Aprovechando que ayer se festejaba el día de los Santos Inocentes me hice a mí mismo la inocentada de cambiarme el diseño del blog que ha quedado como puede apreciarse. Ya lo había intentado hace algo más de un mes, pero me di cuenta de que me llevaría dos o tres horas de trabajo, quizá más, y decidí posponerlo.
Era el león menos fiero de lo que yo lo pintaba. Lo único complicado es dar el primer paso, saltando del blog anterior al nuevo. Y aun así no hay problema, blogger guarda una copia de seguridad de todo el sistema de códigos de la configuración anterior; aparte de que también puede hacerla uno por su cuenta, por si vienen mal dadas. Luego, una vez que se decide la plantilla, ya funciona el sistema nuevo de layout que está tirado y, además, abre nuevas posibilidades. Pero lo más grandioso es que libera del noventa por ciento del html. Vamos, que no es de arrastre, como asegura blogger, pero le falta poco.
De todas formas, me queda un montón de cosas por hacer y por investigar. Se pueden poner videos de youtube en la columna de la derecha y muchas cosas más, como encuestas o álbumes de fotos. La red es un medio de comunicación coincidente con la sociedad global. Supongo que habrá gente que ponga el álbum de fotos de cuando se casó o una colección de imágenes eróticas; igual que hay gente que abre blogs para contar cómo se fabrican bombas caseras, cómo se cultiva la marihuana o cuántas versiones hay de la Biblia.
Lo que más agradezco del cambio es no tener que ver los mismos colores y los mismos adornitos del comienzo. Y otra ventaja nada desdeñable: cambiar ahora el diseño del blog (colores de fondo, tipos y tamaños de letras etc) es facilísimo, así que me aprovecharé de ello para ir cambiando cada poco tiempo.