dimecres, 12 d’agost del 2009

Cadáveres hasta en la sopa.

En las naves del matadero de Madrid y hasta el 30 de este mes se representa el Tito Andrónico de Shakespeare en una escenificación del grupo Animalario. Esta vez el escenario del Matadero se ha hecho circular, algo sobreelevado, rodeado en tres cuartas partes de público. Se agradece que haya desaparecido, al menos por ahora, esa manía de llenar de ríos y lagunas la escena. La dirección de Andrés Lima me parece estupenda y el montaje está muy logrado y es muy ágil y aunque unas veces canse escuchar tantos gritos y otras parezca ridículo contemplar ciertas escenas de especial brutalidad que Shakespeare situó fuera del escenario, como relatos, lo cierto es que el ritmo es grande y las casi tres horas de la representación se pasan volando.

Tito Andrónico es una obra repleta de leyendas. Se dice que es la primera del autor y también se dice que quizá no sea suya; pero si no es suya, lleva su estilo y su indudable impronta.

Desde luego debe de ser la primera o de las primeras de las obras de Shakespeare porque, con mucho espíritu juvenil, resume en su turbulenta praxis temas que luego le daría cada uno de ellos a tragedias por separado. Así, Tito Andrónico es el ilustre patricio, gran general que ha pasado su vida defendiendo Roma a la que ha dado veintidós de sus veinticinco hijos, muertos en el campo de batalla. Un tema que recuerda a Coriolano. Su archienemigo, capaz de las mayors sevicias es un moro perverso, Aaron, que presenta puntos de conexión con el Otelo. La pasión que rige la obra es la venganza, como en Hamlet, si bien aquí dicha pasión se matiza de justicia. Bárbaros contra refinados romanos o, en otros términos, Dionisos frente a Apolo o la indómita naturalea frente al racionalismo unillineal, como en La tempestad.

Lo que hace la obra es teatralizar la leyenda de Filomela, que cuenta Ovidio en Las metamorfosis ya suficientemente tremenda en sí misma. Los hijos de la reina de los godos, Tamora, cautiva de Tito Andrónico, en cumplimiento del plan de venganza de ésta, violan a Lavinia, la hija de Tito y luego, para que no pueda delatarlos le amputan las manos y le cortan la lengua. La propia Lavinia delata a los criminales precisamente señalando el caso de Filomela en un libro de Ovidio. Más tarde será Tito Andrónico quien hará lo que en Las metamorfosis hace Procne, la hermana de Filomela, mata a los hijos de Lavinia, cocina un pastel con ellos y se lo da a comer en una festividad. En lo que, a su vez, hay ecos de un episodio similar de canibalismo familiar en la leyenda del odio entre los atreidas, que está en el origen, en parte, del destino de Agamemnon al volver de Troya. Y estos no son los únicos actos cruentos de la obra. Antes y después de los hechos relatados muere prácticamente el resto del elenco. Esta condición de general casquería es la que dio a la obra la peculiar mala fama que tiene y por lo que no se representó (aparte de su longitud) durante mucho tiempo.

Es el gran tema de Tito Andrónico: de lo que son capaces los seres humanos en punto a crueldad al perseguir la venganza. El otro también presente y más incómodo es el tema del "moro perverso" con su punto de racismo. Todo ello configura un teatro que en su día se consideró como "bárbaro" a su vez, "medieval" y, por lo tanto, no representable hasta que el romanticismo lo convirtió en su autor de culto y Shakespeare regresó entre los vivos para presidir sobre su triunfo perpetuo.

dimarts, 11 d’agost del 2009

El chapapote de la corrupción.

Como cuando el petrolero Prestige se hundió frente a Galicia mientras el señor ministro de Fomento volvía de una cacería y el chapapote invadía las costas, se adentraba en las rías, se adhería a las rocas, tiñéndolas de una negro brillante y espeso ante la desesperación de un vicepresidente del Gobierno, señor Rajoy, quien apenas alcanzaba a balbucir excusas. Así mismo se extiende hoy el chapapote de la corrupción por todos los puntos de la geografía española y todos los itinerarios de la administración pública que hayan estado gobernados por gente del PP. Esa verdadera okupación del espacio público muestra que el procedimiento que aplicaban los presuntos delincuentes en varios lugares era siempre el mismo: contacto con un hombre adecuado del partido de la derecha y comienzo de explotación del negocio de contratos públicos obtenidos mediante cohecho.

A todo esto, la señora Barberá se encuentra ya en el tercer estadio de su reacción ante la revelación de los regalos que recibía del Bigotes: negación, afirmación, negación. Su primera reacción fue decir que jamás había recibido nada regalado del Bigotes. La segunda, que todos los políticos reciben regalos, incluidas las anchoas del presidente del Gobierno. La tercera vuelve a ser que jamás recibió regalo alguno de la trama Gürtel. Es cierto, no recibió nada de la trama Gürtel porque la trama Gürtel es un concepto y los conceptos no regalan bolsos; fue el Bigotes quien hizo los obsequios de bolsos caros. Como, según reciente jurisprudencia, recibir regalos caros no es delito en los políticos, siempre que no haya un vínculo de causalidad con una contraprestación ilegal, toda la cuestión reside en averiguar ahora si el hecho de que la señora Barberá presidiera en su día la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) que es la entidad que otorgó los contratos tiene algo que ver con la recepción de esos feísimos bolsos que a ella deben de antojársele el colmo de la elegancia.

Pero, por ahora, a reserva de lo que se sepa más tarde y sin que medie campaña estatal de intoxicación alguna, cabe decir que allí donde gobierna el PP, hay tomate. Lo que sucede es que luego se les da bien en los tribunales. Véase como ejemplo el caso del señor Fabra en Castellón.

(La imagen es una foto de 20 Minutos, bajo licencia de Creative Commons).

Los símbolos religiosos.

El Gobierno pretende retirar los símbolos religiosos de los espacios públicos, singularmente los crucifijos de las escuelas también públicas. La excepción es el posible valor histórico o artístico de las piezas. Se trata de dar cumplimiento así al principio de no confesionalidad del Estado. Algo que en principio puede entender cualquiera: que en la escuelas de un Estado que no tiene religión alguna no puede haber símbolos de una confesión concreta, aunque sean los de la mayoritaria en la población.

De inmediato ha salido una organización de la enseñanza afirmando que ese proyecto vulnera la "libertad de religión". De todos los argumentos que se le pueden ocurrir a uno para oponerse a la decisión de la autoridad gubernativa, incluido el de que no quede una huella en la pátina de la pared para que no sea necesario pintar de nuevo, confieso que ese de la ofendida libertad de religión no aparece por lugar alguno. Y todavía ahora se me antoja incomprensible qué tenga que ver la presencia o ausencia de símbolos religiosos con la libertad de religión. Y eso en el entendimiento de que nos pongamos de acuerdo respecto a qué significa "libertad de religión". Tomándola por su aspecto más obvio debe de querer decir "libertad de conciencia", "libertad de culto" y "derecho a profesar la religión" que a uno le pete.

La cuestión es que tanto si hay como si no hay crucifijos en las escuelas, la libertad de los alumnos y la gente en general para profesar la religión que quiera depende de otros factores determinantes. La presencia o ausencia de símbolos no es causa alguna de nada sino efecto de algo. En este caso es efecto de la ausencia completa de "libertad de religión" (en cualquiera de los sentidos anteriores) que ha habido en España prácticamente desde siempre y muy en concreto, durante la dictadura de Franco. Falta que, en algunos aspectos, por ejemplo en este simbólico, llega al día de hoy.

(La imagen es el famoso Cristo amarillo de Gauguin, de 1889).

dilluns, 10 d’agost del 2009

Ecos de los atentados.

La prodigiosa contumacia de ETA va a acabar poniendo a todo el mundo de los nervios. A raíz de los últimos atentados han arreciado las voces de quienes proponen endurecer las penas en los casos de terrorismo. Pero endurecer en serio. Así, Miguel Ángel Revilla, presidente de Cantabria, pide que se establezca la cadena perpetua para los etarras para celebrar el día de Cantabria y el profesor Vilas Nogueira, de ordinario moderado y comprensivo, pide leyes penales y penitenciarias de excepción. ¿Qué puede ser una "ley penal de excepción"? Supongo que la pena de muerte; algo que también apoyaba hace unos años (ignoro si sigue haciéndolo) el también profesor Gustavo Bueno.

Pena de muerte, cadena perpetua...El triunfo de la sociedad democrática y abierta sobre esta panda de estúpidos asesinos sólo será completo si se consigue sin renunciar a ninguno de los valores que conforman su acervo civilizatorio y uno de los más importantes es el sentido humanista de las penas y castigos.

En principio puede parecer adecuado ajusticiar a quienes hayan cometido asesinatos en una especie de adaptación de la muy desaconsejable ley del talión. Pero, una vez aceptado, ¿en dónde se detiene esta pena? ¿Cómo evitar que se extienda a otros delitos que, en un momento dado puedan parecer especialmente odiosos, por ejemplo, la pederastia?

