dilluns, 1 de desembre del 2008

Guantanamero.

Ahora se entiende mucho mejor por qué el PP cargaba con tanta saña contra el señor Rodríguez Zapatero porque éste no se llevara bien con Mr. Bush; por qué decían que España carecía de peso en el concierto internacional ya que el citado Mr. Bush se negaba a recibir al presidente español y lo hacía de menos: éste no le lamía las botas ni le tiraba de la levita, y ello por quedarme en estas actividades relativas a la indumentaria, sin mencionar otras posibilidades. Sin duda era mucho mejor tener la simpatía y el trato de los gringos. Mejor ¿para quién? ¡Para España unagrandelibre! dirían los guantanameros al unísono. Hay que contar en el concierto internacional; hay que ser algo. Y, para serlo, hay que estar a buenas con el Boss. ¿A qué precio?

Según lo que publica hoy El País Aznar dio vía libre al paso por España de presos hacia Guantánamo y lo ocultó. Y lo seguirá ocultando cuanto pueda y, cuando no pueda más, dirá que él no sabía de qué se trataba, que pasaba por allí de casualidad, como cuando se probó fehacientemente lo que todos conocíamos de sobra: que mentía como un bellaco en el asunto de las armas de destrucción masiva. Este hombre carente de escrúpulos y de un decoro mínimo en su función de correveidile y lacayo de los desmanes del Imperio había puesto a España en "donde le correspondía", en efecto, no hay más que verlo: la había puesto de escupidera. Y cuando el señor Rodríguez Zapatero rompe con esa vergüenza de ser tratados como lacayos, los guantanameros se le echan al cuello. Y cuando, finalmente, el señor Rodríguez Zapatero consigue poner a España de verdad en un lugar internacional aceptable en contra de la voluntad del señor Bush y de su valet Aznar, los guantanameros siguen poniendo el grito en el cielo, tratando de emponzoñar el ambiente, desacreditando los logros exteriores de España porque los dejan con sus (escasas) vergüenzas al aire.

Así que ahora ya se puede hacer un balance de los ocho años de gobierno del señor Aznar, más conocido como Ansar "el guantanamero":

Entró haciendo una oposición de "todo vale", aliado con el señor Anguita.- Cedió más en 14 días a los nacionalistas que los sociatas en 14 años, según dijo el señor Arzallus.- Intentó cercenar la libertad de expresión, cerrar El País y meter en la cárcel a los señores Polanco y Cebrián.- Privatizó todas las empresas públicas que pudo para beneficiar a sus amigos y compadres.- Negoció con ETA a la que llamó Movimiento Vasco de no sé qué.- Intentó imponerse al mundo del trabajo a base de "decretazos".- Metió a España en una guerra criminal, de robo, rapiña y tortura en contra de la opinión general de la ciudadanía.- Mintió descaradamente sobre la justificación de dicha guerra.- Se gastó una pasta de los dineros públicos en comprar una medalla estadounidense que no se le concedió.- Apoyó el golpe de Estado contra Hugo Chávez en Venezuela.- Se opuso con uñas y dientes a que se procesara al genocida Pinochet.- Se gastó otra pasta en casar a su hija en El Escorial, como si fuera de estirpe de reyes.- Dejó que un petrolero llenara de chapapote las costas de Galicia.- Permitió que un incompetente (o algo peor) hiciera una chapuza con la identificación de sesenta y cuatro militares fallecidos en un accidente aéreo causado por más incompetencia, dejadez y marrullería oficial.- Mintió (él personalmente) sobre la autoría del atentado más grave de la historia reciente de España achacándosela a ETA contra toda evidencia.-

Una joya. Añádase ahora la lacayuna aceptación de que los gringos usaran España como base para los vuelos a Guantánamo, en donde se tortura a personas secuestradas contra toda legalidad humana o divina, su complicidad en la tarea de los gringos de violar los derechos humanos de cientos de personas. Menuda ejecutoria. ¿Cómo puede este tipo hablar de libertad, democracia o derechos humanos? Preguntado en cierta ocasión que cómo iba España, respondió que "España va bien". Y eso es lo que dicen sus seguidores del partido guantanamero, que España iba bien porque se codeaba con los grandes que hacen la historia, como se ve, a golpe de delito, y ha dejado de ir bien desde que el señor Rodríguez Zapatero se enfrentó al amo gringo.

Pero la realidad es al revés: España cuenta ahora, cuando su presidente ha sabido aguantar la grosería y falta de educación del gringo y se ha ganado el sitio que corresponde a nuestro país. Cuando no contaba era antes, cuando estaba de guantanamera. Es decir, a España no le iba bien. A quien le iba y le va bien y muy bien es al señor Aznar, a quien han pagado sus servicios con puestos y canonjías de todo tipo, empezando por un salario en la empresa del señor Murdoch, al que ahora está asesorando con su reconocida competencia, esa que le hizo recomendar que para los vuelos delictivos de los aviones de los EEUU se usaran bases "discretas" en España, las que ya había puesto discretamente al servicio de los Estados Unidos su mentor espiritual, Francisco Franco, otro guantanamero.

¿Se entiende por qué llevo más de seis años preguntándome cómo fue posible que un hombre tan deleznable intelectualmente y moralmente detestable llegara a presidente de España? Aún no he sabido qué responderme...

(La imagen es una foto de Brocco Lee, bajo licencia de Creative Commons).