dijous, 30 de juliol del 2009

Gudari.

Hay que ver cómo ha quedado el edificio. Es asombroso que haya resistido de pie. Prueba de que la construccion debe ser sólida. Si este edificio llega a ser como la mitad de los que había en Aquila, en Italia, se derrumba y muchos heridos hubieran sido muertos. No se requiere más argumento para probar que hay que progresar, mejorar, construir casas cada vez más seguras, sobre todo para la gente que se encarga de nuestra seguridad.

Al margen de lo anterior es inevitable preguntar: ¿qué sentido tienen las casas cuarteles de la Guardia Civil? Supongo que habrá otros casos en la historia de la humanidad en que los cuerpos combatientes llevaban consigo a sus cónyuges e hijos. Las centurias romanas los llamaban pero una vez que se habían instalado en el limes, en la frontera. Pero habrá muy pocos casos. Da vergüenza ver cómo los medios claman al cielo la crueldad de ETA que pudo haber matado a 41 niños. ¡Por Dios, la mejor manera de no poner en peligro a esos niños es no llevarlos a vivir a un cuartel! Si los guardias civiles han de vivir acuartelados, que lo sean ellos, pero no sus familias. Éstas, que vivan por los alrededores. Claro, el problema es si en algunos lugares del país se encontrarían voluntarios suficientes para formar parte de la Guardia Civil, lo que obligaría a seguir contando con gente venida de otra provincia, región o nación. Es mucho más caro y se añade un problema de seguridad de órdago a la grande. Porque quien es capaz de dejar 200 kilos de dinamita ante un edificio con cuarenta niños, es capaz de ir a casa de uno de ellos, de siete años, por ejemplo, y descerrajarle un tiro en la cabeza.

De forma que, si el "conflicto" (situación magmática de imposible conceptualización) ha de prolongarse otros cincuenta años, sugiero cambiar a la Guardia Civil por el ejército. Al fin y al cabo los ingleses lo hicieron e Irlanda del Norte y no es tan demencial. Los soldados saben que viven en cuarteles. El único problema es de comunicación y propaganda porque sería imposible evitar la continua comparación con un "territorio ocupado" lo que, en cierto modo, sería cierto. Visto el emplazamiento de la casa-cuartel atacada está claro que el remedio tendría que ser para toda la plantilla de la Guardia Civil. Pero en las demás zonas del país se encontrarán voluntarios para el instituto armado. No estoy seguro de si eso sucedería en el País Vasco y en Cataluña. La alternativa también es retirar a la Guardia Civil.

Por lo demás, la valoración política del bombazo es nula. Habiendo decidido ya que no hay negociación posible, el Estado no tiene nada que decir en estos trances. Los etarras están a lo suyo, como siempre y nosotros, a lo nuestro, también como siempre. Ya se sabe lo de "vascos sí ETA no". Hasta que acabe la violencia. Cuando acabe, ya veremos.