Calmémosnos un poco y dejemos que la policía y los tribunales hagan su trabajo. Lo llevan muy bien.

(La imagen es una foto de 20 Minutos, bajo licencia de Creative Commons).

El silencio del Curita.

Después de que el Tribunal Superior de Justicia del País Valenciano (TSJPV), presidido por un más que íntimo amigo suyo, archivara la causa por presunto cohecho incoada al president de la Generalitat valenciana está claro que éste no es inocente, no ha sido absuelto de la culpa que se le imputa sino que la causa se ha archivado por razones que en su día revisarán los tribunales.

Desde ese día de feliz memoria para él, el Curita no ha dado una sola conferencia de prensa ni ha respondido a pregunta alguna de los periodistas. El suceso se zanjó con una comparecencia pública del señor Camps filmada en un vídeo que se repartió a los medios. El presidente de la Generalitat no responde preguntas de los medios.

Esa actitud que se ha detectado en algún otro caso tanto en el PP como en el PSOE, ha soliviantado a la profesión periodística, atacada en una de sus fuentes más preciosas: el testimonio directo de la persona afectada. En el caso del señor Camps, sin embargo, parece que la cosa viene de antiguo. Obsérvese en éste vídeo de Caiga quien caiga cómo la negativa del Curita a atender a los periodistas es característica de este político valenciano.

Los políticos que callan, los políticos mudos, los políticos que niegan el diálogo, no solamente atentan contra el derecho democrático a la información y se arrogan facultades por encima del control popular sino que rompen con el principio básico de la democracia deliberativa, consistente en un ámbito de debate público en el que todos exponen sus razones de buena fe y se trata de buscar una actitud común. Algo imposible con quien calla. Sobre todo si el que calla es el que manda.

Significa que se cree con derechos sobre los demás que los demás desconocen, lo que es el núcleo mismo de la dictadura.

(La imagen es una foto de dalequetepego, bajo licencia de Creative Commons).

diumenge, 9 d’agost del 2009

De Cospedal es una kamikaze.

Hay una especie de acuerdo general en que la caja de truenos y relámpagos que ha abierto la derecha en España es para desviar la atención de los casos de corrupción que la afectan. "Y en parte", añade Palinuro el maligno, "lo ha conseguido: hablando de espionaje, escuchas telefónicas, "Estado policial" y de las Waffen SS, el personal no ha parado mucha cuenta en el asunto de fondo que se dirime en Mallorca y en esas imágenes impactantes de los dos ex-altos cargos esposados camino del juez. Pero es fuerte. Un proyecto de velódromo que se presupuesta en una cantidad, acaba costando casi el triple y, además, sirve para todo menos para velódromo por no sé qué cuestiones de construcción. Suena a desarrollismo franquista. Pero el caso es que los imputados, ex-altos cargos, etc parecen haber estado forrándose a costa de los dineros públicos".

Había poco que decir así que la dirección del PP encargó a la señora De Cospedal, o ésta se tomó las atribuciones por su mano, disparar sobre el pianista, hacer saltar por los aires la mesa de juego, acabar con el juego mismo y que arda Troya. Aun a riesgo de arder ella también. Hoy le llamarían "terrorista suicida" de no ser porque la sólida formación cristiana de la señora De Cospedal le impide asimilarse a algo que huela a musulmán. Por eso es preferible el tropo de kamikaze aunque el sintoísmo esté más alejado del cristianismo que el Islam. Kamikaze hace más referencia a un código de moral caballeresca, lo que siempre parece mejor que el fanático que se hace volar en pedazos rodeado de gente en la cola del supermercado. Así es la vida. Y la señora De Cospedal es la vida misma.

Los otros dirigentes y miembros del PP han apoyado con baterías de campaña el ataque de la señora De Cospedal y han rivalizado en machadas. El señor Montoro reta al Gobierno a demostrar que no sean ciertas esas escuchas que se han inventado y el señor González Pons avisa de que presentarán las pruebas de las escuchas inventadas y revela que están considerando llevar el asunto al Parlamento Europeo. ¿Qué asunto? La supuesta persecución del PP por el Gobierno, empeñado en aniquilar a la oposición. En verdad, necesitan la tila que el señor Rajoy recomendaba a los que el señor Fabra también recomienda "ajo, agua y resina". Los mismos que denunciaban que el señor Zapatero hubiera tolerado la internacionalización del llamado "problema vasco" al permitir que la izquierda abertzale tuviera algo que decir en el Parlamento Europeo son los que ahora quieren internacionalizar un problema de un partido con el conjunto del sistema político del que forma parte. Algo sorprendente. No quiero ni imaginar la escena en el improbable caso de que la mesa del PE admitiera a trámite la solicitud. Seguro que algún bromista salía diciendo que, al fin y al cabo, ellos, en el PP, habían tenido "aniquilada" a la oposición durante cuarenta años.

No creo que la señora De Cospedal considere la posibilidad de dimitir en caso de que no presente las pruebas de sus acusaciones. Pero el asunto se ha puesto complicado porque la dama kamikaze ha acabado por indignar al estamento judicial en cuya bienquerencia tiene el PP mucho interés invertido. Y la torpeza sí es una buena causa de dimisión o destitución..

(La imagen es una foto de dalequetepego, bajo licencia de Creative Commons).

Nostalgia.

Bueno, bueno, cuarenta años desde que salió el último disco de los Beatles, posterior en composición a Let It Be. El último juntos, en 1969. Mucha gente ya de vuelta, desmovilizada, volviendo a casita. A reconstruir la vida que ya no volvería a ser la misma. El testamento con la famosa última línea del popurrí: And in the end/The love you take/Is equal to the love you make. ("Y al final/el amor que te corresponde/es igual al amor que haces"). Toda una vida con esta música. Una cara del disco para John Lennon y la otra, la B, para Paul McCartney, porque ya estaban las cosas muy mal y cada cual tiraba para casa. Gana Paul de larguísimo con el popurrí que puede oírse en este vídeo de You tube enterito. Me dejaría cortar en pedazos antes que no colgarlo aquí. ¡Y la cubierta! Debe de ser la más imitada del mundo. Seguro que hay cientos de miles de fotos de cuartetos de turistas imitándola in situ. Están los cuatro fabulosos, como siempre, pero el mejor también me parece Paul. Es curiosamente el que va menos uniformado. Los otros llevan atuendos de "posición vital"; el único que lleva un traje ordinario, como cualquier ciudadano de a pie es Paul. Pero va descalzo, máxima ironía y con el paso cambiado. En fin, que muy bien la portada y muy bien los temas.

Toda la composición es un prodigio de armonías, contrastes, filigranas, variaciones, solos y uno no sabe con qué tema quedarse. Es imposible porque cada uno de ellos cautiva a su manera, siempre distinta; ¡qué sé yo! Si me apuro, me quedo con la nana Once there was a way to get back homeward,("Antaño había un camino para volver a casa") sobre todo su segunda estrofa. Claro que luego llega eso tan divino de I never give you my pillow/I only send you my invitation/And in the middle of the celebrations/I break down ("Nunca te daré mi almohada/Sólo te envío una invitación/Y en mitad de los festejos/Colapso."). Bueno, no, nada, nada: la nana y luego, el solo de batería de Ringo.

Reconozco que soy un carroza pero, buenas gentes, ¡qué música!

dissabte, 8 d’agost del 2009

El lago Ness y el móvil de De Cospedal.

o siga Vd. la interesante saga El caso del espía ciego y el escucha sordo

Véase el artículo que sale hoy en Público sobre tan apasionante tema, para quienes quieran tomárselo por la tremenda; quienes quieran tomarselo más levemente, que sigan por aquí.

Acabáramos. Los teléfonos que la señora De Cospedal dice que tiene pinchados su partido son su móvil y el del señor Trillo. No entiendo nada de móviles ni de comunicaciones en general en el aspecto técnico pero me parece que funcionan a base de ondas en un espacio abierto. Pinchar un móvil debe de estar al alcance de cualquiera que sepa un poco y tenga un receptor o algo parecido, tan fácil como pillar la emisora de la policía en el dial de la radio. Pero supongo que no lo hace nadie porque los aparatos para ello serán caros y porque a todo el mundo le importa una higa lo que digan los demás en miles de millones de charletas en el móvil en cada instante... Salvo que te llames De Cospedal y/o Trillo para que haya interés en pincharte el móvil o en que te lo pinchen. Imagino que las casas tendrán sistema de encriptado de las comunicaciones (esto es, en román paladino, cifrado), especialmente en el caso de políticos relevantes y otros VIPs. Igual que imagino que habrá expertos en reventar claves y en vender después la información que obtengan.

