En el día de hoy Palinuro contrae matrimonio civil con la madre de sus hijos más pequeños, Celia, su compañera de últimas fatigas. En el día de hoy, cuatro de julio, festividad de la Independencia en los EEUU. Bueno, ¿para qué se quiere la independencia? Para rendirla a alguien, sobre todo si es alguien bien amado, como decía Sartre que queríamos la libertad, para comprometerla por algo. Y de ahí salió el "compromiso" del intelectual o "intelectual comprometido", que era término que siempre me repateó porque sonaba a crónica de revista cristiana "comprometida", digo yo que con el siglo, porque las otras cosas, el mundo, el demonio y la carne, son muy comprometidas (en otro sentido, claro) y los cristianos deben huirlas. Me parecía obvio que el término no era inocente: el compromiso político era y es como el compromiso conyugal, algo muy serio y pesado. Conyugal es lo propio de quienes conllevan el yugo, el iugum que, como lo soportan dos, parece ser más liviano y entretenido, pues se va charlando.
Ya les contaré.
(La imagen es el célebre cuadro de Jan van Eyck, El matrimonio Arnolfini (1434) que se encuentra en la National Gallery de Londres. Este Arnolfini era un banquero. Quién lo diría, ¿verdad? viendo a los banqueros de hoy...