Hubo un tiempo en que afirmaciones como las que hizo ayer Iñaki Gabilondo en el informativo de las 21:00 hubieran bastado para que el aludido le enviara los padrinos. Gabilondo llamó embustero al presidente del Gobierno, dijo que en su intervención en la Cuatro del jueves pasado el mandatario mintió al afirmar que él nunca supo nada de los vuelos de la tortura a Guantánamo y que, de haberlo sabido, lo habría denunciado. Sin embargo luego se ha conocido que hubo, al menos, una autorización de un vuelo con prisioneros a la base cubana que se tramitó siendo ministro de Defensa el creyente señor Bono y concluyó siéndolo el señor Alonso. ¿Con o sin conocimiento del señor Rodríguez Zapatero?
La cuestión está en entredicho. ¿Mintió o no mintió el presidente del Gobierno? Pienso que la cosa no puede quedar así y que es obligada una declaración pública del señor Rodríguez Zapatero para dejar el asunto en claro. Dice Gabilondo que, dada la presumible complicidad del PP con el Gobierno en tan vidrioso asunto, no cabe esperar de él iniciativa alguna. Pero sí de la ciudadanía libre y crítica que jamás apoyará estos métodos de secuestro y terrorismo de Estado, llámense GAL o Guantánamo. El presidente nos debe una explicación.