Supongamos que, en efecto, la señora De Cospedal y el señor Trillo andan por ahí con sus móviles pinchados. Antes de saber quién los haya pinchado, ya se lo atribuyen al Gobierno. La verdad es que si quieren averiguar quién lo ha hecho de cierto deben preguntar al señor Granados, consejero de Interior y Justicia de la Comunidad Autónoma de Madrid (CAM) y persona a quien se atribuye la gestión de una red de espías en la CAM al objeto de informarse sobre actividades de unos adversarios de la señora Aguirre en el seno del PP, cuestión de extremo interés público.

De todas formas se reconocerá que sacar a pasear el monstruo del lago Ness en agosto por medio del pinchado de los teléfonos móviles es lo que más se aproxima a una experiencia insólita. Pero más insólito es que la acusación de ayer de pinchar el móvil del prójimo se haya convertido hoy en una exigencia del señor Montoro (o sea, el señor Monte de oro) al Gobierno de que pruebe que él no mató a Manolete, esto es, que pruebe que no ha pinchado los móviles de la señora De Cospedal, fuente sensacional de documentación y el señor Trillo, baluarte jurídico del partido.

"En democracia", decían los populares hablando de los trajes impagos del señor Camps, "la gente no tiene porqué demostrar su inocencia." Se ve que ya no estamos en democracia o que la inocencia es radicalmente distinta según se trate del PP o del PSOE. Otras fuerzas políticas, favor de abstenerse.

Y todo este ridículo se produce tan sólo porque algún lumbrera de asesor político ha explicado a los dirigentes del PP que el mejor modo de desactivar la bomba Gürtel es salir con otra mayor. Si la hay, bueno va. Quizá no sea una actitud muy moral pero será eficaz. El problema es si no la hay y el usuario decide inventarsela como este asunto de las escuchas: pura invención. Y si al menos fuera invención más del tiempo... Hoy el espionaje se hace mucho más por internet, fisgando en los correos ajenos. Ignoro lo que sepa la señora De Cospedal de informática pero me parece que no tiene blog, lo que delata poca familiaridad con el medio. De ahí que hable de escuchas telefónicas.

(La imagen es una foto de 20 Minutos, bajo licencia de Creative Commons).

Meditación de bloguero, II.

En este llevar el diario, el cuaderno de bitácora de cada cual, los comentarios de los lectores tienen un lugar relevante. Hay blogs en los que los lectores forman foros y dialogan entre ellos que suelen ser seguidores de un mismo bloguero; esto se da mucho entre periodistas que tienen sus blogs insertos en la página web del periódico edición online. Los fans y los detractores escriben libremente en el blog sus opiniones, sobre su bloguero favorito o se enzarzan entre ellos. Hay mucho comentarista que vuelve varias veces al blog sólo a ver qué respuestas ha motivado su último comentario y luego replica. Se forman así diálogos que a veces duran días y otras minutos y los comentaristas acaban conociéndose. No descarto la posibilidad de que encontrándose como seguidores de un mismo bloguero, una pareja decida formalizar sus relaciones y casarse. Incluso le ponen a sus hijos nombres relacionados con su bloguero preferido.

De todos los comentaristas los más curiosos me parecen los anónimos y, dentro de estos, los agresivos. Ya se sabe porque suelen explicarlo algunos comentaristas a menudo dos y tres veces diarias que entre el anónimo y un nick no hay mucha diferencia, como si fuéramos tontos que no supiéramos distinguir un anónimo de un pseudónimo. Un pseudónimo es un anónimo con un nombre ficticio que permite identificar a los que dialogan pero no por sus identidades reales (aunque no se descarte) sino por las virtuales que son más rápidas y eficaces. Con todo, siendo lo anterior verdad, lo cierto es que los nicks pueden acabar como verdaderos mecanismos de reconocimiento.

Los que me interesan son los "anónimos" de siempre y a ser posible, los agresivos. Tienen un elemento de misterio: quién puede quererte tan mal que se moleste en ponerlo por escrito pero resguardando su personalidad. Hay gente; hay gente. Cuando estaba en Onda Cero, con Luis del Olmo recibía de vez en cuando anónimos por correo. El más característico era un escrito normalmente desde Málaga que el autor escribía a mano, con lápiz, una lista de insultos completa, sin argumento alguno y aprovechando los espacios más inverosímiles de su escrito. ¿Qué sentido tiene insultar a alguien sabiendo que el insultado no puede averiguar quién lo insulta? Ésta es una pregunta muy elaborada que implica capacidad para ver el mundo desde distintas partes del diálogo. Pero eso al anónimo no le interesa: lo único que le interesa es vomitar su odio por entero y dejarlo ahí a la vista del público. El anónimo, probablemente, como el majara de Málaga, se considera a sí mismo una especie de dios cósmico, de señor universal del desastre desde el momento en que su voz puede llegar a todas partes. Héteme aquí que el bloguero está siempre a la vista del dios que no necesita llamarlo por su nombre pues siempre lo tiene ante sí y a su merced. O tal cosa se piensa el anónimo insultador que normalmente no está mejor de las neuronas que el de Málaga.

(La imagen es una foto de florian kuhlmann, bajo licencia de Creative Commons).

divendres, 7 d’agost del 2009

Los espías neofranquistas acusan al Gobierno de espiar.

No tiene mucho de asombroso que le llamen Coz pedal a juzgar por la virulencia y hasta brutalidad de las afirmaciones de esta señora que más parece un personaje de estaca de teatro de guiñol que una (i)rresponsable política. Eso de que consta que la judicatura y la policía están haciendo escuchas ilegales a políticos del PP como si fueran la Camorra napolitana es acusar de cometer delitos a toda la judicatura española, las fuerzas de seguridad del Estado y al Estado mismo. Son comprensibles las reacciones airadas de estos estamentos pidiendo a la dicha señora que presente denuncia en los tribunales o se retracte.

Eso de que España es hoy un Estado policial al estilo del anterior a la Constitución (quiere decir el franquista) debe de ser el enésimo intento de los políticos del PP de desvincularse nominalmente de la Dictadura, como los que hace de vez en cuando la señora Aguirre en Madrid cuando habla mal del franquismo. Y eso mientras se oponen como gatos panzas arriba a que se despoje a Franco de los títulos y honores que la cobardía nacional fue otorgándole durante los cuarenta años en que la mayoría de los políticos de aquel partido con edad para ello vivía en "extraordinaria placidez" porque España se gobernaba según sus ideales.

Eso de que el Gobierno espía a la oposición, dicho por la secretaria general de un partido que tiene un proceso abierto en Madrid por espiar ¡a los suyos! es, además de una insolente provocación, una muestra de la acendrada táctica de proyeccion de la derecha, consistente en acusar a los demás de lo que hace ella.

Eso de que el Gobierno persigue más al presidente Camps que a ETA es de una desvergüenza que sólo se explica por el intento desesperado de los dirigentes populares de que no se hable de lo que realmente es noticia y tiene interés en España, es decir:

I.- Que el Curita mentiroso se ha visto amparado por unos jueces que han actuado supuestamente por criterios de amiguismo antes que de justicia, que parecen haber prevaricado, que la Fiscalía General del Estado ha recurrido en casación el auto del Tribunal valenciano presidido por un "más que amigo" del señor Camps y que, además, sobre ese "más que amigo" del señor Camps ya media una denuncia por falta muy grave.

II.- Que la corrupción del PP en Mallorca alcanza niveles pandémicos y que en las Baleares, como en Valencia, el propio partido pudiera no ser otra cosa que una red de influencias para las lucrativas prácticas del cohecho, la apropiación indebida y el saqueo de las arcas públicas.

III.- Que, al parecer, la trama corrupta del Gürtel untó con cientos de miles de euros a una serie de políticos del PP en Madrid a cambio de concesiones de obra pública que, en el mejor de los casos, serán fraudulentas.

IV.- Que en la Comunidad Autónoma de Madrid (CAM) han venido produciéndose supuestos actos de espionaje de unos miembros del PP a otros en sus luchas intestinas por hacerse con el poder en el partido.

Estas son las noticias reales, las que configuran la actividad cierta del principal partido de la oposición, literalmente devorado por la corrupción y de las que la señora De Cospedal trata de desviar la atención con declaraciones dinamiteras que, poniendo en cuestión el Estado de derecho, hagan olvidar aquellas otras realidades, una táctica suicida que debiera dar sus lógicos frutos: la señora De Cospedal está moralmente obligada a probar sus acusaciones a jueces, policías y políticos del Gobierno o, en caso contrario, a retractarse de ellas y, de paso, lo que sería medida muy higiénica, a abandonar la política, a ver si marchándose a su casa le queda algo de tiempo para reflexionar sobre lo inadmisible de sus provocaciones sistemáticas.

Ha pasado el tiempo en que el lenguaje incendiario, las amenazas, los chantajes, las mentiras sistemáticas desde la derecha provocaba alguna reacción salvífica de otro estamento como el militar que pudiera traer otros cuarenta años de "extraordinaria placidez".

(La imagen es una foto de 20 Minutos, bajo licencia de Creative Commons).

