Cada voto que no vaya al PP será un voto para que ETA esté en las instituciones
Vayamos a lo que se quiere decir. Quien no vote al PP es un criminal. El mentor espiritual de Mr. Cizaña lo había expuesto con toda claridad y contundencia hace setenta años en forma de Decreto de Unificación que declaraba disueltas las demás organizaciones y partidos políticos que no fueran el partido único, que llevaba el bombástico título de F.E.T y de las J.O.N.S., en cuya versión “auténtica” militó Mr. Cizaña de jovencito.
Cada voto que no vaya al PP será un voto para que ETA esté en las instituciones.
Se comprende que el PP haya necesitado de la trinidad Rajoy/Acebes/Zaplana para sustituir al Jefe. Él solo, como Jefe Verdadero, reúne en sí los rasgos más acusados de sus tres subordinados. Tiene la estolidez del señor Rajoy, la maldad del señor Acebes y la chulería del señor Zaplana. Tres en uno. La derecha en su forma más prístina y condensada, sin complejos.
Cada voto que no vaya al PP será un voto para que ETA esté en las instituciones.
Supongo que ahora aparecerán sus apologetas, glosadores y escoliastas a explicar a la abrumada grey que Mr. Cizaña no duda de que la democracia signifique multipartidismo. Como no duda de que los límites de velocidad estén por algo, de que no había armas de destrucción masiva (aunque pudo haberlas habido) o de que las mujeres han de ser algo más que “mujer-mujer”.
Cada voto que no vaya al PP será un voto para que ETA esté en las instituciones.
Todxs esxs que van diciendo que la izquierda ha perdido el oremus y le aconsejan recuperarlo, para lo cual articulan opciones (siempre de izquierdas, claro) cuyo destino es coincidir con el PP, en ilustrado y certero juicio del señor Zaplana, deben saber en dónde se meten. Les pueden organizar una “causa general” en cualquier momento. Imputación: colaboración con banda armada. Prueba: un voto a CiU, por ejemplo.
Cada voto que no vaya al PP será un voto para que ETA esté en las instituciones.
En las últimas veinticuatro horas he escuchado y leído todo tipo de indignaciones. En la blogosfera, la pregunta más reiterada es “¿cómo pudo alguien así ser presidente del gobierno español durante ocho años? Mira que es lento el personal. Eso ya era evidente en 1996. El libro de servidor, cuya portada me permito reproducir, es de 1998. Repásense sus frases, juicios y comentarios de aquellos años. Mr. Cizaña no ha cambiado un ápice; siempre ha dicho lo mismo.
Cada voto que no vaya al PP será un voto para que ETA esté en las instituciones.
Escárbese en el recuerdo. ¿Qué era el “¡Váyase, señor González!”? Una voz de mando de un cuartel. Todos estos conservadores sin complejos que se escaquearon de la mili con enchufes tienen un recio espíritu castrense. El que no lleve el arma reglamentaria, a letrinas. Toque de queda, fuego a todo lo que se mueva. “Quien no esté conmigo…”, conocida fórmula para resolver conflictos con buena manderecha.
Cada voto que no vaya al PP será un voto para que ETA esté en las instituciones.
¿Y lxs de ETA? Como son iguales que Mr. Cizaña, encantadxs de la audiencia que tiene su jefe de gabinete de comunicación porque ahora ya saben que todos los votos que no vayan al PP son suyos. Mayoría abrumadora, un referendazo, porque no bajarán del 70% de lxs votantes.