diumenge, 11 d’octubre del 2009

Gürtel, Filesa y el camino de Santiago.

Hace unos días Palinuro publicaba una entrada titulada El mundo en blanco y negro en la que sostenía que el caso Filesa del PSOE no era como el Gürtel del PP básicamente porque: "Que yo recuerde, en el caso Filesa hubo financiación ilegal del PSOE pero nadie se enriqueció personalmente; es decir, nadie se lo llevó crudo como parece ser el caso con el PP. Por supuesto, ello no hace el delito de financiación ilegal menos odioso y en los dos casos hay delito. Pero los delincuentes no son iguales; ni mucho menos. Los del PSOE no iban a enriquecerse personalmente. No iban a "forrarse".

De inmediato varios lectores se me echaron a la yugular llamándome sectario y cosas peores porque en el caso Filesa se lo habían llevado crudo; con lo que se venía a implicar que, pues Palinuro no podía desconocer hecho tan obvio, aprobaba Filesa, si es que no se había beneficiado de él directamente, que nunca se sabe. Hoy, sin embargo, Jesús Maraña, a quien se supone bien informado, publica un artículo titulado La "berlusconización" como estrategia" y en el que se lee: "tratándose en ambos casos (Filesa y Gürtel) de delitos de financiación ilegal de idéntica gravedad, los inculpados por Filesa fueron apartados de sus cargos, cumplieron las sentencias y no se hicieron ricos". Otra cosa es que en otros escándalos de corrupción del PSOE, como los de Roldán, Rubio, Urralburu, etc los culpables estuvieran llevándoselo crudo y hasta saignant. Pero no en Filesa en lo que yo recuerdo. En todo caso está claro: Filesa no fue Gürtel. En Gürtel, además de financiación ilegal del partido ha habido presunto trinque para el peculio de cada cual; cosa que no pasaba en Filesa, lo que afirmo según mi leal saber y entender, en lo que recuerdo y sin mucho tiempo para chequear cada vez que alguien te cuestiona un dato que tienes en la memoria.

Sin duda esto del trinque es avatar personalísimo, de la conciencia de cada cual; pero cuando se generaliza en el seno de una organización, se convierte en una moda, en un comportamiento obligado si se quiere estar in: o trincas o eres un pringao que nunca saldrás de concejal de tercera. La diferencia es la que hay entre ideologías. En el PSOE queda algo de ideología (en el mejor sentido del término); poco, pero algo; en el PP la ideología es el trinque. Ha elevado el trinque a la condición ideológica. ¿Qué significa la "privatización" de todo lo público si no exactamente eso: trinque? Lo que añade Gürtel es que el trinque es masivo, coordinado, sistemático y a la remanguillé.


El principal implicado en la trama gurteliana sector naranja, el señor Ricardo Costa, amigo íntimo del Bigotes, se ha dejado el móvil inmóvil y está dando talón al camino de Santiago. Es poca cosa este Ricardo. No tiene el corazón de león de aquel homónimo suyo que se hizo una cruzada. Éste, de cruzada, justo la chaqueta y eso si se la regalan. Pero lo insólito del asunto es que el pollo pera haya convertido una dimisión/destitución en un suspense televisivo. El señor Camps no está para muchas consejas, él que a todos quiere un huevo, incluido el señor juez y todo le parece "bonito", de nuevo incluido el señor juez que, en efecto, está bonito pero de bonito tiene poco. Ahora ya queda sólo él en primera línea de dimisión que es lo único que puede hacer pringado como está hasta las cejas en dos ciénagas a falta de una: Gürtel y sus ridículas mentiras. En realidad lo que debiera de hacer sería pillar él también el camino de Santiago a pedir un milagro al santo porque en Valencia le huele el trasero un poquito pólvora. Bonita, eso sí.

(La imagen es una foto de compostelavirtual, bajo licencia de Creative Commons).