dimecres, 17 d’octubre del 2018

Un chantaje de 900 €

El sector de "izquierda" del 155 anda desesperado. Ve que, si los indepes catalanes no ceden a sus intereses, se quedan si presupuestos, sin gobierno, sin escaños, sin poltronas, sin... Por eso han enviado al segundo jefe del bloque carcelero, Iglesias, (ya que enviar al primero, Sánchez, sería ridículo hasta para ellos) a presionar y chantajear a los presos políticos catalanes. Él no dice "políticos presos", como Sánchez; dice "presos", a secas porque, ya se sabe, es equidistante.

Hacía tiempo que no escuchaba un discurso tan repugnante, tan falso y odioso. Para el líder asaltacielos es normal que el secretario general de Podemos visite al "jefe" de ERC Junqueras. Tan normal no será cuando lleva un año sin hacerlo; ni a él ni a ningún otro preso político excepción hecha de Cuixart, al que visitó en junio (cuando llevaba nueve meses encarcelado) y porque se lo dijo Torra, a quien acaba de ver. En efecto, es normal visitar a estos presos. Sería de desear que no estuvieran en la cárcel, añade, con la misma fuerza de convicción con que yo desearía que el Sahara fuera un vergel y haciendo por ello tanto como yo por el Sahara: nada.

¿Normal que el SG de un partido visite a los presos políticos catalanes? ¿Cuántos han ido? ¿Todos pueden hacerlo cuando quieran o este tiene enchufe porque va en misión extorsionadora? En todo caso, la cuestión no es esta, aunque él le dé una importancia desorbitada. La cuestión es qué va a decir a los presos políticos catalanes.

Y aquí es donde el discurso de este tipo desciende literalmente a lo más abyecto. Va a hacerles chantaje expreso: sí, hay otros problemas políticos (dice, sin especificar cuáles son), que requieren atención, pero él no imagina que un líder de izquierda, una fuerza de izquierda, impida que los catalanes cobren 900 € al mes o puedan pagar el alquiler.

Así, descarnado, crudo, tal cual: la dignidad de los catalanes, su libertad, su lucha por la República y la independencia por 900 € al mes que, esperemos sean más reales que los 200 millones que con igual repugnante fin ofreció Sánchez hace unos días para retirarlos acto seguido. 

Iglesias ha dado pruebas suficientes de entender tanto Catalunya como Aznar. Puede que hasta menos. Pero, con esta perentoria y acogotadora exigencia de que los catalanes olviden el 1-O (del que él no habla), los insultos, las provocaciones de los fascistas (de cuyo despertar ha acusado a los independentistas, a quienes considera a"estafadores"), el 155 (frente al que ha callado y, en el fondo, apoyado) y aprueben sus presupuestillos, añade a su radical incomprensión españolista un desprecio y un insulto aun más españolistas.

No creo que haya un solo independentista catalán capaz de aprobar este chantaje. Ignoro si lo harán los representantes. Espero que no. Y, si lo hacen, probablemente será lo último que hagan. Que con presas, exiliadas políticas, embargados, apaleados y procesados a centenares (y los que siguen siendo perseguidos y procesados) se nos pida que aprobemos unos PGE para que el "verdadero" patriotismo español se asegure los escaños, mientras Catalunya sigue machacada (ya se sabe, son "otros problemas políticos") raya en el sarcasmo. 

Además, la mala fe de estos carceleros de "izquierda" es evidente. ¿Quieren unos PGE con el voto de los independentistas? Muy sencillo. Como, según dicen, los carceleros no pueden presionar a la fiscal a la que han nombrado ni soltar a los rehenes políticos, comprométanse a celebrar un referéndum pactado a fecha fija en tres o cuatro meses, legal, vinculante y con mediación internacional.

¿No es eso lo que Podemos dice que quiere como solución para Catalunya, esto es un referéndum pactado? Pues esta es la ocasión. De proponerlo a cambio de los PGE, saldría sin problema alguno con el voto favorable del PSOE, Podemos, ERC, PdeCat, PNV, Bildu, cuando menos. Triunfo seguro de la razón, PGE aprobados y solución del contencioso catalán en marcha.

¡Un momento! No se puede contar con los 84 votos del PSOE. Al contrario, este partido votará en contra y no habrá solución referendaria.

Pero ahora no es porque "no pueda" a causa de la "división de poderes" etc. Es porque no quiere, porque no le da la gana. Punto. Y Podemos no hace nada por convencerlo. Y no lo hace porque, en el fondo, tampoco quiere un referéndum cuyo probabilísimo resultado positivo lo condenaría a la nada histórica.

A cambio, los indepes catalanes tienen que votar uns PGE porque sí, porque deben someterse a la superioridad castellana, porque son unos colonizados a los que encarcelamos, embargamos y perseguimos cuando nos da la gana. 

Ese es el chantaje que lleva Iglesias a Lledoners en donde reside la llama de libertad y la dignidad de Catalunya. Para apagarla en nombre de España.