divendres, 1 de desembre del 2006

Los nuevos tiempos.

El personal de Telemadrid está que bufa con lo que entiende que es la apropiación partidista de la tele pública y la manipulación de sus contenidos. Pillo la noticia en El Plural: el comité de empresa de Tlm ha colgado una pág. güeb que se llama Salvemostelemadrid, en la que solicita firmas para pedir la destitución de Manuel Soriano, como DG del asunto. No veo la tele; ninguna. No tengo tiempo. La uso de monitor para ver las pelis que me interesan cuando puedo. Pero es igual, tengo noticias fidedignas sobre la situación de ese medio que ponen los pelos de punta. Pedir la destitución del DG probablemente será lo justo. Y tampoco es tan extraño. En algunos lugares del mundo los funcionarios públicos electos están sometidos a revocación. Los asimilados a funcionarios por designación también debieran estarlo.

Otra cosa es que uno crea que destituyendo al actual DG vaya a arreglarse el problema. Parece que el grado de sectarismo de esta Tlm es altísimo. Pero tampoco estaba mal con el señor Gallardón. Recuerdo la fulminante destitución de un director de informativos por un documental de "Informe semanal" sobre el País Vasco. El argumento del señor Gallardón fue que, en asuntos de terrorismo no se puede ser neutral. O sea, que nada de que hablara el señor Otegi que, por entonces, era diputado por una formación política legal.

Creo que no hay gobierno que se resista a manipular los mmcc audiovisuales. Pero el estilo del PP es avasallador. Siempre lo he dicho: como entre sus miembros hay muchos antiguos izquierdistas, marxistas, lectores de Gramsci y Althusser, se han aprendido lo de los "aparatos ideológicos del Estado" y los quieren a su exclusivo servicio. Que es lo que acusan a la izquierda de hacer. Si lo sabrán ellxs, que fueron de izquierdas y, qué diablos, en lo que se refiere a los mmcc siguen siéndolo. Con lo que no contaban los teóricos marxistas (ni sus antiguos discípulos) era con la red. Una simple pág. güeb puede ser un problemón para un/a gobernante. Si no, que le pregunten a doña Esperanza Aguirre qué tal va la campaña de 1europaraespe. Blogueros: gente temible mylady.
No todo había de ser problemas, tropezones, luchas, no señor, los amigos del InSurGente están que no caben en sí porque van de rompetechos, con crecientes cantidades de visitas. Lo que me alegro, tú, porque en ese periódico escribo un articulete semanal. Veo que los lectores, sin embargo, postean poco en comparación, por ejemplo, con El Plural en los que una noticia o artículo, a veces, da lugar a encendidas discusiones de horas, con cientos de entradas, generalmente a cargo de un par de docenas de nicks y, por cierto, un grado subido de agresividad verbal.

Puede que esté equivocado pero, si me dijeran que hiciera una adscripción de clase de los medios digitales, pondría InSurGente decididamente anclado en la "clase trabajadora/obrera" (con todas las reservas sobre la definición del concepto) y me basaría para ello precisamente en los comentarios: poca clase trabajadora/burocrática, que tiene más tiempo delante del ordenata, para navegar y entrar en peleas dialécticas sobre si la COPE miente más que la SER.

Tiempos nuevos, en que la izquierda recupera terreno perdido en los medios en el ámbito digital. Hacer un periódico de papel cuesta un potosí. Hacer uno digital está al alcance de economías raquíticas y tiene una difusión prácticamente ilimitada.

Pues eso, enhorabuena a InSurGente y al grupo de personas que se lo curran todos los días, Cacho, Erra, Jofa, Nico Si me salto a alguien, que me perdone. A fuerza de leer el periódico, va uno identificando los gustos y tendencias de cada uno de estos seres bisílabos y, ya que estamos en ello, se me ocurre una sugerencia, que sigan preguntando a los lectores para tener más información. Ahora sería interesante preguntar a qué hora(s) os leemos. Por supuesto, en el entendimiento de que se especifique de qué uso horario o, cuando menos, de qué hemisferio se trata. Al final, podéis hacer una especie de perfil de los lectores y elaborar unas estadísticas resultonas.


P.S.: no había terminado de postear lo anterior y ya estaba Iñaki Errazkin, cuya alacridad sólo es comparable a su combatividad, mandando una estadística completísima por consumo horario del InSurGente las 24 horas del día. Puede verse en el primer comentario a este post. A la vista de ella, me temo que no cabe hacer una consideración nitida sobre el tipo de audiencia, que crece según avanza el horario laboral y alcanza su punto máximo en lo que posiblemente sean las primeras horas después del curro. Iñaki incluye asimismo el page rank que deja al InSurGente en una cómoda posición, entre El Plural y El País.

Salut, les copains, ce n'est qu'un début. Continuons le combat