¡Qué barbaridad! ¡Cómo está el patio! El bueno de Sánchez -que parece tener fibra- debe de estar soportando presiones, impertinencias, chantajes, amenazas y homilías sin cuento. El bloque continuista ha perdido el Oremus. Sus componentes, el PP con Rajoy mucho Rajoy y muy Rajoy a la cabeza, la patronal, la Iglesia, los demás partidos políticos (Podemos incluido), los medios de comunicación al alirón (azuzados por El Pais) y los camisas viejas y vieja guardia del PSOE ya no saben qué hacer para evitar las terceras elecciones a base de aguantar un segundo mandato de ese extraterrestre que es el presidente de los sobresueldos.
La fronda del PSOE lanzó ayer un torpedo a la línea del NO de su partido con las declaraciones de Zapatero, pidiendo que se abra un diálogo interno sobre la abstención. Odón Elorza también se rinde a la abstención, aunque pone condiciones estrictas. Son pesos pesados y no desacreditados como lo están González, Bono o Rubalcaba. El llamamiento del PP, sin embargo, les hace un flaco favor porque da a entender que se ha forjado un consenso vergonzante con los socialistas de derechas que prefieren un gobierno de Rajoy ("aunque no lo merezca", dice González) a un gobierno de izquierda o unas terceras elecciones. En el consenso entra también Podemos. Su cabeza de lista en el País Vasco afirma que un gobierno de Rajoy es preferible a unas nuevas elecciones.
La centralidad política ha recaído manifiestamente sobre Sánchez, para desesperación de quienes iban a asaltar los cielos y ahora se encuentran en una posición de irrelevancia que puede incluso empeorar si se celebran nuevas elecciones.
En todo caso, no merece la pena detenerse en estas pequeñeces. Como tampoco lo es recordar por enésima vez que esto es un régimen parlamentario, con una lógica de mayorías y minorías; que corresponde al partido mayoritario articular un gobierno viable, para lo cual debe emplearse a fondo. Todo vale, incluso el ridículo de inmiscuirse en los asuntos internos del partido de la oposición. Se descubre así por pura ineptitud el elenco de esta conjura de necios: Rajoy, González, Rivera, Cebrián, Rosell, Iglesias, Zapatero y resto de barones quieren lo mismo: un gobierno del PP, un partido imputado en diversas causas por corrupción y presidido por un hombre que ha dado pruebas abrumadoras de no ser apto para el cargo.
NO es NO.
NO es NO.