La realidad es surrealista.

Dentro de su plan de exposiciones de fotografía, la fundación Mapfre alberga una muy interesante de la obra de Graciela Iturbide. Esta fotógrafa mexicana de esclarecido apellido tiene un ojo para captar el significado o simbolismo de la realidad que encandila; sobre todo de la realidad de su país que ha trabajado con espíritu de antropóloga investigadora (si bien su formación es en una escuela de artes cinematográficas) y método de "observación participante".

Discípula de Álvarez Bravo, el fotógrafo de Eisenstein y Luis Buñuel, ha desarrollado un programa iconográfico que trata de revelar el significado profundo de la cultura precolombina y su huella en la cultura posterior sincrética con la tradición colonial española. El resultado de esta orientación es su búsqueda permanente del motivo de la muerte en las más diversas manifestaciones de la vida mexicana, como puede observarse en ese curioso retrato de una novia de la muerte que ilustra la cubierta del cuaderno de la exposición. Obsérvese asimismo que la persona fotografiada es, a todas luces, un hombre, lo cual nos conduce a otro elemento muy característico de la obra de Iturbide, en concreto el disfraz, el carnaval, el travestismo.

Con ese mismo ánimo Iturbide ha hecho fotografías que son hoy elementos simbólicos de universal aceptación. A raíz de la muerte de una hija muy pequeña y gracias al apoyo del Instituto Nacional Indigenista de México, la fotógrafa se sumergió en el estudio y el reflejo de las culturas específicas de ciertos grupos humanos como los indios seris del desierto de Sonora, los zapotecas del istmo de Tehuantepec parte de los cuales singularizó como las "mujeres de Juchitán", en Oaxaca. Una de ellas es esa fabulosa Nuestra señora de las iguanas sobre la cual se ha especulado abundantemente quien para hablar de la fuerza de la imagen femenina, vinculándola a la idea del carácter "ctónico" del que habla Camille Paglia como el elemento determinante de la naturaleza femenina, quien para acordarse de la Medusa mitológica con sus cabellos de reptiles o para enaltecer el elemento sincrético de la imagen.

El surrealismo que, según André Breton, está en la realidad misma de México es un elemento distintivo de la obra de Iturbide y no solamente en trozos o aspectos de ésta que estén, por así decirlo, "oficialmente" conectados con el surrealismo como, por ejemplo, en el trabajo que hizo por encargo de fotografiar el baño de Frida Kahlo, cerrado por orden de su marido Rivera desde el fallecimiento de aquella en 1954 y en el que destacan piezas muy curiosas, imposibles de olvidar, como el retrato de Stalin que Frida tenía siempre delante y sobre el que reposa el par de muletas de que la pintora se servía o la desnuda toma de su arnés clavado en la pared, como si del de una caballería se tratara. Todas las fotos en busca de los elementos folklóricos y culturales de México en las que figura la muerte en forma de distintas variantes de la clásica calavera catrina, de José Posada, pertenecen a este territorio de un modo muy evidente. Pero también lo hacen otras imágenes que Iturbide ha fijado en varias partes del mundo, por ejemplo en una viaje a la India, del que trajo una serie de tomas en las que late siempre el elemento surrealista por muy ejemplar que sea la fotografía original. La que aquí se reproduce es una imagen tomada en el cementerio de Dolores Hidalgo, en Guanajuato, y recuerda de forma inmediata alguna de las escenas de Los pájaros, de Alfred Hichtckok.

La obra de Iturbide cuenta ya con reconocimiento internacional, justa contraprestación a su gran capacidad para sintetizar y trasmitir los elementos más autóctonos de la cultura de su México natal pero vistos con los ojos de una mujer criolla y refinada.

De esta vocación y preocupación vital proceden algunas de las fotografías más famosas de México. A eso mismo obedece la celebérrima imagen del cartel publicitario con la améndola de la virgen guadalupana, emblema tan nacional mexicano como el águila devorando la serpiente sobre un nopal. Falta la imagen de la Virgen propiamente dicha sustituida por esa especie de poste como si fuera una abstracción de Chirico en representación de las divinidades precolombinas, desplazadas por la colonización católica española. Las dos yucas del primer plano dan a la imagen gran fuerza y profundidad permitiendo una especie de confusión magriteana del segundo plano fotografiado con el natural.

Cambiar en estos días de agosto el sol ardiente de Madrid por las soledades agostadas del desierto de Sonora en las imágenes de Iturbide es una curiosa y sedante experiencia. Ciertamente, toda la exposición lo es.

dijous, 6 d’agost del 2009

La corrupción todo lo enfanga.

Pues menos mal que hay un ciudadano con dignidad en el Reino. Ese abogado, José Luis Mazón, que ha denunciado al señor de la Rúa por no abstenerse en el procedimiento contra su "más que amigo", el presidente Camps. Por cierto, eso de buscar en el diccionario otro término para calificar la relación entre estos dos señores se orienta ¿hacia dónde? ¿Valdría "hermano", "camarada", "amante"? ¿Qué son el uno para el otro? El caso es que había que hacer presidente del Gobierno al señor Mazón en lugar de esta joya que tenemos que ha nombrado presidente del Consejo General del Poder Judicial y, por ende, del Tribunal Supremo, que ha de ver en casación el auto del Tribunal Superior de Justicia del País Valenciano, al señor Carlos Dívar, el que decide en función de creencias religiosas en conciencia.

Porque es sorprendente que nadie haya intentado recusar al magistrado De la Rúa al ser manifiesta su amistad (más que amistad) íntima con el acusado. Que dos jueces hayan decidido en contra del parecer de otros cuatro como poco, incluido uno del propio tribunal, así como fiscales y opinión pública mayoritaria por razones de puro amiguismo es un atropello y una vergüenza nacional que toca reparar al Supremo, presidido por el señor Dívar.

Ya sólo por no ver al señor Fabra en la TVE diciendo groserías merece la pena ponerse a actuar , convertirse en un ciudadano participativo, como ejemplarmente ha hecho el señor Mazón, y colaborar a la defensa de la democracia y el Estado de derecho frente a una panda de corruptos presuntamente amparados por los jueces. Que no se puede decir, como hace el señor Tomás Gómez, que el presidente Camps es un político "tocado". No hay político "tocado". Es "agua" o "hundido". No se puede ser político y mentir a la ciudadanía diciendo que se han pagado unos trajes que no se han pagado, ni aunque que te haya librado del proceso tu más que amigo en cuyo caso, obviamente, se puede ser y decir lo que se quiera.

Al PP no le hace gracia alguna que lo llamen partido corrupto pero la verdad es que tiene un frente judicial amplísimo. Ese lío de Mallorca, esa repetición del milagro de los panes y los peces pero con millones de euros suena ya a práctica colectiva cooperativa. Esa ristra de imputados es prácticamente el Gobierno balear del señor Jaume Matas, ministro que fue del de España en donde, al parecer, le dio para comprarse una especie de palacete renacentista o algo por estilo que acabó en los tribunales pero de donde los tribunales lo sacaron, como han hecho con el presidente de la Generalitat valenciana, señor Francisco Camps-yo-me-compro-mis-trajes.

Este auto del TSJPV va a tener un efecto demoledor sobre el ya quebradizo prestigio de la justicia española.

(La imagen es una foto de dalequetepego, bajo licencia de Creative Commons).

La mezcla imposible.

La fundación de Telefónica tiene en marcha una exposición de fotografías pintadas de Gerhard Richter muy interesante de ver. Una vez que se ha franqueado la entrada del edificio, con sus grandes puertas doradas que recuerda mucho algunos otros neoyorquinos, como el Chrysler Building se encuentra uno con unas cuatrocientas tomas fotográficas personales del artista sobre las que éste ha pintado en una especie de curioso intento de mezclar dos géneros artísticos, la fotografía y la pintura. En su inmensa mayoría son escenas de la vida cotidiana, fotos de viajes, paisajes, tomas en la calle, edificios, retratos, etc y el efecto de la conjunción es muy variado, desde el de una casi completa aniquilación de la imagen en la foto hasta el punto de que no se reconoce lo que hay en ella, incluso si hay algo, hasta la de un equilibrio armónico en el que la pintura realza o acota la imagen fotográfica. Lo que no se produce nunca, probablemente porque no puede producirse, es una mezcla. Las técnicas son demasiado distantes. La pintura es toda subjetividad mientras que en la foto, sin que ésta desaparezca del todo, prevalece la objetividad del medio mecánico.

Richter es hoy uno de los artistas alemanes más cotizados y reconocidos internacionalmente. Estas fotografías pintadas, muy características suyas, son únicamente una parte de su enorme y diversificada producción. Nacido en 1932 y educado en la antigua República Democrática Alemana, se escapó con su mujer hacia 1961, unos meses antes de que se construyera el muro de Berlín y ya hizo toda su carrera en Occidente en una actitud de clara hostilidad a todo tipo de ideologías, pero sin perder la vinculación política de su obra. La prueba es la tendencia que contribuyó a fundar con otros artistas vinculados al pop, llamada humorísticamente "realismo capitalista", del que saltaría luego al expresionismo abstracto.

