divendres, 28 de setembre del 2007

Más convocatorias.

No son convocatorias propiamente hablando sino, en cierto sentido, jaculatorias. Con el botón rojo que también he puesto en la columna de la izquierda no es que me sume acríticamente a los de la "campaña a favor de escribir con una correcta ortografía en los blogs". Y digo que no lo hago acríticamente porque, en el fondo, eso de la "correcta ortografía" me resulta pelín romo. No ya porque la expresión en sí sea redundante, pues carece de sentido la "incorrecta ortografía", sino porque la misma idea de la ortografía no es del todo convincente. Estoy ahora releyendo un libro de mi bisabuelo, publicado originalmente en 1886, que se acaba de reeditar y del que hablaré en algún momento, que se aparta notablemente de la ortografía de hoy, pero era ortografía de ayer. ¿Quién determina qué sea ortográfico y qué heterográfico? El uso, la costumbre, nada más. Las lenguas pueden imponerse por decreto; su ortografía, no. Así que, aunque procuro no cometer faltas de ortografía (si bien en el diario escrito a veces aparecen cosas que erizan los cabellos), no creo deba llevarse el sentido de la ortografía de forma fanática. El "entrometido" de hoy es el más correcto "entremetido" de ayer.

Me sumo a la campaña porque el enunciado de "eres lo que escribes/eres como escribes" puede entenderse también en un sentido más profundo que el ortográfico. Yo cambiaría el lema por el de "eres como escribes/escribes como eres" y se entiende que nos referimos asuntos de contenido. Vamos que me apunto a una campaña para conseguir que la gente sea más civilizada, más educada, menos agresiva y faltona. Con eso de los anónimos se fomentan los más bajos instintos del personal.


Por otro lado, una amiga me hace llegar un artículo, una tribuna (desconozco en qué publicación) de don Javier Anso, director del colegio de San Felipe Neri, con el título Objeción de conciencia: sí, ¿pero a qué? en el que sostiene que no hay que hacer objeción de conciencia a la nueva asignatura de educación cívica. Se pregunta mi amiga cómo podemos airearlo. Bueno, ya lo he subido a Google y está aquí. Tiene gracia el señor Anso. Va como de cristiano militante, pero dice cosas de sentido común. Cómo estará la vida que, cuando un cristiano dice cosas de sentido común, los demás le aplaudimos como si fuera una atracción de feria.
Me atrevo a sostener que no hay no ya oposición, ni siquiera prevención en la sociedad hacia la nueva asignatura. La escandalera que ha montado la Iglesia y el PP tiene una finalidad muy concreta, consistente en derribar el Gobierno socialista como sea. Si es necesario para ello se cabalga el tigre de los sentimientos profundos de la gente, el porvenir de sus hijos y se hace cuanta demagogia se puede. Pero si la gente no secunda tanta acrimonia, los de la objeción de conciencia tendrán que avenirse a razones. O sea, hacer política y no gresca.

(La imagen es un lienzo de Carlo Maratta (interesante pintor barroco muy influido por Rafael), llamado "La aparición de la Virgen a San Felipe Neri", Palazzo Pitti, Florencia).