Parte del drama del rescate español se representa en el traspatio de Rinconete y Cortadillo. Interviniendo españoles era inevitable que hubiera su dosis de picaresca. Aunque no se precisara tanta. Cuando los europeos comprendieron que era imposible sacar a Rajoy ni a ninguno de sus colaboradores verdad alguna, que no hacían sino mentir, contradecirse unos a otros, negar la evidencia y falsear los datos, obligaron a una auditoria externa de la banca De Rajoy, su gobierno y el Banco de España, al frente del cual han puesto a uno de los suyos, o sea, otro pillastre embustero, se fian menos que del color del camaleón.
Para la derecha, Palinuro lo ha formulado varias veces, gobernar es mentir, no decir una verdad ni a tiros, fabular, engañar, desviar la atención y, si se puede, acusar a los demás de hacer lo que ella hace, aunque diga lo contrario. Por ejemplo, robar a mansalva. Hablando de robar y sin que por supuesto, tenga algo que ver con este verbo, ahí va una relación de nombres de relevantes políticos de la derecha con un punto en común. Adivinen cuál: Fabra, Camps, Costa, Ripoll, Bárcenas, Mata, Sepúlveda, Mato, Crespo, Galeote, González Panero y no sigo porque me quedo sin entrada.
El último embuste de Rajoy consiste en sostener que el rescate (al que sigue sin llamar rescate) concedido a España no se concede a España, sino a los bancos españoles y serán estos, no España, quienes respondan de su devolución. Irritada con la terca granujada de Rajoy, Merkel ha señalado por enésima vez que el rescate es a España y del dinero responderá España. Como es lógico pues es España, o sea Rajoy, quien lo ha negociado, no Botín ni Perico de los palotes, sino Rajoy sus ministros del gobierno en nombre de España. ¿Hay alguien en Europa y en el mundo que piense que quien firma un contrato no es quien está obligado a cumplirlo? Rajoy dice una cosa, normalmente una mentira y Merkel dice otra, normalmente la contraria. ¿Hay alguien en Europa y en el mundo que dude de que se hará lo que diga Merkel y no Rajoy que es un cero mentiroso a la izquierda?
Entre tanto, en esta situación, conviene preguntarse por lo que hace el PSOE a los 7 meses de haber perdido estrepitosamente las elecciones frente a un gobierno que no hace si no mentir. Pues, aunque parezca insólito, tomárselo en serio. Rubalcaba lleva meses ofreciendo lealtad, seriedad, sentido de Estado, colaboración a este gobierno de charlatanes, embusteros y tunantes sin otro objetivo que engañar a todo el mundo para mantenerse en el poder y que los suyos sigan robando. Es irresponsable ofrecer pactos de Estado a quien no tiene ningún sentido de Estado sino de conveniencia de partido. Se entiende fácilmente: presa de su pasado, de sus relaciones con un PP que no es otra cosa que una cuadrilla de avispados para hacer negocios a cuenta del erario público, Rubalcaba sigue viviendo en 2004. El PSOE tiene visión de Estado y el PP no.
Pero esa ya no es la situación ni el caso. Rubalcaba vive en la luna. Al PP el Estado y, por supuesto, la Nación, le traen al fresco. Lo que quiere es ocultar su responsabilidad, evitar que se le culpe por la burbuja del ladrillo, por el expolio de la Gürtel, librarse del fantasma de bankia, de Caja Madrid a la que arruinó a base de robar, de enchufar a parientes y amigos y de utilizar un banco para todas sus maniobras sucias, que han sido muchas, desde el Tamayazo hasta la quiebra probablemente fraudulenta de la entidad. Menos mal que el 15-M ha presentado ya la oportuna denuncia porque lo que es el PSOE, ya se ve, está dispuesto a hacer causa común con el PP y a hablar en Europa con una sola voz, como gusta decir Rubalcaba.
¿Una sola voz? ¿La de la mentira, el engaño, la picaresca, el embuste y el latrocinio?
No es el momento de confundir (más) a la gente; no es el momento de la unidad nacional con quienes ya han demostrado que la Nación y el Estado no les importa en absoluto pues lo único que los mueve es el poder, los cargos, los enchufes, los sueldazos y privilegios, los robos, los findes caribeños, el expolio de todo lo público, los negocios propios y los de los parientes y amigos.
O el PSOE da un giro de 180º, marca distancias con este gobierno de incompetentes y pícaros que tratan de engañar a los europeos, se constituye en auténtica oposición, recapacita y elige una dirección de gente más capaz para los tiempos que corren o sus resultados electorales serán cada vez peores. Aunque la dirección actual crea otra cosa, el voto de izquierda no es cautivo.
(La imagen es una foto de La Moncloa en el dominio público).