Richter mantuvo también la tendencia figurativista con temas sociales o incluso claramente políticos. Entre sus llamadas "pinturas fotográficas", que no son las fotografías pintadas de esta exposición, sino óleos a partir de fotografías, me parece especialmente impresionante la serie llamada Baader-Meinhof, de la que puede verse aquí una muestra, un óleo de un retrato juvenil de Ulrike Meinhof. Mientras la paleta de las fotografías pintadas es polícroma y en ellas utiliza normalmente los restos de los colores de las obras expresionistas, la de la pintura fotográfica suele ser blanco y negro y gama de grises con los contornos difuminados, que dejan una impresión como de ensoñación o irrealidad.

Además de los cuadros y las fotografías, Richter, hombre de creatividad arrolladora, ha hecho también lo que llama "atlas", grandes composiciones a modo de collages con todo tipo de fotografías, de las que ha producido cientos y resultan bien curiosas, mapas pintados y vidrio. Precisamente a este último campo pertenece la vidriera que hizo para la catedral de Dresde ya que la anterior fue destruida durante la segunda Guerra Mundial y no se podía reconstruir. La obra de Richter, que está en el estilo de otra anterior suya, llamada 4096 colores y es muy controvertida, remite al mundo de la informática y recuerda las fotos "pixeladas" . A mí me parece todo un hallazgo, pero hay gente que dice que rompe la armonía de formas con las otras vidrieras del templo.(La imagen de la vidriera de la catedral de Dresde es una foto de Ambidexy, bajo licencia de Creative Commons).

dimecres, 5 d’agost del 2009

El Curita mentiroso escurre el bulto.


Todavía retumbaba el solar patrio con los gritos indignados de quienes creen que el auto del Tribunal Superior de Justicia del País Valenciano (TSJPV) es una vergüenza cuando los medios de comunicación empezaron recibir el video que se reproduce más arriba en el que el señor Camps discursea sobre lo mucho que se afana en pro de los valencianos y del resto de los españoles y seguirá haciéndolo, siempre muy bien trajeado, naturalmente gracias a los desvelos del Bigotes que, al regalar ternos por miles de euros al presidente y otros miembros del gobierno de la Generalitat valenciana, lo hacía por pura filantropía y no a cambio de contraprestaciones. Es más, si consiguió pillar hasta ocho millones de euros en forma de contratos , algunos descompuestos en fracciones de no más de 12.000 euros para no tener que hacer concurso alguno, es porque es un lince, capaz de sacar dinero de las piedras y no porque tuviera trato de favor en las administraciones públicas a cuyos encargados hacía regalos sin cuento ni fin.

El vídeo de que aquí se habla es una declaración institucional del señor Camps a raíz del auto de archivo del TSJPV, presidido por un amigo íntimo suyo, que se ha repartido a los periodistas en lugar de una conferencia de prensa ordinaria en la que estos puedan hacer preguntas. El Curita elude así tener que responder a preguntas incómodas, escabulle el bulto. Lo mismo ha hecho luego la señora De Cospedal pues, en lugar de comparecer en vivo y al natural a decir eso de que el Gobierno pone en peligro a la democracia manipulado la Fiscalía, ha preferido la vía virtual, sin duda también para evitar las preguntas de los periodistas. He aquí algunas de las que se me ocurre que se podrían dirigir al Curita:

¿Mintió Vd. cuando dijo que por supuesto se pagaba sus trajes?

¿Mintió cuando dijo que no conocía de nada al Bigotes al que, en realidad "quiere un huevo"?

¿Mintió cuando dijo que estaba deseando comparecer ante el juez para aclararlo todo?

Y, si mintió, ¿piensa confesar su mentira y pedir perdón a los ciudadanos? ¿O más bien aplica Vd. el desenfadado criterio de la derecha de mentir en lo más obvio, por ejemplo, en el 11-M?

¿Cree Vd. que el Tribunal Supremo dará la razón al TSJPV?

Si no se la da, ¿piensa Vd. dimitir de una vez ya que es Vd. una ignominia como presidente y político?

O, teniendo en cuenta que el delito es menor y la pena relativamente baja, ¿piensa Vd. continuar como presidente de la Generalitat para entrar en el Guiness de los Records como el primer presidente delincuente de la historia de España?

De eso nada, ministro.

El ministro del Interior es persona razonable y suele manifestarlo en sus declaraciones habitualmente comedidas y pertinentes. Pero a veces, como a todo el mundo, se le va la olla, sobre todo cuando se trata de asuntos del nacionalismo vasco, acerca del cual la hostilidad del señor Pérez Rubalcaba es tan acendrada y vidriosa que pierde la compostura y hasta el sentido común. Está bien que diga que no habrá más negociaciones con ETA y que la única solución que prevé al terrorismo en Vasconia es policial y judicial y está bien, a mi juicio, porque es lo que pienso yo, después de tres experiencias de negociación reventadas siempre por el lado etarra. Obviamente, para quienes piensen de forma distinta, lo dicho por el ministro no estará bien y si yo pensara otra cosa también diría que el ministro desbarra. Que es lo que me sucede con otras declaraciones de la misma persona en las que considero que ha perdido el oremus. Se trata de esas en las que sostiene que Batasuna no sería legalizada ni aunque pidiera a ETA el fin de la violencia.

Piano, piano, señor ministro, que Batasuna no es ilegal porque Vd. quiera sino porque lo dice la ley. Si Batasuna da cumplimiento a lo que la ley prevé, si se desmarca creiblemente de la violencia y, además, pide a ETA que lo deje (aunque sospecho que esto no sea necesario), Batasuna será legal le guste a Vd. o no, que ya se sabe que no. Sus declaraciones, por tanto, son un desatino y buena prueba de ello es que ha faltado tiempo a la llamada izquierda abertzale para responder sosteniendo que "queda acreditado que la exigencia de las últimas décadas no era más que una mera excusa para tratar de ocultar la naturaleza política del conflicto, poniendo de manifiesto el fraude político-jurídico que el Gobierno español ha realizado tanto en la judicatura española como en la europea". Parece mentira que sea Vd. tan pazguato. ¿No se da Vd. cuenta de que con esas declaraciones -más propias de un Mayor Oreja que de un ministro socialista- desmantela Vd. la defensa de la democracia española frente al terrorismo basada en el Estado de derecho cuyo punto crucial es el imperio de la ley y no la arbitrariedad de las personas?

Que algo sea o no legal en España depende de lo que diga la ley. Y si es legal ERC o Aralar, ¿por qué no iba a serlo Batasuna en el mismo momento en que cumpliera la ley? Tiene Vd. una idea de la articulación territorial de España en la que no cabe el derecho de autodeterminación de los pueblos que la componen; pero esa idea del señor Rubalcaba no puede influir de tal modo en el ministro Rubalcaba que le haga amenazar con sustituir la ley por su omnímoda voluntad. Póngase freno, buen hombre, que no todos los españoles pensamos como Vd.

Quienes defendemos el derecho de autodeterminación de los vascos y otros pueblos de España creemos que es bueno que Batasuna esté en las instituciones siempre que cumpla los requisitos legales para ello porque así se avanzará antes hacia una solución de la cuestión vasca que, para nosotros, implica el ejercicio de aquel derecho. Pero sólo en condiciones de ausencia de violencia y por tal entendemos la violencia terrorista; la del Estado en todas sus manifestaciones es legítima y debe estar presente porque es la que ampara el ejercicio de los derechos entre ellos el de autodeterminación cuando finalmente se abra camino en España que se abrirá en cuanto ETA deje las armas porque es el único obstáculo real a la lucha por la implantación de aquel.

(La imagen es una foto de www ukberri net, bajo licencia de Creative Commons).

dimarts, 4 d’agost del 2009

Al Curita mentiroso lo salva su amigo íntimo.

Claro que yo me pago mis trajes, decía el Curita. Pues no señor; el Curita mintió bellacamente. El Tribunal Superior de Justicia del País Valenciano (TSJPV) acepta que el Curita no pagó los trajes, que los pagó la trama corrupta, pero no ve en ello delito alguno. Si lo hay o no lo decidirá ahora el Tribunal Supremo pero, entre tanto, está claro que el Curita es un mentiroso.

No conozco de nada a ese señor, Álvaro Pérez, dijo el Curita en su momento, fechas antes de que se le oyese proclamar su amistad y más que amistad con el Bigotes en una conversación telefónica grabada en poder de los tribunales. O sea, el Curita ha vuelto a mentir a los tribunales, al Parlamento y a la opinión pública.

Estoy deseando acudir a los tribunales a declarar para probar mi inocencia y terminar con este asunto dijo en su día pero, en realidad, la única vez que compareció ante el juez se negó a declarar y sus abogados no han hecho otra cosa que intentar paralizar el procedimiento lo cual indica que el Curita no solamente es un mentiroso sino también un hipócrita.

