Irlanda, la otrora próspera Irlanda, orgullo del modelo de desarrollo neoliberal, adelantada de la e-economía y de la cristiandad, cultura de la avazadilla del pelotazo, ejemplo de la flexibilidad del capitalismo 2.0, habiendo visto las orejas al lobo, con la economía al borde de la quiebra, teniendo que recurrir al FMI como si se tratara de Guatemala, ha decidido reconsiderar su orgulloso "no" anterior al Tratado de Lisboa, cambiándolo por un "si" masivo, sin condiciones. Todo antes que verse a la intemperie. Les ocurre hoy a los irlandeses lo mismo más o menos que les pasa a los islandeses, también amenazados de ruina y habiendo descubierto una súbdita pasión europeísta capaz de fundir los hielos eternos de su amada tierra. Parecido con los irlandeses que han dicho "sí" a esta Europa de abortistas, descreídos y sin Dios.
Con la sumisa aceptación de Irlanda en el bolsillo, los estrategas de la Unión Europea dan por consolidado el marco político lisboeta. Los dos últimos rezongones, Polonia y Chequia, no son verdaderos problemas; basta con que Alemania apriete un poco las clavijas para que los checos se acuerden de que, gracias a Jorge Podiebrad, ellos cuentan entre los primeros paladines medievales de la unión europea.
Así que todos de enhorabuena con ese resultado del referéndum irlandés de rectificación. Ahora ya podemos dedicarnos a fortalecer la unión europea para lo cual se prevé que el señor Tony Blair formalice su candidatura para el nuevo cargo de presidente de la Unión. Imagínese qué felicidad para quienes sostenemos la teoría de la chapuza europea: nombrado el señor Blair, tendremos al frente de Europa a dos de los cuatro paladines de las Azores, el dúctil señor Barroso, anfitrión de aquel aquelarre de buitres y el fogoso señor Blair, Lawrence de Bagdad, fabricante de trolas mundiales sobre las armas de destrucción masiva al servicio de los piratas gringos. Es un momento excelente para confiar en las posibilidades de Europa como potencia independiente de los Estados Unidos.
Y no sólo eso, la chapuza europea ha alcanzado el grado del sublime oriente habiendo puesto al zorro inglés al cuidado de las gordas gallinas continentales. Menos mal que en el próximo semestre se inicia la presidencia española de la Unión que añadirá sin duda a la chapuza un sólido proyecto de alianza de las civilizaciones seguramente alentado pot los turcos.
(La imagen es una foto de Septem Trionis, bajo licencia de Creative Commons).