divendres, 23 de març del 2007

La poligamia en casa.

Un hecho fortuito, el incendio de una vivienda en Nueva York en el que han muerto cinco niños, ha permitido descubrir que entre los inmigrantes en la Gran manzana no es infrecuente la poligamia. Saco la noticia del New York Times Como se trata de un delito penado con prisión y causa de expediente de expulsión del país,

El cuadro, de Gyula Törnai, hacia 1865, "En el harén".

la práctica existe clandestina; pero existe, y nadie sabe qué extensión puede alcanzar. A la vista de lo que allí sucede, la pregunta que se le plantea a uno en relación con Francia, con España, etc es ¿y no estará pasando aquí lo mismo? Los inmigrantes musulmanes tienden a vivir en núcleos cerrados, apenas se abren a contacto con otros grupos étnicos, el Corán permite al hombre tener hasta cuatro mujeres. La cuestión es saber cuántos polígamos hay en España.

Y con esto del Corán hay que tener cuidado. Acabo de leer que una jueza alemana ha fallado admitiendo como base para su fallo la sura del Corán en que se permite pegar a la mujer díscola. Algo similar, aunque en sentido contrario, es decir, esclarecido, ha pasado en Inglaterra, en donde los Lores Judiciales (el Tribunal Supremo) otorga a los colegios la facultad para impedir que las escolares musulmanas aparezcan con los velos faciales.

Como se ve, el problema es siempre el mismo, esto es, el Islam, que choca frontalmente con nuestros principios básicos. Si aceptamos la poligamia, las palizas a las mujeres y el velo facial estamos aceptando la existencia de ciudadanos de segunda entre nosotros. A su vez, una integración completa en la sociedad de acogida, por lo que se ve, es imposible. La cuestión es si somos capaces de insistir en que hay que acatar nuestros valores básicos sin adoptar actitudes proteccionistas o incluso puramente racistas.