Pues bien, a este mentiroso e hipócrita es a quien su amigo íntimo, el presidente del TSJPV, acaba de resolver un problema grandísimo: el de tener que comparecer ante la justicia por cohecho impropio. En ningún país del mundo civilizado se permite que una persona que es amiga íntima del acusado dicte sentencia en un caso que lo implique. En España no sólo se permite sino que se tiene a gala. Supongo que mañana el Curita podrá presumir de amigos importantes entre los vecinos.

La decisión de ayer del TSJPV, que ya está recurrida ante el Tribunal Supremo, es una vergüenza que no tiene nada que ver con la justicia y todo con el amiguismo. Es una decisión dictada por el amiguismo. En España fue tradicional afirmar que las leyes se acatan pero no se cumplen. Algo parecido cabría decir de decisiones como ésta, que se acatan pero no se respetan.


(La imagen es una foto de dalequetepego, bajo licencia de Creative Commons).

Cuestión de nombre

Está bien esta peli de Borja Cobeaga rodada toda ella en Bilbao. Es ágil, trepidante, disparatada, muy divertida. Son como fogonazos de la vida corriente de la gente más o menos normal, en situaciones absurdas. Y, al mismo tiempo, una especie de estudio en profundidad de un tipo humano muy característico que uno encuentra en diversos lugares y etapas a lo largo de la vida: aquel a quien las mujeres quieren pero "sólo como amigo" y que, por tanto, nunca se come una rosca. Un pagafantas. El término ha hecho rápida fortuna y se ha extendido, sobre todo en los ambientes juveniles, para calificar a a tipos similares en situaciones muy diferentes. En realidad, en buena medida, es responsable de que haya ido a ver la peli que en otras cicunstancias no hubiera visto por aparecer como cine "joven" o sea, programas en función de los intereses de un grupo de edad, desde los niños a los ancianos. En verdad, ayer, además de la habitual pareja de pajaros solitarios había un par de grupos de chavales.

Otra forma de ver la peli es como un reto entre los "jóvenes" y los mayores. Los "jóvenes" (el propio Gorka Otxoa y Sabrina Garciarena) están muy bien pero los mayores (Óscar Ladoire y Kiti Manver, acompañados de la señora Begoña (María Asquerino) están mejor.

dilluns, 3 d’agost del 2009

Por qué no puede haber diálogo ni lo habrá.

El ministro Rubalcaba lo ha dicho con claridad: no habrá final dialogado de ETA. El ministro Rubalcaba nunca fue partidario del diálogo ni de la negociación con la organización terrorista sino, al contrario, de la solución policial y la derrota. Aceptó la tercera ronda de diálogo porque era política especial del gobierno del señor Zapatero, empeñado en pasar a la historia como José Luis (I) "El pacificador", pero la boicoteó cuanto pudo. Por eso, el día en que unos archiimbéciles (más imbéciles de lo que es habitual entre ellos, que ya es decir) decidieron atentar en la T4 de Madrid y poner brusco fin a las negociaciones, se sintió fortalecido en sus augurios y sombrías premoniciones. Se acababan las veleidades dialogantes de unos políticos timoratos y se imponía el reinado de los halcones y la ofensiva policial.

Hasta quienes habíamos defendido de siempre la negociación y el derecho de autodeterminación de los vascos quedamos burlados y con el tafanario al aire. No tanto como los correveidiles de Batasuna, que se habían hecho ilusiones de recurrir a la vía "política" para alcanzar sus objetivos. Así el amigo Otegi quien ya se veía de interlocutor privilegiado con el Estado quedaba reducido a lo que es: un marmitón de los etarras, siempre pendiente de lo que estos hagan o dejen de hacer para justificarlo.

Tres rondas de negociaciones entre el Estado y los terroristas y tres veces que los terroristas las rompieron a tiros tratando después de remover el cieno cuanto pudieran a ver si conseguían que la responsabilidad de la ruptura recayera sobre el Estado. En este noble empeño de estigmatizar a otro tuvieron la impagable ayuda de los medios abertzales de izquierda o sus imitadores en el resto del país. Pero no cuela porque la gente no es tonta y sabe a quién culpar cuando un proceso de diálogo se rompe porque alguien revienta una terminal ultramoderna. En consecuencia, el ministro dice lo que dice y nadie ya pide una nueva ronda de diálogo salvo ETA, sus correveidiles y un porcentaje de izquierdistas españoles que no coinciden con la idea de que pedir diálogo por cuarta vez habiéndose quedado con un palmo de narices las tres anteriores revela verdadero cretinismo.

¡Ah, pero entonces estamos condenados a padecer las consecuencias del conflicto durante años porque quien lleva cincuenta años matando puede seguir haciéndolo otros cincuenta ! Por supuesto, es un riesgo nítido que se corre cuando en un enfrentamiento o conflicto una de las partes toma una decisión y la otra no, y sobre todo teniendo en cuenta que matar es bastante fácil a poco empeño que se ponga. Y ello sea dicho haciendo caso omiso de la muy interesante polémica de si en verdad hay un "conflicto" y en qué en concreto consista éste.

Cabe decir que las autoridades españolas, emborrachadas por sus éxitos en la detención de etarras y convencidas de que ETA está en las últimas, se cierran en banda a toda negociación pero que ésta será inevitable por la misma razón por la que tras la noche viene el día. Pero eso es un error porque ¿qué garantías hay de que la cuarta vez no suceda lo mismo que las tres anteriores? Ninguna, es claro. Pero es que, además, algo habla a favor del absoluto rechazo al diálogo: hubo años en que la violencia fue incomparablemente mayor. A finales de los setenta llegó a haber un muerto por asesinato cada tres días, secuestros, kale borroka... ETA tenía diversos negociados abiertos en la sociedad civil: sociedades de esto y de lo otro, agrupaciones, gestoras, partidos políticos, todos ellos viviendo de los dineros públicos y encubriendo los asesinatos y/o colaborando con ellos.

Todo eso se ha acabado. Eran otros tiempos que ya no volverán. Esta ETA no es ni sombra de lo que fue; sus marcas blancas han desaparecido de la sociedad civil, sus encubridores, muñidores y justificadores están acorralados y si esta minisombra se empeña en mantener el conflicto no habrá otro remedio que seguir en la tesitura. Ya escampará. Cada vez les costará más asesinar y pagarán antes por los asesinatos. Y ya se cansarán los asesinos de asesinar y los que los justifican de justificarlos.

Los etarras y sus amigos saben que nunca obtendrán lo que piden por vía pacífica o electoral, por eso no están especialmente interesados en la existencia de la democracia en España. Siempre me produjo verdadera hilaridad aquella observación que pedía a ETA que desistiese porque la democracia española no podría soportarlo. Lo que se busca es el hartazgo, el que la gente, harta de barbaridades, presione a las autoridades para que éstas hagan lo que la mayoría no votará jamás. Y eso también se ha acabado. En España no quedan ya partidarios de la solución dialogada salvo los insólitos especímenes más arriba citados.

Es decir, no habrá solución dialogada a ETA. Mejor dicho: la solución dialogada comenzará al día siguiente de que ETA deje las armas y renuncie a la violencia. Esa es la única posibilidad de solución y, de no ser ella, sólo queda seguir como estamos: los terroristas cometiendo asesinatos, las fuerzas de seguridad del Estado deteniendo terroristas, la gente apoyando a las fuerzas de seguridad del Estado y colaborando con ellas. ¿Quién dijo que una democracia madura, como la española, respaldada en su legislación antiterrorista por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos no puede resistir el embate de cuatro niñatos descerebrados dispuestos a hacer todo el daño que puedan?


(La imagen es una foto de Zen, bajo licencia de Creative Commons).

La rebelde naturaleza humana.

Carlos García Gual, excelente filólogo, gran helenista y hombre sabio, reedita por tercera vez un texto suyo de hace unos veinte años (Carlos García Gual (2009), Prometeo: mito y literatura, Fondo de cultura económica, México, 238 págs) con el título ligeramente cambiado (el primero era Prometeo: mito y tragedia) ya que le ha añadido tres capítulos que hacen aconsejable el cambio. El contenido de la obra es el análisis del complejo mito de Prometeo en las tres fuentes principales para su articulación: los dos textos de Hesíodo (Teogonía y Los trabajos y los días), la tragedia de Esquilo, Prometeo encadenado y el Protágoras de Platón. Ello lo lleva a matizar en la leyenda, distinguiendo dos veneros en ésta, el del Prometeo engañador, que roba el fuego, el trickster y el Prometeo rebelde contra el dios despótico que es el simbolismo que ha venido prevaleciendo en la interpretación de la leyenda desde los tiempos de romanticismo, hasta llegar a nuestros días en que Prometeo viene a ser el trasunto mítico del Homme révolté de Camus.

