Es cansado tener que defenderse continuamente de ataques de gente sin escrúpulos. Pero, a veces, no queda otro remedio. Un pasquín digital, llamado El Triangle, del que hasta hoy no sabía nada, publica la pieza del titular en la ilustración, repleta de mentiras sobre mí y calumnias a TV3. Por supuesto, sin autoría, sin firma, sin citar fuentes, ni datos. Nada. Ignoro si llamaron a TV3, a contrastar su información. A mí, desde luego no. La pura inventiva de un tipo con un anónimo por si cuela. Periodismo español.
De esta ñorda están llenas las redes. Me la encuentro a veces: individuos que me acusan de vivir en Catalunya y defender la independencia catalana por interés material, por la "paguita" o la "pagueta" o no sé qué vocablos emplean estos catones batuecos. Si contestara a todos los ataques viciosos que recibo, no haría otra cosa. Y, francamente, no tengo mucho tiempo libre, aunque sí aguante y paciencia para soportar esta basura, ya que no se me oculta que su razón de ser no soy yo, sino la causa que defiendo. Ahora, sin embargo, se trata de un medio digital que, probablemente, se apunta a la práctica del "calumnia que algo queda". Y como no me da la gana de dejar que se calumnie la causa y a las personas que aprecio, rompo la costumbre y contesto para que, en efecto, le quede algo al fulano o fulana del anónimo para el recuerdo.
Es falso que haya cobrado o cobre nada por mis intervenciones en TV3 o cualquier otro audivisual catalán, público o privado. Nada, ni un euro por las conferencias, actos, xerradas, etc. Nada. Kilometraje y pernocta, si se tercia. Y punto. El resto, cero. Y nada es nada ¿queda claro? Por tanto, falsas son las cantidades que el panfleto anuncia de 5.000 y 8.600 euros. Una falsedad tanto más descarada cuanto que el autor o autora de esta infamia, ha tenido buen cuidado de contabilizar al minuto mis apariciones, los lugares, si estoy o no sentado, si llevo a no lazo amarillo, los temas y hasta los contertulios. ¿Por qué no comprobó también los (inexistentes) dineros? Está claro, porque se trata de mentir y difamar a alguien con apariencia de veracidad, mostrando que se han hecho unas indagaciones que no se han hecho.
Y todo para llegar a la irrisoria conclusión de que o "lo hace gratis o alguna razón impide que el pago de sus colaboraciones se haga público en el portal correspondiente de la CCMA". Como es evidente que el espabilado español no cree que nadie pueda actuar gratis en estos asuntos, acaba acusando indirectamente a TV3 de ocultar información, quién sabe si de cometer falsificación en documento público. En lugar de TV3 y "Tot es Mou", yo me querellaría por calumnia.
Es obvio que al escriba difamador no le cabe en lo que tenga donde los demás tienen la cabeza la idea de que alguien no sea como los Hermann Tertsch, Sánchez Dragó y otras figuras del patio de Monipodio español. Estos y muchos otros pasaron (algunos siguen) años cobrando ingentes cantidades de dineros públicos en TeleMadrid por decir tonterías y hacer propaganda reaccionaria.
¿Queda claro? Ni un euro. Nada. No lo necesito. Me apaño con lo que tengo. Y aunque lo necesitara, no lo haría, porque, a diferencia del tipo del escrito y sus amigos, creo en lo que digo y lo practico.
Este sujeto o sujeta, seguramente hará carrera en el periodismo español, pero toda su vida será basura..