dilluns, 9 d’abril del 2007

Cuando el paraguas habla.

Vale, en el día de la "Patria Vasca", discursos vascos: el de ETA en Gara, el del PNV y el señor Otegi en sus respectivas celebraciones. Según los señores Ibarretxe e Imaz, ETA tiene que disolverse y Batasuna que renunciar a su paraguas; no es muy congruente el doble deseo porque si ETA se disuelve, no tendrá paraguas que ofrecer; pero es claro y contundente. Igual que el del señor Otegi para quien las declaraciones de ETA son muy positivas y esperanzadoras. Cuánto, se verá a continuación.

No se dirá que el País Vasco no es peculiar: estamos igual que hace treinta años, pero sin muertos, gracias a los dioses.

Vamos a las declaraciones de la organización armada del Movimiento Vasco de Liberación, al decir aznarí. Afirman los del Gara que:

En esta entrevista realizada por GARA, ETA detalla sus reflexiones, objetivos y compromisos. Está realizada en euskara, pero por su valor periodístico se ofrece también la traducción íntegra al castellano en este cuadernillo especial."
Lo que quiere decir que si la tal entrevista no tuviera "valor periodístico", la dejarían en Euskera. Eso se llama "normalización lingüística", supongo.

Los de ETA no dejan lugar a dudas respecto a sus intenciones hoy por hoy:

"Y eso es lo que manifestamos, que ETA seguirá luchando hasta conseguir sus objetivos fundacionales. No queremos abrir ningún debate. Hoy, y en las condiciones que vive nuestro pueblo, pensamos que siguen vigentes las razones para utilizar la lucha armada y mientras sea así seguiremos en ello. Una cosa es ofrecer un cese de las acciones, ya que entendemos esto también como un instrumento de nuestra lucha, porque entendemos que el enemigo o la otra parte también entra en una situación de «alto el fuego» o de distensión. Pero otra cosa bien distinta es reflexionar que practicar la lucha armada no es necesario. Esa situación la vemos lejana en las actuales condiciones. Eso podrá llegar cuando veamos que en Euskal Herria hay suficientes condiciones democráticas y suficientes garantías para mantener esa situación.
El parrafito es la monda porque, debajo del tableteo de las ametralladoras, no quiere decir literalmente nada ya que nada es decir que no se abandonará la "lucha armada" (o sea, los asesinatos de inocentes) en tanto no haya suficientes condiciones democráticas y suficientes garantías para mantener esa situación, porque ¿cuándo puede haber tales condiciones y garantías? Mañana mismo si a Josu Ternera y sus amigos les da por decir que ya las hay. Esto es, el párrafo se resume del siguiente modo: "sigo con la lucha armada y la pararé cuando me dé la gana".

Una última observación. Entre los comentarios que he leído sobre esta pieza de pensamiento no he visto que nadie repare en la mala baba del párrafo siguiente:

"Para empezar, los ataques armados del 11-M en Madrid acabaron con ocho años de gobierno de Aznar y el PSOE llegó al poder. Eso provoca un cierto cambio y, siguiendo con la lectura que hacíamos entonces, al analizar cómo afectaría ese cambio al conflicto que padece Euskal Herria, preveíamos que iría en función de la voluntad de los nuevos líderes del PSOE."
Como están las cosas, ese modo de hablar es un deliberado intento de dar pábulo a la teoría de la conspiración, dejando en el aire la sospecha de que esos "ataques armados" hayan sido obra suya. Supongo que hoy, el señor Del Pino, El Mundo y Libertad Digital estarán sacando chispas a esta confesión de la autoría etarra del 11-M.

Precisamente la parte más chusca de todo este episodio: si la lucha armada y otras acciones contra el odioso imperialismo español consisten en sumarse a los de la teoría de la conspiración, que les hagan un sitio en la COPE.