En los relatos de Hesíodo Prometeo aparece como un personaje ambiguo que trata de favorecer a los hombres pero también de engañar a los dioses (p. 38). Hesíodo, que es un pesimista, atribuye a Prometeo las siguientes paternidades: a) el contenido de los sacrificios a los dioses (huesos, pellejo); b) el origen del fuego; c) la aparición de la primera mujer (Pandora), causa de universal desdicha; d) la existencia de los males en el mundo: el trabajo como necesidad, la pobreza y la enfermedad. La moraleja de los dos textos hesiódicos es: "no es posible esquivar ni transgredir el designio de Zeus" (p. 41). Si para Esquilo la motivación de Prometeo es la filantropía, para Hesíodo no ha traído más que desgracias. Lo de la primera mujer es muy revelador de una misoginia realmente enfermiza.

El autor aporta una estupenda traducción de la entera tragedia esquiliana de Prometeo encadenado, con un perspicaz análisis de los diálogos entre sus personajes (Prometeo, Poder, Violencia, Coro de Oceánides, Io, Océano, Hefesto, Hermes) en estructura arcaica. Io, igual que Prometeo, es un ejemplo de la arbitrariedad de Zeus. Según se nos revela en el prólogo de la tragedia en el diálogo entre Hefesto y Poder, es la tiranía en la que sólo el tirano es libre (p. 92). Trata aquí García Gual con cierto detalle el asunto que siempre me ha parecido más interesante de la leyenda prometeica, esto es, la liberación del Titán. Según la Teogonía Zeus consiente en la liberación de Prometeo, pero no sabemos en qué condiciones. Tampoco lo sabemos en Esquilo ya que la tragedia en que se narraba la liberación, según Filodemo, Prometeo liberado, se ha perdido. Filodemo dice que Prometeo fue liberado porque reveló a Zeus el oráculo sobre Tetis (p. 105). En realidad, no estamos seguros de quién (Prometeo o Zeus) cedió antes (p. 108). El hecho es que cuando Hércules, descendiente de Io, mata al águila y libera a Prometeo la amenaza que pesa sobre el destino de Zeus desaparece y éste rompe la maldición de que los hijos de los dioses destronen a sus padres. Habrá Olimpo por la eternidad. Siempre me ha parecido que este arreglo (libertad a cambio de seguridad) era el núcleo de la política: el pacto, el acuerdo es lo que da a Zeus lo que todo poder pretende: perpetuarse. ¿Qué habría pasado si Prometeo no hubiera revelado el secreto y el hijo de Tetis (el que luego, como hijo de Peleo, será luego Aquiles) hubiera destronado a Zeus? Ahí hay campo para fantásticas conjeturas. Muy apropiadamente García Gual incluye aquí una interesante reflexión sobre la justicia de Zeus (pp. 110-126)

Luego de una brevísima referencia a la aparición cómica de Prometeo en Las aves de Aristófanes, el autor profundiza en el Protágoras platónico y atribuye al sofista, en la medida en que no es pura fabulación de Platón, una versión de los orígenes de la cultura derivada de la leyenda prometeica. La aportación de Protágoras es que la cultura no consiste sólo en las técnicas instrumentales y especializadas sino en la técnica política y unas normas morales que permiten la convivencia en la sociedad (p. 140). Es una adaptación de un mito esencialmente maleable para hacerlo vehículo de ideas personales típicas de la ilustración sofística, la idea del progreso moral, la enseñanza de la areté y la techné políticas (p. 152)

La segunda parte del libro, con los nuevos capítulos es otro tipo de reflexión, más especulativa y que hace mayor uso de fuentes secundarias. Hay un capítulo sobre las variaciones y simbolismos de la figura de Prometeo en el que se insiste en que la visión moderna de "lo prometeico", presente sobre todo en Goethe y Shelley procede de Esquilo y no de la tradición anterior (p. 170) porque fue Esquilo quien resaltó la historia del hombre rebelde en lucha contra el dios despótico, olvidando al efecto todo lo que se refiere a Pandora y Epimeteo, igual que en el Protágoras se olvida la venganza de Zeus. En el desarrollo general del mito García Gual distingue cuatro etapas: 1ª) la filantrópica; 2ª) en el Protágoras colabora con los dioses en la distribución de las cualidades físicas de los vivientes; 3ª) la creación de la primera mujer; 4ª) la creación de los seres humanos del barro (p. 172). Cada época escoge al Prometeo que quiere y el del romanticismo es el héroe rebelde.

Tras una sucinta referencia a tres textos breves pero muy significativos de Goethe, Nietzsche y Kafka, el autor hace un análisis de una de las últimas obras de Goethe, El retorno de Pandora con una reevaluación de la figura tanto de la primera mujer como de Epimeteo, como si fuera el arco que se cierra al final de la vida del poeta alemán, quien reivindica la aportación de la mujer en contra de la tradición misógina helénica (p. 199).

En Prometeo creador de los seres humanos profundiza el autor en la faceta del dios artesano que fabrica seres humanos con agua y arcilla y que, según interpretan los románticos, se encariña de tal modo con sus criaturas que se enfrenta por ellas con el dios supremo. La interpretación se hace a base de las figuras de un sarcófago. Es muy curiosa la referencia al intento de cristianización de la figura en Lactancio (p. 215).

También tiene mucho interés la reflexión sobre Prometeo y la idea del progreso de los seres humanos ya que se hace comparando la tragedia de Esquilo con sendos trozos de otras dos de Sófocles y Eurípides, en concreto el himno a la grandeza del hombre en Antígona ("hay muchas cosas protentosas, etc") y el elogio del saber humano en boca de Teseo en Las suplicantes de Eurípides. Esquilo el arcaico valora sobre todo el arrojo de enfrentarse al dios mientras Sófocles y Eurípides cantan el esfuerzo de los hombres por vivir en un mundo mejor (p. 223). No se oculta el valor ambiguo que tiene la técnica con alcances dudosos (hay un par de referencias en la obra a la de Mary Shelley, Frankenstein, el Prometeo moderno) pero al final es Zeus quien proporciona a los seres humanos el instrumento definitivo para su convivencia y progreso, la techné politiké.

Por cierto, no hago más que dar vueltas a una observación que se hace de pasada en la obra y que tiene a mi juicio gran importancia: Prometeo carece de todo modelo o antecedente oriental. Es decir, es una leyenda europea, lo que no deja de tener su mérito en una cultura en la que casi todo, incluidos otros dioses, viene de Oriente, como la luz.

(Las imágenes son: una escultura de Nicolas-Sébastien Adam Prometeo (1737) muy curiosa que se encuentra en el Museo del Louvre, en París y un cuadro de Maxfield Parrish, Prometeo (1919) que es un calendario publicitario que se encuentra en Art Renewal Center).

diumenge, 2 d’agost del 2009

El cielo es el límite.

Aparecen nuevos datos acerca de las actividades de la trama Gürtel en Valencia y cómo había hecho regalos a catorce políticos de la Generalitat valenciana, incluido, según parece el hijo del presidente de la Generalitat. Una verdadera lluvia de obsequios en forma de relojes, bolsos, trajes, juguetes y todo porque el Gobierno de la Comunidad Autónoma se había "portado bien" con ella, esto es, le había adjudicado contratos a mansalva. Justamente en este momento aumentan los rumores de que el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, presidido por amigo íntimo de Camps, se apresta a archivar el asunto. Si tal cosa sucede será un escándalo evidente y una prueba más de que, como dijo alguien, en España la justicia es un cachondeo. Y algo peor que un cachondeo: en España, sencillamente, la justicia no existe. Será prueba de que sólo existe la injusticia y el trato de favor. Sobre todo, a la derecha.

La decisión que tome el TSJPV es recurrible y debe serlo de inmediato ya que, a juzgar por todos los indicios, sería rayana en la prevaricación, tanto por la decisión en sí como por las otras que han llevado a que un tribunal de justicia se niegue a investigar unos hechos que tienen toda la pinta de ser delictivos. De esta forma se explicaría la aparente tranquilidad del Curita a lo largo de todo el proceso: estaba seguro de que el tribunal archivaría el caso probablemente porque así se lo habría anticipado su amigo íntimo, el presidente de tal órgano judicial.

La decisión de archivo de la causa que, según se dice, se producirá mañana, lunes, vendrá asimismo a resolver la esquizofrénica situación en que se encuentra el Curita quien, por un lado, airea a los cuatro vientos lo muy interesado que está en declarar ante las instancias apropiadas y, por el otro, hace todo lo que puede para impedirlo. A esto también se le llama "tener morro"· Algo parecido a lo que sucede asimismo con el PP: el señor Trillo ha empezado a quejarse tan indignadamente como acostumbra por el hecho de que se estén produciendo presiones sobre el TSJPV para que éste no archive el caso y, por otro, según parece, está en contacto permanente con uno de los magistrados del dicho tribunal para conseguir precisamente eso: el carpetazo. Este comportamiento recibe otros nombres bastante sonoros que tienen que ver con la vergüenza o falta de vergüenza de la gente.

