierno y el partido del gobierno. Docenas de cargos públicos del PP imputados en todo tipo de ilegalidades, estafas, malversaciones, etc. Por doquier, en Baleares, Valencia, Madrid o Galicia. La trama Gürtel es una empresa de corrupción de tamaño industrial y parte de sus fechorías ha sido contribuir supuestamente a la financiación ilegal del partido, la peor forma del juego sucio. A la Comunidad de Madrid le queda por explicar si FUNDESCAM pagaba los gastos electorales del PP.
Y algunas personas dentro del partido. El extesorero, muy en la línea de los anteriores ocupantes del cargo, se ha enriquecido y tiene además a la plana mayor del PP, según parece, cogida por el gañote. Ahí están las balbuceantes, absurdas, comparecencias de Cospedal, Floriano, Pons y el silencio aterrorizado de Rajoy. Solo así se explica que se haya seguido pagando un suculento sueldo a Bárcenas el innombrable de 23.000€ al mes al tiempo que se afirmaba con rostro pétreo que el afortunado no tenía nada que ver con el partido. Generosas retribuciones que más parecen resultado de una extorsión. El caso es que toda esa pasta -incluidos los 220.000 euros on los que el PP va a agradecer los servicios prestados a Sepúlveda, el del Jaguar, salen del dinero de los contribuyentes. ¡Eso sí que es un finiquito como dios manda! Ejemplo sin duda de los buenos resultados de la reforma laboral.
El presidente del gobierno, que se subió el sueldo un 26% mientras pedía austeridad para los demás, todavía no ha explicado clara y fehacientemente si alguna vez cobró los dineros ilegales de los que hablan los papeles barcénigos. Pero se marcha a la instalación del sucesor de San Pedro en un séquito de once personas, de ellas, tres clérigos y los correspondientes guardaespaldas. Todo eso, igualmente, a costa del contribuyente, un contribuyente sometido por otro lado a una política de expolio sistemático.
El grado de deterioro, de descrédito, de desprestigio de las instituciones roza la chirigota nacional. Esto no puede seguir así. Hay que hacer algo.
(La imagen es una foto de N (Aleph), bajo licencia Wikimedia Commons).