dimecres, 24 de desembre del 2008

Nada de corporativismo: pura justicia.

¿Ven Vds., descreídos, como es cierto que ya no hay diferencias entre la izquierda y la derecha, según sostienen la señora Botella y otros intelectuales de similar abolengo? Como un solo hombre hicieron piña ayer los vocales-jueces del Consejo General del Poder Judicial, los de la izquierda y los de la derecha, para defender al pobre juez Tirado de este infame linchamiento mediático al que se le ha sometido a instigación directa del Gobierno. Vocales "progresistas" y vocales conservadores, con el presidente del Consejo a la cabeza, el ultracatólico señor Dívar, encontraron un terreno común ante el que palidecen sus respectivas convicciones ideológicas. ¡No podían dejar al juez en la situación que dictamina su apellido! Y no lo hicieron. Mil quinientos euros de multa entienden Sus Señorías que es pena suficiente para la negligencia del juez, consistente en dejar de ejecutar una sentencia que hubiera enviado a la cárcel a quien, estando en cambio en la calle, aprovechó para asesinar presuntamente a una niña. Mil quinientos euros. A los que el señor Dívar, tan católico, tan recto y tan justo habrá añadido para su coleto una docena de avemarías.

(La imagen es una foto de Público, bajo licencia de Creative Commons).