(La imagen es una foto de dalequetepego, bajo licencia de Creative Commons).

34 radios y televisiones.

Me quedé con las ganas. Ayer ni uno solo de los valientes y verdaderos medios online de izquierda radical traía mención alguna al proyecto de ley mordaza del Gobierno del señor Chávez Frías llamado "Ley especial de delitos mediáticos". Como si no existiera. Y mucho menos, claro, hubo un solo comentario tratando de defenderlo. Esos medios que tanto y tan bravamente denuncian los menores intentos capitalistas de manipular la información y que de continuo ponen en la picota a los medios comerciales a los que acusan de ser falsarios, escamotearon la noticia que, sin embargo, tiene una importancia grande porque plantea el problema de la complicidad de la izquierda con las actividades contrarias a la libertad de expresión de un Gobierno sedicentemente revolucionario.

Hoy ese Gobierno da un paso más y, antes de que esté la ley y por decisión administrativa, ha cerrado 34 emisoras de radio y televisión. Pongo el enlace de Le Monde porque se vea que es toda la prensa del mundo, esa a la que la izquierda radical acusa de mentir sistemáticamente, la que informa de lo que los medios autotitulados críticos silencian. Por supuesto, las razones son todas muy lógicas: fin de la concesión administrativa y cosas por el estilo. Pero el propio poder censor se traiciona a sí mismo cuando, por boca del señor Cabello, presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), hace saber que "Cuando tomamos la decisión en el Gobierno nacional y revolucionario de democratizar el espectro radioeléctrico, de acabar con el latifundio mediático, lo estábamos diciendo en serio, no estábamos jugando". Cerrar emisoras, amordazar la libertad de expresión se llama "democratizar el espacio radioeléctrico". Es orwellianamente maravilloso.

Supongo que ante la bestialidad del ataque, los medios críticos no tendrán más remedio que decir algo y supongo asimismo que encontrarán algún esbirro dispuesto a escribir que hay que silenciar a la contrarrevolución, que la oligarquía no debe tener libertad de expresión y que ésta debe tenerla toda el pueblo que en Venezuela, gracias a San Bolívar, es el que gobierna. Mientras tanto, quien quiera estar informado de lo que sucede en el mundo en general, en Latinoamérica en concreto y, más específicamente, en Venezuela, que consulte los medios comerciales, prodigios de objetividad en comparación con la mendacidad de los medios llamados "revolucionarios".

¿Qué tiene que ver con la izquierda este neocaudillismo latinoamericano?

¿Qué tiene que ver con la izquierda la política de restricción de libertades?

¿Qué tiene que ver con la izquierda la legislación contraria a la libertad de expresión?

¿Qué tienen que ver con la izquierda los actos despóticos del poder amordazando a quienes piensan de otro modo?

Y me refiero a la izquierda; no al totalitarismo leninista en sus cuasi infinitas variedades.

(La imagen es una foto de ¡Qué comunismo!, bajo licencia de Creative Commons).

dissabte, 1 d’agost del 2009

Censura del siglo XXI.

Ardo en deseos de leer cómo justificará la izquierda bolivariana y la no bolivariana el último ataque de Chávez a la libertad de expresión con el proyecto de ley especial de delitos mediáticos. ¡Delitos mediáticos! La cultura francesa bautizó el nuevo territorio como médiatique, mediático; la hispánica le cuelga el sustantivo delitos. Desde luego, no paro quieto de deseos de conocer con qué argumentos defiende la izquierda una norma arbitraria que impone penas de cárcel por "delitos" de opinión, esto es, que prohíbe arbitrariamente la libertad de expresión. Los bienes que habitualmente se invocan para justificar las restricciones a esta libertad son altisonantes: la Patria, la Seguridad Nacional, el régimen democrático, la salvación de la República, la Divinidad, etc. Pero en la izquierda siempre hemos sabido que esas son excusas y que coartar la libertad de expresión es cosa de derecha mientras que ampliarla lo es de izquierda. Cierto que el señor Chávez no se queda atrás en altisonancia: se va a suprimir la libertad de expresión en Venezuela para garantizar la seguridad del Estado y, desde luego, los logros de la Revolución bolivariana que, como todas estas revoluciones pendientes de caudillos, se adapta con facilidad a lo que el mando ordene en cada momento y significa lo que el mando quiere que signifique. ¿Es cierto que Según el borrador de la ley, una persona que divulgue una información considerada "falsa", "manipulada" o "tergiversada", que cause "perjuicio a los intereses del Estado" o atente contra la "moral pública" o la "salud mental", habrá incurrido en un "delito mediático" y podrá ser castigada hasta con cuatro años de cárcel? Si eso es cierto, eso es una barbaridad. En la izquierda hemos pensado siempre que la mejor ley de prensa es la que no existe. No hay delito de opinión pero siempre acaba apareciendo alguien que consigue restringir la opinión sobre algo por altos intereses de Estado o la Moral, por supuesto. Por ejemplo, hoy, los que penan el negacionismo de los campos de exterminio.

Una ley mordaza, si la promulga lo que pasa por ser la izquierda, ¿es menos ley mordaza? Por cierto, a la hora de limitar la libertad de expresión de los audiovisuales la idea de que en el espacio radioeléctrico hay "latifundios" es genial. Así, lógicamente, se limitan las emisoras invocando la muy izquierdista libertad de la propia expresión de cada cual. Eso se llama la "democratización del espacio radioeléctrico".

Lo repito: estoy impaciente esperando a leer cómo se justifica la abolición de la libertad de expresión en aras de los intereses de la Revolución bolivariana. No hay miedo: parece difícil pero, en realidad, es muy fácil pues consiste en jugar con la multivocidad de las palabras. Doy además, un ejemplo inmarcesible acerca de cómo se hacen estas cosas. Franco no suprimió la libertad de expresión sino el libertinaje de expresión. ¿Se capta el matiz?

En el caso de la izquierda contemporánea su libertinaje de expresión fue la idea que comparten todos los medios de comunicación de la extrema izquierda de que el mundo está entontecido por unos medios de comunicación comerciales de masas que, en realidad, son medios de manipulación de masas, frente al baluarte de los alternativos que se juzga más verídico y objetivo cuando a mi entender supera en mendacidad a la prensa comercial más lamentable.

En fin, a ver quién se lleva la palma en justificar esta barbaridad en nombre de la Revolución.

(La imagen es una foto de ¡Qué comunismo!, bajo licencia de Creative Commons).

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Crimen, pasado y memoria.

Hacia 1972 el presidente del Uruguay, Juan María Bordaberry, echó mano de los milicos para atajar la oleada revolucionaria del país, el MLN, los Tupamaros. Al año siguiente, 1973, los militares tomaron el poder en el Uruguay, hasta entonces conocida como la "Suiza de América Latina" por la estabilidad de sus instituciones democráticas e implantaron uno de esos regímenes de terror, tortura, secuestros y atropellos a los derechos humanos que suelen hablar de la unidad del pueblo y la salvación de la patria. Algo parecido a lo que hacían por entonces los generales argentinos. Pura barbarie. Llegó un momento en que alguien dijo que había más uruguayos fuera del Uruguay que dentro.

Esta peli de Ana Díez que no está mal, aunque resulta algo blanda, falta de nervio narrativo, cuenta parte de la historia anterior reflejada en la vida que llevan los vecinos de un barrio de Montevideo, un jefe de la policía y un comerciante navarro exiliado de la República. En realidad, el punto de vista es el de los recuerdos de dos treintañeros que se reencuentran en Pamplona y el relato viene en flash back que trabajosamente va desentrañando lo que pasó en aquellos años pero que dejaron una amarga noticia en la vida de los niños que ya entonces se querían y consistente en que el padre del chico, el tendero navarro aparece como cómplice de los asesinos del padre de la chica, el jefe de la policía. Le realidad será distinta y, al tiempo, acorde con la siniestra barbarie de aquel tiempo.

La peli no es muy allá en casi nada sino una narración discreta muy llevadera de no ser por un sonido que dan ganas de salir corriendo porque está grabado con un micrófono que no discrimina los diálogos de los ruidos de la calle ni siquiera en los primeros planos. No obstante se trasmite muy bien el clima de miedo, de zozobra de la población ante la inminente intervención de los milicos. Se refleja también el clima de opinión de los militares en los juicios de ese general que es amigo del jefe de policía al que luego hace lo que le hace.

Quienes éramos mayores de edad cuando los militares tomaron el poder en el Uruguay solemos tener recuerdos e imágenes de los hechos porque hemos tenido relaciones con uruguayos exiliados y los uruguayos exiliados han llegado a ser personajes propios de según qué zonas. Por cierto, hay escenas que recuerdan mucho a Estado de sitio, de Costa Gavras sobre el mismo tiempo en el Uruguay.